Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Just A Little Favor por keny_shawol

[Reviews - 181]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola.


La semana pasada no pude actualizar, pero esta sí. Así que, ¡sábado de actualización!

Kibum estaba más que molesto. Estaba triste, decepcionado, dolido y cada maldita emoción pasaba por su cuerpo. Quería golpear a Taemin, regresar el tiempo, decirle a Minho, ver a Minho o hacer cualquier cosa para que su vida regresara a una normalidad que a él le gustara.

 

Pero eso no era posible.

 

Y tal vez nunca pudiera resolver las cosas.

 

Pero ese no era el momento para pensar en eso, decidió, ese era el momento para decirle a Taemin todo, para reclamarle, para gritarle y para desahogarse.

 

—¡Todo es tu culpa!—Su dedo golpeó el pecho de Taemin. Lo señaló también, frunciendo el ceño cuando sus miradas se encontraron. —Todo es por ti, todo fue por ti.

 

—Kibum, detente. —Taemin advirtió, mientras tomaba sus manos. Pero Kibum no quería detenerse, no podía hacerlo tampoco.

 

Necesitaba esos gritos, necesitaba cada palabra. Necesitaba por un momento darle la culpa a alguien más. Y Taemin era la persona adecuada.

 

—¡No!—Gritó. Se dio cuenta que asustó a Taemin. Era la primera vez que estaba realmente molesto con él. Era la primera vez que la mirada dulce de Taemin no lo arrastraría al perdón. —¡Esta vez no, Taemin!

 

Kibum no pensó, no lo hizo cuando su mano se estrelló contra la mejilla de Taemin. No lo pensó una segunda vez tampoco, pero cuando quiso hacerlo una tercera vez la mano de Taemin apresó su muñeca.

 

Sus miradas se encontraron, y a Kibum no le importó, ni la molestia, ni el dolor que vio en sus pequeños ojos.

 

—¡Basta!—Taemin gritó también, pero eso mucho menos le importó. —Es la primera vez que me golpeas, Kibum, y no lo permitiré de nuevo.

 

—¡Es tu culpa, Taemin!—No le importó el dolor en sus palabras, ni las lágrimas que comenzaban a picar contra sus ojos. Era mejor llorar, decidió, que seguir golpeando a Taemin. —Todo es tu culpa, ¿No te das cuenta de eso?

Susurros escaparon de su boca una última vez, antes que las lágrimas corrieran por sus mejillas. Cayó contra los brazos de Taemin. Y a pesar de los golpes dados, y los gritos escuchados, Taemin lo sostuvo contra él.

 

Como si de un niño se tratara, Kibum lloró en ese momento, murmurando palabras torpes. Pensó que esa era la relación más extraña que había tenido en su vida, mientras las lágrimas se perdían contra sus labios.

 

Ahí estaba llorando entre los brazos de Taemin, aún después de culparlo y golpearlo. Pero, de nuevo, no es como si importara, porque necesita esas lágrimas fuera.

 

La mano de Taemin pasó por su cabello, peinó suavemente y murmuró palabras de ánimo contra su cabello.

 

Kibum lo odiaba, tanto como lo amaba en ese momento.

 

—Llora todo lo que quieras, Kibum. —Taemin murmuró. —Yo te sostendré.

 

Y Kibum lo hizo.

 

Lo hizo pensando en Minho, en los golpes a Taemin, en su extraña relación, en los problemas que su relación con Minho le causó. En cada pequeña cosa de sus últimos meses a lado de Minho.

 

—Es tu culpa, Taemin.

 

Taemin rió contra su cabello, mientras detenía cada movimiento hacia él.

 

Dios, él estaba tan mal como Taemin lo estaba.

 

Era la peor persona del mundo. Estaba siendo un hipócrita con él. Fue hipócrita con Minho. Se estaba haciendo la víctima, cuando él tenía tanta culpa como Taemin de todo. Tal vez él tenía más culpa que cualquier otro.

 

—¿Te lo advertí o no?

 

Kibum se incorporó y secó las lágrimas con la palma de su mano. Miró a Taemin enojado otra vez. Dios, era un maldito bipolar, por culpa del pequeño Taemin.

—¿Te lo advertí?—Frunció el ceño, cuando las palabras abandonaron su boca. —¡Sí, maldita sea, lo hiciste! Y, ¿Adivina qué, Taemin?—Taemin rodó los ojos, mientras dejaba su lugar. —¡Lo hice! Estoy malditamente enamorado de Choi Minho. Y todo es tu culpa.

 

—Te dije que no lo hicieras. Te dije que te cuidaras de él.

 

—Es muy tarde para eso. —Se dejó caer de nuevo en el sofá y enterró el rostro contra un cojín. —Lo amo, Taemin. Lo amo y no sé qué hacer.

 

—Kibum, Minho no es una buena persona.

 

—¿Cómo puedes saberlo? Dime cómo.

 

Taemin mordió su labio inferior, mientras se paseó de un lado a otro de la habitación.

 

Estaba hecho, Taemin sabía de su amor a Choi Minho y ahora esperaba que él le dijera un poco más de todo lo que decía saber y pensar de Minho. Pero Taemin no habló. Mordió su labio, evitó su mirada, pero no dijo nada.

 

—Minho sólo no es una buena persona.

 

—¿Por qué, Taemin?, ¿Por qué no lo es?—Dejó su lugar y caminó hacia Taemin. Los ojos de Taemin se abrieron cuando alzó las manos, pero esa vez no quería golpearlo. Tomó a Taemin por los hombros y esperó una respuesta. —¿Qué sucedió entre Minho y tú?

 

—Nada.

 

—¿En verdad fui tan mal amigo para no darme cuenta que en verdad lo amabas?—Taemin bajó la mirada. —He sido el peor de los amigos, ¿No es así?

 

Cuando Taemin no contestó, Kibum pensó que era la peor persona. Recordó entonces el día en que todo comenzó. La mirada de Taemin, sus palabras duras y la venganza. En ese momento nada extraño vio en él, pero ahora que lo pensaba de otra manera, la respuesta estaba ahí.

 

Taemin no sólo buscaba venganza por todo lo que Choi Minho prometió y no le dio. Taemin buscaba venganza por un corazón roto, por despecho.

 

—Kibum.

 

—¡Como no lo vi antes!—Los ojos de Taemin se cristalizaron, a Kibum le dolió el corazón. Todo pasó ante sus ojos, las miradas fuertes de Taemin, las palabras malas y la venganza bien hecha. —Tú y yo nos hemos ocultado un par de cosas, ¿No es así?—Taemin asintió sin hablar, sin decir más. —Es tu turno para llorar, Taemin, yo te sostendré.

 

Taemin lo hizo justo como él lo hizo, y Kibum vio todo con otros ojos. Él siempre Taemin hablando mal de Minho, la siempre manera de hacerlo sufrir de la misma manera en que él lo hizo.

 

Se regañó por no darse cuenta antes, por no mirar a Taemin más de cerca y saber qué es lo que pasaba por esa pequeña mente. Taemin era, después de todo, un niño. Uno enamorado de la persona incorrecta. Uno que tal vez, se enamoró como nunca imaginó.

 

—¿Sabes que esto te está haciendo mal, verdad?—Murmuró, jugando con el cabello de Taemin. —Todo este plan, todas estas mentiras, Taemin, no sanaron nada. Todo esto que tu mente pensó, complicó más las cosas en lugar de arreglarlas.

 

Taemin asintió, pero Kibum no sabía si estaba entendiendo todo lo que él decía. Su camisa se sintió húmeda, el cuerpo de Taemin se sacudió contra él. Y por primera vez desde que todo comenzó, Kibum se sintió en paz.

 

De una manera extraña, para nada normal, conocer todo, lo relajó un poco. Eran más problemas, por supuesto. Era más grande que una tonta venganza. Se regañó de nuevo al no pensar todo bien.

 

¿Cómo no se dio cuenta antes de la verdad que Taemin escondía?

 

Eso era más que un Taemin jugando. Ese era Taemin pensando de más, mintiéndole y haciéndolo creer otras cosas.

 

—Por eso no quería que te enamoraras de él. —Taemin murmuró contra su camisa. —Minho puede hacerte sufrir de la manera en que menos te lo esperas.

 

Kibum se preguntó como ese pequeño Taemin pudo mirarlo a los ojos y decirle que su separación con Minho no le dolió en lo absoluto. Se preguntó cómo pudo verlo con Minho, cómo pudo decirle que todo era sólo una venganza sin más.

Pero entonces también recordó todas esas miradas serias de Taemin hacia él. Todas esas veces en que la palabra ‘amor’ escapaba de él. Todas las advertencias de un corazón roto, de una mala experiencia. Taemin no sólo hablaba por hablar de todo, Taemin estaba contándole, con una mentira su experiencia.

 

—Es muy tarde para explicaciones y reclamos. —Separó a Taemin de su cuerpo y limpió las lágrimas con sus pulgares. —Minho y yo, es algo diferente a lo tuyo con él. —Taemin asintió, pero de nuevo, Kibum no sabía si le estaba entendiendo. —Me enamoré de él, y no puedo hacer más. Tú tienes un mal concepto de Minho, pero, Taemin, yo vi al alguien diferente, sentí algo diferente, y eso no cambiara.

 

—Es sólo un juego, Kibum, él te lastimara más.

 

—Minho y yo ya estamos suficiente lastimados. Y fue mi culpa también. —Kibum negó con la cabeza, pero se obligó a no pensar más en todas las mentiras hacia Minho. —Si hubiera sabido que tú seguías enamorado de él, no hubiera hecho nada de esto.

 

—Minho merecía sufrir.

 

—Basta con eso. —Dijo en un tono más fuerte de lo normal. —Tienes que dejar ir todo esto, porque una venganza contra Minho, no te ayudará como tú crees que lo hará. Te está lastimando más, y creo que te has lastimado suficiente.

 

—Yo sólo quiero que entiendas que Minho te hará sufrir como no tienes idea. —Murmuró, sin mirarlo a los ojos. —¿No lo hizo ya?, ¿Acaso no viste las revistas?

 

La realidad lo atrapó de nuevo, pero esta vez, no pelearía con Taemin. Estaba molesto con él por recordarle esa situación, pero antes necesitaba saber qué de todo lo que decían esas revistas era verdad.

 

—Leí las revistas. Gracias por dejarlas ahí, por cierto. —Replicó con sarcasmo y miró a Taemin a los ojos. —Ahora me dirás lo que sucedió esa noche, y quiero la verdad, Taemin.

 

—Las revistas dicen la verdad.

 

—Taemin. —Advirtió, sin abandonar su mirada. Taemin entrecerró los ojos hacia él y entonces bajó la mirada, atrapando su labio inferior entre sus dientes. —Quiero sólo la verdad. Seamos sinceros.

—Es una larga historia.

 

—No te preocupes. —Tomó la mano de Taemin y lo arrastró con él hacia el sofá. —Tenemos mucho tiempo. Así que comienza a hablar.

 

Y Taemin lo hizo, pero no sabía si todo era cierto.

 

 

 

—Entonces. —Minho escuchó a Changmin, pero no levantó la vista del periódico que leía. —¿Quieres hablar de eso?

 

Changmin directo, sin cautela y Minho le agradeció por eso. Pero aunque Changmin fuera su amigo, casi un hermano, no podía simplemente dejar que las palabras escaparan de su boca.

 

Era demasiado vergonzoso.

 

Estaba sufriendo sólo por la mente de un pequeño de menos de 22 años, y se preguntó cómo pudo estar con él en primer lugar.

 

Taemin y Kibum era muy diferentes, pero después de eso, Minho entendió porque eran amigos. No les importaba jugar con los sentimientos de las personas y fingir ser otras personas.

 

Todo era muy complicado, para que Minho entrara aún más en todo. Todo dolía demasiado para siquiera recordarlo otra vez.

 

—No.

 

Escuchó a Changmin suspirar, y no necesitó verlo para saber que estaba rodando los ojos. Lo conocía tan bien, como creía conocer a Kibum.

 

—¿Hablaras sobre lo que dicen las noticias?

 

—No.

 

—¿Debo tomar eso como un sí?

—Te sorprenderías.

 

—Minho, basta.

 

Pero él no quería parar, y no sabía por qué.

 

Estaba harto de lo que decían las revistas, estaba harto de los reporteros siguiéndolo, haciéndole preguntas sobre Taemin y él, sobre Kibum y él, sobre cada cosa de su vida. Una que suponía, debía ser privada.

 

—Cree lo que dicen las noticas, Changmin. —Habló, dejando el periódico sobre la mesa. —Kibum no pudo atraparme del todo. No he olvidado a Taemin. Sí, pasé la noche con él. Sí, no llegué a casa ese día. Sí, mi relación con Kibum terminó. ¿Olvide algo?

 

Changmin rió, y asintió hacia él, y Minho, otra vez, agradeció eso.

 

—Tal vez no más citas para ti en un largo tiempo.

 

O tal vez no más nada para él en un tiempo. Deseó poder dejar todo, olvidar un momento y no saber sobre Kibum. Pero ahora que sabía todo, Kibum aparecía en cada parte. Kibum era, después de todo, el diseñador del momento.

 

—Tal vez debería tomarme unas vacaciones. —Dijo, sin pensar del todo en esas vacaciones. —No tomaré más trabajos por ahora. Me daré un tiempo.

 

Porque darse un tiempo, alejado del medio artístico y de las palabras malintencionadas, parecía lo mejor.

 

 

 

Kibum no estaba del todo seguro sobre lo que Taemin había dicho. Taemin habló sobre lo que él tenía planeado ese día, pero no le dijo lo que pasó entre Minho y él en el hotel.

 

¿Taemin le estaba mintiendo de nuevo?

 

No estaba seguro, ni quería pensar en más mentiras, sólo quería encontrar una solución para sus problemas.

 

—¿Sigues enamorado de Minho?

 

Él preguntó, porque necesitaba una confirmación más. No sabía lo que haría si resultaba que Taemin estaba enamorado de Minho, cuando él también lo estaba. Más que enamorado, Kibum sentía que había encontrado a la persona de su vida.

 

—No, Kibum, no lo estoy.

 

—¿Estás enamorado de Jinki?

 

—No lo sé.

 

Kibum lo miró, extendiendo su mano para encontrar la de Taemin. Por más que quería odiar ese niño, por más que quería culparlo de todo, no podía. Porque después de saber un poco más de las mentiras de Taemin, ahora podía ver un poco al niño que jugaba en su jardín.

 

—Si aún sientes algo por Minho, es mejor que no intentes nada con él. —Taemin abrió la boca, pero Kibum lo detuvo antes de que hablara. —Y si ya no sientes nada por Minho, y quieres algo con Jinki, es mejor que te olvides de la idea de querer verlo sufrir. —Habló suave, apretando también la mano de Taemin. —El sufrimiento ha sido suficiente.

 

—Bien. —Taemin murmuró, sonriendo suavemente. —¿Qué vas a hacer tú?

 

Kibum lo pensó un momento. ¿Qué iba a hacer? No estaba seguro, quería muchas cosas, como hablar con Minho, verlo una vez más, tratar de obtener su perdón, hablar con su madre y otras cosas más.

 

Eran tantas cosas que Kibum no estaba seguro de qué hacer.

 

—Creo que por ahora. —Dijo. —Viviré mi vida como yo quiera.

 

Notas finales:

Taemin sólo es un niño~.


Pero aún hay más cosas detrás de todo esto, y no hay un final cerca por ahora.


¡Nos estamos leyendo! 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).