Después de un largo tiempo de espera, al fin los cosplayers de la zona y alrededores, se iban a juntar en una gran convención. Ya todos los invitados especiales y demás gente estaban esperando a la apertura de sus puertas cuando uno de los hombres que dirigía el evento anunció que el mismo se cancelaba. No dijo el motivo por el que lo había hecho, y eso causó un gran revuelo, aunque sin graves consecuencias. La gente que allí esperaba se fue del lugar y los invitados que estaban convocados se dirigieron a la sala del redactor jefe de una de las más importantes revistas del cómic, que era el organizador del evento y quien había dado la noticia.
POV. : Luhan
Me giré asustado tras oír un fuerte golpe acompañado del sonido de una taza rompiéndose. Allí esta él, vestido con un cosplay de samurai y empuñando una katana. El chico que se había atrevido a enfrentar al redactor jefe, el que algún día fue el responsable de que adquiriera el éxito como dibujante que aún conservo.
Sin poder reaccionar, me quedé mirando como aquel chico salía de la sala en la que nos encontrábamos. Cuando dejé de verlo, volví en mi y atendí a mi anterior jefe que aún yacía en el suelo, adolorido. -¿Se encuentra bien, redactor jefe? – pregunté cuando este me miró. – Si… no te preocupes Luhan…- se incorporó despacio haciendo leves muecas de dolor hasta que logró levantarse. – no es la primera vez que tengo problemas con ese muchacho. – miró hacia donde se había ido aquel chico. La curiosidad podía conmigo, necesitaba saber quien era él. -¿Cuál es su nombre…? – no fui consciente de mis palabras hasta que ya era tarde; el redactor jefe ya me miraba fijamente preguntándose el motivo de mi curiosidad, pero yo no di mi brazo a torcer y me mantuve pasivo ,restándole importancia al asunto. El hombre no demoró en contestar a mi curiosa pregunta. – Oh, el es Oh Sehun. – Dejó de mirarme pero siguió contándome sobre él como si supiera que yo necesitaba saber. – Es un dibujante de cómic como tú lo eras antes, la diferencia está en que sus historias no son buenas … - me sorprendió que dijera eso y sin poder evitarlo empecé de nuevo otra pregunta, siendo esta cortada por el hombre. – él trata temas reales, de personas reales, en las que pasan cosas crueles ; la gente que lee cómic no quiere realidad, quiere salir del mundo y entrar en otros donde todo es bueno . Además, ya sabes que la mayoría de los lectores actuales son chicas adolescentes que buscan romanticismo. - si… lo sé… - mi mente había vuelto a volar pensando en la situación en la que Sehun estaba; se lo doloroso que es que después de tus esfuerzos no quieran publicarte.
Salí de la sala en busca de Sehun, aunque ya no tenía muchas esperanzas de encontrarlo después de lo que pasó. Creí que se habría ido, pero me equivocaba, él estaba sentado en el suelo con la cabeza gacha. Suspiré aliviado por encontrarlo acercándome hasta él. Buscaba una excusa para hablarle, pero no se me ocurrió nada hasta que vi que en la pared en la que se apoyaba había unos dibujos suyos. Los miré detenidamente observando cada detalle de los mismos y quedándome fascinado por su forma de expresar sentimientos; con cada mirada, cada gesto ,cada situación … era como si la persona ilustrada fuera real y estuviera delante de mis ojos , mirándome.Él no se había percatado de mi presencia.
-¡Eh! ¿tú has hecho estos dibujos? – mi pregunta era estúpida, ya sabía la respuesta, su nombre estaba escrito bajo los mismos. Él alzó un poco la cabeza al escuchar mi voz , me analizó con la mirada antes de asentir dándome paso para seguir con mi propósito de conocerlo. – Vaya , tienes un estilo brutal . Con tu talento no , no entiendo por qué no te quieren publicar. – sonreí intentando que el chico que permanecía sentado a mi lado se animara , pero al parecer mi comentario no le agradó y con una mirada que podría llevarme a la tumba contestó.- ¿Y tú? ¡todas las revistas de cómic quieren publicarte! ¿cómo puedes hacer un curro normal en vez de seguir dibujando? – sus palabras me desgarraban porque sabía que tenía razón, yo mismo había pensado eso cuando lo deje. En ningún momento esperé que el me dijera eso, pero ya pude comprobar que tenía un carácter fuerte. En el fondo me alegré de lo que me había dicho. Él sabía quien soy yo, sabía que antes solía publicar en esa misma revista, que lo dejé por otro trabajo, él lo sabía.
Me llamo Luhan . Me mudé a Corea hace unos años para conseguir hacerme hueco en la industria del cómic ya que estaba más aceptada que en China. Conseguí que me publicaran gracias a un dibujo que hice de mi antiguo hogar, convirtiéndome en un autor reconocido por mis cómics . Pero por aquel entonces , la sociedad no aceptaba aun del todo mi trabajo por lo que mis padres me pidieron que lo dejara y me buscara un trabajo de verdad. Cuando obtuve mi diplomatura , lo dejé todo de mala gana. Conseguí un trabajo como secretario; no era gran cosa, pero a mi me gustaba y me hizo olvidarme del cómic.
Hasta que lo conocí a él y a sus alucinantes dibujos. Sé que suena como si de una telenovela se tratara, pero en aquel momento, cuando lo vi en la oficina del redactor jefe el día de la convención a la que fui invitado , me enamoré de Oh Sehun…