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Celos. por BlingBligDiva

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Notas del fanfic:

Se me ocurrio recien, no tenia clases entonces decidi escibir. Dejen rewiew ah y se dividira en dos partes o tal vez en tres. Maas tarde subo la otra parte. Besos : )

Notas del capitulo:

Mas tarde subo la otra parte, espero que les guste <3

¿Cómo le decía que le molestaba que lo miraran de esa manera? Porque, mierda que le molestaba. Todas se le colgaban como garrapatas mientras el solo podía mirarlo de lejos. Porque claro, ser su “mejor amigo” era una tortura, tenía que fingir que su sonrisa no lo volvía loco, que su enorme altura lo molestaba, cuando en realidad le encantaba y ayudaba ser pequeñito para cuando te abrazaba . Era estúpido decir que no le molestaba que todas estén enteradas de lo atractivo que era.

Dios lo odiaba. Lo odiaba por tener a todas locas por él, pero por sobre todas las cosas, lo odiaba por hacerlo amarlo tanto. Odiaba que le encantara su sonrisa, su grave y profunda voz, sus grandes ojos, su altura, su cuerpo fuerte, en nada parecido al suyo. Estaba tan enamorado de él, por eso lo odiaba. Era increíble  verlo jugar al básquet, verlo en el gimnasio con su perfecto cuerpo  sudado y las gotas de sudor cayendo por su cuello… De solo pensarlo lograba tener una erección.

Lo peor es que sabía perfectamente que era perfectamente heterosexual, se acostaba con chicas diferentes todos los malditos días y él no podía hacer nada. Dios, te odio Park ChanYeol.

-¡Baekhyun!- al oír mi nombre voltee y lo vi con su perfecta sonrisa y su perfecto cuerpo... Basta Baekhyun, para.

-Hey, ¿Dónde estabas?- le pregunte sonriendo.

-Acabo de levantarme, odio venir a esta mierda- dijo riendo. Ambos odiábamos la escuela, aunque creo que el mas.

-Yo igual- reí- Dios hace frio- me fije en él, tenía los primeros botones de su camisa desabrochada, el inconsciente, ¿no se daba cuenta que afuera estaba prácticamente nevando?- Dios, ChanYeol- acerque mis manos a su camisa y abroche los botones- Vas a enfermarte y sabes muy bien que cada vez que te enfermas tienes fiebre y tengo que cuidarte- dije dándole un piquecito en la nariz. Rio.

-Quiero que me cuides, mi Bacon- amaba que me dijera con sus apodos raros, me los puso cuando éramos niños y no me canso de ellos-Ugh, tengo hambre, no desayune nada- se sobo el estómago.

-Como siempre, sales apurado y no comes nada. Tienes que comer- le di una mirada de desaprobación.

-¡No es mi culpa! ¿A quién se le ocurre tener clases a las ocho de la mañana? Es inhumano- reí ante su exageración.

-Dirías lo mismo si entráramos a la una de la tarde- asintió.

-Es demasiado para nosotros, nos matan- puse mis ojos en blanco.

-Siempre tan exagerado. Ya traje tu desayuno- de mi mochila saque una bolsa de cartón. Era algo típico, no desayunaba, yo le traía algo de comer y comíamos juntos. Mi actitud protectora era ridícula, cuidaba demasiado de él, al igual que el conmigo. Era mutuo.

-¡Upi! ¿Sabías que te quiero?- me dio un beso en la mejilla, provocando que mi corazón diera saltitos.

-Si claro, si no te traía nada me odiarías- rio.

-Siempre me traes algo, jamás podría odiarte- bufe, tenía razón. Incluso cuando me enojaba con él, lo seguía cuidando.

- Como sea. Toma, ponte esto- le di una bufanda que había traído de mi departamento, sabiendo que ChanYeol no traería nada para protegerse del frio.

-Gracias-sonrió y se la puso- ¿Comemos?- asentí. Nos sentamos en una de las bancas cerca de nuestros casilleros. ChanYeol saco los sándwiches y las cajitas de jugo multifruta, nuestros favoritos.

-Te ves adorable- señalo mi pequeño gorrito de lana con orejitas de pandita, mi bufanda que me tapaba casi media cara y mis guantes de colores. Por alguna estúpida razón no pude controlar que mis mejillas se tiñeran de un color carmín. Cosa que hizo que se riera y me picara una mequilla- Ese gorrito te lo compre yo, siempre lo usas- me miro dándole un mordisco a su sándwich.

- Sabes que es mi favorito y... ¿esta rico?- señale el sándwich.

-Pollo con mostaza, mi favorito- sonrió- Siempre te salen deliciosos, cocinas muy bien.

-La diferencia entre tú y yo-rio-

-No es tan malo cocinar pésimo, porque así tú puedes cuidarme y darme de comer para que no me muera.

-Si no fuera por mí comerías ramen instantáneo- reímos. Era cierto, él era pésimo cocinero. Eso provocaba que prácticamente el viva en mi pequeño departamento. Tenía el suyo, pero decía que le gustaba el mío. Tal vez porque estaba limpio, aunque todos los días me encontraba con ropa, libros, etcétera de cosas de ChanYeol por toda mi casa.

Pasaron unos diez minutos y el timbre de las clases sonó. Ambos fuimos a nuestras clases. Bien, ahora la tortura si empezaba: todas las estúpidas zorras se le pegarían a MI ChanYeol como estúpidas garrapatas. Sin ofender a las garrapatas, claro.

-¿De nuevo eso?- LuHan hizo una mueca de asco, sentándose junto a mi.- ¿Por qué no lo dejan en paz?- miro la escena de las perras con Mi ChanYeol.

- Es lo típico- suspire.

-Sabes lo que pienso de eso, las odio, no te pongas así. Estoy seguro que él está enamorado de ti- reí con ironía.

-Es lo que todos le dicen a los amigos sobre la persona que le gusta.

-Ahí la diferencia- me señalo- a ti no te gusta, tú estás enamorado.

-Puede que más que eso- afirme.

-Me pasa lo mismo con Sehun. Tenemos la suerte de ser todos amigos porque si no sería un problema.

-No es lo mismo, tú tienes a Sehun, yo no tengo a ChanYeol.

-Sabes que pasara, yo decía lo mismo con Sehun y míranos. Se me declaro y yo a el- sonrió como enamorado. No pude sentir envidia, pero envidia de la sana, estaba feliz por el pero ¿Porque yo no podía estar así con ChanYeol? Eso era injusto.

Nos pasamos la clase entera hablando de cosas triviales sin prestar atención a la clase. Normalmente lo hacía, pero no podía dejar de mirar la escena de las zorras con ChanYeol. LuHan lo noto y me distrajo hablándome de las últimas ocurrencias de Lay. Era demasiado distraído, eso me puso de buen humor.

En el receso me dirigí con mis amigos.

-Hey, ahí viene la diva- dijo Tao riéndose.

-Hola panda- lo salude.

-¿Cómo estás?- me pregunto Kyungsoo con una sonrisa.

-Bien- mentí.

-¿Dónde está los demás?- pregunto Tao.

Como por arte de magia aparecieron todos: Kris, Chen, Kai, Sehun, ChanYeol y Suho.

-Hola a todos- dijeron a coro. Todos formaban parte del equipo de futbol de la escuela, algo por lo que yo nunca calificaría.

-Hey- a mi lado aparecieron Xiumin, Lay y Luhan.

- Ven cariño siéntate aquí- dijo Chen señalando a Xiumin. Todos sabíamos que eran novios, al igual que Kris y Tao, Kyungsoo y Kai. Lo bueno de todo era que nadie les decía nada, todos en la escuela lo veían venir. Se llevaban demasiado bien como para que no terminaran siendo novios.

-¿Y mi almuerzo?- dijo Lay mirando para todos lados.

-Lay, te dije que lo pidieras- dijo Xiumin.

-Ah, pensé que lo habías pedido – dijo rascándose la nuca. Todos reímos, Lay era así. Se olvidaba todo, excepto de Suho. Pero no quería aceptarlo, al igual que Suho.

-Yo voy por tu almuerzo- Suho se levantó. Kai y ChanYeol le sonrieron pícaramente a Suho.

-¿Qué? Solo voy por su almuerzo- dijo nerviosamente.

-Sí, claro- dijo Xiumin.

-Siéntate Lay, no te vayas a perder como la otra vez- Lay asintió. Todos cuidábamos de él, era demasiado distraído, se había perdido en la cafetería más de una vez y había acabado en el baño de mujeres. Era como un niño pequeño del que todos debíamos cuidar.

-¿Y cómo les fue en el partido?- pregunto Tao.

-Anotamos siete goles- dijo orgullosamente Kai.

-Chen dos, Kai dos y ChanYeol tres.- dijo Kris.

-¡Bien!- choque las manos con ChanYeol.

-Merezco algo por eso, te dedique cada uno de mis goles- me miro sonriendo, reí.

-Yo también quiero que me dediquen un gol- dijo Lay haciendo un puchero, si hubiera estado Suho, se hubiera muerto de ternura.

-Yo te dedico uno Lay- dijo Chen. Uno para mi Xiumin y otro para ti.

-Gracias- sonrió Lay- ¿Un gol con forma de unicornio?

-Si, por supuesto- dijo Chen- Todo es con forma de unicornio para ti- reímos.

-Llegue- apareció Suho con una bandeja.

-Gracias- Lay le dio un beso en su mejilla, ambos se sonrojaron graciosamente.

-Aww, consíganse un cuarto, los inmortales no deben ver estas escenas- Xiumin le pego en el brazo.

-Déjalos en paz.

-No puedo, molestar es lo que mejor se hacer- dijo ganándose otro golpe de Xiumin, todos reímos.

-Esto es un asco- dijo Sehun empujando su bandeja con una mueca de asco.

-Ja, las ventajas de que alguien te prepare la comida, es no tener que probar comida de escuela- se burló ChanYeol.

-Cierra la boca Yoda, Baekhyun te prepara la comida, tú no sabes siquiera hervir agua- reímos.

-Por eso, mi Bacon me prepara la comida- me lanzo un beso. Dios, no hagas eso, haces que muera de ternura.

-Tranquilo mi Sehunnie- dijo Luhan- yo te traje algo- le dio un sándwich envuelto en papel film y un juguito de naranja.

-Aww gracias mi Lulú, por eso te amo- Sehun se paró y le dio un beso a Luhan.

-Awwwww, que asco- dijo Chen fingiendo vomitar.

-Que exagerado tú te pones peor con tu novio de pelo rosa- dijo Luhan.

-Y tu novio el que tiene el pelo de colores, es aún peor-dijo señalando a Sehun.

-Se aman, es lo que hacen los enamorados- dije comiendo mi sándwich.

-Exacto- dijo D.O.

En la clase de Historia, el profesor me había mandado a buscar un par de libros a la biblioteca. Iba yendo por el pasillo cuando siento un golpe en la espalda.

-Mira mocoso- una chica rubia, labios rojos y exceso de maquillaje. Su remera que mostraba casi todos sus atributos, me dijo una cosa: Yuang so. Perseguía a ChanYeol todo el tiempo, otra razón para odiarla.

-Quítate- dije quitando su mando de mi hombro.

-Aléjate de ChanYeol, él es MIO ¿Oíste?- dijo con su asquerosa voz chillona.

-ChanYeol no es tuyo- dije molesto.

-¿Quieres apostar?-rio cínicamente- Acéptalo es jamás se fijaría en ti. Eres demasiado pequeño, flacucho y te pintas los ojos- rio- te queda patético. Además él quiere que te alejes de él, te odia, no te soporta-

Por alguna razón  mis ojos se aguaron, tenía razón. Jamás sentiría algo por mí que no sea amistad. Era un idiota intentado algo que jamás pasaría.

-De-déjame- intente decir mientras lagrimas recorrían mis mejillas.

-Ja, lloras como un marica- rio- Aléjate de él o tú y to, tendremos problemas- dijo alejándose de mí. Nunca había podido defenderme, siempre era lo mismo. Dependía demasiado de ChanYeol, él siempre me defendía y golpeaba al que se atreviera a ofenderme, así fue como nos conocimos.

*FLASHBACK*

-Míralo, es un tonto- decían unos niños de siete y ocho años que golpeaban un pequeño cuerpito en el suelo que omitía sollozos y se cubría su pequeña carita con sus manitos.

-Por-por favor déjenme- logro decir pero claramente no lo oyeron.

-Pareces una chica- se burlaban- Deberías usar una falda niñita-reían.

-¡Hey!- dijo un niño alto y delgado con el ceño fruncido- Déjenlo en paz- se acercó al pequeño cuerpito pero lo empujaron.

-¡Vete! No te metas- el alto lo empujo logrando que cayera al piso.

-Oh, seguramente es su novia, tu novia es un marica- dijo un niño, mientras pateaba a niño que estaba en el suelo.

-¡Basta!- grito el alto, les pego a un par de niños, los demás salieron corriendo al ver el enojo del alto.

-¿Estas bien?- se acercó al pequeño cuerpito que temblaba y lloraba. Su corazoncito dio un vuelvo al verlo tan indefenso .Le aparto las manitos de su carita para poder verlo. Se formó una pequeña sonrisa en su cara al ver al mayor.- No te hare daño.

-¿Quién eres?- dijo el pequeño asustado, aun temblando.

-Soy ChanYeol… ¿Y tú?- dijo aun sonriendo.

-Baekhyun-dijo tímido.

-No llores más- le limpio las lágrimas con sus manitos- Los tocinos no lloran.

-¿Tocinos?- dijo confundido.

-Si, Baekhyun parece un tocino- el pequeño rio ante la ocurrencia del alto.

-¡Si! Te hice reír... ¿Quieres ser mi amigo?- dijo ayudándolo a levantarse.

-Sí...- dijo con las mejillas sonrojadas, eso lo hace más tierno, pensó ChanYeol.

*FIN FLASHBACK*

Así había empezado todo, y si se ponía a pensar se daba cuenta de que nada había cambiado. ChanYeol seguía cuidándolo como el primer día.

Su corazón se oprimió, se limpió las lágrimas y fue a la biblioteca.

Cuando volvía con los libros, decidió ir al baño al ver si su delineador no se había corrido, aunque era aprueba de agua, pero quería cerciorarse.

Se miró al espejo y no, no se había corrido. Pero al darse vuelta, una escena que le paro el corazón. Oyó como los pedazos de su corazón se rompían y las lágrimas salían.

Notas finales:

Besos! Dejen rewiew


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