Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Un hombre, un plan, un canal: Panamá. por Takaptilia

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Si buscaban un final meloso y lleno de sexo pierden su tiempo.

Existen muchos escritos en donde todo termina bien o mal.
Preferí escribir algo como un Inicio deLa construcción del puente que unirá e independizara a dos personas.

Continuación no hay. Hay muchos fanfics que cumplirían con aquel papel.



Por favor, siéntase libre de leer.

Notas del capitulo:


Aclaraciones:

Diálogos: 「」
Separación de escenas: -- 
Pensamientos:" "
Flashback: ・・


「¿Qué están haciendo?」

Y el espíritu a Ruki se le escapó por la nariz.

「¿Eh? Nada. Estábamos hablando y--」

Pero Kai fue interrumpido por la sonrisa bonachona de Aoi, quien lo tomó por el brazo y se lo llevó arrastrando prácticamente fuera del salón de reuniones.

Ruki seguía sin reaccionar, ni siquiera los lejanos gritos de Kai lograron sacarle de aquel plano.

¡¿Qué era lo que estaba a punto de hacer?!


Toda una tarde de reunión con el pensamiento carcomiéndole. Era ahora o nunca. Más de un año en que lo único que pensaba era en que decir.

Pero, ¿Qué era lo que realmente quería decir?

Apoyó la frente sobre el volante y cerró los ojos sintiendo vergüenza. Tras un traspié mental dio un saltito de impresión y observó el espejo retrovisor; su cara completamente roja.

「¿Qué mierda pensaba hacer?」

Se observó fijamente sin pasar por alto el calor y los latidos erráticos de su corazón.
Recordó, conforme notó el color aumentar en su rostro.

・・・

「¿Dime?」
Kai lucia algo distraído observando uno que otro papel sobre el mesón. Comenzaba a vestir su chaqueta, listo para retirarse.
Ruki había tragado aire y fruncido el ceño; comiéndose el nerviosismo.

「Bueno…」
Pero no había alcanzado ni a decir dos palabras cuando la puerta del estudio se abría y comenzaban las risas.
Había permanecido quieto, como si no estuviera allí y para cuando cayó en cuenta Kai ya no estaba.
Kai había sido arrastrado por una ola de humanidad vestida de negro.

・・・

Y aquella misma escena se había repetido millones de veces. Inclusive hacia unos minutos atrás.

Respiró profundo y encendió el vehículo.

--


Se recostó de espalda en el sillón, frente al televisor y lo observó sin realmente observarlo.

「¿Qué es lo tan difícil de decir?」
Habló en voz alta y mirando de reojos notó la juguetona presencia de Koron.

「¿Sabes?」
Sonrió con terneza y vergonzosa tristeza al pequeño can. Las pequeñas patitas oscuras se apoyaban en el borde del sofá.

「Incluso si pudiera ser capaz de decirlo, no lo haría. Está bien de esta manera.」
Koron ladeó la cabeza jadeando amistosamente y saltó hacia él.
Si Ruki no se hubiera levantado de prisa Koron le hubiera babeado completamente el rostro.

Una noche más que acababa con completa desconformidad.

--


Para la mañana siguiente, vistiendo con una chaqueta bastante grande, Ruki ingresó a la compañía.
El camino hacia el salón correspondiente fue largo y silencioso, pero estaba bien tener unos minutos de extremo silencio.

「Buenos días.」

「Buenos días.」
Saludó con tranquilidad al primero en la habitación. Reita devolvió el saludo y continúo acomodando sus cosas en su lugar correspondiente.
No solo Ruki había sentido las bajas temperaturas a tan temprana hora del día, Reita parecía esquiador.

「¿Acaso no sería grandioso que una gran nevada cayera y no tuviéramos que trabajar por días?」
Reita rio abriendo un poco la gruesa chaqueta de invierno que vestía. Caminó hacia los sillones y se sentó tranquilamente.

「De ser así…」
Dejando el gran bolso dorado sobre el mesón, Ruki caminó hacia el rubio y, cruzándose de brazos, se sentó a su lado.
「De ser así se nos sería bastante difícil superar en que un día cualquiera amaneciera y ¡zas! Nada de nieve.」
Rio cubriendo sus labios con el dorso de la mano derecha y Reita asintió dándole la razón.

「Sobre todo Aoi, reclamaría por días.」
Acompañó a Ruki en las risas y tras unos minutos pudieron recuperar la compostura.

「La nieve no es tan mala.」
Murmuró Reita mirando hacia una de las ventanas. Ruki arrugó la nariz.

「Me gusta, pero detesto el frio. Realmente hace bastante frio. Odio traer tanta ropa encima.」

「Luces bien.」

Ruki lo observó por el rabillo del ojo con atención.

「¿Cómo se te es tan fácil decirlo?」
Y para cuando Reita giró a mirarle, Ruki se abochornó.

「¿Qué cosa? ¿Qué luces bien? Es un cumplido, hombre.」

「No es que me haya molestado, pero--」
Nuevamente siendo interrumpido, entraban los restantes y Kai. Ruki le saludó simplemente inclinando ligeramente la cabeza. Kai le devolvió el saludo.


Horas y la cabeza le pesaba. Aoi, como solía hacer en días extremadamente fríos, empezaba una discusión acalorada con Kai. Gracias a esto el ambiente era cálido y no agradecía al sistema de calefacción por ello.

Ruki observó a Uruha, quién parecía desentendido del tema. Luego miró a Reita, este le devolvió la mirada encogiéndose de hombros, tampoco entendiendo cuál era el punto de discutir por quien daría x entrevista en x radio.

Sus pequeños ojos negros miraron a Aoi, quien poco a poco se tranquilizaba al ver que en Kai no causaba ninguna reacción negativa como para comenzar una divertida “pelea”
Kai lucia sereno, escuchándole con respeto, pero simplemente negándose a ciertas peticiones bastantes egoístas.

「¿Acaso nadie dirá nada? Yo ese día tengo un compromiso, además la última vez--」

「Iré yo, Aoi-kun.」
La noticia que el propio Kai entregaba dejó a Aoi sin palabras -- Por un par de segundos.

「¿Qué? ¿Seguro?」

「Claro.」
Informó agitando levemente la cabeza.
Si Ruki no hubiera observado por tanto tiempo a Kai, en el pasado y en el presente,  no daría de lleno con que estaba realmente molesto.  El ceño temblaba por contraerse aún más.

Aoi sonrió como si hubiera ganado una gran guerra y, con regocijo, siguió vociferando que él no estaría dispuesto a hacer algo que no quisiera. Uruha palmeó su hombro tranquilizándole, dándole la razón. “Dejemos que el niño lo crea así”

「Yo también iré.」
Todos miraron a Ruki.
「¿A-acaso no puedo ir? --Bien, entonces no iré.」
Se cruzó de brazos y frunció el ceño ocultando la vergüenza. Bajó la mirada temiendo encontrarse con Kai.

「No, no es eso.」
Reita fue el primero en hablar por todos.

「¿No se supone que en días como estos detestas salir?」
Aoi cuestionó mirando de vez en cuando a Uruha, este asentía apoyando sus palabras.

「Lo único que he oído es negativas. Es trabajo de todos, así que también me corresponde.」
Dictaminó con confianza. Intentó quitar un poco de expectativa con un semblante serio y fijo en el mesón.

「Ya veo. Tratas de hacerme lucir como un incompetente. ¡Que feo, Ruki!」
Aoi lloriqueó con infantil molestia, causando las leves risas de Uruha y Reita. Kai sonrió levemente, pero más parecía interesado en la reacción de Ruki. Ruki parecía luchar por ignorarle o eso creyó.

「¿Qué? ¡Oye!」
Se sacudió levemente con sorpresa y miró a Aoi fijamente, pero poco duró la atención al guitarrista ya que sin querer sus ojos giraron hacia Kai. Él le miraba divertido, esto lo avergonzó levemente.

「¿Realmente quieres acompañarme?」
Arqueó una ceja e interrogante Kai le preguntó.

「Ya he terminado de hablar.」
Ruki aclaró su garganta y escondió sus labios bajo el dorso de su mano. Todo el resto se encogió de hombros como si aquello no tuviera mayor relevancia.
Si Ruki quería ir, que fuera.

「Bien. Ruki y yo daremos aquella entrevista.」
Kai finalizó con una complacida sonrisa en el rosto.
Ruki sintió cálido el estómago.

--


El día de la entrevista fue el más frio de todos los correspondientes en aquella semana.
Ruki esperó junto con Kai en la pequeña oficina de recepción. Las manos le sudaban tan contradictorio con la falta de calefacción en la sala.


「Vaya.」
Murmuró Kai frotando sus manos. Ruki observó con disimulo como intentaba mantener el calor.

「Detesto estos días.」
Habló levemente para no llamar la atención de la secretaria.

La recepción se encontraba a unos cuantos metros de los sillones. La joven mujer de coleta les dio un último vistazo y sonrió con cortesía. Kai asintió correspondiendo el saludo y Ruki, tras unos segundos de entender del porqué de su gesto, miró a la mujer y sonrió levemente.

Esperaron un poco más en silencio.

「¿Tienes mucho frio, no?」
Ruki preguntó débilmente sin mirarle. Kai asintió y esbozando una leve sonrisa, frotó sus manos con más fuerza.

「Tú siempre dices que detestas el frio, pero veo que lo estas llevando mejor que yo.」
Kai rio levemente mientras se encogía en la tibia chaqueta negra. Ruki cubrió sus labios con el dorso de la mano y escondió su leve vergüenza. La risa de Kai siempre lograba avergonzarle.

「Algo así. Me aseguré de traer más abrigo conmigo.」
Le observó bajo las pestañas.

Y tras unos minutos, la secretaria les llamó.

--


「Bien. Bien. Ellos fueron The Gazette. Un gran gusto de poder haberlos tenido aquí. Ahora saben con exactitud los siguientes planes de esta banda tan popular tras su WORLD TOUR. Para finalizar, Ruki-kun.」
El locutor de la radio, un hombre joven, sonreía dándole la palabra a Ruki para que presentara la canción de cierre de aquella entrevista.
Ruki asintió, habló calmo y profundo.
REDO.

Tras agradecerles su participación comenzó a tocar la pista.

Ambos músicos se retiraron los auriculares y pudieron relajarse una vez el letrero de On Air se apagara.

「Muchas gracias, Ruki-kun, Kai-kun. Fue un placer.」
El anfitrión se levantó de la silla y se despidió con cortesía. Ambos correspondieron la despedida de igual manera.
Una pequeña reunión se generó en una de las oficinas de la radio y se concluyó la participación sin inconvenientes.


「Ruki-kun, ¿ya se retira?」
El manager  preguntó cuándo le vio acomodando su bolso sobre el hombro. Ruki volteó y sonrió con cortesía.

「Hmm…」
Por sobre el hombro del ejecutivo observó como Kai continuaba conversando con alguno de los funcionarios de la Radio.

El hombre le miró expectante. Si el artista se retiraba en aquel momento él le acompañaría, pero Ruki negó.

「Aún no. Por favor, regrese sin mí. Estaré bien.」
Y dicho esto el hombre se retiró dejándolo solo.

Aún de pie frente a uno de los mesones, se dedicó a revisar su móvil. Aunque en el fondo era un mero pretexto para ganar algo de tiempo y, sin premeditación según él, encontrarse nuevamente con Kai, si es que el presentaba indicios de retirarse. Las cosas de Kai estaban sobre el mesón.

¿Por qué razón de tan infantil comportamiento?
Meramente porque en aquel instante sintió ganas de sincerarse.

Takanori quería huir y esconder la cabeza en el suelo, pero Ruki no se lo permitió.

Escuchó como Kai se despedía de los jóvenes y giraba hacia su dirección.
Contrajo los dedos con fuerza sobre los bordes del Iphone blanco.
Era ahora o nunca.

「¿Ruki?」
Kai se detuvo a unos pasos de él. El vocal retiró su vista de la pantalla y asintió, observándole con grandes ojos. Kai se sintió un poco nervioso.

--


Ambos abordaron el ascensor poco después.
Hombro a hombro, en silencio.

Kai deslizó la mirada con lentitud hasta dar con la mano que sostenía el bolso de tan peculiar color.
Se quedó observándola por un momento. El rubio de los lisos cabellos del más bajo ahora captaba su completa atención.

「Muchas gracias por aceptar venir.」
Comenzó la conversación a unos pisos del subterráneo. Ruki se removió un poco cuando le escuchó hablar.

「No debes agradecer.  Como dije, es trabajo de todos.」
La voz de Ruki se escuchaba lejana. Intentó no perder la calma. Estaban completamente solos. No había nadie más en aquel cubículo de metal. Su mirada se concentraba en una de las orillas de la puerta de metal.

Nuevamente silencio.

--


Caminaban cada uno con destino a sus correspondientes vehículos. El lugar donde Ruki había estacionado el suyo se encontraba a un piso más arriba.
Algo que no comprendió bien Kai fue del porque Ruki le acompañó hasta su piso cuando el de él estaba a uno más arriba.
¿Y cómo se enteró de ello?
Ruki se dirigía hacia las escaleras.

Quiso preguntarle, pero Ruki era tan igual a una brisa juguetona. A veces venia, otras simplemente no. Pensó que de preguntarle este se le escurriría de las manos como el agua. Arrugó la nariz.

「Nos vemos mañana.」
Pronunció rápidamente.
Ruki se había acobardado. En el ascensor lo habida pensado mejor. No era el momento y jamás lo seria.
¿En qué pensaba? ¿En decirle qué a Kai? ¿A Kai? ¿Decirle qué?

Hace un tiempo, yo… He pensado mucho en…

No. Simplemente no.


「Espera, Ruki.」
Kai le detuvo cuando estuvo a pasos de subir al primer escalón.
Como nunca sus manos sudaban, inclusive el mango del bolso amenazó con resbalársele del hombro. Volteó  mirando al batero estupefacto. Sintió un miedo abrumador.

「¿Pasa algo?」
Sonrió levemente y giró por completo su cuerpo. Kai avanzó unos pasos. Ruki sintió el suelo temblar.

「¿No tenías algo que decirme?」
Y recordó, que por mucho que Kai olvidara cosas, tal parecía que jamás lo haría con las más importantes. Tal vez, está era una de ellas.

Intentó hacerse el desentendido y rio con leve nerviosismo. Cruzando sus brazos cerró un poco más su tapado negro. Se inclinó levemente hacia atrás como si intentara recordar “aquello” Y, tras unos segundos, inclinar la cabeza y negar con divertido e infantil ingenuidad.

「No. Nada que recuerde. Tal vez, pero…」
De entre todos Ruki era el peor en mentir y ahora se cercioraba de ello.
Podía olvidar cosas, pero estúpido no era.

Si Kai no hubiera observado por tanto tiempo a Ruki, en el pasado y en el presente,  no daría de lleno con que estaba realmente mintiendo.

「¿Pero?」
Ruki apretó sus labios en una coqueta y nerviosa mueca. Se rascó ligeramente el cuello y alejó la mano.
Kai continuaba observándole.

Ruki, dentro muy dentro de él, estaba disfrutando aquello. Nunca antes había tenido tanta atención del batero. Se sentía un hombre caprichoso y complicado, pero en esos momentos, en que tantas noches planificando el llamar su atención, le habían vuelto un completo descarado.

Como en el pasado. Siempre había hecho algo completamente fuera de sí para llamar su atención, ya fuera tratándole mal, ignorándole en entrevistas o simplemente pegándole.
Lo último sin intención de herirle, simplemente cuando comenzaba a emocionarse, se pasaba con la fuerza y lo permitido.
Sintió que hacer todo aquello estaba completamente bien. Kai era del tipo que por mucho jugaras con su paciencia, si a él le interesaba, seguiría aguantando hasta obtener un resultado provechoso.

Takanori era barrido completamente por el comportamiento egoísta de Ruki en esos momentos.

「Pero no es el momento. Tengo que irme.」
Sonrió y volteando nuevamente subió las escaleras.

Kai se mantuvo observándole con completa confusión.
Si no fuera por su experiencia dudaría que todo aquello hubiera sido ¿Coquetería?

「Adiós.」
Se quedó con las palabras a medio morir en la garganta.

Giró con dirección a su vehículo y meditó ya frente a este.

Antiguas oportunidades en que Ruki había tenido algo que decirle y jamás escuchó nada de aquello. Ahora cuando él era quien preguntaba Ruki se negaba a responder.

Fuera como fuera que pensara el vocalista su comportamiento le hacía creer fervientemente que intentaba ganar su atención con todo aquel juego.

Ahora, con ello en mente tras el volante, le felicitaba. Lo había logrado.

Para mañana, cuando le viera, sería él mismo quien tuviera que decirle algo que jamás llegaría a ser revelado.

Tal vez un; Hace un tiempo, yo… He pensado mucho en…

No, simplemente sería algo mejor. Como una construcción de un canal que tomaria su tiempo, tiempo que valdria la pena para llegar más rapido y mejor a él.




Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).