CAPITULO 3
Hoy saldría con Haruka otra vez así que me desperté muy temprano pues quería arreglarme muy bonita y comprarme un vestido que valiera la pena, le hable a Rei para ver si me podía acompañar al centro comercial pero me dijo que lo sentía pero por asuntos del tempo que tenía que atender, no podía estar conmigo así que decidí ser mi propia conciencia para reflexionar todo lo que iba a hacer esta noche ya que debía recordar dos cosas muy importantes: primero que íbamos a salir en plan de amigas y segundo que ella salía con Mina y yo con Seiya y bien o mal no le tengo rencor a Mina pues no fue su culpa y Seiya es muy lindo conmigo así que no merece que yo siquiera piense en serle infiel.
Ya me encontraba en el centro comercial y recorría los cientos de tiendas de ropa revisando de vestido en vestido para encontrar el ideal pero simplemente ninguno parecía ser lo que buscaba, unos eran muy sencillos, otros eran demasiado llamativos, había muy largos y muy cortos, no tenía ni idea de cuál llevar, me probé cerca de 40 vestidos mínimo de 12 tiendas diferentes, ya me estaba dando por vencida hasta que vi un vestido negro entallado sin mangas ni espalda muy coqueto y en cuanto me lo puse sentí como si hubiera sido hecho para mí, así que sin pensarlo más lo compre, el reloj el cual me indico que mi estancia en el centro comercial no fue corta y apenas me daría tiempo de llegar a mi casa y tener el suficiente tiempo como para arreglarme así que tome un taxi y me dirigí de inmediato a mi hogar.
Apenas me había terminado de colocar los últimos detalles cuando escuche que sonaba el timbre, primero pensé en ir casi corriendo a recibirla pero en cuanto me encontré frente a la escalera lo bajo lo más lento posible ya que la quería dejar esperando hasta que escuche que tocaba el timbre con desesperación me decidí ir a abrirle y en cuanto lo hice me quede impresionada, se veía esplendida con su camisa azul marino, un pantalón negro y en la mano un gran ramo de rosas blancas.
-para ti. –dijo estirando la mano.
-muchas gracias, son hermosas. –me encontraba sonriente.
-entonces, ¿nos vamos sirenita?
-sí, vámonos.
Me colgué de su brazo y nos dirigimos a su convertible amarillo, ocupe mi lugar y nuevamente me sentí como antes, en el camino hablamos de cómo nos fue ese año sin vernos ni escribirnos, en serio parecía que habíamos olvidado rencores para empezar de nuevo (como amigas claro está) y en nuestra conversación el viaje nos pareció muy corto y nos encontramos frente a una hermosa y gigante mansión, al parecer era una fiesta por lo cual me sorprendí y le mire en forma de reproche y ella me miraba con su tierna cara de “yo no fui” .
-¿no fue una sorpresa? –me miraba sonriente
-sí que lo fue –le conteste fastidiada pero me tomo de la mano y olvide mi enfado.
Ya dentro de aquella casa el ambiente se veía muy entretenido, aunque yo nunca he disfrutado mucho de ese exceso de gente, la alegría era tal que se contagiaba hasta que nos encontramos con un atractivo hombre que sostenía una copa en su mano, al parecer era el anfitrión.
-¿se están divirtiendo?
-acabamos de llegar –contesto Haruka.
-¡vaya Haruka sique es hermosa tu novia! –ella no respondió.
-no soy su novia –me atreví a contestar
-solo somos amigas –continuo ella.
-mira que lastima hacen bonita pareja –se fue con otros invitados.
Su comentario nos incomodó a ambas, sobre todo porque yo estaba comenzando a creer que las cosas eran como antes, por suerte desperté.
-¿quieres bailar Michiru? –me invito ella.
-no lo sé –me hacía del rogar.
-ven acá. –me atrajo hacia si y me llevo a bailar.
Una vez en la pista comenzó una canción y con lo excelente bailarina que era Haruka me guio de forma que pronto fuimos el centro de atención.
Pequeñas cosas, que vivimos tu y yo
aquellas cosas, que el tiempo no olvido.
Aún están presentes, aún siguen latentes
tus recuerdos, en mi corazón.
Ha sido imposible, sacarte de mí ser
aun llevo grabados, tus deseos en mi piel
y en cada parte mía, en el silencio más profundo
escucho tu voz.
Y es que no puedo, sacarte de mi mente
estas atada sin saber a mi suerte
y es que en mis sueños, estas siempre presente
por más que quiera escapar, por más que quiera olvidar
no lo consigo.
Hay amor...
daría todo por tenerte hoy
junto a mí
y olvidar el pasado
que nos separó
Pequeñas cosas, que vivimos tu y yo
aquella flor,
aquel beso, aquel adiós.
Son viejos momentos que se olvidan
con el tiempo y mueren
sin una razón.
Ha sido imposible, sacarte de mí ser
aun llevo grabados, tus deseos en mi piel
y en cada parte mía, en el silencio más profundo
escucho tu voz.
Y es que no puedo, sacarte de mi mente
estas atada sin saber a mi suerte
y es que en mis sueños, estas siempre presente
por más que quiera escapar,
por más que quiera olvidar
no lo consigo.
En ese momento me pregunte que se hace cuando la sensación de cercanía es insoportable, estas frente a ella, la persona que tanto deseas, me tomo de la cintura y se acercó peligrosamente a mí, ahora no existe nada parecido al distanciamiento y sé que tal vez me arrepienta mañana pero hoy solo pensaba en eso que tanto quería: un beso de sus exquisitos labios que son aún más anhelados y codiciados que el oro.
Las dudas serán después, el arrepentimiento quizá mañana, lo único que importa es el aquí y el ahora y dejando todo atrás me entregue a ese deseo comenzando con un tierno beso con timidez, temía que no fuera real así que trate de asegurarme que así fuera. En un momento el mundo se detuvo, la música paro y toda la gente desapareció, la pasión fue real, estoy segura que aun recordamos todo ese amor que algún día nos juramos pero el maldito sentido común me hizo detenerme. Puse fin a ese edén abruptamente, ella me miraba confundida y lo único que pude hacer es salir corriendo cobardemente dejando todo atrás.
Tenía miedo, pánico, en cuanto Salí del lugar le hice la parada a un taxi y después de darle la dirección encendió la radio y yo reconocí la melodía y casi de forma inconsciente comencé a cantar mientras dejaba escapar una lagrima.
Otra vez te cruzaste en mi vida
y sin avisarme.
Justo cuando empezaba de nuevo
por fin a olvidarte.
tu mirada me trajo los besos que yo másquería
despertando más fuerte el deseo que en mi se dormía
(tú lo sabes ya no sigo sola
otro querer fue llenando el vacíoahora no es la misma historia
yo me rehusó a engañarlo contigo
no te quiero mirar
porque aún se escapa el amor por ti
no lo puedo negar
mis labios se mueren por volverte a sentir
no te quiero mirar
tú me provocas sin intención
no lo puedo negar
tú sigues siendo mi ardiente tentación)
es tan fácil decirle a mi vida
que mire a otro lado
lo difícil es que ande derecha
y no busque el pasado
te acercas y veo en tus ojos aquel buen amante
pero sigo pensando
en el otro que si sabe amarme
-disculpe señorita no quiero parecer entrometido
-¿Qué es lo que sucede?
-¿podría ser que la tiene así?
-no sé si decirle
-mire soy taxista y usted no podría decirme algo que no haya escuchado ya.
-¿quiere apostar? –le dije con una sonrisa irónica.
-bueno solo quería ayudarla, aunque sea escuchando pero si quiere me puedo limitar a lo que es mi trabajo.
-usted no entendería, nadie entendería.
-tal vez no, pero puedo solo escuchar, un desahogo siempre es bueno.
-todo es culpa de ella.
-ella ¿es su madre?
-no, mi ex- novia
-ah, ya comprendo continúe por favor.
-¿no me escucho? Dije ex NOVIA. –La verdad me sorprendió su reacción.
-si le escuche señorita y también le dije que continuara.
-¿no le molesta eso?
-no tengo porque, mire tal vez no este usted para saberlo ni yo para decirlo. Yo era… ¿Cómo decirlo? Pues intolerante, pero uno tiene hijos señorita y así es como se paga esto. Un buen día mi hija menor, la luz de mis ojos me dijo que le gustaban las mujeres.
-¿y usted que hizo?
-le solté una bofetada tan fuerte que la tiro al suelo, casi la corrí de la casa, sino hubiera sido por mi mujer no hubiera notado que ella es mi hija, mi bebé y que nada había cambiado en ella ni para bien ni para mal.
-me sorprende que piense así.
-es por mi mujer, ella es psicóloga y algo se pega ¿sabe?
-ya entiendo.
-si mire uno no está para juzgar, además yo me ofrecí a escucharla sin condiciones.
-muchas gracias, tal vez sea lo que necesito.
-sí, si quiere continúe, nada sale de este carrito.
-hace cerca de cuatro años la conocí y aunque al principio me evitaba un poco, bueno mucho –sonreí al recordar esto- creo que me fui ganando su corazón, salimos y hasta vivimos juntas por dos años hasta que se fue. –sentí que me ganaba el llanto.
-¿discutieron a algo así?
-no, ella es corredora de autos y se le presento la oportunidad de crecer en su carrera, así que aunque le fue muy bien se olvidó de mí.
-es raro saber que una mujer está en las carreras de autos, ¿sería una imprudencia preguntarle el nombre de la niña?
-Tenoh, Haruka Tenoh.
-¡es ella! –me miro sorprendido.
-si ¿Por qué?
-es extraño pero soy gran fan suyo, ella es la estrella de Ferrari y hace poco más de medio año sale con la cantante Mina Aino. Cuando ella corre es como el viento.
-espere… ¿dijo medio año? –me encontraba sorprendida.
-si señorita, ya llegamos.
-muchas gracias, sí que me dejo algo para pensar. –le pague y me fui.
No sé qué me paso y mucho menos que le paso a ella, por un momento tuve la absurda idea de que todo era como antes, que el tiempo no había transcurrido pero soy una ilusa porque si paso y ahora ambas estamos más distanciadas que nunca, quizá pensé que podríamos ser amigas pero ya me di cuenta que esto no va a funcionar.
Simplemente salió corriendo después de ese beso que ella misma inicio, tal vez le desconcertó un poco el que hayamos salido tan pronto pero necesito saber que pasa, bueno si sé que es lo que pasa, está jugando conmigo otra vez.
Tengo esa canción tan presente que hasta ciento que la escucho, es que nos describe tan bien que parece que el destino y la música se coordinan…
Justamente ahora irrumpes en mi vida,
con tu cuerpo exacto y ojos de asesina.
Tarde como siempre, nos llega la fortuna.
Tú ibas con él, yo iba con ella,
jugando a ser felices por desesperados,
por no aguardar los sueños,
por miedo a quedar solos.
Pero llegamos tarde, te vi y me viste,
nos reconocimos enseguida, pero tarde.
Maldita sea la hora
que encontré lo que soñé,
tarde.
Tanto soñarte y extrañarte sin tenerte,
tanto inventarte,
tanto buscarte por las calles como un loco,
sin encontrarte. Y ahí va uno de tonto; por desesperado,
confundiendo amor con compañía.
Y ese miedo idiota de verte viejo y sin pareja,
te hace escoger con la cabeza lo que es del corazón.
Y no tengo nada contra ellos,
la rabia es contra el tiempo por ponerte junto a mí,
tarde.
Ganas de huir; de no verte ni la sombra,
de pensar que esto fue un sueño o una pesadilla,
que nunca apareciste, que nunca has existido.
Ganas de besarte, de coincidir contigo.
De acercarme un poco, y amarrarte en un abrazo,
de mirarte a los ojos
y decirte bienvenida.
Pero llegamos tarde. Te vi y me viste,
nos reconocimos en seguida,
pero tarde.
Quizás en otras vidas, quizás en otras muertes.
Que ganas de rozarte, que ganas de tocarte,
de acercarme a ti y golpearte con un beso, de fugarnos para siempre,
sin daños a terceros.
¿Por qué no nos encontramos antes? ¿Por qué no me espero? ¿Qué fue lo que le hacía falta? ¿Por qué no hizo las cosas bien? Esas y muchas preguntas más me acechaban y me daban vueltas por la cabeza, tome otro sorbo de mi cerveza mientras trato de analizar mi confusa situación.
A veces me pregunto: ¿Qué hiciste con tu vida Haruka Tenoh? ¿En serio valió la pena perder lo que perdí por lo que ahora tengo? Tal vez siempre fueron estas sus intenciones, no se ya ni que pasa por mi mente. Michiru tal vez era un poco celosa, gruñona, vengativa, obstinada, lo que sea pero también era muy honesta y lo que ella menos haría es lastimar a cualquier persona, tal vez solo no funciono y encontró lo que buscaba en alguien normal.
¡Rayos! Sabía que esto no estaba bien por eso nunca se lo dijimos a nadie, todo el mundo lo sospechaba y le decía que lo nuestro no iba a funcionar, que incluso su carrera y su futuro se verían afectados. Seiya es el vocalista del grupo de moda así que su relación es algo que a todos les pareció excelente y conmigo nunca podrá tener una familia como ella se merece ¡maldita sea! Todo se junta en mi contra, pero ella ahora rehízo su vida y tampoco quiero ser egoísta, ella me ha dado tantas cosas… ¡rayos me volví tan cursi!
Mina no tiene ningún problema ni prejuicio en cuanto a nuestra relación sino al contrario, en cuanto le pedí que lo intentáramos lo hizo público frente a toda la prensa y no quiero pensar mal pero desde entonces su carrera subió como la espuma. Hace mucho que olvide lo que es enfadarse, aún recuerdo como me reencontré con Mina.
-FLASH BACK-
Hace 5 meses me mude a E.U. y extraño a Michiru como no pensé hacerlo, las pruebas no son difíciles y por el momento voy a la cabeza y no es para menos ¡soy Haruka Tenoh! Pienso que estas pruebas solo quieren humillar a los novatos y alejarme de mi sirenita. Para colmo Mino vino a querer sobresalir aquí y aunque yo no le di mi número no ha parado de llamarme para que por lo menos salgamos a cenar.
-¿sí?
-Haruka, no quiero sonar insistente pero solo una cena.
-Mina ¿Cómo conseguiste mi número?
-eso no importa Haruka, tu nunca despreciarías a una amiga ¿o sí?
-Mina ¿Por qué te interesa salir conmigo?
-me siento sola y seguramente tú también
-no es así, pero con tal de que me dejes en paz, hoy vamos a cenar.
-¡sí! ¡Gracias!
-¿paso por ti?
-si ahora te doy la dirección
Después de anotar la dirección colgué y me quede pensando porque ella será si, n importa yo solo quiero escuchar la voz de Michiru, ¡maldición! Olvide que cambio de número y aun no me acostumbro, tal vez no debería depender tanto del celular, prometo aprenderme el numero o de perdida anotarlo en otro lado sino estaré siempre en las mismas, pero será después ahora solo quiero escucharla.
-bueno ¿Haruka?
-¿Cómo se encuentra la violinista más hermosa de todo Japón?
-bien relativamente, siento que me haces mucha falta.
-no te preocupes mi sirenita en cuanto gane el contrato con Ferrari iré corriendo hacia donde te encuentres.
-sabes que te esperare todo lo que haga falta.
-también para mí se están volviendo los meses más eternos de toda mi vida.
-me entere que vas ganando.
-Michiru tu voz se escucha llorosa ¿estás bien?
-ahora la que se preocupa de mas es otra.
-sirenita no llores por favor, cada vez que te oigo llorar me dan ganas de regresar para…
-no se te ocurra Haruka Tenoh, ya me has hecho sufrir bastante estos 5 meses y no vas a echar todo a la basura ahora.
-así será sirenita.
-ai shiteru.
-se oye tan hermoso en tu voz.
-mi amor tengo ensayo para un concierto.
-sí, no te preocupes adiós.
-adiós.
Su voz es un canto de ángeles para mí, esa voz y las cartas que nos mandamos cada semana son lo que me hace seguir aquí, era difícil para las dos ya que es la primera vez que nos separamos por tanto tiempo y aunque lo intento no pudo posponer ni cancelar ningún concierto.
Lo que más me molesta es que tuve que dejarla con el idiota de Seiya que no para de molestarla desde que lo conocimos, simplemente no lo tolero, primero no dejaba a Serena en paz así que procure cuidarla pero ahora molesta a Michiru.
Debo dejar de pensar en eso y arreglarme para la cita ¿cita? ¡No! Es una cena, las únicas citas que puedo tener son con Michiru.
Ya casi llegaba a la casa de Mina cuando escuche unos gritos.
-te daré lo que quieras pero suéltame por favor.
-cállate o te mato.
-te lo suplico por favor. –se oía la llorosa voz de Mina.
-¡Mina! –me abalance sobre el tipo que la tenía detenida.
Forcejeamos un poco pero de un puñetazo lo tire al suelo mientras veía a una asustada y pequeña rubia en el piso y con un hermoso vestido azul rasgado, su rostro me enterneció por completo.
Mientras lloraba silenciosamente, con la mirada baja me acerque a ella, la abrace primero muy despacio pero a pesar de eso se inquietó, entonces la tome con fuerza para tratar de tranquilizarla, teniéndola así de cerca pude notar un golpe en su rostro ¡ese maldito! Solo pensaba en lo que pudo haber pasado si no hubiera llegado a tiempo, o si esto hubiera sucedido antes.
Busque mi celular para llamar a la policía pero no lo encontré por ningún lado así que ya que el tipo se había escapado lleve a la pequeña cantante a su casa, se veía tan indefensa que sentí que se me iba a romper el corazón, su mirada estaba perdida en la nada mientras yo preparaba un té, no quería separarme de ella.
-Haruka… -su voz era casi inaudible.
-¿si preciosa?
-no me dejes por favor. –pensé que iba a volver a llorar.
-shhh, no llores nena yo voy a estar contigo, vamos a darte un baño.
-todavía tengo miedo.
-lo sé, tomaras un baño y te daré un té, después quiero que te acuestes.
-no quería causarte tantas molestias.
-no es ninguna molestia, a las niñas lindas lo que sea. –al fin sonrió.
Después de esa pequeña pero notable sonrisa me sentí un poco más aliviada, la lleve directo al baño y me pidió que la ayudara a desvestirse, ahí me di cuenta que a pesar de verse tan pequeña y frágil, ya se había convertido en una mujer, cosa de lo cual no me había dado cuenta.
Esa noche no salimos a ningún lado y me quede a su lado velando su sueño hasta que llego el amanecer. Ahí empezó una muy cercana y bella amistad con Mina Aino, éramos tan cercanas que incluso me ayudaba a enviar y recoger las cartas que nos mandábamos Michiru y yo.
Hace cerca de un mes que me he vuelto inseparable a Mina y sobre mi celular, jamás lo encontré, le envié una carta a Michiru explicándole todo lo que sucedió pero no he recibido respuesta, también le pedí que me volviera a enviar su número telefónico ya que nunca lo transcribí pero como ya mencione anteriormente no he recibido ninguna respuesta desde hace casi un mes.
-¡Haruka! –llegaba corriendo Mina con un periódico en sus manos.
-¿Qué es lo que sucede Mina?
-¿ya te enteraste?
-deja de responder una pregunta con otra. –empezaba a desesperarme.
-sobre la relación de Michiru…
-¿Qué? ¿Conquién? –tome a mi amiga de los hombros con fuerza.
-con Seiya. –solté a Mina y le arrebate el periódico abruptamente.
-¡no puede ser!
Después de leer el encabezado “Romance del año” el cual hablaba de la nueva relación que surgió entre la gran violinista Michiru Kaioh y el vocalista de Los Three Lights, Seiya Kou. Aventé el periódico con fuerza y salí furiosa de ahí.
En ese instante la cabeza me daba vueltas pero poco a poco tuve que relajarme y asimilar esta noticia. Durante 6 meses más, la única persona que se volvió mi apoyo y respaldo fue Mina así que decidí ir mas allá con ella y di el siguiente paso: le pedí a Mina que fuera mi novia, ella accedió gustosa al instante pero algo que me ha estado preocupando es que mi “novia” le tiene cierto gusto al alcohol…
-FIN FLASH BACK-
Y sí que bebía mucho pero prometí no dejarla ya que ella tampoco no dejo a mi cuando yo más la necesitaba, me siento hasta cierto punto comprometida con ella.
¿Por qué el taxista me dijo que Haruka lleve saliendo solo 6 meses con Mina? ¡Tonta! Lo hicieron público hace 6 meses pero Lita ya me había dicho que ellos tenían una relación, la verdad no o quería creer pero fue un mes que no supe nada de Haruka ya que no me hablaba, no contestaba mis llamadas, mensajes ni cartas así que simplemente le creí a Lita y en un ataque de ira, depresión y celos hable con Seiya y le dije que si quería ser su novia. Desde entonces el me trata como si fuera de cristal y digo eso no me molesta, es lo que cualquier chica desearía. Él es atractivo, inteligente, famoso, carismático, me trata como a una reina pero aun siento que algo me falta y por supuesto yo no soy como cualquier chica.
Le dije a Haruka que la iba a amar por siempre pero ambas dijimos muchas cosas, solo me daré un baño y me iré a acostar, dejare que la almohada sea mi consejera.
Un nuevo día, es domingo así que no quiero ni salir de la cama, encendí la televisión y mientras cambiaba los canales vi en uno de ellos a Mina cantando, pensé en apagar el aparato pero me arrepentí, tenía la curiosidad de saber por qué Haruka me dejo por ella, y nuevamente mi sentido masoquista me controla, ahora Mina es una de las cantantes más reconocidas en Japón además de que es muy bella y madura pero ¿eso qué? Yo también soy bella y madura incluso más que ella y soy una de las mejores violinistas no solo e Japón sino del mundo.
Deje mis absurdos pensamientos a un lado y mire al televisor, justamente en ese instante pasaron una imagen de Haruka abrazando a Mina y ahí si apague la televisión.
Tal vez lo único que necesito es relajarme y dejar de pensar tanto así que me arregle y me dirigí al parque Numero 10, tengo un par de recuerdos de aquí pero trato de olvidarme de ellos y mientras camino veo a lo lejos una simpática pareja conformada por un alto, moreno y serio hombre acompañado de una simpática, bella y alegre niña, al parecer están en una cita y no me han visto así que mejor tomo otra ruta para no interrumpir.
-¿Michiru? ¡Michiru! –me hablaba el pelinegro.
-Darien ¡qué casualidad! –lo salude cortésmente.
-¡hola Michiru! –me saludo Serena.
-¿Qué tal Serena? Me da gusto verte ¿están en una cita?
-sí, no. –Darien dijo que no y Serena que si ¿Qué debo pensar?
-bueno no los interrumpo más así que me voy.
-espera –Darien soltó la mano de Serena y tomo la mía.- por favor si quieres te puedes quedar con nosotros.
-Darien… -Serena parecía incomoda.
-no te preocupes Serena, de todas maneras quería ver a… Seiya, si claro me dirigía a Seiya.
-bueno, le mandas saludos de mi parte. –parecía más relajada.
-está bien, vámonos Serena, adiós Michiru. –parecía molesto.
-¿sucede algo Darien? Parece que te molestaste repentinamente.
-no es nada solo que tú vas a una cita con ese tipo y yo vengo con Serena.
-Darien sé que no te cae bien porque no dejaba a Serena en paz pero ya es diferente. –trataba de justificarlo.
-simplemente no tolero al tipo así que no hace falta que lo justifiques.
-Darien mejor ya vámonos por favor. –la rubia quería controlar la situación.
-se van con cuidado, con permiso. –y sin dejarlo responder di la media vuelta y conteste mi celular que comenzaba a sonar.
-¿sí? ¿Seiya? Claro, nos vemos.
-¿te acaba de hablar el cierto?
-no te interesa Darien ya me voy, lo siento por amargarte el día Serena.
-no te preocupes Michiru. –me contesto la tierna niña y me retire.
Últimamente me incomoda mucho la actitud de Darien, siempre evita hablar de Seiya, incluso cuando se enteró que nos hicimos novios me dejo de hablar por un tiempo pero después me envió disculpas y me dijo que me extrañaba mucho, que no quería que nuestra amistad acabara por una tontería.
Hace poco me hablo Seiya para que nos viéramos en el lugar donde hicimos nuestro concierto alterno aunque no estoy segura del por que. Una vez ahí, el escenario se encontraba completamente oscuro hasta que frente a mi se ilumino un camino de rosas que me llevaba hasta el centro del escenario donde se encontraba una mesa lista para dos, así que sonriendo me dirigí hacia esa mesa preguntándome ahora que tramaba Seiya. De pronto escuche como empezó a sonar una canción…
Desde que llegaste, no me quema el frío
me hierve la sangre, oigo mis latidos
desde que llegaste, ser feliz es mi vicio
contemplar la luna, mi mejor oficio.
No te prometo amor eterno
porque no puedo
soy tripulante de una nube, aventurero
un cazador de mariposas
cuando te veo
y resumido en tres palabras
cuanto te quiero.
En ese momento apareció Seiya con un enorme ramo de rosas mientras me cantaba al oído.
Desde que llegaste
nada está prohibido
se marchó la duda
me abrazo un suspiro
desde que llegaste
no hay mejor motivo
para despertarme
pa` sentirme vivo.
No te prometo amor eterno
porque no puedo
soy tripulante de una nube
aventurero
un cazador de mariposas
cuando te veo
y resumido en tres palabras
cuanto te quiero
En ese momento paro la música y con una sonrisa en su rostro me pidió que me sentara y luego se sentó el.
-¿ahora por qué tantas intenciones?
-porque es lo menos que te mereces.
-pues gracias, no te hubieras molestado.
-no es una molestia ya que tú me has dado el año más feliz de mi vida.
-si un año, espera ¿Qué día es hoy?
-19 de enero.
-¿en serio? Perdóname Seiya lo olvide por completo.
-si lo he notado, no te preocupes.
-¿Cómo pude pasar por alto una fecha así?
-tranquila, mejor vamos a comer.
-claro, pero ¿Por qué aquí?
-Michiru ahora sí que me sorprendes. –dijo un poco indignado.
-discúlpame pero no te entiendo.
-en este escenario fue la primera vez que te vi.
-me siento tan apenada y es que estoy muy distraída. –sentí como me sonrojaba.
-no te apures. –dicho esto me beso.
Aun no sé cómo pude olvidar que hoy cumplimos un año de novios y que en este escenario fue la primera vez que nos vimos, no pensé que fuera a olvidar un lugar tan importante pero entonces ¿Por qué no olvide esa pista de carreras? Me siento confundida.
-¿Cómo esta tu amiga?
-¿Quién?
-pues Tenoh ¿Quién más? Me entere que van a cancelar sus carreras para ir a una gira acompañando a Mina.
-¿en serio? No lo sabía.
-sí, toda la prensa lo dice y ¿la vas a invitar?
-¿A dónde?
-pues a nuestra boda por supuesto.
-¿Qué? –en ese momento deje de hacer todo lo que estaba haciendo y lo mire completamente incrédula.
-perdón no hice las cosas bien. –se arrodillo frente a mí y de su pantalón saco una pequeña caja de terciopelo. –señorita Michiru Kaioh ¿me haría usted el honor de convertirse en mi esposa y convertirme a mí en el hombre más feliz del universo?
-Seiya… no sé qué decir. –en serio no sabía.
-solo di que sí. –me sonreía de gran manera.
Un torbellino de ideas se forma en mi cabeza, Haruka va a cancelar todo lo que hace para ir con Mina, olvide nuestro aniversario, me siento culpable, no estoy lista para esto pero no puedo seguir así.
-acepto. –solo espero estar haciendo lo correcto.