Era un dia lluvioso, aunque la lluvia no azotaba demasiado al pequeño pueblo era lo suficientemente fuerte para que las fuertes gotas retumben en las pequeñas y no tan pequeñas casas, molestando el pacifico sueño de las personas que intentan (ya no mas) dormir, algunos fastidiados al verse interrumpido su hora habitual de dormir, otros aprovecharon ese tiempo para ver un poco la lluvia, que aunque no lo aparente relajaba demasiado. Ai, un chico de 15 años de rasgos algo extraños, lo más notable de él era su cabellera de un intenso rojo, estaba viendo preocupado la lluvia, que comenzaba a aumentar la intesidad.
-“Ahora no podre ver a mi abuela, todo estará lleno de lodo y será imposible pasar a la capital…”- Pensó Ai con cierta desgana al mismo tiempo que dio un sorbo a su café recién preparado, dio un vistazo al reloj de su habitación.-Las 05:43- murmuro por lo bajo dándose cuenta que la lluvia había empezado almenos hace media hora, un escalofrió le recorrió su espalda al darse cuenta que estaba perdiendo tiempo.
-¡Mierda!- exclamo, el nerviosismo era notorio en su cara, escucho dos leves “Toc, toc” en la puerta principal, -“¿No pudieron haber llegado demasiado rápido verdad?”- pensó y con rapidez corrió a la puerta principal de su pequeña casa, lentamente y con algo de preocupacion abrió la puerta, suspiro al darse cuenta de quién era, su tío.
-¡Sobrino mío! ¿Por qué esa cara?- Exclamo alegre un señor que rondaba los 40, algo panzón y con algunas canas ya saliendo de su cabello extrañamente ¿verde?, pero su preocupación se marcó al saber o almenos darse la idea de porque el repentino suspiro de su sobrino, era como si fuere el alivio más grande del mundo.-Llegaran pronto tío-Murmuro por la bajo con cierto temblor en su voz, no estaba preocupado, estaba nervioso.-No debes poner esa cara, anda, todavía no es la hora, ¡Vamos! Te ayudare para que la casa este presentable.-Dijo el señor que estaba completamente mojado por la lluvia, que debido a que estaba en su mundo Ai no se había dado cuenta, dejo pasar a su tío y le dio una toalla para que se seque.
Se dedicaron a limpiar la casa por completo para dejarla “presentable”, luego de terminar despidió a su tío que iba a trabajar, miro el reloj y soltó un leve gritito al darse cuenta de la hora.-¡Maldición, al carajo todo el mundo!- Maldijo para luego correr a buscar quien sabe qué cosa, gritando y soltando mil maldiciones, era extraño por no decir raro que suelte maldiciones o palabrotas por lo tanto el mismo se impresionó al tropezarse con todo, el fuerte “Toc, toc” lo hizo volver a la realidad, y a la velocidad de la luz dejo todo en su lugar de nuevo y se volvió hasta la puerta, se ordenó toda la ropa y acomodo su cabello que estaba levemente desordenado, abrió la puerta, y por un milisegundo su rostro paso a ser uno de incredulidad pero la volvió a remplazar por una sonriente, volvió a levantar su cara tan lentamente como si tuviera una pesada roca en su cabeza y se dirigió a las 2 personas que estaban delante suyo.-Pasen por favor.- murmuro con un hilillo de voz, quiso aumentar su tono de voz pero le fue imposible, las otras 2 personas que vestían una capa negra que llegaba un poco más bajo de las rodillas, con una capucha y algo que cubría su mentón y boca, lo suficientemente grande para cubrir todo su rostro, prácticamente irreconocibles se adentraron en la casa desapareciendo en las habitaciones.
Ai quería que la tierra lo tragase hay mismo, solo quería desaparecer, se preguntó porque los soldados habrían venido, solo se limitó a esperar para poder preguntarles.
Algo confundido y extrañado se limitó a sentarse en una silla del comedor, comenzó a divagar y pensar alguna razón por la cual ellos estuvieran aquí, entre todas esas pensó en que lo llevarían ante “Gobierno(1)”, un escalofrió recorrió su cuerpo pues según había escuchado el nuevo “líder” no era muy bueno que digamos, quien desobedezca las reglas y las imponencias de “gobierno” es condenado a muerte, tortura o simplemente encierran a las personas en un calabozo esperando a que se mueran para luego tirar los cuerpos en una especie de basurero, eso era lo que Ai y el pueblo NO sabia, aún tenía a sus padres, sus abuelos, sus amigos, pero todos en la capital, la soledad lo invadía para carcomerlo poco a poco, ¿a quién engañaba? .-Al corazón le hace mal no tener a alguien que lo complete, no digo que tengas ya pero ¿No te has fijado en alguien?”- Quizás esa era la compañía que necesitaba, era muy apresurado pero, bah.
El problema de Ai es que nunca se ha fijado verdaderamente en alguien y no tenía el suficiente valor que necesitaba para invitar a una chica a una cita ¿un chico?-“Es más difícil, soy bisexual pero… Nunca lo intente”-, Pensó, y recordó las veces en que invitaba a una chica todo salía mal, siempre aceptaban y lo alagaban de alguna manera “Tierno, lindo, guapo, adorable” decían, pero por el destino y la mala suerte que poseía siempre terminaba en “Idiota, pervertido, manoseador, asqueroso Blah Blah Blah” además, ¡No era su culpa tropezarse y pasar a tocarle algo indebido! Él era torpe ante las chicas ¿Qué querían que hiciera?, los pasos retumbantes de las botas de los soldados le sacaron brutamente de sus pensamientos, los observo y ante de decir una sola palabra, las de ellos cayeron sobre el como un balde de agua helada, y extra congelada.-¿Metzger Ai cierto?-Ai rio irónicamente en sus pensamientos al escuchar su nombre, pues su apellido era alemán y su nombre japonés ¿extraño cierto?- Quedas arrastrado, no tienes derecho a hablar si lo haces, lo usaremos en su contra.- Las palabras sonaron frías y cortantes, provenía de una voz femenina, Ai simplemente se quedó inmóvil, sintió sus manos ser esposadas y ser empujado para caminar, y así lo hizo, con la fuerza de sabe quién dios, camino junto con los 2 soldados preguntándose qué diablos estaba pasando.
Ai presencio todas las miradas de la gente del pequeño pueblo, se limitó a agachar la cabeza avergonzado, no era muy común en ese pueblo ver a alguien ser arrestado, ya al final del ni muy grande ni muy pequeño pueblo había un lujoso auto negro, lo hicieron subir y en todo el camino silencioso (Ya que no era buena idea preguntar y ya se daba la idea de a dónde iban o mejor dicho lo llevaban) se limitaba a pensar porque rayos lo habían arrestado-“Genial no estoy aquí ni una semana y ya estoy arrestado”- Pensó con desgana pensando que su madre se habría decepcionado si se hubiera enterado que estaba arrestado por decirlo así ya que le había prometido no causar problemas, sintió un tironeo fuerte en su camisa y una mirada fulminante, vio que la puerta del auto estaba abierta y los 2 soldados estaban afuera, bajo del auto y no supo cuántos minutos había estado “viajando” en el auto, pues la curiosidad que invadió a su cuerpo solo hacia procesar más y más su cerebro pensando cómo sería la cárcel (cabe aclarar que él nunca había visto una)
Sintió como lo arrastraban de su camisa, observo el lugar era un lindo campo, bastante lindo para una gran “mansión” completamente negra con detalles blanco, claro, estaban en una prisión ¿no? una sonrisita nerviosa se escapó de su rostro, en lo único que pensó en todo el tiempo en el que se dirigieron hay era que probablemente lo llevarían a una cárcel o prisión, como se diga.
Observo el lugar bastante bonito, para tener una cárcel allí, la curiosidad lo abofeteo al poner un pie en la gran “mansión” oscura y silenciosa la describió Ai, observo el lugar tranquilo, cualquiera no querría estar allí pero a él le daba simplemente igual, de todas formas no tenía nada que perder ¿ven? Ya está siendo pesimista sin saber porque estaba allí, observo sus pies –“Estoy descalzo”- pensó, -Que idiota me hubiera puesto algo…- Murmuro por lo bajo observando sus pies, levanto su rostro, ahora que lo veía si alguna vez su madre le había contado como era una prisión recordaba que habrían celdas y policías rondando para ver que los presos no hicieran nada malo pero esto más parecía una casa, una gran casa o más bien una mansión-“¿No me enviaran a prisión? ¿Entonces porque rayos estoy aquí?”- Pensó el pelirrojo, no le apetencia pensar en nada más ni siquiera tampoco le apetecía pensar en porque lo “arrestaron” él no había hecho nada malo... ¿O sí? No, él no había hecho nada malo, estaba muy firme y seguro, se convenció en que no había hecho nada malo por lo tanto no debían arrestarlo, pero ¿Qué ganaba con decirles eso? Exactamente nada.
Ai siguió caminando, lo hacía automáticamente, su cuerpo y mente se habían desconectado, era algo que hacia siempre que no quería escuchar o ver algo, es como estar sonámbulo pero despierto, no supo en qué momento se habían detenido en una INMENSA puerta negra con pequeñas decoraciones doradas, tampoco supo en el momento en que “había vuelto” a la realidad, giro su cabeza levemente para buscar una posibilidad de golpear a los soldados, correr y escapar-Ni lo pienses- “Quizás será en otro momento mi gran y pequeño cerebro…” pensó el pelirrojo con un deje divertido y sarcástico-“no es momento para divertirse”- El joven vio como la puerta se abrió, no mentiría si digiera que sentía curiosidad, veía todo negro, mejor dicho no veía nada.-“¿No será porque tienes una venda en tus ojos? … ¡Estúpido!”- Sintió una pequeña vocecilla que le hablaba en su cabeza pero la ignoro, ¿desde cuándo tenía una venda en sus ojos? ¡Maldición! No podía estar más desorientado y despistado.
En todo el alboroto sintió un leve tironeo en su cabeza.-Arrodíllate- Murmuro la voz femenina, que supuso que sería la que lo esposo, y como se lo dijeron así lo hizo, sintió como le removían algo de sus ojos pero aun así no veía nada.-Abre tus ojos- Murmuro la segunda voz femenina.-“Con que era eso... ¡Imbécil!”- De nuevo esa voz, la volvió a ignorar-Lárguense de aquí.- Se escuchó que murmuraba otra voz, esta ves masculina, quizás… Puede ser quee…. él era… Él era…-Con su permiso, gobierno- escucho los pasos de las femeninas irse alejando, él no podía estar más-“Muerto, muerto, muerto ¡¡Muerto!! Estas muerto”- Escucho de nuevo la vocecilla burlona, no sabía desde cuando le comenzó a hablar pero eso no importaba, lo que importaba es que estaba supuestamente con el líder de la ciudad-Que raro ¿Tan “Malvado” eres como para que te arresten? Y yo pensé que me querían mucho como para ni querer mencionarme…- Escucho como hablaba el ¿Tipo? No, no era alguien mayor, su voz no era tan grave, era más bien un poco ¿femenina? Bueno, no tanto pero se escuchaba más bien como algún adolescente de su edad o más, rio con ganas en su interior, ¿Cómo un chico puede ser líder de una ciudad? Esto era una broma pesada seguro -“¿¡Eso significa que es alguien menor!?”- La misma vocecilla, la ignoro de nuevo, sintió como alguien se sentaba delante suyo, lo supo por el movimiento y los leves pasos que se dirigían hacia su persona.
¿Por qué no quería abrir los ojos y alzar la cabeza? Simple, porque no quería y además nadie le había dicho que lo haga, escucho lo que el “líder” le decía, su voz sonaba… Quizás, al diablo, no estaba seguro (2) -¿No piensas contestarme, tienes miedo o algo? Y yo pensaba que todos me adoraban…-Pregunto al pelirrojo con burla escondida-Abre los ojos ahora mismo si no quieres un puto cuchillo en alguna parte de tu cuerpo-Ai escucho la voz irritada y como dijo abrió los ojos, nadie quería un cuchillo en su cuerpo ¿verdad? Él quería su cuerpo sin ninguna herida y sin golpes, él era un angelito bonito, ¿verdad?, un momento... ¿Angelito? … Eso es más falso que decir que él amaba las verduras, así de falso.
Veía todo borroso así que parpadeo varias veces para aclarar su vista se quedó inmóvil (si es que hacia eso ya que en todo el tiempo estuvo quieto) al ver una silueta no la diviso bien pero sintió como esta se movió y prácticamente ataco sus labios, sintió como estos eran invadidos por otros, fríos pero dulces, el pobre pelirrojo solo atino a abrir desmesuradamente sus ojos, el pequeño beso que era casto pero ¿dulce? Izo sonrojar violentamente al “pobre angelito” (3).
Gobierno aprovecho la confusión del pelirrojo para posicionarse sobre el e invadir sus labios de nuevo, tomo sus cabellos rojizos y tomo posesión de su boca introduciendo su lengua, al cabo de unos segundos se separó, observo con detenimiento al pelirrojo que estaba en shock y un notable sonrojo, sus cabellos revueltos de un intenso color rojo que le llegaba a su hombro, sus ojos de un lindo verde jade, no debía medir menos de…. 1,75-“Es más alto que yo por 15 centímetros”- Pensó y se irrito casi automáticamente, odiaba a las personas más altas que él, en ese momento odio ciertamente ser… Un poco “bajito”, gruño y tomo al pobre chico que seguía en un estilo de trance-Levántate ya... ¿Acaso quieres que te use como un trapeador? Puedo hacerlo tranquilamente ¿sabes?-Murmuro fastidiado, por alguna razón el chico sin hacer nada ya lo irritaba.
POV Ai
-Levántate ya… ¿Acaso quieres que te use como trapeador? Puedo hacerlo tranquilamente ¿sabes?- Escuche la voz irritada de la persona a la que llamaban “gobierno” y me levante rápidamente, ¿Pero qué carajos? ¿¡Porque me había besado!? Estoy confundido, además fue mi primer beso…-¿Podrías dejar de verme así? ¿Acaso no entendiste lo del cuchillo cuchillo atravesando tu pobre cuerpo?- Asentí ligeramente con un leve rubor en mi rostro, no me había dado cuenta que lo había estado observando pues, ya no tenía la capucha que... ¿¡Ya no tenia la capucha!?, sentí su respiración delante mío y un leve roze en mis labios, abrí desmesuradamente los ojos y lo vi, su rostro se mostraba frio, unas ojeras debajo de sus ojos con el típico color purpura oscuro, sus ojos eran de un color miel opaco y tenía facciones... ¿Un poco femeninas quizás? Su cabellera era de un lindo naranja y era bastante largo, le llegaba un poco más debajo de la cintura, su cabeza no era ni muy ovalada ni muy redonda, una linda nariz fina ligeramente puntiaguda y sus labios… Ho sus labios, de un lindo color entre rojo y salmon, ni muy finos y ni muy grueso, PERFECTOS, no tendría más de 14 o 15 años, era un poco más bajo que yo, ¿Saben que es otra cosa que me fijo en las chicas y chicos? La altura, y la de el es perfecta, casi reí inconscientemente, me parece un chico bastante lindo… Momento, ¿Le estoy diciendo tierno y lindo a la persona que hace unos momentos me amenazo con que me pondría un lindo y filoso cuchillo en mi lindo y hermoso cuerpo? Ho vamos… Hormonas… Por favor… Hoy no es el momento y dia justo, mucho menos con el ¿Saben quien es? La persona de mayor nivel de poder, asi que, Jaque mate, yo gano, ustedes pierden.
-Que tierno, eres bajito y bastante lindo- Pensé, y me quede viéndolo estúpidamente, en un arrebato de locura (que me costara la vida) acaricie una de sus mejillas-Suaves y tiernas- volví a pensar, estoy loco, muy loco, en un momento temí por mi integridad física (y lo sigo haciendo) No quiero un cuchillo en mi cuerpo… y ahora estoy embobado con un chico, malditas hormonas… Maldita adolescencia, no me ataquen justamente ahora, sé que en algún momento estaré sin mis extremidades y en un charco de sangre, un escalofrió recorrió mi cuerpo al pensar en mi posible muerte.-Se separó de mí y vi en sus mejillas como se formaba un sonrojo, pero de un momento a otro su expresión cambio, sentí como tomaba de mi camisa y me miraba con ¿Un mirada de odio y puro desprecio? De un momento a otro me senti triste y decepcionado pero lo peor de todo es que… ¿Pensé en voz alta?
-Mierda….-
-“Mierda…”-
Mierda.