Tony Stark apenas pudo contenerse de recriminar de mala manera lo que su amigo acababa de hacer, era un gran bruto inconsciente, eso es lo que era... un bruto sin cerebro que estaba perdiendo a su gran amor por culpa de una calentura que no valía la pena y sentía ganas de gritárselo en la cara. No podía evitar sentir pena por Loki, sobre todo cuando había atestiguado el enorme amor que sentía. Y Thor era tan imbécil que no se daba cuenta como había caído en el juego obsesivo y lleno de chantajes de Jane Foster. La mujer había encontrado el camino correcto para interponerse en la relación de los dioses, se había propuesto separarlos y ¡Maldita sea! Finalmente lo había logrado.
-Lo siento, Stark... Pero lo que sucede solo es del interés de Loki y mío... tenemos a nuestros hijos y seguiremos siendo sus padres, vendrán en vacaciones y Loki con ellos, es un acuerdo que respetaremos... la torre es suficientemente grande para no vernos mientras estén aquí, pero si te incomoda... ordenaré que Loki se quede en Asgard.
-De ningún modo. Loki es bienvenido en mi casa tanto como tú- Tony hubiese querido agregar “prefiero que Jane se vaya” pero sabía que solo causaría contrariedad y tensión en su amistad con el Dios del Trueno, a quien aún no se le pasaba el entusiasmo de su nueva relación.
Thor bajó hasta el piso que compartía hacía ya largos diez meses con Jane Foster. El encontrarse viviendo y trabajando en el mismo lugar, había propiciado el caldo de cultivo necesario para que volvieran a enredarse. Al principio, Jane lo buscaba, suplicante y llorosa, amenazando con quitarse la vida si no estaba a su lado… pero una vez que lograra meterlo nuevamente en su cama, se las ingeniaba para retenerlo de una y mil formas diferentes. El resultado fue que el rubio se sentía tan obligado y comprometido con Jane, que se le dificultaba pensar objetivamente.
-¿Es en serio lo que me dices?- exclamó Foster, reflejando su felicidad y echándole los brazos al cuello a Thor- ¡Es la mejor noticia del universo!
-Te dije que era cuestión de tiempo... Loki y yo rompimos... ahora ya nada se interpone entre lo nuestro.
Jane lo besó apasionadamente, feliz en el interior y en el exterior por saber que al fin, el rubio era solo de ella. Sin embargo, el entusiasmo en Thor no fue precisamente el que esperaba.
-No pareces muy contento... pensé que yo era la más importante en tu vida.
-Jane, entiende... Me duele separarme... lo mío con Loki es... fue… algo que no puedo olvidar de un momento al otro, además, están de por medio nuestros hijos... es difícil...
-¡Claro!- exclamó la científica, transfigurando su rostro en una mueca trágica- Yo que te he esperado en las sombras no merezco tu piedad, solo él, que además es un asesino y un loco...
-¡Jane!- exclamó Thor, reaccionando mal ante el ataque a su ex compañero.
Foster comenzó a llorar, se cubrió el rostro con las manos y se hizo un ovillo con el cuerpo, como si temiera que el rubio pasara a agredirla. Thor hizo un gesto de impaciencia al verla hacer ese teatro, pero no podía resistir sus lágrimas, la abrazó con ternura y comenzó a decirle palabras de consuelo...
-¿Me amas, Thor?- le preguntó, hipando entre sollozos.
-Solo sé que no puedo estar sin ti...
-Pero dime que me amas...
-Jane... eres importante, muy importante... Tanto que por tí acabo de romper con alguien muy especial en mi vida... por favor... dame tiempo para acomodar mis ideas...
***
En Asgard, Einar despertó cuando una mano fina y una voz suave lo sacudieron. Entreabrió los ojos y observó el cabello rubio de su hermana, mientras seguía sacudiéndolo con insistencia.
-¿Qué te pasa, hermana?- preguntó, más dormido que despierto.
-No puedo creer que estés durmiendo como si nada. Que no te preocupe lo que está sucediendo con nuestros padres...
-¿Qué sucede con ellos?
-¡Einar, por favor! ¿Acaso no te diste cuenta? Padre Thor y Padre Loki tienen problemas.
-Estás loca, Elynn... Tuvieron un disgusto por culpa de esas leyes tontas del abuelo Odín, pero seguramente pasará.
-No lo creo... a mí me parece que es algo mucho peor...
Elynn poseía un fino sexto sentido, en el que ambos habían aprendido a confiar. De manera que finalmente, el chico terminó por despabilarse y centrar su atención en la preocupación de su hermana.
-¿Y cómo podríamos averiguar eso?
-Muy fácil... lee la mente de Padre Loki... yo sé que puedes hacerlo.
-¡Puedo hacerlo!- afirmó Einar con orgullo- Pero no con Padre Loki... A él es muy difícil intentar sorprenderle... se daría cuenta de inmediato y nos ganaríamos un castigo por todo lo que resta de la eternidad...- Elynn puso un gesto de desánimo, sabía que su hermano no mentía- Pero... hay otra cosa que puedo hacer...
Y fue hasta su armario, donde sacó el fino tahalí de piel grabada donde guardaba la valiosa daga ceremonial que había recibido por obsequio. La tomó con habilidad y se concentró en la piedra central de su empuñadura.
-¿Qué haces?
-Esta daga es especial... su hoja de uru y la piedra que tiene en el mango, son mágicas... me dan poderes muy fuertes... No puedo leer la mente de Padre Loki, pero puedo ver lo que hace Padre Thor en Midgard...
-¿Cómo Heimdall?
-Mucho mejor que Heimdall... pero solo a una persona a la vez...
Elynn guardó silencio mientras su hermano se concentraba. La daga comenzó a irradiar una luz color verde que iluminó la habitación, mientras el cabello negro y las ropas de Einar flotaban como si ondearan al viento.
-Padre está en casa de papá Tony...- dijo el joven- Su corazón está angustiado... está hablando con alguien... habla de querer estar en paz... guardar silencio... solicita tranquilidad... Padre Thor está sufriendo... siente que algo no es correcto...
Elynn comenzó a llorar... su intuición una vez más había acertado.
-¿Con quién habla?
-Con la mortal... Jane Foster... “dame tiempo, Jane” “No me obligues a decirte que te amo... debes darme tiempo”
-La mataré...- dijo Elynn, con los verdes ojos brillando con odio- ¡Ella es la causante del sufrimiento de Padre Thor!
-Ahora veo a nuestro Padre Loki...- dijo Einar, asustado- Está llorando... percibe mi presencia... ya...
Einar se desvaneció justo en ese momento. Soltó la daga y su visualización a Midgard y a la habitación de su padre desaparecieron.
Elynn esperó que su hermano se recuperara antes que fueran descubiertos, lo que afortunadamente sucedió. Usar los poderes potenciados con la daga le habían dejado exhausto. Pero las cosas habían también quedado muy claras para los hermanos.
-Nuestros padres se han separado por culpa de esa mortal...- dijo Elynn, convocando con su enojo, sin quererlo, una tormenta eléctrica sobre Bliskirnir.- Einar... ¿Qué va a suceder?
-Padre Loki viene hacia acá... ha percibido nuestras acciones...
-Dime que vamos a hacer algo, hermano.
-¡Claro que lo haremos! Esa mortal no sabe lo que ha provocado...
Cuando Loki abrió la puerta de la alcoba de su hijo, solo observó a Einar profundamente dormido. Todas las luces apagadas y las ventanas cerradas. Parpadeó un par de veces ante la fuerza de los rayos que iluminaban el exterior, luego cerró la puerta.
No pasaron más de un par de segundos cuando la puerta se volvió a abrir, Loki entró y se cruzó de brazos, al mismo tiempo que hacía un discreto ademán con su mano.
-¿Cómo es posible que puedas crear una ilusión tan avanzada, Einar?- dijo, admirado de lo que acababa de presenciar. Sus hijos estaban sentados sobre la cama, guardando un silencio absoluto, esperando que la ilusión creada fuera suficiente para engañar a su padre- ¿Qué tratan de ocultarme?
-Lo sentimos, Padre...- dijo Elynn, bajando la mirada en forma encantadora- Yo le mostraba a mi hermano que puedo crear una tormenta...
-¿La tormenta es tuya, Elynn?- preguntó Loki, asombrado.
-No quisimos molestar, padre... solo nos divertíamos...
-Einar... intentaste leer mis pensamientos...
-¡No, lo juro! Solo quería saber si ya dormías, padre, para continuar practicando...
-Intentar mentir al Dios de la mentira... debe ser una especie de ironía del destino- se dijo a sí mismo, mientras tomaba la mano de su hijo y revisaba el brazalete que portaba. Arrugó el ceño cuando vió las runas mágicas a punto de borrarse por completo- Por todo lo eterno... ya no sé que más imponerles para que sus poderes no se desborden...
-Padre Loki... debo confesarte algo: Las últimas tres veces que nos has impuesto runas de control... las he borrado antes de que terminara el día... hemos tenido nuestros poderes desde hace más de un año... confía en nosotros...
-¿Es verdad eso, hijo mío?
-Tan verdad como la promesa que hacemos por amor a ti, no cometeremos excesos de los que te puedas avergonzar... controlaremos todo, mi hermana el rayo… yo la magia...
***
Jane Foster forzó la sonrisa cuando el Bifröst se abrió para la llegada de los hijos de Thor. Empeñada en estar presente en la bienvenida, esperaba tener la templanza suficiente para enfrentar su llegada junto a la ex pareja de su amante, respiró aliviada al ver solamente a los gemelos. Loki no estaba.
-¡Padre Thor!- exclamaron los jovencitos, abrazando felices al Dios del Trueno e ignorando olímpicamente a la científica.
-¡Mis adorados!- dijo Thor, devolviendo el cariño- ¿Y su padre?
-Padre está en Asgard, dice que es mejor que él no esté, para que podamos disfrutar nuestras vacaciones con gusto.
Thor se sonrojó, ahora estaba seguro que sus hijos ya sabían de su separación y muy probablemente, de su nueva relación. Pensó entonces que lo mejor era presentar a Jane y comenzar a propiciar que se conocieran.
-¡Hey... mis demonios consentidos!- exclamó Tony Stark, interrumpiendo con su habitual locuacidad y provocando que los gemelos corrieran a abrazarle.
-¡Papá Tony! – gritaron a su vez, buscando con los ojos a Pepper y al pequeño Anthony, al cual consideraban su hermano menor.
-Vámonos- dijo Jane al rubio, sabedora que estaba sobrando en aquella escena- Nos presentarás durante la cena.
Elynn los vió retirarse y se preparó para lanzar un haz de energía sobre la mujer, Einar le detuvo la mano a tiempo. Y sonriendo, guardaron las apariencias ante Stark.
No faltaba demasiado para la cena, así que planearon salir a pasear hasta la mañana siguiente. Einar se fué con Thor y Tony a uno de los salones, demostrándoles lo hábil que era ya con la espada, Pepper y Elynn se divertían con los juegos de Anthony, quien contaba ya con tres años de edad y era el orgullo y la delicia de sus padres.
-Anthony es adorable, Mamá Pepper... tengo dos hermanos, pero me hubiera gustado tener una hermana.
-Lo sé, querida. Pero tu Padre Loki no podía arriesgarse con otro embarazo... el nacimiento de ustedes fue muy peligroso para los tres.
-Cuéntame más de eso... Padre siempre termina con un nudo en la garganta cuando le preguntamos acerca de nuestros nacimientos y ya no quiere hablarnos de nada, pero yo quiero saber más...
Pepper contaba solamente lo bueno que podía mencionar, todo lo que había escuchado alguna vez en boca de Thor o del propio Loki... le contó sobre como Loki estaba feliz con su embarazo, de lo increíble que fué el día que se enteró que tendría gemelos, y sobre el momento en que la abuela Frigga supo que eran fuego y hielo… sol y luna...
Elynn sonreía y escuchaba, mientras su hermano... a corta distancia de ellas, husmeaba entre los recuerdos de Pepper, que venían a su mente mientras elegía las palabras que usaría para compartir su historia.
Las dos sonrieron cuando vieron al niño derramarse encima todo el helado que estaba sobre la mesa. La pelirroja se disculpó para ir a cambiarle de ropa y Elynn se quedó a solas en el jardín.
-“Tengo mucho que contarte”- resonó en su mente la voz de su hermano- “Pero debes prometerme que no te vas a enojar...”
-Prometo que me enojaré y mucho- dijo la joven, imaginando que Einar había logrado descubrir mucho más de lo que esperaban.
-Hola Elynn- saludó una voz femenina que obligó a los hermanos a salir de la comunicación mental. La jovencita rubia levantó sus hermosos ojos verdes, que de momento perturbaron a Jane Foster, quien se atrevía a acercársele en un intento de limar asperezas con los vástagos de su amante.- Vi que estabas sola... y quise saludarte.
Elynn tenía en la punta de la lengua una respuesta grosera y soberbia, pero pensó con rapidez y optó por sonreírle... No era una sonrisa cualquiera, Jane no pudo evitar ver el gesto descarado de Loki en ella... después de todo, era su hija también.
-Pues llegas en buen momento- le respondió fingiendo una amabilidad que no sentía- Padre Thor quiere que pasemos tiempo juntas... yo quiero saber como es que padre y tú han terminado enamorándose...
-Vaya- murmuró Foster, sonrojándose- Pensé que nuestra charla sería sobre temas menos... adultos...
-Todo lo que afecte a mis padres me interesa- sonrió Elynn, segura que ahora Einar también leía la mente de Jane.
Thor entró justo cuando Jane y su hija charlaban, se acercó sin disimular su sorpresa y su agrado, ya que estaba seguro que Elynn no aceptaría con facilidad a la científica, se alegró de verlas juntas.
-¿De qué hablan?
-Cosas de mujeres- dijo Elynn, besando la mejilla de su padre con ternura y corriendo hacia Pepper, que regresaba con su pequeño hijo.
-¿Cosas de mujeres?- interrogó a Jane.
-¡Así parece!- respondió ella, con un suspiro.
Antes de la cena, los hermanos se reunieron para conversar. Einar dijo en palabras directas lo que había averiguado en los pensamientos de las dos mujeres... estaba horrorizado y consternado, porque definitivamente no entendía muchas cosas.
-Padre Loki estuvo en prisión...- comenzó, esperando que su hermana se calmara antes de proseguir- En Asgard, lo llevaron ahí encadenado y con una mordaza sobre su boca...
-¿Quién lo llevó ahí? ¿Por qué? Padre Loki es el mas bueno y amoroso ser de los nueve mundos... ¿Por qué estuvo en prisión?
-El por qué no lo sé... Lo vi usando su armadura, librando una batalla en esta ciudad, pero no sé contra quien o porqué... Nunca he leído nada sobre una batalla en Midgard donde participara Padre... Pero si vi quien lo capturó y lo llevó a prisión...
-¿Y quién fue…? Le arrancaré los ojos con mis uñas...
-Fue... Padre Thor...
La cena fue en apariencia una feliz reunión familiar, con los gemelos demostrando una vez más que entre sus habilidades estaba la de mentir... ya que sonreían y hablaban como si ninguna pena les rondara el corazón.
Pero Elynn estaba destrozada... No solo comprobaba que la separación de sus amados padres era mucho más seria de lo que pensaba, al ver a una mujer al lado de Thor, sino que ahora se enteraba de un pasado oscuro entre él y Loki, un pasado que nunca les había sido revelado y que estaba ansiosa por conocer.
Einar prefería esperar y preguntar a sus abuelos o consultar la biblioteca de Asgard... pero ella no tenía tanta paciencia.
-¿Qué intentas saber, pequeña mía?- resonó a sus espaldas la voz de Tony Stark, sorprendiendo a la jovencita en su sala de armaduras, buscando la forma de accesar a la información de su computadora.
-J.A.R.V.I.S. te avisó que yo estaba aquí... ¿verdad?
-Yo le indiqué que te permitiera entrar a mi sala... pero no accesar las computadoras... Dime, cariño... ¿Qué deseas encontrar? ¿Estás segura que quieres enterarte de lo que buscas?
Elynn se abrazó llorando a su padre temporal, sacando entonces toda la rabia que estaba acumulando desde la noche que sus padres se separaran. Era muy doloroso aceptarlo y más a su edad... en que el sentido de pertenencia era fundamental para sentirse a salvo... el poseer por completo sus poderes, el saberse parte de dos mundos tan distintos... y no tener a su lado a sus padres para apoyarse en ellos le estaban causando un conflicto enorme.
-Quiero saber quién era Padre Loki en el pasado...