Capitulo 15: Dai x Kyo
NARRACI”N KYO
-Mocosos-gritó mi padre. Me levanté y me fui a la ducha, donde con cuidado entre por que resbalaba. Me desperté de golpe al notar el agua fría, que rápidamente cambie a caliente.
Tardé 10 minutos en bañarme y al salir fui al armario, abrí el primer cajón y saque un pantalón corto negro y una camisa azul zafiro. Me las puse seguido de las zapatillas negras. Me acerque a la cama, la prepare y me acerque al lado de la puerta. Cogí mi porta-armas y me la puse detrás en la espalda.
Abrí la puerta y la cerré para luego, bajar las escaleras y dirigirme al comedor. Según entró, los ojos onix de mi padre me miran. Su rostro es inexpresivo y es un emo vengador. Eso sin duda.
Empecé a comer en silenció, siendo seguido por él. Un ruido se escucho para luego, un crujido y acabar con la entrada de MI “hermano”, sobándose la cabeza y con un mochin que me sacó una sonrisa de medio lado. Mi padre se levantó y le sirvió el desayuno. Daisuke sonría feliz, es increíble que nos comprendamos también con solo una mirada. Sasuke nos miró y seriamente habló.
-Terminad rápido, tengo que ir a hacer algunas cosas y ya de paso os dejo en la escuela.
Yo solo asentí y al terminar de desayunar, recogí mis platos y los puse en la cocina.
Daisuke todavía tenia el pijama puesto. Sonreí de medio lado, otra vez, al ver como ese pijama le caía un poco grande, pero tuve que admitir que estaba muy apetecible. Me sonroje levemente y un poco más al ver la mirada de Daisuke, me miraba con amor, felicidad, deseo y lujuria.
Camine seguro aunque por dentro no lo estaba hacia mi habitación, entré y cerré la puerta. Habían pasado 2 días que no teníamos sexo. El primero era cuando le dije que quería venir a Konoha y el segundo fue cuando nos pillaron y ahora, estaba frustrado, mi padre, el emo vengador no me dejaba ni masturbarme.... HAY QUE JODERSE.
Estaba tan metido en mis pensamientos que no noté cuando alguien me abrazo por la cintura. Su aliento era cálido, lo que provoco que jadeara y me recorriera un escalofrío de placer por la espalda. Por la altura y por la fuerza que hacia, supe que era Daisuke.
-Kyo- me llamó, yo jadeé y pude notar que sonreía victorioso.-Te amo, ya no aguanto.- Yo gemía bajito mientras, me lamia y besaba el cuello. Despacio, sensual y tortuoso.
-“¿Con solo 7 años, es buenos que hagamos esto?”- pensé, volví a gemir al notar su erección en mi culo. -”Mierda, ya no aguanto”- Daisuke sonrió al ver que me relajaba y cerraba los ojos. Me giró con cuidado y nuestros labios se unieron. Daisuke movía su boca encima de la miá, y yo seguía su ritmo. Lamió mi labio superior y yo abrí un poco para que pudiera meter su lengua en mi boca. Gemí tras la invasión y pude notar que me abrazó con más fuerza, profundizando el beso y note su erección en mi bajo vientre. Nos separamos por falta de aire. Jadeábamos al mismo ritmo.
Cuando Daisuke estaba apunto de volverme a besar, la puerta de mi habitación se abrió dejándonos en evidencia.
-MOCOSOS-gritó mi padre.- OS OLVIDASTEIS DE LA NORMA 8 Y 9 -gritó Daisuke me soltó y me sentí solo... era extraño pero, siempre me pasaba.
-Tsk- me queje, mi rostro estaba un poco rojo pero, seguía serio y anti sociable.
Mi padre jalo a Daisuke y le regaño, al menos tenia instinto paternal.
Cuando se tranquilizo, nos miró.
-Tsk... Vamos-no dijimos nada más, solo le seguimos, salimos de la casa, y todos nos miraban como si fuéramos lo más antinatural del mundo. No le deba importancia pero, era algo que por dentro me dejaba muy mal. Daisuke se acercó y me sonrió. La escuela Ninja, era enorme, sin embargo, no le tome importancia, solo lo hice con un columpio debajo de unos arboles. Parecía viejo y malgastado. Un hombre moreno, con pelo color café y ojos verdes esmeralda se nos acercó. Sonrió a mi padre y este desapareció. Sus ojos nos miraron a los dos, parecían llenos de amor.... eso me confundió.
-Hola Daisuke y Kyo. Me llamo Iruka Umino, y soy profesor de esta escuela, además de que yo le di clases a vuestra madre.-se presentó y explico. Sus ojos verdes tomaron mucha más vida y con una radiante sonrisa nos hizo seguirlo, era una persona maravillosa. Nos llevó a la 2º planta de la escuela. Nuestra clase era 3º B. Iruka entró y cerró la puerta, se oían gritos de niños y de Iruka. Sonreí divertido. Daisuke me miró extrañado para luego, acercarse y decirle.
-Pase lo que pase, te amo.- yo frunci el ceño, a que venia eso? Iba a preguntar, pero… Iruka abrió la puerta y nos hizo una señal.
-Había 6 filas de mesa en cada sitio del aula. Montones de niñas y niños que nos miraban con curiosidad.
-Niños, ellos son los hijos de Sasuke Uchiha y Naruto Namikaze Uzumaki-nos presentó.-Digan algo de vosotros y sus nombres-nos dijo. Daisuke se acercó un poco y dijo.
-Soy Daisuke Nara-sonrió de medio lado-Hijo de Shikamaru Nara, me gusta mucho los juegos de estrategia y a mi novio-Creo que nadie se dio cuenta de que dijo novio, no novia. Daisuke me miró y sonrió.
-Soy Kyo Namikaze Uzumaki Uchiha- me presente con una cara seria.- Mis padres son Naruto, futuro destructor de Konoha y Sasuke, el emo vengador. –Todos me miraban divertidos, confusos y con lujuria.-Tsk… me gusta 4 cosas y odio muchas- Iruka me miró y sonrió. Iruka nos dijo unos asientos y en silencio nos sentamos. Un hombre vestido de Verde y con cejas pobladas abrió la puerta de la clase y dijo.
-Iruka-sensei-llamó- es el día de practicar y Gay sensei no puede venir, yo me ocuparé.-Iruka asintió y con una sonrisa se despidió. –Niños, yo soy Rock Lee-se presentó.-Siganme.-Dijo con una radiante sonrisa. Se paró a los niños y las niñas, y me miró.-Kyo?-yo asentí.-Ponte con las niñas, son impares y para este juego, necesito que tenga parejas todas-Frunci el ceño, sabia perfectamente que me estaba llamando niña. Daisuke dejo de sonreir y mato al sensei con una mirada.
En seguida fui rodeado por todas, me moleste nadie habia estado conmigo, tan acerca al menos no, solo Dai.
-Escuchen, Los niñso tienen una misión y es capturar a las niñas, usando cualquier tipo de jutsu, ninjutsu que no sea peligroso. Y las niñas se tienen que defender, sin embargo, tienen que amarrar a los niños para que ellos queden fuera del juego.-sonrió-Bien, empiecen….YA-todas las niñas se esfumaron y los niños sonreían porque creían que yo era fácil de capturar… Sacaron unas cuerdas, hicieron unos jutsus y… varios gritos y niños que se acercaron a mi…Un gran polvo se levantó ocultándome de todas las miradas al igual que los niños. Se oyeron otros gritos, pero esta vez de dolor, y leugo…..
Sali yo sacudiéndome las manos y cuando el humo se fue, el sensei Rock Lee abrió grandes los ojos pero…. Yo ya estaba en otro sitio. Estaba en un sitio donde habían colchonetas, el pabellón, para ser exactos el pabellón de entrenamiento, en un cuarto. Suspiré.
-Deja de hacer eso.-le dije a la persona que estaba delante mia.
-Lo siento, lo siento.-se disculpó. –Kyo?- me llamó, suspiré derrotado, me quite la camisa, los pantalones y los boxers. El hizo lo mismo. Se acercó y me beso. Nuestras, lenguas luchaban para ganar la batalla. Jugaba con mis pezones que se ponían erectos, beso, mordio y chupo mi cuellos hasta la clavícula. Y yo gemia de placer. Abracé su cuello con las dos manos, y deje que tocara mi cuerpo, una de sus manos agarro mi sexo y empezó un increíble movimiento. Gemí su nombre.
-Daisuke-le llamé, el paró, me puso contra la pared y de una sola estocada sin preparación me penetró, grite por dicha acción pero, no de dolor sino de placer. Es que somos masoquistas….
Empezó a embistirme con moviminetos salvajes y me daba en el punto que me volvia loco. Nos venimos cada uno gritando el nombre del otro. Yo me vine en su mano y el en mi interior.
-Kyo, te amo-dijo jadeando. Yo le bese y sonreí de verdad, con él era el único que sonreía de esa forma, y eso es porque…
-Te amo, Daisuke-conteste para luego besarlo y vestirnos. Pero, nos quedamos ahí, abrazados hasta que el timbre de la escuela sonó.
CONTINURA…
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