CAPITULO 1
-Eunhyuk ¿Donde has dejado la camisa azul que te dejé la semana pasada? -Me preguntó Donghae, rebuscando en el armario.
-Se está lavando -respondí mientras le observaba detenidamente desde mi cama.
Su cuerpo estaba cubierto solamente por una pequeña toalla que cubría lo justo, el pelo goteaba sobre su pecho y espalda, provocando que las gotas que ya estaban ahí se resbalaran por su torso.
En realidad era guapo, mucho más que el resto de nosotros.
Bufó al no saber que ponerse, en otra ocasión me habría hecho gracia, pero en ese momento no, Donghae tendría una cita con una chica que había conocido hacía unas 3 semanas, no era su primera ni segunda cita con ella y eso me enfurecía, normalmente no tenía mas de dos con nadie, no es que fuera un casanova, si no que simplemente por cuestiones de trabajo o por diferencias de opiniones, no estaba con nadie lo suficiente como para pedirle ser su novia.
-¿Se lo pedirás hoy? -pregunté, y sentí de nuevo ganas de romper un cristal.
-¿Ser mi novia? -yo asentí mientras le observaba ponerse una camiseta blanca con la palabra "REVOLUTION" por todo el pecho -No, aún no sé si pienso hacerlo -en ese momento solté todo el aire que no sabía que estaba reteniendo -¿Por qué? ¿Estás celoso? -sonrió -ohh amor mío, -dijo teatralmente -sabes que para mi el EunHae siempre estará primero-
Le tiré una almohada a la cara antes de que pudiera continuar y me sorprendí al notar como deseé por un momento que lo hubiera dicho en serio.
-Ahórrate eso para el próximo concierto -sonreí forzadamente.
En ese momento ya se encontraba totalmente vestido, y al mirarme frunció el ceño.
-Vale, ¿Qué te pasa, Hyukkie?
Se sentó a mi lado en la cama.
-No... -"no me gusta nada esa chica" estuve a punto de decir -no es nada importante, pásalo bien en tu cita.
Me levanté de la cama sin decir ni dejarle decir nada más y me encaminé hacia la sala.
Heechul, Yesung y Hangeng se encontraban en el sofá viendo una película que no fui capaz de identificar, puesto que pasé de largo y fui directo a la cocina, necesitaba un vaso de agua para calmar mi... rabia, de momento dejaría ese sentimiento como simple rabia, no pensaba buscar una explicación para mi enfado, puesto que sabía la de problemas que podía causar.
-Hola Hyung -me saludó Ryeowook mientras hacía la cena.
Después de tomarme un vaso con agua repleto de hielo, me ofrecí a ayudarle con la cena, pero se negó rotundamente diciendo que ese era su papel en el grupo, que fuese a ver la peli con los demás.
Le hice caso, arrastrando los pies en el acto y me senté lo más lejos posible de la puerta de salida y de las habitaciones, quedando asi al lado de Heechul -quien estaba con la cabeza apoyada en el hombro de Hangeng-.
-Chicos, -dijo Donghae saliendo de su habitación y llamando la atención de todos los presentes, pero yo seguí mirando la pantalla sin decir nada -yo me voy ya.
-¡Suerte en tu cita! -Dijo un emocionado Hangeng.
-Pasalo bien -se despidió Yesung.
Por un momento todos nos quedamos en silencio, y me pregunté por que Heechul tampoco pensaba despedirse de él.
-Sí, pásatelo bien con Min-jee -repitió Heechul, pero por su tono de voz parecía que decía todo lo contrario.
Min-jee, sólo de escuchar ese nombre algo se rompía en mi interior.
-Heechul ya lo hemos hablado -dijo Donghae, lo que captó mi atención de inmediato.
¿De qué habían hablado? ¿Por qué yo no sabía nada de esa conversación? ¿No se suponía que Donghae me lo contaba todo?
-Claro -respondió Rella -me lo dejaste muy claro, precisamente por eso lo digo.
Donghae bufó sonoramente y se fue dando un portazo.
-¿Qué... qué acaba de pasar aquí? -pregunté mirándoles a todos.
Parecía que Yesung estaba igual de perdido que yo, pero en cambio por la expresión de Hangeng supe que él sí estaba al tanto de todo.
-¡Ya está la comida! -exclamó Ryeowook saliendo de la cocina con una bandeja llena.
En cuanto vieron la comida todos se relajaron y fueron directos a la mensa.Yo, en cambio no dejaba de darle vueltas, ya conseguiría hablar con Heechul a solas y sacarle algo de información.
Por muy “enfadado/dolido” que estuviera con el asunto Donghae/Min-jee, él seguía siendo mi mejor amigo, y si le pasaba algo me merecía saberlo, a cualquier coste.
Esa noche no hubo manera de hacer que Heechul se quedará solo por más que lo intenté.
“Hyung, necesito hablar contigo ¿Quedamos en el bar de siempre a las 17h?”
Tenía el dedo encima de la tecla enviar, pero no podía decidirme.
Por una parte si la enviaba me arriesgaba a descubrir algo que no quería, y por otro si no lo enviaba me arriesgaba a no saber algo que necesitaba saber.
-¡Hyukkie! -gritó alguien detrás de mi dandome tal susto que apreté la tecla sin querer.
-¡Mierda Hae! -grité -no había decidido si enviarlo o no.
Me giré para verle, íbamos a grabar un programa por lo que lo habían maquillado y peinado, el cabrón parecía un ángel.
-¿Era para una chica? -preguntó con una media sonrisa.
Hice una mueca, Heechul como Lady Hee Hee aún no contaba como una chica por más que lo pareciera ¿Verdad?
-No -respondí -era para un chico -le sonreí -¿Nos vamos ya?
Llevaba en el bar desde 15 minutos antes de lo acordado, con la rítmica pulsasión de mis dedos sobre la mesa, haciendo énfasis a mi nerviosismo.
Pedí una botella de Soju mientras pensaba en lo idiota que era al enfadarme con DongHae por tener una cita, eso debería de ser lo más normal del mundo.
-¿Lamentándote porque deseas que el EunHae sea real? -preguntó una voz detrás de mí.
¿Porque tenía Heechul que leerme la mente?
-Esa cara me lo confirma -dijo él sentándose enfrente de mí con una sonrisa de oreja a oreja.
No pude aguantarle la mirada dado que me invadió una tremenda vergüenza.
Le serví un poco de suju haciendo tiempo mientras mi mente se aclaraba.
Me gustaba mi mejor amigo, y mientras antes lo admitiera abiertamente sería mejor.
-HeeChul Hyung -susurré, pero me interrumpió antes de continuar.
-Déjame adivinar, -puso sus codos encima de la mesa mirándome detenidamente -quieres que te ayude a conquistarle ¿Verdad?
-¡No! -dije quizás demasiado alto -no -repetí más bajo al notar la mirada de todos en el bar sobre mí -es sobre otra cosa -me miró expectante -ayer dijiste que habías hablado de algo con él.
-Y quieres saber de qué habíamos hablado -afirmó, a lo que asentí -¿Por qué quieres saberlo? -Preguntó.
-Es mi mejor amigo -dije, pero él negó inmediatamente.
-No te he preguntado que relación tienes con él, mono tonto, te he preguntado por qué quieres saberlo.
Suspiré.
-Solo quiero saber si es algo que debe preocuparme.
Estuvo alrededor de un minuto sin decir nada, no quise presionarlo, total era HeeChul, quién cambia de humor de un segundo a otro.
-No es “preocupación” la palabra que yo elegiría -negó con la cabeza -Hace un rato te ruborizaste cuando hablé del EunHae ¿Qué sientes por él, EunHyuk?
Abrí los ojos como platos ¡Aún no podía decirlo en voz alta! No estaba en absoluto preparado.
-Yo... -y seguidamente balbuceé cosas que ni yo mismo entendí.
-Vale, para para -a él parecía divertirle el tema -limitate a asentir o negar cuando yo haga una pregunta ¿Vale? -asentí -DongHae es tu mejor amigo -asentí -y le quieres -asentí sin dudarlo -pero últimamente sientes que ese cariño va más allá que el de amigos ¿verdad? -baje la vista, esto no debería resultarme tan difícil, tomé una bocanada de aire.
-Verdad -dije sintiendo como mi corazón palpitaba como loco, tanto que por un momento pensé que intentaba salirse de mi pecho.
-¿Sabrías decir exactamente que sientes por él? -me preguntó, llegados a ese punto habíamos bebido ya gran parte de la botella.
-No...no puedo.
-¿Por qué?
¡Habíamos venido aquí a que me contara de lo que había hablado con Hae! Y en cambio se dedicaba a interrogarme, cuando debería ser al revés.
-Porque no puedo Hyung, simplemente no puedo.
-A mi me gusta HanKyung -dijo tan naturalmente como si hablara del tiempo -es más, estoy enamorado de él y no me importa en absoluto decirlo en voz alta.
No es que nunca me hubiera imaginado que Rella sintiera algo por él, pero que fuera capaz de decirlo de esa manera me dejaba simplemente sin palabras.
Admiré esa parte de él, siempre tan sincero sin importarle las consecuencias.
-¿Estáis saliendo? -pregunté.
Negó con la cabeza.
-Nunca me cree cuando le digo que le quiero -se encogió de hombros
-Oh... -fue lo único que pudo salir de mi boca.
Eso debería ser aún peor, lograr tener la fuerza suficiente para declararte y que la otra persona se lo tomara como una broma ¡Que frustración!
-¿Sabes qué Hyukjae? Que aún no te mereces saber de qué hablabamos, cuando aceptes tus sentimientos llámame y hablaremos.
Se levantó de la mesa y me dejó aún más confundido de lo que estaba hacía media hora.