Prologo
Cuando Sanji estaba arreglando su ultimo pastel el teléfono comenzó a sonar, pero lo había prometido no interrumpiría su labor por nada del mundo. Por fin después de tantos intentos fracasados logro conseguir la mezcla exacta de fresas y zarzamoras para que el pastel luciera un toque fresco pero romántico a la vez.
-Hola, hablas a la familia Kuroashi, en este momento no te podemos atender así que deja tu nombre y numero, y en cuanto tengamos tiempo nos comunicaremos contigo- finalizo la contestadora y seguido sonó un pitido, entonces alguien comenzó a hablar- Hola? Habla Ussop, tengo en este momento dos boletos para la firma de autógrafos de Grant Achatz y la verdad quisiera…
Apresuradamente Sanji estiro la mano para descolgar el auricular. -¡Ussop! Los quiero-
-a si, hola Ussop, ¿Cómo has estado?- dijo Ussop imitando la voz de Sanji- yo muy bien, y tu que tal…
-vas a necesitar mi numero de tarjeta de crédito verdad, espera un segundo.
Sanji le dicto a Ussop un par de números y después se despidieron.-esto le va a encantar a Law- pensó Sanji, se dirigió a la ventana y abriéndola de par en par grito a todo pulmón- ¡hey Law, ven acá!
Una motita blanca con manchas negras salió debajo de un arbusto, obviamente no se parecía a Sanji, el pequeño tenia 9 años, su cabello era negro y su piel caía en un tono oliva claro, el niño era encantador -eso decían las vecinas, bastaba con conocerlo para cambiar de opinión-, lo que mas le gustaba a Sanji del pequeño Law eran sus ojos, si uno los miraba con atención se podría dar cuenta que eran de un color gris claro , no muchos poseen ese tipo de ojos. Antes de que siquiera Law llegara a la mitad del camino Sanji le dijo-tengo boletos para una firma de autógrafos de Grant Achatz. Los ojos se le iluminaron a Law y una gran sonrisa se dibujo en su rostro- no te creo- dijo.
-¡En serio!!- le contesto de regreso. Sanji pensó entonces que haría lo que fuera por ver esa dulce carita miles de veces mas –se preocuparía por banalidades como el dinero que se gasto en esos boletos en otro momento, después de todo la vida era muy corta y había muchas cosas que disfrutar-.
-apresúrate a hacer tu tarea, nos vamos en una hora.
Por la emoción tanto Sanji como Law a penas y avanzaron en sus labores. Dieron entonces las 3:00 pm y partieron hacia Osaka donde seria la firma de autógrafos.
Viajaron aproximadamente 2 horas, llegaron al foro en donde se llevaría a cabo el evento, para ese entonces había aproximadamente una fila de mas de 300 personas esperando, aun que eso era lo de menos. Ya en la firma Law insistió tanto a Grant Achatz y logro hacer que se tomaran muchas fotos juntos, al final el gran chef sintió gusto por Law y le regalo un libro edición especial cosa que el pequeño agradeció mucho. Regresaron a su casa poco después de las 11:00 pm.
-Law no te importaría cenar aunque ya sea bastante tarde.
-no hay problema Sanji
-te he dicho miles de veces que me llames papá.
-…mejor pondré la mesa.
-encima me ignoras.
Sanji preparo una cena “sencilla y modesta” que consistía en huevo escalfado y un vaso de jugo de naranja, al parecer no podía prepara una comida sin que esta luciera como de cinco estrellas.
Hacia 10 minutos que Law se había ido a dormir, eran las cinco para las doce y aun no había terminado los pasteles para mañana. No iba a arruinar 4 celebraciones: una boda un bautizo y dos cumpleaños. Definitivamente no los defraudaría…
Capitulo 1
Cuando el teléfono sonó desgarrando el gutural silencio del departamento de Zoro, miles de ideas borrosas pasaron por su cabeza- la mayoría relacionadas con el trabajo por supuesto- y además del hecho que eran cerca de las 2:00 am.
-¿hola?
- hola, ¿hablo con Roronoa Zoro?
-si habla el
- me llamo Nami, soy amiga de Sanji, el acaba de tener un accidente, un auto lo choco por detrás y callo por una barranca
-no… y Law?!!
-el no estaba con el, se había quedado con su vecino- Zoro sintió un gran alivio.
-¿en que hospital esta el ahora?
-Esta en el hospital de Nagoya
-enseguida voy- y colgó.
Zoro no lo podía creer, para el Sanji era el hombre mas sano y fuerte que nunca antes había conocido. Era increíble que ahora estuviera en uno de los lugares que mas detestaba, en los años que había vivido con Sanji el no necesito ir a un hospital prácticamente nunca. “Ya no estas con el”, le recordó su yo interno, “el fue el que te abandono”, entonces porque estaba yendo a verlo, aun le dolía su separación a pesar de los años, -eso no importa- pensó, de cualquier manera el tenia que hacer los arreglos necesarios para con Law no lo iba a dejar solo.
Le tomo solo cinco minutos vestirse y lavarse los dientes para después tomar sus llaves e ir corriendo a su auto, el viaje duraría mas de 3 horas. En el auto tomo su teléfono y marco al hospital – hola me llamo Roronoa Zoro, mi amigo- la palabra sonaba horrible, pero que mas podía decir- acaba de ser hospitalizado y quisiera saber como se encuentra-
Una voz joven le contesto, obviamente era de una enfermera - dígame cual es el nombre de su amigo-
-se llama kuroashi Sanji-
-permítame- Zoro escucho el sonido de teclas apretadas rápidamente, un corto silencio y de nuevo la voz de la mujer- haces 5 horas el cayo por un barranco, tiene severas fracturas sobre todo en las piernas, además de una gran hinchazón causada por un golpe en la cara, aun sigue inconsciente.
-esta en coma, verdad?
-me temo que si- contesto la enfermera