Capitulo 5
Alberto se levantó según sonó el despertador de Adrian, Dios, lo tenia puesto par a las 6:30 de la mañana, que tortura... Giro su cabeza adonde un chico de pelo azabache dormía felizmente y tranquilamente. Se levantó con cuidado y se fue a la ducha, se baño y a los 30 minutos, volvió a vestirse para ir al Instituto. Esta semana tenia enormes exámenes. Miro otra vez la hora. 7:00.
Sonrió, se acercó y con cuidado beso esos lindos labios que le encantaban. Bajo y preparo su desayuno y el de su UKE y ahora novio.
Un vaso de Naranja, 3 tostadas con mermelada y una taza de café.
Salió sin hacer ruido y se dirigió a su destino. El instituto.
Mientras, en la casa, Adrian abría los ojos lentamente. Miro a su alrededor y comprobó que su acompañante hacia poco que se había ido. Se levantó con un dolor en su parte baja y con dificultad se fue al baño, para quitarse el resto de semen que escurría de su ano y su barriga. Encendió la música en el baño. -Tiene un reproductor en el baño, como yo- Abrió el grifo y antes de meterse, preparo la toalla. Cerró la puerta.
La puerta principal se abrió con cuidado y un hombre empezó a subir las escaleras. Se acercó a la puerta donde estaba Adrian.
En el baño se podía oír las canciones. Toco la puerta varias veces, hasta que Adrian la apago y se dirigió a la puerta con una sonrisa, la abrió pensando que era Alberto y su rostro se volvió más pálido de lo habitual. El hombre solo lo miraba divertido y con un pequeño enojo que no paso desapercibido por nuestro UKE.
-Hola, Adri -saludo el extraño. -¿Como estas? ¿Te divertiste anoche?
-Que...¿Que haces a- aquí?-Pregunto como pudo.
-Nada, ayer por la noche llegue y vine para saludarte, pero, estabas ocupado así que decidí venir a darte una sorpresa.-sonrió mostrando sus dientes blancos- Hermano menor. -Adrian intento cerrar la puerta tan rápido como pudo pero, el hombre solo se lo impidió y lo agarro llevándolo a la habitación más grande de todas, la de sus padres. Lo empujo tan fuerte que callo encima del concho dejando que un sonido lastimero saliera de sus labios.
-Hermano, ¿que haces?-pregunto temeroso al ver como su hermano mayor se quitaba la camisa y dejaba ver su cuerpo. (todavía tiene los pantalones)
-Nada, solo que no puedo controlarme cuando te tengo a mi merced y desnudo- Adrian al comprobar que tenia razón intento taparse con los brazos, pero cuando intentaba salir huyendo su hermano se posiciono encima de él y le agarro las muñecas por encima de la cabeza, Adrian estaba asustado, sabia lo que venia y no quería, no otra vez, se defendía como podía, empujando, mordiendo o pataleando como era posible, recibió un golpe que hizo que su cara se dará la vuelta hacia el otro lado. El mayor al ver que Adrian no se movía, se quito sus pantalones y los boxees que tenia puesto, se posiciono en la parte baja del menor y sin preparación ninguna lo embistió. Adrian volvió en sí, cuando sintió ese cayo de carne en su interior sin preparación y que lo partía en dos. Se sintió morir, cada vez que lo embestía con mucha fuerza.
-Ah, Adri.... joder, eres estrecho.-dicho eso se corrió en su interior y como si nada salio de su interior. Se levanto y se vistió, lo miro sonriendo.-Te acuerdas cuando lo hicimos por primera vez, yo sí, y tú también por desgracia te traume. Espere, a que me aceptaras, pero nunca lo hiciste así que volví a dominarte, fue divertido como te intentabas librar, pero nunca resulto. Te acuerdas, ¿cuantas veces al día te violaba?...Yo todavía lo recuerdo, y me excito solo al pensarlo. Pero, veo que encontraste a otra persona. -Adrian lloraba en silencio escuchando cada palabra de su hermano mayor, recordó todo, y también a la persona que era su luz. Alberto. -Sino quieres que pase como a papá y mamá sera mejor que dentro de unas horas, tengas listo todo, nos iremos lejos de esta cuidad. -Su hermano mayor salio de la habitación y cerró la puerta con brusquedad. Adrian se levanto del concho que ahora estaba lleno de sangre y semen, se ducho y se vistió, preparo las maletas y cuando todo estaba listo se tumbo en su cama y empezó a escribir una carta, para Alberto. Sus lágrimas caían sin control, le estorbaban y su corazón lastimaba. Miro la hora las 8:30 había pasado varios minutos en aquella tortura...sus lágrimas no cesaban de caer por sus mejillas y callo en los brazos de morfeo que lo recibió gustoso.
Habían pasado varias horas y en el instituto todas las chicas estaban revueltas....Había un hombre de mediana edad, de unos 26 años, de compresión fuerte y muy equilibrado, su pelo marrón casi negro estaba bien peinado, sus ojos color marrón cobre resaltaban con su vestimenta, una camisa negra y unos pantalones vaqueros con playeras negras. Su rostro era el de alguien maduro y bien adinerado, orgulloso y un poco intimidarte. Miraba hacia las personas, pero más los chicos. No le hacia casos a las chicas o a las profesoras que le intentaban pedir una cita, solo lo interesaba una persona ….
Se acercó al chico de piel bronceada y pelo castaño y ojos marrón oscuro, se puso delante y empezó a hablar.
-Buenas Tardes, joven.-el chico le presto atención- Estoy buscando a Alberto de 1º B de Bachillerato. ¿Lo conoce?-El chico asintió y con una sonrisa dijo.
-Soy Alberto, ¿quien es usted?
-Yo soy Marcus, el hermano mayor de Adrian.-Alberto abrió sorprendido los ojos pero, volvió enseguida a la pose de un chico normal.-Por su reacción, e de suponer que Adrian no le había dicho nada- Alberto asintió, pero no le gusto nado como dijo el nombre de su actual NOVIO.
-¿Puede ir directo al grano?-pregunto alzando una de sus oscuras cejas, en señal de que no fuera tan cortes ya que sabia a lo que venia.
-Veo que ya sabes o estarás pensando para que vine-dijo más relajado Marcus.
-Sí, para que me aleje de Adrian, pero no lo are LO AMO-contesto. Marcus se rió.
-Lo suponía, pero, ¿porque no estas con Adrian?-pregunto curioso-Sino te das prisas se largara- Alberto no consiguió entender hasta que....-Mis hombres estarán en su casa dentro de algunos momentos para llevárselo lejos de aquí, pero, sobretodo de TI, Alberto. -Alberto empezó a correr mientras, oía la oscura y horrorosa risa de Marcus.
Llego sudado a la casa, toco el timbre pero, nadie abría, toco la puerta y la encontró abierta. Con temor paso dentro de la casa, miro hacia la cocina, el desayuno estaba sin tocar, subió las escaleras y miro el baño, estaba usado alguien se había bañado...Adrian....Miro a su izquierda y vio la habitación de los padres, entro y se encontró una mesa con muchas fotos, en la primera, estaba Adrian recién nacido, En la segunda con sus padres, en la tercera con su hermano entrando al colegio con unos 7 o 8 años y en la ultima, Adrian con 12 años, junto a su hermano de 18, pero, lo que más extraño a Alberto es que en las anteriores fotos estaba sonriendo, feliz y en la ultima estaba serio, en su rostro se podía ver terror y odio hacia la persona que estaba ahí, se fijo mejor y pudo ver como el rostro lo tenia golpeado solo en la mejilla derecha y algunos chupe tones en el cuello. Una idea se le paso por la mente la castaño pero deicidio hacerla desaparecer. No podía ser....
Se giro y abrió los ojos de la sorpresa, el concho estaba lleno de sangre y semen, y el único vivía aquí era Adrian, esa misma idea volvió a sus mente como una tormenta. Torpemente salio y entro en la habitación donde ambos se habían entregado mutuamente. Sus lágrimas se amontonaban en los ojos, los cajones estaban vacíos, el armario también, su cama estaba como la había dejado, ordenada y todo recogido, lo que no se llevara lo dejaría ahí, seguro. Se sentó en la cama y rompió a llorar. ¿Donde estaba? ¿Porque, porque lo había abandonado? ¿Porque se volvía a repetir todo otra vez, con la persona más importante en su vida?
Miró el escritorio que tenia a su lado y vio una carta, con su nombre escrito en ella. Se levanto para cogerla y después se volvió a sentar en la cama, todavía quedaba una esperanza y esa era la carta... Abrió con dedos temblorosos y empezó a leer.
CONTINUARA.......
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