¿PORQUE…?
Fue tan grande la decepción…fue tan rápido el como ocurrió todo…fue tan fuerte el dolor de perderlo todo en un santiamén…pero lo más doloroso fue…que nunca pensó que llegaría un momento como ese…pelear con su hermano, lo amaba entrañablemente de eso no cabía la menor duda, era su héroe, su amigo, su confidente, tenia todo lo que podía desear de alguien tan cercano como su hermano mayor, el lo cuidaba, lo mimaba, lo enseñaba, lo guiaba… lo amaba…
¿Porque…? ¿Por qué tuvo que pasar todo eso? ¿Porque su padre lo decepciono tanto y tan fuerte…? SÍ, es cierto que siempre lo quiso, o al menos eso es lo que le hicieron creer, sí, por que siempre hubo una pequeña diferencia, sí pequeña y quizá muy disimulada diferencia, pero ahí estaba… una pequeña preferencia por el rubio de la familia, una pequeña preferencia por el fortachón del grupo, una muy grande preferencia y festejos por los logros del hermano mayor, una pequeña pero muy marcada preferencia por el primogénito de la familia… ¿Por qué…? ¿Porque si su padre dijo que los dos habían nacido para ser reyes?
Pero… ¡Claro, ahora lo entendía todo! Que terrible descubrir que…sí, efectivamente, los dos habían nacido para ser reyes… pero nunca le dijeron ni especificaron que no del mismo reino, a él esa oportunidad le fue robada…le robaron su reino… le robaron su familia…le robaron su vida…ahora, ahora lo entendía todo…
Ahora entendía la diferencia en el cabello, la diferencia en el cuerpo, la diferencia en el físico, la diferencia en… el amor…en el amor recibido de su “padre”, de los amigos de su padre, si, de las personas más cercanas al rey y la reina, y hasta la diferencia del trato de los amigos de su hermano…
De su madre no tenia nada que decir, pues ella siempre lo amo, lo mimo, lo guio, lo complacía en todo, lo cubría en sus travesuras, jugaba con el, ella le enseño todo lo que sabia, su madre siempre lo amo, y el…el la amaba más que a nada en el universo…y sí, el sí podía utilizar esas palabras…”del universo”.
De su hermano…que podía decir de su hermano…a pesar de amarlo como a nadie, siempre le tuvo algo de celos, siempre se sintió su sombra, siempre hubo cierta rivalidad entre ambos, aunque siempre ambos lo negaran, ahora… ahora entendía el porque…
Siempre se pregunto de porque la diferencia en todo, el no se parecía a su madre, no se parecía a su padre, se pasaba horas observándolos a ambos y terminaba dejando escapar suspiros tras suspiros, miraba a su hermano y veía la diferencia de tamaño, la diferencia de ojos, su hermano los tenia azules al igual que sus padres, y él de un verde intenso, penetrante, su hermano tenía el cabello rubio y el de un negro intenso, veía la diferencia en las facciones y no sabía si terminar amándolo aún más como ya lo hacía hace tiempo u odiarlo como lo deseaba con todo el corazón…
De su físico… definitivamente no podía quejarse, era muy apuesto, elegante, incluso algunos pensaban que más que su hermano mayor, ciertamente no era fortachón como su querido hermano, pero su belleza no consistía en tal cantidad de músculos, pero tenia un cuerpo excelentemente bien formado y que definitivamente no le pedía nada a cualquiera que se le pusiera enfrente, aunque el era más bien del tipo intelectual que del tipo de hacer pesas y mucho ejercicio, si hacía ejercicio pero no tenia el cuerpo tan marcado como su hermano que parecía… ¿como fue que vio esa palabra en la tierra? Si, eso fisicoculturista…o algo así.
Pero vaya, también era porque a su hermano le fascinaba la guerra, le encantaba estar en batalla, su hermano amaba pelear…y él era como más del tipo estratega.
El era lo contrario ¿Cómo decía su madre? Así…él era un mago, él era un excelente actor, le gustaba manipular alguna que otra vez a su querido hermano, pero vaya…todo era un juego de niños, el era muy astuto y observador, y por lo mismo fue que poco a poco lo descubrió todo, y eso…eso fue lo más doloroso… descubrir que quienes has amado por toda la vida te han engañado siempre…el no era impulsivo, así que le dolió guardar la verdad para el solo hasta que tuvo la oportunidad de reclamarle a su padre…y aún así…lloro como nunca…
Vaya…suspiro y junto con una lagrima dejo escapar una pequeña sonrisa, si una sonrisa…a pesar de estar a punto de morir…una sonrisa escapo de su hermoso rostro, miro a su padre que sujetaba con todas sus fuerzas a su hermano Thor de uno de sus pies para que no cayera al vacio, mientras este al mismo tiempo lo sujetaba a el de su querida e inseparable lanza, le grito a su padre que el solo quería su amor, que el no quería el trono, pero su padre a pesar de haberle jodido la vida completa…se dio el lujo de que sus ultimas palabras fueran negativas y mirándolo a los ojos tuvo el descaro de decirle que no…
- ¡No Loki! - esas fueron las últimas palabras que escucho de su “querido padre”, y fue cuando una lagrima escapo de uno de sus bellos ojos verdes…junto con una sonrisa triste que se formo en su rostro…
Vio por última vez a su hermano…a su querido hermano y sin pensarlo más, soltó la lanza y cayó al vacio, escuchando cada vez más lejos las últimas palabras de su hermano…
- ¡Noooo Loki!
Y esa…esa fue la última vez que Thor vio a su hermano con vida…
Después de eso, el rubio deambulaba por el castillo triste y cabizbajo, su madre lo veía y sufría por no poder hacer nada, pues ella al igual que su hijo lloraba la muerte de su pequeño hijo Loki, ella nunca hizo diferencias en su amor, ella lo amo como si ella misma le hubiera dado la vida, es más ella siempre tuvo alguna preferencia por su hijo menor…
Hasta que una tarde después de algún tiempo pasado…
- ¿Me mandaste llamar Heimdall? - dijo el rubio deteniéndose a la orilla del puente quebrado por el mismo, suspiro y se detuvo junto al Guardián de las Puertas, quien volteo a verlo en cuanto lo escucho hablar, y quien viéndolo triste y apagado sonrió levemente sabiendo que el muchacho necesitaba algún aliciente para poder seguir adelante, sabia que Loki había hecho muchas cosas malas, pero también sabia y esto no significaba que lo estuviera justificando, que tras todo lo que hizo el ojiverde, el chico tenía sus muy buenos motivos para haber actuado de la forma en como lo hizo…después de todo el los vio crecer, los vio jugar, los vio convertirse en hombres, y también vio la transformación de cada uno de ellos y también sabia del porque de dicha transformación… así que…
- Thor…muchacho… - iba a continuar hablando pero el rubio lo interrumpió.
- ¿has visto algo? - pregunto solo por obligación - ¿sucede algo en la Tierra? - dijo con desanimo.
- No…no sucede nada…de hecho solo quería que supieras que…
- ¡Oh vamos Heimdall! - lo interrumpió nuevamente al darse cuenta de que el Guardián le estaba dando muchos rodeos al asunto - tú no eres de dar rodeos… ¿Qué pasa en la Tierra, alguien quiere invadirla o destruirla?
- De hecho, no destruirla, pero… - lo pensó mejor - quería preguntarte ¿Cuándo estuviste en la Tierra conociste la Torre Stark?
- No… ¿Qué pasa Heimdall? ya me intrigaste.
- Bueno…pues, en la Torre Stark vive un millonario que se llama Tony Stark, por eso el nombre de dicha Torre - le hizo un gesto con la mano para que no lo interrumpiera de nuevo y lo dejara continuar hasta terminar - en cuanto se arregle la puerta y se pueda viajar a través de ella deberías bajar eh ir allá…
- ¿y para que? - pregunto algo hastiado
- Te va a interesar visitarlo, es un millonario excéntrico y el… - suspiro y sonrió algo malicioso - el siempre consigue lo que quiere y...
- ¿y eso a mi que…? Mientras no decida que lo que quiere es destruir la Tierra por mi puede ser lo que quiera y hacer lo que se le antoje, si su dinero se lo permite que bueno por el… - se dio la vuelta y comenzó a caminar en lado contrario pensando que tanta presión en el trabajo de ser Guardián o haberle destruido el puente lo estaban volviendo loco.
- En cuanto puedas viaja a la Tierra, descubrirás que no me estoy volviendo loco, él… - lo vio detenerse sin voltear - puede darte lo que necesitas para seguir adelante y ser feliz…
El Guardián lo vio soltar un enorme suspiro y vio como cayeron sus hombros dejándolo ver como realmente estaba…deprimido y triste, sonrió también muy triste pero esto Thor no lo vio, el pensó que el Guardián se estaba burlando de su dolor…de su hermano…hablo pero no volteo.
- Yo…yo no puedo ser feliz de nuevo… - no volteo pero el Guardián escucho sus sollozos ahogados - lo siento Heimdall…
- No te preocupes muchacho, te entiendo y muy bien…
- A pesar de… - titubeo - a pesar de que intento matarte… ¿no le guardas rencor? Se…se que lo que hizo estuvo mal, pero…era mi hermano…mi hermano pequeño… - continuo sin voltear hasta que sintió como el Guardián de las Puertas poso su mano en su hombro y dijo…
- ¡Nunca…! - le apretó el hombro en señal de apoyo y continuo - escúchame Thor… yo no justifico a Loki pero si le doy la razón, es solo que equivoco el camino, el método para arreglar las cosas estuvo mal…
- ¡Gracias Heimdall! - subió su mano y la apoyo sobre la del Guardián en agradecimiento por sus palabras y por no guardarle rencor a su hermano - no sabes lo que significa para mi que no le guardes rencor a Loki… tu no sabes cuanto lo ame…y lo sigo amando…
El Guardián ya no dijo nada solo lo vio alejarse del lugar, amaba a ese muchacho al igual que a toda la familia real, y le dolía por todo lo que tuvieron que pasar, también sentía el dolor de haber perdido al más pequeño de la familia, pero sabía que el dolor era pasajero pues afortunadamente el tiempo hace su trabajo y poco a poco las heridas van cerrando y sanando dejando a su paso tan solo el recuerdo de dichos momentos…sonrió pensando que ayudaría a componer la puerta lo más rápido posible, era muy importante para él ver sonreír de nuevo al chico que quería como si fuera de su familia, sonrió pues sabía que no le dijo todo el rubio, no quería darle falsas esperanzas…todavía.
Paso más o menos un año desde que el puente fuera destruido y reconstruido, y llego por fin el gran día en que quedo listo para ser usado de nuevo…
- Listo - dijo Heimdall dedicándole una ligera sonrisa de satisfacción al rubio Thor quien seguía instalado en sus trece y en su apatía por la vida, quien se había resignado a la perdida de su hermano, pero que seguía sin aceptarlo…
- Listo… - lo miro sin expresión alguna en el rostro - ¿listo para que…?
- Thor…muchacho, debes de dejar esa actitud, un futuro rey no debe ser así, debe ser fuerte, feliz y optimista…
- Sí, voy a ser un rey…y soy fuerte pero no me pidas que sea feliz y optimista porque no lo siento…para nada - ya no dijo más y dándose la vuelta comenzó a alejarse del Guardián.
A lo lejos Thor nunca de dio cuenta de que era observado por su madre, quien tras haber perdido a un hijo no estaba dispuesta a perder al segundo, así que armándose de valor decidió tomar las riendas del asunto y puso manos a la obra, fue al gran salón donde estaba el trono a ver al Rey Odín al Padre de Todo.
- Odín… - lo llamo deteniéndose frente a el, quien la miro algo extrañado al ver cierta determinación en sus ojos.
- Dime… - fue lo único que dijo.
- Odín…el Bifrost ya esta restaurado, ya se puede viajar por el a otros mundos, y se que quizá sea muy apresurado pero… - suspiro - a nuestro hijo aún le falta tiempo, conocimientos para ser nombrado Rey de Asgard… - hizo una pausa pues desde los acontecimientos pasados, entre ellos dos nunca habían mencionado nada de lo ocurrido - sé…que Thor a estado muy triste desde… - trago saliva pues a ella también le costaba mencionar el asunto, aún le dolía demasiado - desde la muerte de su hermano, y necesita distraerse antes de tomar un cargo muy importante como el de ser Rey de Asgard, así que pido tu benevolencia para que lo dejes viajar a la Tierra…
- ¿A la Tierra…? - dijo algo extrañado
- Si, a la Tierra… - hizo una mueca con los hombros tratando de quitarle importancia al asunto - es aún un muchacho, y necesita distraerse de su pena, el amaba mucho a su hermano y le dolió en lo más profundo de su alma el haberlo perdido y si le sumamos que… - sabia donde poner el dedo, en que llaga para hacerla sangrar, sabía que su marido a pesar de mostrarse frio con Loki en vida, lo amaba y también lo extrañaba, así que… - se entero que no era su hermano de sangre, y que el mismo al principio de todo fomento la destrucción del reino que le tocaba a su querido hermano, pues…deberías dejarlo visitar la Tierra, donde dejo amigos aquella vez que lo desterraste… ¿lo recuerdas?
- Yo nunca olvido mujer - la miro sabiendo que entre sus palabras no dichas abiertamente, ella…lo culpaba de todo, suspiro y decidió que su mujer tenía algo de razón - pero tienes razón, aun le falta mucho para ser nombrado Rey de Asgard, así que… - le dio la espalda, no quería mostrarse débil ante ella - deberá estudiar mucho más, y que mejor lugar que estudiar y conocer otros mundos para comprenderlos y gobernarlos mejor…si, tienes razón… - volteo a verla y le sonrió, sonrisa que ella vio como mesclada con algo de tristeza - llámalo tu misma a mi presencia y dale tu misma la sorpresa, ¿Qué te parece?
- ¿en verdad Odín? - los ojos se llenaron de agua al ver que sí, efectivamente su marido también sufría por la muerte de su pequeño hijo y que deseaba también hacer feliz al que les quedaba, corrió y se abrazo a su cuello mojándolo en dicho abrazo - gracias mi amor, eso lo hará muy feliz - lo soltó y dándole un beso ella misma fue a buscarlo.
Lo busco por varios salones, pero no quiso dejarle a nadie la tarea de encontrarlo, ella misma lo haría no era tan inútil después de todo, lo vino a encontrar en una de las terrazas, en una muy especial…la terraza que más le gustaba a su hijo menor, la que más le gustaba por ser la más alejada de todo el palacio y la que gozaba de mayor soledad… estaba en una de las esquinas de un balcón…lo vio a lo lejos y su corazón se estrujo, se veía una figura tan frágil, se veía tanto dolor en su rostro, en su persona que sintió un nudo formarse en su garganta, trago saliva, y limpiándose una lagrima que logro escapar de uno de sus ojos logro dibujar una sonrisa en su bello rostro.
- Thor…hijo mío ¿Qué haces aquí solo? - camino a su encuentro y lo abrazo muy fuerte, lo soltó y mirándolo a los ojos le dijo - tu padre quiere verte, necesita darte una noticia - y guiñándole un ojo lo tomo del brazo instándolo a caminar - vamos, te gustara saber que es…
- ¿Tú sabes de que se trata madre? - dijo devolviéndole la sonrisa a su madre, comenzó a caminar del brazo con ella.
- Si, pero es una sorpresa, vamos, quiere que la escuches estando los dos junto a ti.
Así fue como caminando los dos rumbo al salón del Gran Trono y tomados del brazo llegaron a la presencia del Gran Padre de Todo, el Gran Odín…
- ¿Me llamaste padre? - dijo ya estando frente a el.
El Gran Odín miro a su esposa y le sonrió dándole la pauta para que fuera ella la que hablara sabiendo que le encantaría darle esa noticia a su hijo amado.
- Hijo - dijo ella sonriendo mientras caminaba y tomaba del brazo al Gran Padre de Todo - tu padre a decidido que debes viajar a la Tierra…
- ¿A la Tierra…y para que? - pregunto extrañado, pues sabia que su padre no quería ese viaje porque en el anterior el dejo un amor inconcluso… - padre… tu no quieres que yo vaya a …
- Hijo - dijo el Gran Odín - aún te falta mucho por aprender y si quieres ser un buen Rey, debes saber como actuar, debes ser más sabio y debes estudiar mucho aún…sí, puede que al principio no quería que fuera más, pero… - hizo una pausa y sonrió triste - debes tratar de aprender como seguir con tu vida, por que el Reino es muy demandante y no puede darse el lujo de tener un Rey triste, que no sabe dejar las cosas atrás, sobretodo porque se reflejaría en tus decisiones…ve y aprende a sobrellevar todas tus emociones, llora, diviértete, estudia…para todo hay tiempo, pero sobre todo…se feliz, Asgard quiere un Rey capaz de hacer feliz a todos y para que lo logres, primero debes aprender a serlo tu…
- ¡Padre te quiero! - Thor abrazo a su padre y después a su madre diciéndole al oído - sé que tu tuviste mucho que ver con esta decisión y te lo agradezco mucho, te quiero madre… - le dio un beso a cada uno y partió rumbo al puente.
Llego al puente donde ya lo esperaba Heimdall el Guardián, quien sonreía muy poco, esta vez le dedico una pequeña sonrisa al rubio quien no pudo evitar devolvérsela y preguntarle.
- ¿Tú también tienes algo que ver con este viaje?
- No se de que me hablas… - dijo mientras le guiñaba un ojo - Thor… al llegar a la Tierra…busca la manera de ir a la Torre Stark…
- ¿Debo preguntar por alguien? - dijo intrigado el rubio
- Vas a ir por algún tiempo y esta vez no vas por accidente, así que vas a ir como un estudiante universitario, en la escuela a la que vas a ir ya hay alguien a quien conoces de tiempo y que te ayudara en lo que sea necesario…
- ¿ya conozco a alguien? - dijo tratando de averiguar algo más que puras conjeturas…
- No te diré más… - y se dispuso a abrirle el portal para mandarlo a la Tierra.
- Pero… - dijo mientras caminaba hacía el portal
- Lo demás lo averiguaras por ti solo y harás lo que dicte tu corazón…no puedo decirte más… - le mostro una sonrisa sincera y le dijo por ultimo antes de lanzarlo a la Tierra - Thor…allá encontraras el amor y tu felicidad, solo debes saber donde buscar… - y sin darle tiempo a nada más lo transporto al otro mundo.
A penas cerro el portal y la Reina salió de su escondite y dedicándole una sonrisa le dijo cómplice…
- Solo por que sé, que hay algo allá en la Tierra que se que lo hará feliz es que lo dejo ir… - le guiño un ojo al Guardián y se dio la vuelta para alejarse, cuando…
- Mi Reina… - la detuvo indeciso de decirle la verdad - yo…
- Tú… - ella suspiro y dijo sin voltear a verlo - tú sabes algo que yo debo saber, pero aún no es tiempo…aún no es tiempo Heimdall…aún no… - y se fue…
Esta vez no fue como la vez anterior que visito la Tierra…o más bien cuando cayo en ella, esta vez fue muy distinto, apareció en medio de un departamento o más bien en una habitación de un campus universitario, ahí encontró todo lo que necesitaba cualquier chico estudiante, tenía todo incluso estaba apuntado ya en las clases a las que acudiría, al gimnasio, al equipo de fútbol americano, reviso todo y después de ponerse al corriente con lo que haría a continuación salió de la habitación, y sonriéndole a todo el mundo decidió dar una vuelta para conocer el campus, cual va siendo su sorpresa más grande cuando apenas iba reconociendo el campo deportivo cuando se encontró con Darcy la hermana de su antiguo amor.
- Darcy… - corrió a abrazarla - que alegría encontrar a alguien conocido y que quiero mucho - dijo mientras la levantaba en brazos - ¿Qué haces aquí? - la soltó y le dedico una sonrisa encantadora que derritió a las compañeras y amigas de la chica.
- Thor… ¿¿Qué haces aquí? ¿ya sabe mi hermana que estás aquí? ¿hay alguien en problemas? ¿nos atacaran de nuevo? - pregunto algo asustada pero muy emocionada.
- No…y no quiero decirle por el momento… ¿me podrías guardar el secreto un tiempo? - le guiño un ojo mientras recordaba las palabras del Guardián de las Puertas de Asgard - “en la Tierra encontraras a alguien que ya conoces de tiempo atrás y que te ayudara en lo que sea necesario” - decidió que había tiempo para todo y que lo que tenía que hacer lo haría con calma.
- ¡claro! ¿Por qué no? - le sonrió y lo tomo del brazo ignorando a sus amigas y alejándose con el rubio de ahí - y dime… ¿a que debemos el honor de tu visita aquí en la Tierra?
- Darcy… - le sonrió triste y mientras caminaban le platicaba - tu sabes todo lo que paso y lo sabes de primera mano, no puedo mentirte y menos a ti… - hizo una pausa - la muerte de mi hermano me toco muy hondo y no eh podido superarlo… mis padres creen que debo distraerme un poco y que debo hacer algo aquí antes de que me nombren Rey de Asgard… - suspiro y continuo - Heimdall también me indico que debía venir y que aquí encontraría lo que necesito para despertar de mi letargo, ellos no saben que lo que yo necesito murió… y yo con él…
La chica lo miro conmovida y le sonrió comprendiendo su dolor, así que sin pensarlo dos veces le ofreció su ayuda para lo que fuera necesario, ahí Thor comprendió a quien se refería Heimdall…
Así paso el primer semestre en la universidad, y todo transcurría con relativa calma, cuando el rubio decidió que debería empezar a moverse, así que pensándolo un poco le dijo a su eterna compañera de estudios y travesuras…
- Darcy…tengo que ir a un lugar, no se si lo hayas oído mencionar…”La Torre Stark”
- ¿”La Torre Stark”? claro que si, su dueño es millonario y se llama Tony Stark por ello el nombre de la Torre y es famosa por …
- Tranquila Darcy, en realidad no me importa porque sea famosa, Heimdall me dijo que tenia que ir y creo que ya es tiempo de que lo haga, en realidad no se que puedo encontrar ahí, pero ya es tiempo de que vaya… ¿sabes la dirección?
- Yo te puedo llevar - dijo emocionada.
- Pero puede ser peligroso, no se si sea seguro que tu…
- ¡claro que es seguro! Tu no te preocupes, Tony es famoso y quiero conocerlo, de hecho Erick trabaja con el.
- ¿Segura…? Porque no quiero meterte en problemas…
- Oh no te preocupes, servirá para saludarlo y te servirá de pretexto para que busques lo que necesitas saber…
- ¡Gracias Darcy!
Al siguiente día saltándose todas las clases llegaron a la Torre Stark al punto del medio día…siendo recibidos por el mismísimo Tony en persona…
- ¡Darcy que sorpresa! Ven aquí… - dijo abrazándola y causando una cara de real sorpresa en ambos chicos que no esperaban semejante recibimiento…
- Eeeh…yo, bueno Sr. Stark no… - no sabia que decir - yo eh…
- Tranquila niña, Erick me platico sobre ti y tu hermana Jane la doctora… y te conozco porque el…tiene una foto de ti y tu hermana en su laboratorio…
- Aaah claro, que bueno, bueno pues nosotros queríamos saludarlo porque Thor - dijo señalando a su rubio compañero - viene de un viaje muy largo y antes de irse quería saludarlo…
- ¿ya te vas…? - dijo Tony mirando a Thor - pero…
- No, no lo que pasa es que ya tengo tiempo aquí y no eh podido ni saludarlo y el tiempo se pasa volando y terminare de estudiar y no hay tiempo para nada y… - a la vez estaba nervioso e intranquilo, pues tenía una sensación extraña, y miraba para todos lados y no sabía que era…cuando…
- Tony… - entro un chico muy guapo a la estancia interrumpiéndolos y dejando a Thor con la boca abierta y sin saber que decir ni que pensar y con ganas de reír histéricamente o morir… - discúlpame tienes visitas y no me di cuenta - los saludo a ambos dejándolos con la boca abierta - lo siento vendré en otro momento - se dio la vuelta para alejarse cuando fue detenido por el mismo Tony, quien lo tomo cariñosamente del brazo de una forma muy familiar…
- Les presento a Liam - dijo Tony acercando al chico a la pareja, ella lo miro de arriba abajo apreciando la belleza del chico, cabello negro algo ondulado, ojos de un verde intenso, hermosa sonrisa, excelente cuerpo, buena estatura, muy buen trasero… y de esto se pudo dar cuenta cuando el chico intento alejarse antes de ser detenido por el millonario, iba vestido con un pantalón de vestir negro que delineaba su bien formado trasero, llevaba una camisa blanca, sin corbata, zapatos bien lustrados y un libro en las manos - Liam te presento a unos amigos de Erick o familiares? Bueno no importa - le sonrió muy encantador al chico - ¿te importaría llevarlos con el a su laboratorio? Tengo una cita con… - le guiño un ojo - y se me hace tarde.
- ¡claro que no! - dijo devolviendo la sonrisa y el guiño - Yo los llevare y vete antes de que Peper se enoje por tu retardo.
- No se enojara, voy a tiempo y gracias por hacerlo por mi - se volteo a ver a la pareja que no habían dicho nada y les sonrió a modo de disculpa - lo siento, pero tengo una cita - se iba a ir cuando vio la cara del rubio que no había podido articular una sola palabra, lo miro extrañado y se preocupo - disculpa chico ¿te sientes mal?
Fue entonces que Thor por fin pudo reaccionar asustando a todos…