"Eye-liner"
Las grandes y cálidas manos de ChanYeol se posaron en sus mejillas ya sonrojadas, su mirada nerviosa sintió la necesidad de evitar la del más alto, quién sonrió con ternura.
Yeol tomo el frasco de desmaquillante líquido y un algodón, lo humedeció y lo froto suavemente sobre los ojos del mayor en edad para así ir desvaneciendo el Delineador que adornaba esos ojos cafés que tanto le gustaban. Baek cerró los ojos, disfrutando del tacto y los cuidados de su novio. Suspiró. Suspiro tan fuerte que quizás se oyó hasta China.
Cuando el delineador estuvo removido de sus ojos, recibió un beso en la frente del más alto, para luego ser abrazado con esos brazos tan fuertes y poco marcados que le gustaba sentir.
Era un poco extraño como había surgido todo, ya que bueno... Si vas a ser Gay, uno espera que por lo menos tu novio sea alguien de 1.80, bronceado, cuerpo bien marcado, ojos penetrantes y sonrisa incitante... Sensual. Tal como el novio de su mejor amigo KyungSoo, pero No. No, claro que no, lo único en lo que acertaba era en la estatura, su novio le llevaba mucho de estatura -Por dios, media 1.85- pero era más pálido que la leche, su cuerpo era escuálido aunque no se podía quejar ya que el más alto tenía lo suyo, era fuerte, su sonrisa era lo más alejado a lo que se le podía denominar "Sensual", era estúpida, enorme, Derp, contagiosa y muy adorable, y su mirada era extrañamente desorbitada, pero profunda.
Estaba perdidamente enamorado de un tipo que a la vista podría parecer que se inhala cualquier clase de hierbas tóxicas, se reía de cosas sin sentido y le alegraba el día en cualquier momento, le consentía los caprichos más estúpidos y era su cómplice en cualquier travesura por más arriesgada que fuese. No había duda que lo amaba.
ChanYeol había llegado a su vida gracias a su amigo KyungSoo, él los había presentado con la intención de que el más alto los dejara solos a él y a su novio, y gracias al cielo así fue, solo que nadie contaba con que... Ahora, justo 2 años después se encontraran tan juntos, tan cerca... Tan enamorados.
Sus labios se unieron en un beso limpio y casto, lento y lleno de amor, sin prisa alguna, degustando su sabor y textura. BaekHyun amarró sus brazos al cuello de su amado mientras que este le sujetó la cintura, acercando sus cuerpos. Se separaron al momento de necesitar aire y se miraron a los ojos.
"BaekHyun era guapo cuando tenía maquillaje, pero sin ello, era hermoso. "
-Te amo- BaekHyun se sonrojó al oír a su amado susurrarle al oído. A pesar de llevar poco más de año y medio de relación, seguía siendo extrañamente tierno que su novio le dijera una y otra vez cosas como esas.
-También te amo- Sintió las palabras salir por si solas de entre sus labios, haciendo florecer una sonrisa en ambos rostros.
-Te necesito... ¿Lo sabes?- BaekHyun asintió dudoso. Y es que ChanYeol no era "Sexy" a menudo, pero cuando se lo proponía podía serlo en verdad.
El más alto mordió con sensualidad el lóbulo izquierdo de Baek robándole un suspiro. Sus cuerpos se acercaron lo más que pudieron para volver a besarse con ansiedad. Los finos dedos del más bajo se enredaron en el cabello del menor atrayéndolo en un beso húmedo y con lenguas de por medio. El más alto avanza pequeños pasos que hacen retroceder al contrario hasta llegar al filo de la cama que pareciera invitarlos a recostarse sobre ella, y por supuesto que no dudaron en aceptar la invitación.
A arrastrones logran llegar al centro de la cama, BaekHyun gime quedito al sentir el cuerpo de su novio caer sobre el suyo y siente la necesidad de estar más juntos aún, por lo que al instante levanta sus piernas para amarrarlas a las caderas del contrario, gozando así de un roce enloquecedor, el otro por su parte, sujeta una de las piernas ajenas mientras a acaricia de arriba abajo con desesperación.
La tentación es grande y los labios de BaekHyun succionando con ímpetu los de Yeol incitan al más alto a morderlos con cierta brusquedad, robando un gemido agudo del cuerpo contrario.
Las manos de Baek buscan contacto directo con la tibia piel de su novio, por lo que escurre sus manos dentro de su camiseta palpando con delicadeza el no muy marcado abdomen que lo aplastaba. El menor se estremeció al sentir las yemas ajenas explorando nuevamente su ya necesitado cuerpo. Mentiría si dijera que no tenía vergüenza de lo que hacía, a decir verdad, siempre sentía vergüenza en momentos así, pero la satisfacción de sentir la piel de Yeol erizarse ante su tacto era aún mayor. Una corriente eléctrica recorrió la médula espinal de ambos al sentir sus erecciones frotarse en uno de tantos movimientos, Yeol empujó levemente hacia adelante simulando una embestida, por lo que el más bajo gimió sin remedio. Ambos sabían que era lo que querían en ese momento, pero no querían terminar tan pronto. El más alto volvió a empujar sobre sus ropas consiguiendo un gemido sonoro en ambos, mientras marcaba un vaivén constante en el que sus miembros se acariciaban por sobre la tela, ahogando sus gemidos entre besos húmedos y calientes. De un momento a otro, Baek se giró quedando sobre Yeol, se sentó sobre las caderas de su amante y se deslizó hacia adelante y hacia atrás frotándose con más desesperación y ansias, quería y necesitaba sentir a Yeol.
Era insufriblemente delicioso cada roce y demasiado excitante ver a Baek encima suyo de esa manera, tan lindo y sonrojado, exhalando dificultosamente, ahogando gemidos constantes, apretando los ojos con fuerza... Todo él era excitante en esos momentos, por lo que sabía que si seguían brindándole esa imagen tan "maravillosa" terminaría ahí mismo. Y estaba claro que no quería que eso suceda.
Volvió a girarse, dejando al mayor debajo suyo y lo besó con poco romanticismo -a estas alturas a quién carajos le importa ser romántico- y casi le arrancó la playera, dejando expuesto el vientre plano del otro quién gimió en el acto. De pronto la idea de ir lento la dejó en lo más profundo de su mente, estaba enfadándose y muy caluroso, no quería más rodeos. Se separaron y Yeol aprovechó para quitarse su playera por completo, y arrancarse las pijamas de una maldita vez. La ropa interior de Baek era delgada, tanto como su cuerpo, y endemoniadamente irresistible.
El peli lacio sonrió coqueto cuando notó la mirada de su amado sobre su cuerpo y comenzó a menearse con descaro, su miembro ya erecto se notaba bastante bajo los calzoncillos que ya comenzaban a incomodarle, ChanYeol se relamió los labios desprendiendo lujuria y sin previo aviso le arrancó de un tirón la ropa interior.
BaekHyun estaba casi delirando por la brusquedad con la que Yeol lo dominaba, siempre era tierno y adorable, pero al momento de estar en la cama era jodidamente sexy y salvaje, por lo que su labio inferior fue el que sufrió las consecuencias.
Las piernas del más bajo volvieron a enredarse en la cadera de su novio teniendo así un contacto casi directo entre sus hombrías, y por Dios que se sentía bien. Ninguno de los dos lo soportaba, sentían que explotarían si seguían así, por lo que él indefenso y pasivo BaekHyun, tomó la mano del más alto y comenzó a lamer sus dedos con todo el ímpetu y sensualidad que podía para lubricarlos, recibiendo un gruñido por parte del otro.
Yeol arrancó de una buena vez la escaza ropa que impedía que sus pieles se sintieran entre sí y fue tan glorioso el gemido de su amante que sin darse cuenta él también gimió. Volvió a recostarse sobre el más bajo cuidando no herirlo con su peso y beso su pronunciada y filosa mandíbula robando suspiros y leves jadeos de un impaciente Baek.
-Ye... Yeol... por favor... yo...- sus temblorosos labios y su atolondrada mente no dejaban salir las palabras de manera coherente
-Shhhh, lo se Baek- la voz grave del más alto era tan profunda y varonil que en situaciones así le hacía perder la cabeza en todo el placer que sabía que vendría.
El más alto sonrió en medio de uno de tantos besos al sentir el cuerpo de Baekhyun tensarse por la intromisión del primer dedo en su entrada, sin embargo no se quejó, dejó que su novio le brindara caricias en esa parte tan íntima de su cuerpo, era algo tan especial para ambos poder compartir esas experiencias juntos que sobrepasaba el placer físico.
Baekhyun gimió quedito cuando el segundo dedo se introdujo en su ser, Chanyeol lamió su cuello para distraerle de la intromisión, aunque ambos deseaban fundirse como uno solo sabían por experiencia que sería algo -muy- doloroso, así que la paciencia tuvo que unirse a todo su deseo.
Cuando estuvo lo suficiente preparado, Chanyeol sacó sus dedos y se posicionó entre sus piernas admirando el esbelto cuerpo debajo suyo y relamiéndose los labios.
-Yeollie, cariño... Deja de admirarme y mejor hazme tuyo o te juro que me las pagarás-
-¡Oh vamos bebé!... No seas impaciente- sonrió de medio lado.
Chanyeol se inclinó y lo beso tan tiernamente como pudo mientras se introducía en la estrecha cavidad del mayor, Baek se aferró a su amplia espalda aruñando suavemente mientras respondía el beso de su amante, recibiendo y brindándole mordiscos en los labios, ambos gimieron cuando el más alto llegó tan profundo como le fue posible.
-Yeollie... muévete... por favor-
-Como digas dulzura-
Comenzaron un ritmo lento, soltando ocasionales gemidos ahogados por los labios contrarios o cualquier espacio de piel contra sus labios, aún se sentía el dolor pero el placer llegaría pronto, por lo que las quejas eran algo que estaban de más, eran innecesarias.
La luz de la luna entraba por las persianas acompañado de una suave brisa que no fue capaz de pasar entre sus cuerpos, los gemidos y exclamaciones del nombre contrario era una hermosa melodía erótica que sonaba suave en sus oídos y que quedaba grabada en sus corazones, las manos contrarias recorriendo sus cuerpos marcaban con fuego el amor que se entregaban, sus rostros se distorsionaban reflejando un sinfín de sensaciones distintas.
Las embestidas se hicieron desenfrenadas y bruscas, los gemidos sonoros, los besos húmedos y descoordinados y las caricias más fogosas, las respiraciones irregulares hacían contraste con el chasquido de sus cuerpos al chocar, el sudor haciendo que sus cuerpos luzcan perlados era cálido y confortante. Yeol empujó en el interior del más bajo dando con su punto dulce. El frágil cuerpo de Baek comenzó a sacudirse por la ola de sensaciones que inundaban su cuerpo hasta hacerlos alcanzar su límite, Baek corriéndose entre sus vientres y Yeol en su interior. La sensación era abrumadora de lo hermoso que resultaba.
-Bacon... Te amo... Muchísimo...- el más alto lo abrazó sin salir de su interior y besó sus labios con delicadeza, sintiendo su respiración pesada
-También te amo y mucho...-rio delicadamente -Pero no me vuelvas a llamar Bacon de nuevo- lo miró ferozmente
-De acuerdo... Te amo Baekie-
-No más que yo-
-¿Mas que el delineador?-
-Mmm... tal vez-
-Yo se que sí-
-Tonto-
FIN