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Las aventuras de Neville Longbottom: El niñero. por Vanessa Potter

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Notas del capitulo:

Esta fue mi primera comedia, recuerden que entraron aqui para reirse y humillar a personajes ficticios en sus mentes llenas de yaoi y harry potter. Así que quiero risas histericas, es más, premio al que me diga que se cayo de la ventana por la risa.

¿Es magia o esperma defectuoso?

Mierda, mierda y más mierda, fue el único pensamiento que cruzo mi mente durante 3 tortuosos minutos, en los cuales "mis hijos" se conocieron mas a profundidad, y no me refiero a que se pusieron a hablar de sentimientos y anécdotas de sus cortas vidas, cuando digo profundidad me refiero a que todos se examinaron las orejas, las bocas, los ojos y justo ahora todos se habían quitado los zapatos y calcetines y se observaban los pies.

-Mira, ¡tú no tienes dedo gordo!- le dijo el niño pelirrojo al niño rubio, y curiosamente ambos se me hacían familiares, como si los conociera desde los 11 años.- ¿Por qué no lo tienes?

-Claro que lo tengo, solo que no es gordo- le explico el rubio mientras se sentaba el suelo y observaba su dedo de forma más minuciosa, ¡Pobre tonto!, a distancia se ve que no tiene dedo gordo

-¿Cómo te llamas niño sin dedo gordo?

-Draco- se escucharon las risas del niño pelirrojo, definitivamente esto era extraño, sintió que ya he vivido esto antes, como un deja vú o como los que tiene la profesora Trelawey- ¿De qué te ríes?, mi nombre es bonito, ¿Cuál es el tuyo?

-Me llamo Ron - ¡Mas casualidades!, sus hijos ya tenían nombres y se llamaban como sus compañeros, que cómico

-¿Acaso tus padres eran alcohólicos?- le grito el querubín rubio al pecoso pelirrojo

-Pues no lo sé, déjame preguntar- Ron se acerco a mí y me jalo el pantalón, yo me agache un poco para estar a su altura y sus ojos azules se me hicieron súper conocidísimos

-¿Qué es alcohólico?- Ron se metió el dedo a la nariz y se giro para ver a Draco con su carita de tontuelo, mi  niño tenía los mismos gestos que yo a su edad, ¡Qué lindo!

-Pues una persona que tiene cólicos- ¡Bien hecho, hijo!, fue mi pensamiento al ver que mi hijo era un genio, pero ese tipo de cosas no duran mucho, ya que siempre llega alguien y te dice lo imbécil que es tu hijo.

-No es verdad- exclamo su otra hija, la que parecía un clon de Hermione y un conejo que uso mal una rizadora de pelo.- Un alcohólico es una persona enferma- Tal vez me equivoque y el pequeño idiota no es mi  hijo, yo no tengo familia rubia

-¿Eres un castor?- le pregunto Ron y Draco se rio de ella- ¿Quién eres?

-Soy Hermione, lástima que no sea un gusto conocerlos- su niña era toda una princesita, como la chica de aquella película, la idiota que tenía un diario y una abuela transexual.

-Pues lo mismo digo- le dijo Draco sacándole la lengua, Ron se rio y también le saco la lengua- ¿Y tú, quien eres niño?

Dirigí mi mirada hacia el mismo lugar en el que miraba mi niño rubio y vi que miraba a un chico moreno de lentes redondos, ese niño se parecía tanto a alguien que yo conozco, pelo negro, una cicatriz extraña y lentos redondos, ¡Que idiota!, soy el padre de la reencarnación de John Lennon y Drake Bell, aunque es muy raro, porque, que yo sepa, Drake Bell aun sigue vivo.

-Ha… Ha…Harry, ese es mi nombre- no sé por qué, pero creo que esto es demasiada casualidad o muy extraño, yo nunca antes había visto a estos niños en mi vida y llegan y me dicen papi.

-¿Ha...Ha… Harry? ¿Qué clase de nombre es ese?- dijo Draco acercándosele, el morenito era el más pequeño de todos, tanto en altura como en peso, parecía un niño del DIF

-No, mi nombre es Harry, solo Harry- el morenito le tendió la mano y mi otro niño se la acepto y le pregunto.

-¿Cómo es tu dedo gordo?

-Pues es gordo, como el de todos

Ron se acerco a ellos dos y se presento con Harry, luego volteo a ver a Draco y le dijo:

-Te lo dije, todos tienen dedo gordo menos tu

Eso basto para que los 4 se engancharan en buna discusión sobre los dedos gordos, los pies, los hongos y ahora estaban hablando sobre quien tenía los pies mas apestosos, esos niños y sus conversaciones.

Mientras ellos hablaban no puede evitar pensar en muchas cosas, y obviamente darme cuenta de otros, como de mi gran error al decir que esos niños eran mis hijos y su otro padre era ese gato negro llamado Danny, los gatos no tienen hijos humanos, tienen gatitos, aparte no tuve sexo con ese gato, solo tuve su semen en mi trasero eso no significa algo y si ese gato fue el otro padre de mis hijos, ellos serian como los Thundercats y Gatubela.

Otra cosa de la que me he dado cuenta en este corto tiempo fue que los debí haber tenido a los 12 años, lo cual es bastante extraño, porque por aquella época estaba aterrado de que llegara el basilisco en la noche y me matara, y cuando hablo del basilisco hablo del que había en la cámara de los secretos, no del basilisco que tenía el profesor Gilderoy en los pantalones y al que varios chicos temían.

Tan distraído estaba con mis brillantes deducciones detectivescas que no me di cuenta de que había una persona en shock en la puerta viendo como los niños cambiaban de zapatos.

-Señor Longbottom, explique esto ahora o sino juro que lo encerrare con la señora Norris- esa voz es tan peculiar y fría que tuve que voltear para ver a mi peor pesadilla, y no era yo desnudo con un consolador de madera, era Severus Snape.

-Pues… ¿Qué quiere que le explique?

-¿De dónde saco a estos monigotes?- me dijo entrecerrando los ojos y acercándose peligrosamente hacia mi burbuja personal, ¡Diablos!, me está acosando

-¿Monigotes?, ¿A qué se refiere?- le pregunte mientras cruzaba las piernas y me aguantaba las ganas de orinar, porque cada vez que me gritan lloro y orino, como los borrachos y mi abuela.

-Me refiero a las versiones de las chicas superpoderosas y Mojo jojo jugando con sus zapatos- me grito y una vez más me escupió en el ojo, creo que un día se me va infectar, no es sano que te escupan la cornea

-¿De qué habla?

Observe como se acercaba a los niños y como al ver a mi niño rubio se quedaba aun más blanco de lo habitual, como si hubiera visto a alguien haciendo mal una poción.

-¿Cómo ha pasado esto Longbottom?

-¿Cómo ha pasado que profesor?- mi mente estaba totalmente en blanco, era como si mi cerebro solo me dijera que hiciera 2 cosas, echarle la culpa a los niños y respirar, ¡Fácil!

-¿Cómo se han vuelto niños Potter, Malfoy, Weasley y Granger?- me grito y mis niños corrieron a mi lado y se escondieron detrás de mí, ¡Cobardes!

-¿Ellos son Harry, Malfoy, Ron y Hermione?- no tenía ni la más mínima idea de que esos niñitos en realidad no eran mis hijos, sino mis compañeros de escuela, ¿Significara que en realidad pensé que Malfoy era un querubín?

-Por el amor del putero Merlín, ¿Acaso es usted imbécil?, hasta un cola cuerno húngaro sabría que esos niños son sus compañeros

-Oh, vaya que raro

-¿Es todo lo que dirá Longbottom?- la verdad es que nunca he sido un chico de muchas palabras, yo más bien diría de muchas tonterías

-Eso creo

Snape comenzó a dar vueltas en círculos y los niños y yo nos terminamos de marear viéndolo como trataba de hacerle un hoyo al suelo y llegar al centro de la Tierra, el cual estaría lleno de dinosaurios. Cuando por fin se detuvo, se me quedo con esa típica mirada de un profesor, esa que te dice que está pensando en ponerte a ti frente a todos a hacer el ejercicio sino aguantas su mirada y yo, al ser la persona que era, simplemente parpadee, luego me dedique a fantasear como yo mismo me arrancaba los ojos.

-Bien Longbottom, dado que este accidente es su culpa, usted le explicara esto al director Dumbledore- se me quedo mirando esperando para ver mi reacción, el esperaba que reaccionara de forma ridícula.

Y lo hice

-¿Esta de coña?, ¡Joder!, yo no puedo decirle eso colega, me va a matar

-Señor Longbottom, usted es ingles no español, así que deje de actuar como si lo fuera pedazo de imbécil

-De acuerdo, profesor Snape- le dije totalmente sonrojado, y a mis espaldas pude ver como esos monstruos se reían de mi, solo yo puedo ser la burla de mis compañeros aunque estos tengan 4 años

-Tome a esos y vamos al despacho del director- comenzó a caminar en dirección a la puerta y al ver que no me movía me tomo de la oreja y me dio un fuerte tirón y me susurro:

-Haber bodoquitos junior, ¿Te mueves o te muevo?

-Ahhh, duele, por favor suélteme

-Bien bodoquitos, te muevo

Me jaloneo de la oreja y me saco de ahí, yo tome la mano de Hermione que era la más cercana y comenzamos a avanzar. La pequeña castaña al ver que ninguno de esos 3 tontos se movía, tomo la oreja del pelirrojo y la jalo, este a su vez tomo la Draco y por último el tomo la de Harry.

Y así fue como Severus Snape, yo, Hermione, Ron, Draco y Harry hicimos una cadena orejera de 6 personas hacia el despacho del director, el profesor Snape fue veloz, aprovecho que no había nadie en los pasillos porque aun no acababan las clases y casi me arranca el oído y por ende yo la mano a Hermione y ella la oreja a Ron y este a Draco y este a Harry, en fin, pronto seriamos des orejados.

Ya estábamos frente a la gárgola y ni así Snape se digno a soltarme, no sé yo, pero creo que alguien con el cabello grasiento como un chico de 13 años que no se baña en vacaciones, tiene una extraña atracción sexual hacia mi persona. Sé que algunos pensaran que estoy loco, pero vamos, es obvio que el estricto profesor me ama, solo que no se ha dado cuenta, esa forma en la que jala las orejas, esa forma en la que me llena de insultos, esa manera en la que tira mis calderos, no son más que la forma en la que el demuestra esa frustración sexual, tal y como lo hacen Drake y Josh, tal y como lo hacen Bart y Milhouse, tal y como lo hacen Superman y Batman. Snape y yo somos la pareja ideal, somos "Nevus"

Obviamente yo sería el dominante, soy más delgado

-Malvaviscos bañados de queso- el director Dumbledore siempre se había caracterizado por sus contraseñas de dulces, pero yo no sabía que los malvaviscos bañados en queso eran dulces, ¡Que ignorante soy!

El profesor Snape comenzó a aporrear la puerta con una parte de mi cabeza, gracias a Merlín que soy un poco cabeza hueca del lado derecha de la cabeza, neuronas más, neuronas menos, qué más da, al fin y al cabo, ¡No las usaba mucho!

-Pasa Severus- el profesor Snape entro al despacho aun jalando mi oreja y con la fila de niños detrás de nosotros jalándose las orejas igual, parecíamos unos niños idiotas, como los de aquella serie de TV donde se toman del pantalón para ir al baño, me sintió igual que esos niños.- Por favor suelta la oreja del señor Longbottom

¡Libertad!, pensé sonriendo como un papanatas, libere la mano de Hermione y ella libero a Ron y así sucesivamente hasta que nosotros nos dimos cuenta 5 minutos después de que ahora teníamos una parte extrañamente hinchada en nuestro cuerpo, y no, no hablo de una erección o un embarazo.

A nuestro alrededor estaban varios profesores, como McGonagall, Flitwick, Sprout y Slughorn, también el apacible anciano del director Dumbledore, ¿Cómo se sentirá su barba?, ¿Áspera o suave?, ¿Es falsa?

-Señor Longbottom, ¿Quiere tocar?

Ese era la voz del director, ¿Otro acosador?, vaya, yo sí que debo ser muy interesante o millonario.

-¿A qué se refiere profesor Dumbledore?

-Pues ya sabe a qué, ande venga y toque

-No lo sé, no es correcto- pude sentir las miradas del resto de los profesores clavadas en mi, Oh, yo y mi increíble físico siempre llamando la atención.

-Vamos, yo se que lo desea- se palmeo las rodillas para animarme a que me acercara, decide rendirme a su misteriosa barba y me acerque con toda la calma del mundo y cuando por fin estaba a unos pasos, la profesora McGonagall me jala del cuello y me avienta al suelo, ¡Mi trasero!, si me sigo cayendo de sentón voy a terminar como un anoréxico, sin retaguardia alguna.

-Albus, por Merlín, no me hagas recordarte el incidente del 82

-¿Qué incidente?

-Ya sabes, el incidente de la snitch, Carlitoris y el barniz de uñas

¿Carlitoris?, ¿Qué clase de nombre es ese?, todos los profesores se sonrojaron, ¡Snape se sonrojo!, todos nos miramos unos a otros preguntándonos sobre el incidente del 82 con la snitch, Carlitoris y el barniz de uñas, este era uno de esos momentos incómodos en los que un anciano hace una referencia a la vida sexual de otro anciano, ¡Como mi abuela en aquella navidad donde se quito el sostén!

-Oh sí, ya recuerdo ese "incidente"- el profesor Dumbledore giro su silla y se quedo mirando por la ventana riendo durante un rato sobándose el estómago, aunque yo creo que era otra cosa- Ahhh Carlitoris, ¿Dónde estarás ahora?

 -¿Albus?

-¿Qué sucede Minerva?

-¿Cómo vamos a solucionar esto?- ella señalo a los niños que ahora andaban divididos por el despacho, Ron y Draco jugaban con una silla giratoria, Hermione trataba de alcanzar un libro y Harry se robo el plato de galletas.

-¿Lo de las galletas?, pues es sencillo, vamos a abrirle el estomago a Harry

El pequeño soltó el plato de galletas y se fue a esconder detrás de Hermione, la cual le dio un golpe con el libro, lo que provoco que Harry la empujara y se desencadenara una pelea entre ellos dos. ¡Fascinante!

-No, no hablo de las galletas, hablo de la edad que ahora tienen los chicos

-Oh, así que era eso, ¿Cómo paso esto?

-Hable señor Longbottom

Comencé a explicar todo desde el principio, mis continuas tardanzas y caídas, el modo en que me embarre de alguna clase de esperma defectuoso, sobre el modo de fornicar de los gatos y perros, la locura de Astoria Greengrass y de sus ridículos gatos calenturientos como adolescentes, las muchas humillaciones que he sufrido a causa del profesor Snape, el modo en fui aislado de todos por mi horrible olor a menstruación, café y pescado.

Nadie parecía muy interesado en lo que estaba contando, pero no me importo yo iba a contar todo lo de este día horrible, así fuera el dato más insignificante, como lo es mi existencia en sus vidas.

Les hable sobre lo del trasero de Malfoy y mis serias sospechas de que fue Hermione la que lo hizo, eso si pareció importarles, ya al final les hable de los niños y mis ideas idiotas de que pensé que eran mis hijos y de ese gatos de eyaculación precoz.

Los profesores se quedaron mirándose entre sí, luego el techo, el suelo y la pelea de los niños, en la cual estaban las porras que les daban Draco y Ron a Harry y Hermione respectivamente. Esa serie de miradas y movimientos siguió al menos durante 5 minutos, hasta que el director Dumbledore hablo:

-Creo que es bastante obvio como resolver este problemas, me extraña que aun no lo hayas resuelto Severus-le dijo con toda la tranquilidad del mundo mientras levantaba las galletas del suelo

-Pues entonces dígame su estúpida solución prófugo de la calaca- grito con la cara roja como una berenjena, ¿Las berenjenas son rojas?, Bah, da igual, el chiste es que Snape estaba como loco- Vamos ilumíneme

-Oh, Severus, eres un gran actor, sino fuera por esa nariz, triunfarías en el cine

Snape se puso a lanzar insultos en voz baja mientras no dejaba de matar con la mirada al director Dumbledore, hasta que la profesora Sprout hablo:

-¿Cuál es la solución Albus?

EL profesor Dumbledore se levanto con una mirada firme y penetrante, ¡Eso no se oyó bien!

-La única forma de solucionar esto es- nos miro a todos los presentes a los ojos- Averiguar quién le toco el trasero al señor Malfoy

¿Cómo no se me ocurrió?

Los profesores Snape y McGonagall parecían querer echarle cera caliente al director, en cambio Slughorn y Sprout parecían muy contentos. Flitwick se unió a la pelea de los niños.

-Tienes razón Albus, hay que averiguarlo- exclamo la profesora de Herbologia con una gran sonrisa

-Genio, eres un verdadero genio- dijo Slughorn uniéndose a la charla

Los 3 se unieron en una charla sobre las investigaciones necesarias para resolver ese enigma tan confuso y místico.

-¿Estas bromeando Albus?- le grito McGonagall furiosa

-Claro que no Minerva, pienso que es la mejor solución

-Eres un imbécil- la profesora al parecer se volvió demente, empezó a dar vueltas por el despacho- Y ustedes malditos gordos, ¿Acaso no piensan?, ¿Cómo carajos nos va a servir el hecho de saber quien le toco el culo al señor Malfoy?

El director Dumbledore ya no la escuchaba, estaba lamiendo el suelo de las migajas de galletas, en cambio el par de obesos la miraban como si la quisieran matar.

Tenía que reír.

 

 

 

Y eso hice

 

 

 

Y mi vida se hizo mierda

 

 

-Usted señor Longbottom se encargara de cuidar a sus compañeros mientras duren en ese estado, ¿Me escucho?

-¿Por qué yo?

-Según lo que conto, usted es el único culpable

-¿No era Ron?

-Cállese

-Pero yo…

-He dicho que se calle

Me cruce de brazos y me le quedo mirando esperando que en cualquier momento estallara en llamas o viniera Davy Jones a matarla con una hacha, pero nada de eso paso.

-Maldita violadora de ancianos- susurre lo más bajo que pude, ya que no quería atraer la atención de la profesora McGonagall, la cual ahora insultaba a Snape y su falta de vista, ya que lo acusaba de ser un cerdo daltónico.

-¿Qué ha dicho Longbottom?- ¡La puta me ha oído!, pero si yo lo he susurrado bien bajo

-Nada….nada de nada

-¿Seguro?- dijo entrecerrando sus ojos y acercándose a mi burbuja de espacio personal y vital

Cuando estaba a punto de responder, la pelea de los niños y el profesor Flitwick paro en seguida y todos se pusieron de pie, creo que está de más decir que tuve un horrible presentimiento.

-Maldita - dijo Hermione acomodándose sus cabellos, los cuales se habían enredado

-Violadora- le siguió Ron sobándose su pierna

-De- incluso de niño Draco es muy astuto

-Ancianos- termino Harry sonriendo como toda una ternurita

-Maldita violadora de ancianos- le grito el profesor Flitwick, se veía muy enojado con ella y parecía tan gracioso, ¡Necesito tocarlo!

La profesora de transformaciones giro su mirada hacia el pequeño y diminuto profesor, se enrojeció en 3 segundos y grito a todo pulmón.

-Maldito engendro de Blanca nieves, es mejor que te apartes de mi vista o te parto las piernas y te prendo fuego, ¿Escuchaste?

EL muy cobarde no necesito que se lo repitieran y salió corriendo de ahí, como lo envidio.

-Señor Longbottom usted le explicara a los padres de sus compañeros todos esto y será el encargado de cuidarlos y pobre de usted si alguien se entera que son sus compañeros- me toco el cuello con sus manso huesudas y temblorosas- Y si eso paso, le pasara lo que le dije al profesor Flitwick

-Le juro que los cuidare

-Largo

-Claro

Me acerque a los chicos y cargo en mis brazos a Harry y Hermione que eran los más lastimaditos, ¿Cómo me llevaba a Draco y Ron?, me les quede viendo esperando que ellos me ayudaran, y lo hicieron, se abrazaron a mis piernas.

Me despedí de todos y baje con cuidado las escaleras del despacho, lo último que pude oír fueron los gritos de Slughorn diciéndole al director que si no iba a hacer algo y la corta respuesta de este:

-Minerva ya organizo todo

Notas finales:

Ahora un poema, y muy dulce, porque soy como un flan.

 

Oh, dulces y sexys comentarios ¿Donde estan que no los leo?

Me entretienen y me haces poner esa sonrisota idiota nivel 12

12 como el numero de veces que me viole a Draco y Harry con el poder de mi mente

 

Oh, Comentarios dulces y queridos, ¿Donde coño estan?


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