Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

R.D.S.B por Sou-Tan

[Reviews - 11]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

solo no se saquen los ojos por esto :v

Notas del capitulo:

Al fin tome la decision de hacer de un viejo one-sho un fanfics de al menos diez capitulos. Este primer capitulo es bastante, como dice el titulo, idiota (?) El punto es que tengo sueño.

-Hello bitches, ¿Qué tal el día? – Saludo un sonriente Jinki, sentándose despreocupadamente en el sillón y estirando sus pies.

Bufo, pues aquella era, de por sí, una pregunta bastante estúpida. Minho se acomodó mejor en su silla, intentando tragar ese gran trozo de carne que desde hacía tres minutos estaba tratando de comer.

-¿Qué tal el día? Bueno, empezando por la aburrida clase de historia de la fotografía con el insoportable profesor suplente, no tan mal – Respondió con simpleza y luego continuo: Pero podría seguir, hablando de esta maldita carne que parece estar hecha de material sintético, también añadiría que ustedes aun, luego de tanto desprecio, no me dejan en paz aunque mi deseo de que no vuelvan es cada día más evidente. Y claro, como no, no puedo pasar por alto el hecho de que tus pies están ensuciando mis cojines. Por su puesto, mi día va genial.

El de ojos pequeños sonrió tomando el mando de la televisión y cambiando enseguida de canales.

-¿Es la comida de Taemin, cierto?

Minho asintió con una mueca trágica pintada en el rostro, se notaba que sufría bastante.

-Ya veo – Añadió – Sinceramente no los entiendo, vaya que no… - susurro para sí mismo.

 

Jonghyun simplemente se encogió de hombros, casi ni prestándole atención a esos dos. Ya estaba bastante acostumbrado a ese tipo de comportamiento por parte del ojón siempre que el de cabello largo estaba involucrado.

Minho era mucho más imbécil que de costumbre. Mucho más…Minho.

-Así que, ¿A qué hora paso por ustedes hoy en la noche?

El apodado Onew se limitó a arquear una ceja y morderse los labios.

-Vaya, querido, apenas y te conozco y ya quieres llegar a segunda base. Contrólate, soy mejor en dosis pequeñas, no creo que nadie aguante tanto de esto – paso sus manos por sus abdominales e hizo como si quemase al tacto – en una sola noche.

-Hyung, lidio contigo y tus maneras peculiares desde hace dos años. Supongo que es un alivio no haber muerto de una sobredosis por tus estupideces.

Suspiro cansado y se volvió a tumbar en el sillón sin despegar la vista de la televisión.

-Nunca vas a respetarme, ¿cierto?

Negó aun tratando de comer esa carne.

-Bueno, igual no puedo, sabes que mañana es miércoles. Además, tengo exámenes que presentar.

-Yo solo tengo una clase mañana, así que iré a casa de Hee a pasar la noche.

Los otros dos no pudieron evitar mirarse entre ellos. Claro, a pasar toda la noche pasándosela bien, pero con Key, el primo de Heechul.

Terminada su comida, una vez esos dos desalojaron su departamento, no tardó en darse una ducha, tomar su chaqueta e irse de ahí. Metió los dos boletos en sus bolsillos y se aseguró que sus llaves estaban ahí justo cuando cruzaba el portal de su edificio. Vivir en los dormitorios de la universidad era una ventaja de vez en cuando.

Reviso su celular y  el reloj marcaba exactamente las tres pm. La hora perfecta para ir a buscar a su mejor enemigo. O como a los demás les gustaba llamarlos, “mejor amigo”.

-¿Qué quieres? – Contesto la voz del otro lado de la línea.

-Oye, que tengas sus mismos gustos, no quiere decir que tengas que comportarte como una nenita.

-Ya, tonto, dime. Estoy ocupado – Pidió con una pizca de sonrisa en sus palabras.

Suspiro. Realmente no tenía ganas de iniciar una discusión inútil provocada principalmente por su incontrolable lengua. Midió sus palabras y modero sus insultos antes de añadir:

-Ven conmigo al partido de hoy. Sé que no tienes nada que hacer. Y que tampoco estás haciendo nada.

-No puedo, voy a casa de Kibum mas tarde y ahora estoy estudiando.

Nunca cambiaba, ni siquiera en lo mentiroso. Colgó la llamada cuando vio de cerca como Taemin estaba sentado debajo de uno de los muchos árboles del campus, con un manga en la mano mientras que todos a su alrededor estudiaban con sus gigantescos libros.

-No creo que Naruto y su Fenshui  ayuden mucho en la composición de nuevas melodías.

El pelilargo no volteo a mirarle, solo esbozo una pequeña sonrisa ente su comentario, intentando no atragantarse con su café.

-¿Fenshui?

-Solo olvídalo.

-Así como tú vas a olvidar que “debo” – hizo la señal de las comillas – ir contigo. Ya te dije, voy a casa de…

-No te odio tanto como para no advertirte que hoy Jonghyun planea estar allá y, a menos que quieras un pequeño trauma, te recomiendo no ir.

-Entonces estaré muy ocupado leyendo mi manga. Vete a comer moscas, shu, shu – Dio por terminada la conversación dando un manotazo al aire, pero Minho no quería terminar.

Cada vez que le veía así de indiferente y fastidiado por su presencia, algo dentro de él se encendía. Y no era tristeza. Era satisfacción mezclada con un poco de malicia acumulándose mientras le observaba. Ganas de hacerle rabiar.

-Vamos, vamos, vamos. Sabes que odio ir solo y tú eres la única compañía que tengo.

Una mueca de fastidio se formó en el rostro del pelilargo que solo hasta ahora se había dignado a mirarle a los ojos. Vio un reto en el brillo de sus ojos, ambos sabían que cuando sonreían de esa forma definitivamente comenzaría una nueva pelea.

-Pues búscate una de tu putas – Mascullo entre dientes sin apartar la vista.

-Es más fácil convencerte a ti. Me caes mejor – Y, como siempre, cuando parecía que la pelea estaba terminada… - tu no chillas, me gusta que estén en silencio porque así molestan menos. A ti no tengo que complacerte en nada. ¿Qué más puedo pedir? Hasta barato me sales, queridito – Le lanzo un beso en el aire.

Ambos sabían que era mentira, porque entre ambos comían más que un grupo de cinco personas y terminaban con sus billeteras a medio llenar al finalizar el día.

-Si te digo que sí, ¿Vas a dejarme en paz? – Resoplo levantándose - ¡Que va! Nunca podre deshacerme de ti – Y, sinceramente, Taemin tampoco quería hacerlo, pero Minho no tenía la necesidad de saberlo.

Sonrió, había logrado su cometido. No le importaba ver el partido solo, pero si tenía la oportunidad de robárselo un rato, se lo llevaría consigo a donde fuera. Más por costumbre que por necesidad, se dijo.

-Pero igual sabes que tendrás que darme mi algodón de azúcar, y las palomitas. Tampoco – Se vio callado por sus labios haciendo presión sobre los suyos. Le aparto de un empujón - ¡Yah, cabron!

Minho se encogió de hombros, despreocupado, mientras una mirada asesina intentaba arrancarle la cabeza inútilmente.

-Sabes lo que pasa cuando hablas mucho. Eres un insoportable.

Un insoportable porque le comenzaba a descontrolar. ¡Vaya idioteces hacía por su culpa!

Claro, ningún pensamiento le salvo del golpe que recibió después de eso. Desde que Taemin le había informado sobre sus preferencias sexuales, Minho no había dejado de molestarlo de forma constante debido a eso. Siempre recalcaba su apariencia débil y femenina aun cuando Taemin era un poco…bastante agresivo.

-Solo…no vuelvas a hacerlo.

Si claro, como si pudiese hacerlo.

-¿Por qué? ¿Ya no me quieres? Ya sé, ¿Tienes a otro? ¿O has vuelto con Jihyun?

-Minho… - Intento despegar sus brazos de su cuerpo.

-¿Por qué no me quieres, he? ¿Qué hice de malo?

-Quítate de encima, me asfixias – Se quejó antes de darle una fuerte patada en su entrepierna.

-¡Aigo, mi Taeminnie ya no me quiere!

-Por idiota.

Por ser tan…Minho.

 

 

Notas finales:

El titulo tendra sentido mucho despues, casi al final.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).