Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Deseo de Navidad por Riolu

[Reviews - 6]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Nyaaaaaaaaan hola lectores y lectoras, aqui deseandoles feliz navidad o fiesta que ustedes celebren, le mando saludo a Ale-sama que no me ha dado saludos mala ><, tambien a todos los que me han apoyado en este tiempo y ojala les guste nyan cat

 

ninguno de los personajes me pertenece excepto Iris, sus dueños son Square Enix y Disney, tambien a los otros productores y su creador que no recuerdo su nombre ><, benditos sean por crear este juego

Una blanca mañana producto de la nieve amontonada en la ventana, un frio que simplemente me hacía acurrucarme en las sabanas sin deseos de levantarme pero debía hacerlo, solté un bostezo y vi el reloj de mi mesa de noche, son las 10 de la mañana del 24 de diciembre, Navidad, sabía que debía juntarme con mis amigos por una petición y con la mayor pereza del mundo me levante. El agua de la ducha me ayudo con el frio mientras no dejaba de pensar algo deprimido que no obtendría lo que deseaba para este día nuevamente, un secreto que llevo desde hace 2 años y que no he podido abandonar....un amor imposible.

Me comencé a arreglar con algo para abrigarme, baje con la intensión de desayunar y encontré unas notas en la mesa, la primera era de mis padres que decía "perdonen, ocurrió una emergencia en la empresa y ambos tendremos que trabajar todo el día, quizás lleguemos mañana en la tarde y trataremos de compensarlos en algo, Roxas, Ventus nuevamente disculpen y feliz Navidad". Otra vez la misma excusa pero no puedo quejarme siendo que no están aquí, ahora revise la otra notando que era de mi gemelo “Roxas estaré en casa de Vanitas, recuerda que nos juntaremos con los demás en el parque a las 12:00, si no vas ya sabrás lo que Iris te hará...no faltes, no quiero quedar traumado cuando me cuentes que te hizo", ante esa nota un ligero escalofrió me recorrió por solo mencionar ese nombre, vi el reloj notando que solo tenía una hora para llegar, decidí hacerme algo rápido de comer y poder salir pues entre más temprano llegara más a salvo estaría, la nieve seguía cayendo en todo mi trayecto obligándome a acomodar mejor la bufanda, al hacerlo una sensación de molestia me llego pues fue esa misma persona por la cual sufro quien me la regalo, realmente necesito ayuda para superarlo pues en todo el camino no había podido dejar de pensar en él y fue peor cuando lo vi en la cafetería, sus cabellos castaños, sus ojos azules como el mar y su rostro que desprendía inocencia pura, un perfecto ángel que a través de su amabilidad y consideración hacia otros me había enamorado, el pareció notar mi presencia y al igual que un niño pequeño comenzó a alzar su brazo gritando mi nombre para que fuera hacia él, a cada paso mi corazón aceleraba y luego se detuvo cuando vi que había alguien que no había notado.

Su novia Kairi

Ella me saludo con una sonrisa y yo me senté frente a ellos aunque hubiera deseado que no, cada vez que Sora parecía querer hablarme ella le llamaba la atención y terminaban dándose un beso o hablando entre ellos, tome mi celular y comencé a jugar en el intentando distraer mi rabia pues sabía que no podía impedirlo, más bien no debía pues ellos son la pareja y yo el tonto que está de sobra aquí, el idiota sin derecho a interponerse en una relación que se ve tan feliz y que me causa tanto dolor, lo peor era que el castaño insistía en querer hablarme aunque su novia le pedía mas atención, me alegre bastante cuando llegaron mi gemelo agarrado a su novio, Vanitas el hermano de Sora se veía algo incómodo por como las miradas de varios se posaban en ellos dos pero Ventus simplemente no le importaba mientras el pudiera estar con el azabache. Lo bueno fue que ya no estaba a solas con esa pareja, la mala era que ahora yo parecía el tonto solo entre dos parejas cosa que se terminó en cuanto llegaron Axel y Riku, me alivio bastante pues con el pelirrojo me llevaba bastante bien y con el pude conversar normalmente recibiendo algunas burlas del albino, lo curioso que es sentía una mirada sobre mi constantemente pero prefería ignorarla, la curiosidad me gano y voltee disimuladamente notando que era Sora quien me observaba molesto y el apenas noto que ya sabía se volteo rápidamente confundiéndome un poco, ¿él me estaba observando a pesar de estar con su novia?...no, no debo hacerme falsas ilusiones, cuando llegaron Aqua y Terra ya estábamos casi todos exceptuando a Naminé y a Xion las primas de Kairi, nos pusimos a hablar sobre qué planes tenia cada uno aunque Ven únicamente se la pasaba de afectuoso con el azabache o respondía que pasaría el resto de su vida junto a él, aun nadie podía creer lo tranquilo que podía actuar a pesar de las críticas que le hacían, “es mi felicidad, por mí los que critican se van a la ******”, era lo que siempre nos respondía y la mayoría culpaba a su pareja porque usara esas palabras, mi gemelo parecía inocente pero algo dentro de mí me decía que era un diablo con cara de ángel.

-Al fin llegas Iris-le regaño Vanitas al ver como finalmente llegaba la que nos había pedido llegar acompañada de sus amigas Xion y Naminé, una castaña que si no fueran sus ojos de un verde esmeralda seria la versión femenina de Sora, aunque también era su hermana y del azabache así que tendría sentido en algo, ella se excusó junto a las otras dos y se quitaban la nieve de su cabello, una vez estuvimos todos juntos pidieron un chocolate caliente para cada uno mientras todos la mirábamos esperando la respuesta a la convocatoria.

-Ejem, bueno les pedí que vinieran pues este año tenía planeado que juguemos al amigo secreto en navidad-explico ella bebiendo su chocolate y sonreía por ello, todos nos quedamos en silencio pensando que sería una broma pero por el semblante de sus amigas no parecía serlo.

-Eh ¿sabes que es 24 de diciembre verdad? Es decir todas las tiendas están cerradas-le recordó Terra molesto por pensar que le hizo perder el tiempo, al igual que muchos planeaba levantarse e irse pero una mirada de ella los devolvió a sus asientos algo asustados, jamás sabré como se ganó nuestro respeto o miedo pero nunca nadie quería enfrentarla después de todo se dice ella peleó contra 4 sujetos al mismo tiempo que molestaban a Naminé y los dejo casi en estado de coma...de acuerdo creo que ese si era un buen motivo para respetarla, todos comenzamos a preocuparnos por el tema de donde conseguiríamos a esta hora un regalo y con el dinero que tenía ahora temía regalar algo mediocre, ella fingió toser nuevamente y saco un volante que dejo en mitad de la mesa para que todos lo viéramos.

"¿OLVIDO SU REGALO?, ¿TUVO PROBLEMAS O NO TIENE DINERO? ENTONCES VENGA A NUESTRO ESPECIAL DE NAVIDAD, EL CENTRO COMERCIAL ESTE DIA 24 ESTARA ABIERTO HASTA LAS 7 DE LA TARDE Y CON OFERTAS DE HASTA UN 50% VENGA, NO QUEDE MAL EN ESTA NAVIDAD.


-Lo encontré ayer y me dedique a quitar los otros para que nadie más lo notara, ahora no tienen excusa de que algún lugar está cerrado y lo del dinero tampoco me lo creeré pues sé que la mayoría recibió un bono de Navidad-nos explicó ella con una sonrisa de victoria mientras la mayoría de nosotros bajo la cabeza en señal de derrota, ¿cómo diablos podía saber ella ese tipo de cosas? Es verdad que Ven y yo recibimos una buena suma de dinero de parte de nuestros padres pero yo tenía planeado ahorrar para una nueva consola, todos parecían tener una situación similar excepto mi gemelo que únicamente se recargaba en el azabache sin preocuparse realmente-en fin ahora saquen un papel para saber a quién le van a regalar, recuerden que es secreto y si hacen trampa-nos recordó antes de tronar sus nudillos de un modo amenazante y todos tragamos fuerte presos del miedo, dejo unos papeles exactamente iguales en la mesa y cada uno lo pensó antes de sacar uno, el ultimo que saco fui yo y me quede confuso al ver que me había salido Vanitas, el único regalo que se me ocurría le gustaría seria a mi gemelo desnudo envuelto en un lazo junto a un tubo de lubricante, no me hizo bien pensarlo pues mis mejillas me ardieron un poco y entonces un pequeño puntapié me llego, voltee un poco a mi lado notando como Ventus extendía su papel hacia mí por debajo de la mesa pidiendo cambiar con la mirada, supuse que leyó quien me toco y observe como todos estaban concentrados en el nombre que les toco así que nadie me vería cambiárselo, se lo extendí escuchando un pequeño gracias de su parte antes de acurrucarse en su novio. Maldije a cada instante lo que acababa de hacer.


A quien debía regalar...era a Sora.

Me quede de piedra mientras le imploraba a mi gemelo cambiarme nuevamente pero el simplemente se levantó con su pareja diciendo que irían temprano, la mayoría también comenzó a irse pues tenían planes con su familia más tarde o eso decían, solté un profundo suspiro atrayendo la mirada de los demás y me despedí sin prestar atención como algunos me preguntaban que ocurría, apenas llegue a la entrada parecía que no dejaría de nevar, acomode mi bufanda preparándome a irme hasta que unas manos taparon mis ojos tomándome por sorpresa, escuche una pequeña risa y la reconocí enseguida.

-¿Sora no crees que hace demasiado frio como para hacer esto sin guantes?-le pregunte tomando sus manos desnudas con las mías pues estaban muy frías, incluso con mis guantes podía sentir un escalofrió en mi cuerpo por tocarlas y tuve que separarlas con algo de prisa, voltee a verlo y el parecía querer decirme algo pero Kairi se había abrazado a su espalda reclamando que la había dejado sola, este se excusó mientras estaban por besarse y entonces me tuve que voltear en otra dirección para no verlos, en verdad me lastimaba eso pero eso no debería importarles, ellos están juntos así que lo más lógico es que me alegre pero era inútil, tengo envidia de ella por tenerlo a su lado, tengo rabia de que lo hagan sin saber mis sentimientos y tengo tristeza por pensar que nunca lo podría dejar ir, comencé a caminar en el sentido opuesto de ellos para poder alejarme hasta que el castaño me jalo por la bufanda deteniendo mi huida.

-Si vas al centro comercial entonces vayamos los tres juntos, no quiero que estés solo este día-propuso el con su clásica sonrisa de inocencia, le iba a negar pero parece que Kairi se me adelanto pues comenzó a ponerse afectuosa con el pidiéndole un tiempo a solas, el por el contrario parecía pedirle que así tendrían mejores opiniones para los regalos, comenzaron una leve discusión y para ese entonces yo deseaba únicamente que Sora me soltara pero este apretaba con fuerza pidiéndome que no me fuera, las ganas de gritarle que me soltara me las tenía que aguantar pues una parte de mi estaba feliz de que quisiera pasar un tiempo conmigo, realmente no tengo solución a este amor, pensé que se alargaría mas pero entonces sentí alguien agarrarme del brazo captando la atención de los tres.

-Disculpa hermanito pero Roxas me acompañara a mí, así no estará solo como tú quieres y estarás con Kairi-le propuso Iris mientras me guiñaba un ojo como pidiéndome que le siguiera el juego, era eso o ella me está coqueteando cosa que no creería posible jamás, lo más curioso fue la mirada de molestia en el castaño que al parecer fui el único en notar, la pelirroja parecía feliz por su victoria y entonces lo jalo a el del brazo para que comenzaran a caminar en la otra dirección, me dolía en verdad verlos apartarse a mí pero eso se detuvo cuando Sora volteo la mirada yo creo hacia mí, en sus ojos creí ver algo de tristeza y molestia pero rápidamente la aparto cuando se dio cuenta de mí, me quede perplejo unos momentos pues ya iba siendo la segunda vez este día hasta que sentí como me comenzaban a arrastrar para que la siguiera.

 

-¿Esto no es una cita verdad?-le pregunte algo nervioso por como caminábamos y debo decir que en verdad tenia fuerza pues ella parecía poder arrastrarme sin esfuerzo, ella se rio un poco y me negó con la cabeza contagiándome un poco y por fin me reí en este día, llegamos al centro comercial y ella me explico que deseaba su opinión acerca de que regalarle a Xion pues a ella le había tocado ya que quería impresionarla, comenzamos a recorrer varios lugares encontrándonos con algunos amigos igual de ocupados, finalmente ella entro en una tienda de electrónicos y yo decidí voltear a mirar hacia otros lados para buscar que le gustaría a mi…amigo, vaya esas palabras me dolieron, me llamo la atención en un aparador un collar con forma de corona, pase a preguntarle y no era tan costoso como me imagine así que decidí que ese sería su regalo, me sorprendió saber que se podía abrir y que dentro había espacio para una fotografía pequeña y en el otro lado estaban las palabras “always together”, por un momento  desee ver una foto mía y de Sora abrazados dentro de ese collar pero eso solo sería un sueño lejano, quitando esas tristes ideas me encamine hacia donde estaba la castaña que para mi sorpresa estaba al parecer discutiendo con Sora, me extraño que estuviera aquí y solo al igual que me confundí cuando él se sonrojo un poco por algo que debió decir su hermana, se encamino hacia mí al parecer sin saber que estaba cerca pues al verme sus mejillas se sonrojaron más y su mirada reflejo algo de nervios, estaba por preguntarle que ocurría el comenzó a correr pasándome de largo, me sentí algo mal por eso y volví con mi amiga que únicamente tenía una sonrisa al parecer de victoria.

 

-Sora se molestó porque estuviera contigo-me explico al ver mi confusión, pensé que sería únicamente el hecho de que estaba a solas con su hermana pero su risa me desconcertó-no es porque fuera su hermana, está molesto porque estás conmigo y no con el-se burló por cómo me ardían las mejillas, es verdad que esa idea me gustaría mucho, desde que comenzó a salir con la pelirroja nosotros que éramos los mejores amigos nos distanciamos bastante, pero el parecía tan feliz que intente acercarme a Axel, ese error no volveré a repetirlo pues por ello casi termino en un incendio además de que el no dejaba de ser acosador-no le digas que yo te dije, pero él te ha extrañado bastante, Kairi es demasiado posesiva y no acepta que le hable a nadie frente a ella, es más controladora con él porque teme que tú le gustes-me dijo guiñándome un ojo y para ese entonces estaba seguro de que mi rostro estaba un tomate por la vergüenza, de seguro ella ya sabía de mis sentimientos hacia su hermano y en vez de alejarme me parecía incitar a que lo consiguiera, sonreí por esa tonta idea y creo que algo de esperanza nació en mí, aun así no lo creería a menos de que lo escuchara yo mismo, comenzamos a caminar un rato más viendo por las tiendas únicamente para perder el tiempo y terminamos encontrándonos con mi gemelo viendo una tienda de disfraces, ambos lo saludamos y el pareció asustarse al vernos, yo también lo estuve un poco pues que no esté apegado a su novio es un auténtico milagro.

-Vanitas fue a comprar unos chocolates calientes para el frio-nos explicó adivinando nuestros pensamientos, se nos quedó mirando un tiempo y entonces se sonrojo un poco-oigan...¿me vería más lindo vestido de gato o de sirvienta?-nos preguntó jugando con sus dedos de un modo tímido, tanto Iris como yo nos miramos confusos por esa pregunta hasta que nuestras mejillas se sonrojaron al entender el motivo por el cual preguntaba, yo ahora estaba con un trauma por jamás esperar que el fuera a hacer ese tipo de cosas, observe que él se agarraba la cabeza arrepentido de habernos preguntado y entonces me llego una realidad que no quería saber, mi gemelo era pasivo y definitivamente ya no era virgen, estaba pensando en regañarlo, gritarle o cualquier cosa que un hermano haría en esta situación pero en vez de eso me quede callado, era Navidad después de todo y el también merecía pasarla bien, el azabache regreso antes de que fuéramos a responder algo y Ventus no lo dejo ni saludar antes de llevárselo del brazo ocasionado que los vasos casi se le cayeran.

-¡Ventus, creo que uno de cachorro estaría bien!-le grito Iris a lo lejos ocasionado que casi me diera un ataque, intérprete que ella se había sonrojado no por el tema del sexo sino por estar imaginándolo con diversos trajes, ella me miro confusa de mi reacción y yo simplemente me reí nervioso apartándome un poco de ella, después de habernos calmado ella le había conseguido a Xion un nuevo reproductor de música y ambos nos despedimos sabiendo que nos veríamos en la noche, regrese a mi casa mientras envolvía el collar en un pequeño paquete y le colocaba una cinta, a pesar de ello seguía maldiciendo mi suerte de que me tocara Sora pues esperaba no arruinarla y declarar mis sentimientos como en muchas de mis fantasías, esos pensamientos se me apartaron de la mente cuando escuche la puerta abrirse, me asome desde mi habitación notando a mi gemelo cargando un paquete entre sus brazos, apenas su mirada choco con la mía su rostro se puso más colorado que un tomate y corrió a encerrarse en su propia habitación, no pude hacer más que suspirar y comenzar a arreglarme pues al menos me debería ver bien, apenas salí de la ducha y me había colocado los pantalones Ventus se asomó por la puerta mirándome apenado y con ojos de cachorro dándome a entender que quería un favor, me termine de vestir y él estaba mirando al piso bastante nervioso mientras yo permanecía calmado hasta que mi mente logro trabajar más rápido y entendí lo que quería, el despego sus labios para hablar pero inmediatamente le puse una mano para impedirlo.

-Ya entendí que quieres así que...me quedare en casa de Axel o Riku o donde sea para que tengas la casa para ti solo, únicamente pido que cuando estén en...eso, no lo hagan en mi habitación-le pedí intentando sonar calmado pero por dentro me moría de la vergüenza y rabia, acabo de permitir que esta noche se violen a mi hermano pero este salto encima mío diciéndome gracias múltiples veces, ser buen hermano en verdad duele a veces. Pasadas unas horas en que me preparaba mentalmente de no hacer ninguna tontería por los celos o rabia o cualquier sentimiento que me hiciera perder la cabeza, ambos nos terminamos de arreglar para dirigimos a la casa de Sora, siempre era costumbre que los padres de ambas familias trabajarán en este día y por ello desde pequeños tuvimos la costumbre de pasar esta fiesta los 5 juntos, de ahí se dio el tema de que con tantos momentos de risa y buen tiempo mi gemelo se enamoró del idiota de Vanitas, aunque eso fue un bien para todos por como su actitud había mejorado pero en fin, yo había caído en el amor desde hace dos fiestas y la última apenas la había sobrevivido así que esta espero no será un desastre, finalmente llegamos a la residencia y fue el azabache que traía un suéter negro con un árbol de navidad bordado quien nos abrió siendo emboscado enseguida por Ventus terminando los dos besándose en el piso, los pase de largo y entre en la sala donde al parecer todo ya estaba listo con una deliciosa comida e incluso un pavo asado, Sora estaba ya sentado y llevaba unas ropas que parecía un disfraz de Santa Claus por ese chaleco rojo con unos renos bordados mientras que Iris llevaba un traje de Santa Claus pero versión femenina, una vez los otros dos decidieron dejar de intercambiar saliva estuvimos todos mientras que para mí mala suerte tuve que sentarme con mi amado castaño pues no dejaba de señalarme el puesto insistente, recordé la conversación que tuve con Iris y supuse que era verdad que lo había evitado por mis sentimientos, le di una sonrisa y estuve a su lado notando como el parecía más feliz, esta noche debía estar con él los momentos que tenía antes de que llegara su novia.

Después de dar las gracias comenzamos a comer mientras nos reíamos de todas las tonterías que habíamos hecho en el año, los dos tórtolos se daban de comer al otro en la boca, mayormente Ven al azabache provocándonos leves risas pues este no podía negarse y mi gemelo después hacia pucheros para que hiciera lo mismo con él, sin darme cuenta Sora había agarrado mi brazo en el que tenía el tenedor y termine dándole de comer en la boca, estaba confuso por lo que hizo pero el simplemente se rio un poco como si no fuera nada, su hermana me dirigió una mirada algo picara y tuve que desviar la mía intentado no hacer visibles mis pensamientos, el castaño pareció malinterpretar eso pues bajo un poco la mirada y me sentí culpable, comencé a pensar un poco en como enmendarlo y únicamente le pude ofrecer otra vez darle de comer observando como aceptaba sin dudar, sonreí un poco por su actitud tan adorable que casi me tuve que enterrar el tenedor en la mano para reprimir el impulso de arrojarme a besarlo, apenas termino la cena todos agradecimos la comida mientras la pareja se iba a acomodar a un sillón antes de encender la televisión y nosotros tres nos vimos obligados a encargarnos del aseo, Sora y yo nos habíamos entretenido hablando como si nada pasara pero por algún modo lo sentía más cerca mío de lo normal, una hora más tarde y sonó el timbre dando a entender que habían llegado los demás, todos estaban algo abrigados por la nevada que estaba cayendo pero aun así se veían bastante animados, apenas entro la pelirroja esta corrió a abrazar al castaño y me ordenaba salir de donde estaba para estar junto a su novio, las ganas de decirle una palabra fea o mandarla a que se entierre en la nieve casi me ganaban pero solo termine suspirando y me dirigí donde estaba Axel para hablar de cualquier cosa que me distrajera, una vez nos aseguramos de que estábamos todos cada uno comenzó a intercambiar sus regalos, Terra y Aqua estaban algo cariñosos pues el castaño le había regalado un hermoso collar y ella a él una nueva chaqueta de cuero, Axel estaba bastante emocionado por recibir un set de encendedores y Riku un nuevo videojuego de combates, las chicas al parecer se habían intercambiado entre sí, Kairi a Naminé una caja completa de artículos de arte ella a Iris una cámara está a Xion el reproductor de música y por último la azabache a la pelirroja una Tablet. Los siguientes fueron Vanitas que le regalo un colgante que tenía una estrella verde a mi gemelo quien le sonrió encantado y le susurro algo en el oído sacándole una sonrisa perversa, mejor desviar la mirada de esa zona...esperen un momento, si esos son todos entonces...a Sora le toco regalarme, lo busque con la mirada y este estaba bastante cerca mío, iba a decir algo pero me jalo del brazo pidiéndome que lo acompañara en silencio aprovechando la distracción en los demás y yo tuve que hacerlo, apenas estuvimos en la cocina lo mire pidiendo una explicación pero él estaba jugando con sus dedos indicándome que estaba nervioso.

-Roxas en verdad perdóname, también a Kairi por cómo te trato hace poco y pues...porque no te tengo un regalo-me dijo juntando sus manos en señal de perdón y yo me sentí algo desilusionado por tener alguna falsa esperanza-es que, bueno Kairi me comenzó a extorsionar para que le comprará otro regalo y yo le dije que debía guardar para ti, me dijo que te prefería antes de ella y entonces lloro un poco, perdóname, te prometo que te daré uno, es más si quieres tu tampoco me das el mío-me dijo cabizbajo por creer que me había fallado, simplemente respire profundo antes de darle unas palmadas en el hombro para animarlo, me vio algo más calmado y abrió sus ojos de sorpresa cuando le coloque el paquete entre las manos.

-Aunque no me des nada no importa, total haz sido mi amigo por años y con eso me bastaría, además es normal que prefieras a tu novia antes que a mí, pero este regalo es tuyo así que te pido que lo aceptes-le calme con una sonrisa que ocultaba mi dolor, no me había gustado para nada pero verlo triste es aún peor, él tiene novia y es normal que la tome en cuenta antes que a todos incluso si con ello lastima mi corazón, tenía que ser fuerte por mí y no salir corriendo solo para estar solo, apenas él lo abrió sus ojos se llenaron de un brillo de felicidad dando pequeños saltos mirando el collar en forma de corona, se lo coloco enseguida y antes de que pudiera reaccionar me había abrazado repitiéndome las gracias constantemente aliviando un poco mi dolor y le devolví el abrazo, pareciera que estuvimos varios minutos así pero yo no deseaba separarme por nada y por extraño que parecía el tampoco, aun así sabía que no podíamos estar tanto y comencé a separarme contra mi voluntad, apenas lo hice note que él estaba levemente sonrojado y desvié un poco la mirada pues su rostro de ese modo y la cercanía era demasiado, desgraciadamente mire hacia arriba notando algo que menos necesitaba ahora.


Un muérdago


-Eh Roxas...no es necesario-susurro el castaño que también había alzado la mirada y parecía que su cuerpo temblaba un poco, se le veía demasiado nervioso y de un modo tan inofensivo que fue demasiado para mí, el comenzó a mirarme 

proponiéndome que regresáramos pero yo coloque mi brazo en mitad de su camino obligándolo a detenerse, el me volteo a mirar con las mejillas aun sonrojadas antes de tragar un poco por el miedo creo...eso fue demasiado para mi autocontrol.

-Feliz Navidad Sora-le dije antes de ceder ante mis impulsos aprovechando la excusa del muérdago y lo bese, inmediatamente mi mente salto de felicidad por lo que estaba haciendo mientras él no se había movido de su lugar yo creo por la sorpresa, sus labios eran bastante dulces y no deseaba separarme de ellos por el momento pues esto era algo que quería, era el deseo de muchas navidades al fin cumplido, apenas me hizo falta el aire me separe de él notando como estaba sonrojado y sus ojos expresaban confusión, me excuse con que era la tradición y el comenzó a reírse nervioso desviándome la mirada, yo me reí con normalidad pero en realidad solo deseaba irme a algún lugar y atesorar el sabor que pude probar, eso se descartó cuando escuchamos como un vaso se rompía y entonces el rostro del castaño expreso miedo.

-¡¿U-U-Ustedes que creían que hacían?!-pregunto alterada y por su actitud parecía haber visto todo, Sora comenzó a balbucear excusas pero ello solo pareció aumentar su ira, le comenzó a soltar insolencias y críticas a el castaño que parecía herido por cada palabra, que no sabía complacerla, que tenía suerte de que ella estuviera a su lado, de que nunca nadie lo querría por pareja sino ella causando que mi rabia fuera aumentando, no era solo porque ella lo estaba tratando como escoria sino que él se dejaba ser tratado así, ella finalmente pareció calmarse y como si fuera un perro le ordeno acompañarla, mi paciencia se rompió en ese instante y abrace por la espalda a Sora impidiendo que se moviera mientras los dos me miraban impresionados por lo que hacía.

-Querías saber que hacíamos, pues solo era esto-le dije con un tono de enfado antes de tomar el rostro de Sora y poder besarlo nuevamente, no sé si es la emoción de estar probando nuevamente ese adictivo sabor o el rostro estupefacto de la pelirroja que no podía decir nada, miraba a ella indicándole que esto me encantaba pero lo que llamo mi atención mas fue por como unos momentos el castaño apretó mi mano con la suya y sus labios comenzaron a corresponder los míos, ahora el que estaba en shock pues sus ojos se habían cerrado un poco como si ahora fuera el quien lo disfrutara, correspondí su apretón y ahora ambos nos sincronizábamos en ese beso hasta que nos separamos para respirar, volteamos la mirada hacia Kairi y esta me dio una bofetada antes de gritarle a mi compañero que lo odiaba y salir corriendo de la cocina, Sora pareció regresar a la normalidad y se apartó de mi mirándome confuso y tocándose los labios, unos segundos pasaron en que ninguno decía nada hasta que di un paso para acercarme a él ocasionado que escapara yo creo a perseguir a su novia, me recargue contra uno de los muebles tocando mis labios con una tonta sonrisa, aun sentía su cálido tacto y mi lengua los recorrió para disfrutar el sabor que aún me quedaba, la realidad me golpeo de repente sacándome de mi lugar feliz, el solamente debió hacerlo como venganza o por el momento, e incluso lo pudo hacer por el tonto muérdago, ahora la culpa me estaba llegando pues si ellos terminaban el castaño podría odiarme para siempre, jamás podría vivir con eso así que me levante de inmediato y fui a la sala donde había un ambiente algo tenso, observe como las ropas de Kairi no están pero las de Sora si, le di un rápido vistazo a los demás e Iris me indico por medio de una seña de sus ojos que ambos habían salido, tome mi ropa y salí apresurado mientras me abrigaba agradeciendo la nieve que me mostraba las huellas que dejaron indicándome que dirección tomaron.

Unas cuantas calles y las huellas comenzaban a desaparecer, estaba asustado por pensar que no arreglaría lo que hice hasta que finalmente al cruzar una cuadra encontré a Sora apoyado en la pared, se veía un rastro de lágrimas en su rostro además de tristeza en su mirada y una marca en su mejilla parecida a una bofetada, estaba temblando un poco por haber salido con un suéter muy delgado nada más, con timidez me acerque a él llegando a su lado y no parecía querer dirigirme la palabra, aun así sabía que hacia demasiado frio y le coloque la bufanda que me había regalado alrededor de su cuello, él se había tensado por ello pero no se resistió pues parecía en verdad necesitar calor.

-Kairi y yo....terminamos-me dijo con una profunda tristeza y yo me sentía mal, me sentía mal por estar feliz de ello, de que quizás ahora se fijaría en mi pero lo veía poco probable, estaba por hablar pero él me miro molesto-fue por tu culpa, tú me besaste frente a ella...¿por qué?-me pregunto mientras me golpeaba el pecho suavemente como si fuera una pataleta, lo tome de las muñecas para calmarlo pero el apoyo su rostro en mi hombro ocultándose, sabía que era para no verme pero su tacto se sentía muy bien, cada parte de mi cuerpo agradecía ese contacto-¿por qué....se sintió tan bien?-susurro y con eso mi corazón comenzó a acelerarse, mis mejillas me ardían mientras mis brazos rodearon su cintura para acércalo más a mí, el suspiro en mi hombro como si disfrutara esto y finalmente se separó un poco para mirarme a los ojos, estaban temblando como si fuera a llorar y sus mejillas estaban sonrojadas de un modo que me pedían besarlas-¿por qué...deseo otro?-me pregunto ahora de manera abierta y eso sonó como una celestial invitación para mí, me acerque lentamente a su rostro y el simplemente me ofrecía sus labios y ocurrió lo que había deseado para navidad, estaba besando a Sora, el chico que me había cautivado desde hace mucho y que supuestamente no estaba a mi alcance por tener novia, ahora me corresponde tiernamente mientras sus dedos se enredaban en mi cabello y yo acariciaba su espalda junto a su cintura, cuando nos separamos él se veía algo confundido pero feliz, solo nos mirábamos pero necesitaba hacer esa pregunta.

-Sora...no sé si es confusión o cariño lo que sientes ahora, pero si no te molesta-le dije arrodillándome ante él y tomaba su mano-¿me darías una oportunidad para amarte?-le pregunte mirándolo sin ninguna duda en mis ojos, el abrió los suyos de sorpresa mientras comenzaba a balbucear cosas y yo lo veía enternecido, no es de extrañar la reacción pues ahora su amigo, otro hombre, le pedía que fuera su pareja, respiro profundo y yo rezaba por no tener una negativa, si lo hacía sabía que no podría controlarme y le haría cosas aunque fueran contra su voluntad, esa idea basto para que se me fuera el frio del cuerpo mientras agradecía llevar los pantalones cubiertos en cierta parte por mi suéter.

-Eh...yo...lo hare solo porque es navidad y no te tengo un regalo-se excusó el desviándome su mirada pero vi una pequeña sonrisa, solo eso me basto para levantarme y unir nuestros labios nuevamente tomándolo por sorpresa, comenzó a moverse un poco pero no permitía que se me escapara mientras mi lengua había conseguido colarse en su boca y jugaba con la suya, el comenzó a jalarme el cabello para que me alejara pero no lo hice hasta que el aire me falto, un pequeño hilo de saliva se quedó entre nosotros solamente roto por una bofetada que él me dio mirándome molesto-me asustaste...me estaba ahogando-se quejó mirándome molesto pero yo solo le sonreí mientras lo abrazaba con cariño y le susurraba un pequeño "perdóname", tome su mano y nos encaminamos a su casa donde nos esperaban, él se veía algo incómodo pero aun así me regresaba el apretón y eso no me puede hacer más feliz.

-Te amo-susurre en su oído notando como los colores se le subieron al rostro intentando desviarme la mirada, sabía que él no pensaba decirme lo mismo tan rápido pero aun así tuve una sonrisa enorme cuando él me beso mi mejilla-mi mejor regalo de navidad haz sido tu Sora, si te quedas junto a mí no necesito que me regalen nada mas-le dije mientras él se tapaba los oídos para no seguir escuchando las palabras que ahora lo avergonzaban bastante, yo me reía de su actitud hasta que llegamos frente a la puerta donde la fiesta parecía seguir. Le solté la mano pues sabía que no podía aparecerse así después de su rompimiento, pareció entenderme y susurro un gracias antes de darme un corto beso y entro en la casa, estaba a punto de gritar de felicidad pues lo había hecho por voluntad pero me contuve para seguirlo, todo parecía normal, Terra, Aqua, Axel y Riku se había ido al parecer, Naminé Xion e Iris estaban tostando unos malvaviscos en la chimenea y veían un especial de navidad en la televisión, desvié la vista notando a Ventus sentando en las piernas de Vanitas y ambos intercambiaban saliva gustosos aunque me sorprendía ahora la disposición del azabache, busque una explicación con la mirada y note un muérdago sobre ellos, me reí imaginando que mi gemelo se las había ingeniado para ponerlo cuando no lo veían, pregunte por Sora atrayendo la atención de ellas tres que se veían dudosas en responder

-Está arriba, creo que está dolido por lo de Kairi, así que lo mejor será dejarlo so...¡maldición Naminé deja de comerte los míos!-le grito Iris molesta por como ella había aprovechado su distracción, Xion y yo nos reíamos de la pequeña riña que se estaba formando por lo que decidí hacerles compañía, tras una hora todos decidimos irnos a nuestros hogares pues no podríamos quedarnos aquí en el supuesto estado de Sora, si supieran la verdad de lo que paso igual se irían pero para dejarme a mí a solas con él y disfrutar mi regalo...wow ¿desde cuándo soy tan pervertido? Es verdad que a veces...bueno casi siempre sueño con Sora y yo llegando a un bello punto pero eso es culpa de las hormonas, decidí no atormentarme más y estábamos por salir de la residencia.

-Roxas, Van ¿podrían quedarse a limpiar?-nos preguntó Sora desde el piso de arriba sorprendiendo a la mayoría, normalmente se lo diría a su hermana pero ella me explico que iba a hacer una pijamada en casa de Xion pues la dejaron sola, busque a Vanitas pero él estaba varias calles más alejado con Ven agarrado en su abrazo, mi gemelo se dio la vuelta para mirarnos, sonriéndonos nos guiño un ojo y levanto dos de sus dedos ocasionando un sonrojo en todos pues sabíamos lo que eso significaba, las chicas decidieron irse para su pijamada y yo regrese adentro comenzando a arreglar todas las cosas.

-Oye Van no haz vis...-se quedó a media palabra Sora cuando bajo y noto que era el único que había, él estaba en un pijama blanco y al parecer se había bañado pues sus cabellos aún estaban algo húmedos, sus mejillas comenzaron a enrojecerse mientras lentamente comenzaba a subir las escaleras y yo comencé a seguirlo riéndome por como el escapaba, termino corriendo por el pasillo mientras lo seguía preguntando con un falso tono inocente "¿por qué corres?" riéndome de sus nervios, se encerró en su habitación dejándome fuera como si tuviera miedo de que lo atacara, me apoye en su puerta riéndome un poco mientras le preguntaba si estaba feliz de que estuviéramos a solas pero él no me respondía nada, solté un suspiro y regrese a ordenar todo de modo más apresurado para que pudiéramos hablar con libertad sobre como seria nuestra relación a partir de ahora, una vez termine fui a tocar su puerta y le pedía entrar.

-Ya está limpio así que puedes irte, buenas noches-me dijo aunque su voz sonaba nerviosa y yo molesto comencé a pensar en algo y una idea me llego a la cabeza, fui a la habitación de Iris y me sorprendí por la cantidad de peluches que habían, tome uno de sus pasadores y con el comencé a forzar la cerradura de la puerta de Sora y una enorme sonrisa de formo en mi cuando escuche un clic, la abrí con lentitud y note como él estaba sentado en su cama en posición fetal ocultando su rostro, entre y cerré de manera silenciosa hasta con seguro y me acerque por su espalda.

-Eres demasiado lindo como para poder estar en ese estado-le dije abrazándolo y él se sobresaltó al notar mi presencia, pensé que escaparía pero en lugar de eso apretó algo en sus manos intentando ocultarlo y yo vi un leve brillo, lo mire pidiéndole saber que era y el avergonzado me mostro que era ese collar con forma de corona que le había regalado, lo tome para abrirlo y me sorprendí al notar como había una fotografía mía y de Sora mientras que en el otro lado aún estaban las palabras always together solo que también había una R y S unidas, lo mire pero el desviaba la mirada sonrojado aunque yo comencé a besar su mejilla diciéndole que me encantaba lo que hizo.

-Es normal que lo haga ya que...eres mi novio y...te amo-me dijo mientras me miraba esta vez a la cara y yo sentí que no me podía controlar más, me abalance sobre el tomándolo por sorpresa y comencé a besarlo con un profundo cariño, quería llorar de felicidad pero eso lo preocuparía así que la descargue dándole caricias a su cuerpo mientras nuestros labios se unían hasta que él se separó, me observo de un modo tímido además de estar sonrojado y bajo su mirada, también lo hice yo deseando que me tragara la tierra pues tenía una erección, estaba por excusarme hasta que note como la mía chocaba contra la suya, una sonrisa pícara se formó en mis labios mientras besaba su cuello deseando dejar una marca y el gemía de un modo ahogado.

-Quiero jugar con mi regalo, ¿me dejarías?-le pregunte mientras mi mano intentaba desabrochar su camisa y el temblaba por ello, me observaba como si estuviera confundido de lo que íbamos a hacer y yo bese su nariz enternecido por su inocencia, mi mano se escabullo por su pecho acariciándolo con cuidado mientras el solo se dejaba, comencé a lamer una de sus mejillas, de ahí pase a su cuello y mi mano bajo hasta sus pantalones intentando desabrocharlos, en ese momento el pareció comprender que era lo que pretendía, estiro sus brazos enredándolos en mi cuello y pensé que estaría asustado, estaba por detenerme hasta que sentí como me quitaba mi playera ahora mirándome con un tono lujurioso, sentí que tenía todo el permiso y ataque sus labios de un modo salvaje mientras él me correspondía como me podía, unos pequeños gemidos se le escapaban de sus labios cuando comencé a tocar su erección por sobre la tela hasta que harto de esos pantalones se los arranque, la visión de él desnudo, excitado y mirándome algo alborotado eran como un afrodisiaco para mí, me incline sobre él y bese su pecho, su estómago descendiendo más hasta que llegue a su miembro el cual comencé a lamer escuchando sus pequeñas suplicas por mas, estaba por complacerlo hasta que el hizo fuerza dando vuelta la situación, me miro de un modo deseoso y finalmente me arrebato la ropa que me quedaba, ambos quedamos en igual condiciones mientras yo estaba sorprendido y excitado por esta nueva faceta que veía en el, su miembro ahora apuntaba hacia mi rostro al igual que el mío hacia el suyo, sentí sus tímidos labios besarlo y sentía unos espasmos recorrerme ante la agradable sensación, yo comencé a introducirlo en mi boca notando como todo su cuerpo temblaba y el soltaba un pequeño chillido de placer, cuando hice un vaivén con mi cabeza estimulando su miembro el soltaba pequeños suspiros combinados de gemidos que solo me alentaban a continuar, finalmente el comenzó a hacerme lo mismo mientras mis gemidos fueron ahogados, la placentera sensación que me estaba dominando únicamente despertaba más mi lado salvaje, los únicos sonidos que se podían apreciar en el cuarto eran nuestros gemidos que luchaban por salir pero ninguno deseaba que este placer se terminara, finalmente sentí un sabor distinto en mi lengua dándome a probar solo la primera parte del manjar que vendría, el comenzó a mover sus caderas en un intento de alejarse pero yo agarre su cintura impidiéndolo, el parecía intentarlo ahora más desesperado y mordía suavemente mi miembro pero eso únicamente hacia que mi orgasmo se acercara mas rápido, finalmente todo su cuerpo se tensó y libero su esencia en mi boca, yo tragaba sin tener asco pues era de él y con ello para mi tenía el mejor sabor, unos instantes después lo hice también al no poder aguantar las mordidas suaves que me había seguido dando haciendo que todo terminara en su boca, él se alejó de mi intentando retenerlo pero se le escapaba por la comisura de los labios.

 

-Sabe bien-susurro mirándome algo apenado mientras se limpiaba los restos que habían quedado bastando eso para excitarme nuevamente, el pareció notar ello y comenzó a acercarse a mí para besarme con cariño, nuestras lenguas se tocaban intercambiando los sabores que aun habían quedado y nuestros ojos solo expresaban cariño y deseo-Roxas…haz sentir bien a tu regalo-me pidió chocando su frente con la mía, lo acosté con cuidado mientras tres de mis dedos se habían introducido en su boca, el los lamia sin despegar su mirada de mí y eso me desesperaba, con todo el control para no hacerlo mío de una vez los separe pidiéndole que se relajara, me afirmo lentamente y se abrazó a mi hundiendo mi rostro en su cuello, introduje un dedo sintiendo que estaba bastante apretado mientras el había suspirado un poco, entro el segundo y entonces el mordió mi oreja un poco, los moví en círculos dentro de él mientras sus gemidos me tentaban demasiado, cuando estuvo más dilatado entro el tercero y entonces sus uñas se clavaron en mi espalda, eso me dolió pero debía dolerle más a él por lo que no me queje, con mi mano libre comencé a masturbar su miembro que al igual que el mío estaba pidiendo atención desesperado, unos momentos más y sus caderas parecían sincronizarse con  mis dedos mientras con la mirada suplicaba que lo hiciera mío, los retire con cuidado y coloque sus piernas en mis hombros, lentamente entraba en él y se retorcía indicándome que le dolía, besaba unas lágrimas que se asomaban por sus ojos sin poder detenerme, finalmente entre por completo y ambos soltamos un gemido de placer, estábamos unidos, al fin era mío y sin poder retenerme moví mis caderas realizando pequeñas embestidas en las cuales él se retorcía, sus caderas se movían junto a mi pidiéndome por mas mientras nuestros labios se encontraban, el sudor que lo recorría, su mirada nublada por el sudor y los sonidos que hacían nuestros cuerpos al chocar me enloquecían únicamente deseando complacerlo aún más, su interior me apretaba de un modo que me pedía no salir cada vez más fuerte, el apretaba las sabanas intentado resistir esta experiencia que era nueva para ambos hasta que al golpear un punto el arqueo su espalda indicándome que ese punto era sensible en él, enredo sus brazos en mi cuello y con un esfuerzo logro empujarme hacia atrás, él ahora se encontraba sobre mi sentado en mis piernas mientras el mismo se auto penetraba, me abrace a él colocando mis manos en su cadera para ayudarlo mientras ahora se apretaba de mis hombros en un intento por sostenerse, el final estaba cerca y podía sentirlo pues su miembro estaba demasiado húmedo al igual que yo resbalando con mas facilidad dentro de él, un último beso, una última estocada y ambos eyaculamos, el entre nosotros manchándonos y yo en su interior que me apretaba con fuerza por su orgasmo, la respiración de ambos estaba agitada, él se veía agotado pero no deseaba separarse de mí, lo acosté a mi lado antes de salir de él sacándole un último gemido.

 

-Te amo Sora, nunca lo olvides-le susurre en su oído escuchando una risa de su parte, me observo unos momentos y nuestros labios se encontraron demostrando nuestro cariño para que él se acurrucara junto a mí y se durmiera, afuera podía hacer frio pero no lo sentía, tenía a Sora a mi lado y con ello estaba feliz, supongo que el deseo de navidad si se cumplió a fin de cuentas, nos arrope con las sabanas y lo abrace deseando descansar a su lado, lo último que pensé fue en que pediría para la próxima navidad de parte de él.

Notas finales:

nyan nyan saludos, review si gusto


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).