Capítulo 1:
Y…volvemos a lo de antes…
Ahí me encontraba yo, corriendo por las calles lo más rápido que mi cuerpo golpeado me permitía. Debía volver rápido a casa, o sino papa me esperaría con otra golpiza.
Las cosas han sido así desde que entre a esa casa, golpes…insultos…más golpes…días sin comida…más golpes…golpes…golpes…
Desde que entre a esa casa, supe que no me quería ahí, pero yo era pequeño y no sabía nada del mundo, con el tiempo empecé a aprender, que si pides algo…te golpearan y si te quejas del dolor te golpearan más duro, eso lo aprendí desde mis cortos 7 años. No sé si decir que papa era muy duro conmigo o no, porque con Sehun era completamente diferente, a mí me golpea y me humillaba en cambio a Sehun lo felicitaba y le daba todo su amor, mientras a mí me obligaba a hacer las cosas bien, a Sehun le permitía hacer lo que quisiera. No es que yo odie a Sehun o a papa, por el contrario, los amo a ambos, después de todo son mi familia, tal vez soy idiota por pensar así, pero los amo mucho, haría lo que fuera por ellos, tengo la esperanza de que algún día se den cuenta, y correspondan mi amor, aunque eso jamás pase, me gustaría que supieran cuanto me duele el trato que ellos tiene hacia mí.
Debía llegar temprano hoy, usualmente salgo de la escuela a las 2:30, tengo todo el tiempo calculado: 2:30 salida del colegio, de 2:30 a 2:50 golpiza diaria, me toma aproximadamente 10 a 15 minutos más tomar fuerzas y levantarme del suelo, para ir a casa cojeando lo más rápido que pueda, una vez llego a casa me quito los zapatos y los dejo en la puerta. Cuando papa llega de trabajar a las 4:00 yo ya debo haber llegado a casa o sino me golpeara porque piensa que me voy a divertir por ahí, luego de gritarme, insultarme o golpearme, nos sentamos a comer los 3, cuando está de buen humor, si esta de mal humor debo cenar en la cocina con el personal que hace la comida, así me evito más golpes. Cuando logro llegar a la hora a tiempo él no me golpea y comemos todos juntos, pero eso usualmente no pasa, los golpes en la escuela son tan fuertes que me cuesta recuperarme, y caminar de regreso es aun peor, Sehun tiene un carro del año, pero yo no tengo nada para movilizarme y debo caminar o correr, en serio duele.
Y hoy no fue la excepción, como siempre me jalaron hasta un callejón, me golpearon como quisieron, me sorprende que aún no tenga ningún hueso partido, me levante como pude y Salí corriendo como podía a casa, lo hice con toda la fuerza que me quedaba, no podría soportar una golpiza más, así que se podría decir que esta vez llegue a tiempo, vi la hora en el reloj de la sala y eran las 3:00, así que tendría más tiempo para caminar y llegar a tiempo, antes de que llegara papa. Junte un poco más de energía y subí la escaleras de la parte de afuera y entre, en eso Sehun bajo.
- Wow, es un milagro verte tan temprano… - dijo burlón, yo seguía caminando.
- Si, eso creo – dije.
- ¿Por qué estás tan apurado? – me preguntó recargado en el marco de la puerta, su pose habitual.
- Quiero recostarme un rato… - dije cansado, me dolía todo y solo quería terminar dormir.
- Bien, pues hazlo y más tarde vienes a mi cuarto un rato – quede petrificado, yo...no quería acostarme con él, estaba muy adolorido.
- Yo…emm… -
- No es una pregunta – dijo firme.
- Esta bien… - dije resignado, al menos hoy papá no me golpearía, un punto a favor.
- Ese es mi Lulu, tan obediente – se acercó a mí y presiono mi pómulo, que estaba lleno de sangre por la golpiza – eso debe doler – dijo presionando con su dedo.
- S-si…duele… - dije cabizbajo, dolía mucho. Como de costumbre, papá llego a las 4:00, no me golpeo, comimos y luego me puse a hacer tarea.
- Luhan – dijo papá.
- ¿S-si? – dije nervioso.
- Saldré hoy, así que no me esperen para comer, llegaré tarde – asentí despacio y él se fue.
- ¿Ya terminaste? – preguntó Sehun, yo asentí lentamente.
- Bien – lo siguiente que sentí, es que me besaba bruscamente, yo trataba de seguirle el paso, pero él era un experto y yo solo había estado con una sola persona en mi vida, que era él.
- Aa-h – no podía respirar, pero no le podía decir que pare o se enojaría, no era la primera vez que teníamos sexo, de hecho había perdido mi virginidad hace mucho, pero aun no superaba el dolor, Sehun no era delicado, de hecho era muy brusco conmigo en ocasiones me hacía sangrar, pero no quería que se enojara, así que lo dejaba hacer lo que él quisiera, no quería más problemas.
- Sehun…e-espera – le supliqué.
- ¿Qué pasa? – dijo molesto.
- Em…pues…podrías ser un poco más delicado esta vez, es que…yo…duele… - trataba de que las lágrimas nos salieran de mis ojos, el rodo los suyos.
- Bien, trataré, pero no prometo nada -
- Gracias… - se acercó a besarme de una forma un poco más lenta, mientras me sacaba la ropa, mi ropa estaba manchado de algunos puntos de sangre, tierra, y esas cosas. Saco mi polo y lo tiro por algún lugar de su habitación, luego quito mis pantalones rotos, y por un segundo pude ver que contemplaba todo mi cuerpo, yo también lo hice, estaba lleno de marca y moretones bastantes oscuros, algunos raspones, y varias heridas aún abiertas, luego de unos momentos en siguió acariciándome, esta vez de forma muy delicada hasta que se detuvo por completo.
- …no puedo… - dijo casi susurrando.
- ¿S-sehunnie? – dije bajo.
- Ven… - me agarro de la muñeca y me arrastro hasta el baño.
- Quítate la ropa – dijo
- P-pero –
- ¡Quítatela! – dijo fuerte, me asuste así que me la saque.
- Siéntate – dijo señalando la tapa del baño, así lo hice y el salió de ahí. Mire la puerta extrañado, no sabía a donde iba, pero luego de unos momentos regreso, con lo que parecía ser un kit de primeros auxilios.
- Hunnie… ¿Q-que…-
- Cállate – me dijo mientras se arrodillaba frente a mí y sorprendentemente comenzaba a pasar una gaza desinfectada sobre mi heridas sangrantes, mis ojos se abrieron de forma descomunal. Él no me miraba a los ojos hasta que termino con mis piernas y se dirigió a mi abdomen y pecho, que igualmente estaba lleno de golpes. Cuando termino con eso fue hasta mi cara, yo me sonroje, jamás en la vida el habría hecho algo así por mí. Me miro aun con su expresión inmutable y limpia mi pómulo que tenía un corte algo profundo, no puedo negar que me dolía, pero más dolor sentí cuando me golpearon así que no me importo, una vez curado todo mi cuerpo, guardo las cosas.
- Gracias Sehunnie – dije en voz baja.
- Ahora lárgate – dijo serio, asentí y Salí del baño aun desnudo en busca de mi ropa, la recogí y Salí de la habitación, en serio fue un muy extraño.