Eché mi cabeza sobre la mesa, la clase de filosofía me estaba resultando demasiada aburrida. ¿Por qué la profesora lo hacía más pesada de lo que ya era? Solo debía de pensar que después de esto era recreo, y podría disfrutar tranquilamente junto a mis amigos. Mi hermano me estaría esperando enfrente de la puerta de mi clase junto a su mejor amigo, como siempre. Cuando el timbre sonó la profesora seguía explicando, puesto que ella había dicho que solo iba a tardas unos míseros segundos para terminar de explicar lo que quedaba de tema. Mis ojos rodaron al escuchar sus palabras, pero tan solo un segundo después de que acabara de hablar todos nos levantamos corriendo y salimos por la puerta. Yo esperé un poco para no ser aplastado por mis compañeros, como ninguno se portaba muy bien conmigo pues creo que hubieran aprovechado bien esa situación. Al mirar hacia el pasillo encontré a mi hermano Yoongi junto a su mejor amigo, como antes había dicho.
-¡Kook! Que bien que hayas salido ya- Me da un fuerte abrazo, yo no hago nada ante esto.
-La profesora de filosofía siempre hace lo mismo, a nosotros también nos dejaba encerrados en la clase hasta que le daba la gana- El rubio sonríe recordando.
-Namjoon, esa profesora nunca ha estado muy bien- Yoongi le da la razón a su amigo.
-Hyung, no creo que sea muy buena idea hablar de ella teniéndola aquí al lado.
-Tranquilo, no creo que se entere, siempre ha sido un poco sorda- La mujer nos echó una mirada llena de curiosidad, lo más seguro que se estaría imaginando de lo que estaríamos hablando. Ella perfectamente sabe que Namjoon nunca ha sido muy buen alumno. Suspiré y comencé a andar hacia la cafetería, los otros nos deberían estar esperando allí.
-Yoongi hyung, ¿Te vienes hoy a jugar al baloncesto? Había quedado con unos amigos y les he hablado de ti, ellos están emocionados por conocerte, y quieren jugar un partido contra uno de los mejores.
-Pues claro que iré, les mostraré quién es el mejor jugando al baloncesto.
-Hemos quedado a las ocho, es que ellos dicen que es cuando mejor se juega,y también después podríamos ir a cenar o a un karaoke.
-Hyung, me prometiste que te quedarías conmigo hoy para echar unas partidas a la xbox- Fruncí el ceño. Mi hermano siempre hacía lo mismo, cuando me prometía algo y después aparecía Namjoon y le preguntaba si tenía algo ese día, él contestaba que no y se iba dejándome a mi solo. Aunque después no paraba de pedirme disculpas, y yo le tenía que perdonar porque me compraba galletas.
-Lo siento Kook, te prometo que te compraré galletitas si me perdonas- Suspiro resignado.
-Vale... pero porque son galletas- Él sonríe mientras me coge de mis mejillas fuertemente- ¡Ah! Eso duele- Aparto sus manos de mi.
-Eres tan adorable.
-Nuestro maknae siempre es tan adorable- Taehyung, uno de mis amigos saltó hacia mi y me dio un abrazo. ¿Por qué tenía que pasar por esto todos los días? Estábamos justamente enfrente de la puerta de la cafetería, cuando creía que iba a poder comer algo y aparece V, como todos le llamamos.
-Jeongguk ha sido atacado dos veces en tan solo unos minutos- Namjoon se reía de mi mientras apoyaba su brazo sobre el hombro de Yoongi.
-Hyung, podrías ayudarme- Puse un puchero aunque él no me hizo caso. Aparté a Taehyung y entré en la cafetería antes de que fuese atacado de nuevo. Fui hacia donde estaban los alimentos y cogí algo para comer, Yoongi me acompañó mientras Namjoon y Taehyung hablaban unos pasos detrás de nosotros- Ahora me quedaré solo en casa.
-¡Es verdad! No me acordaba que papá y mamá salían hoy con unos amigos.
-Y no volverán hasta más tarde.
-Lo peor es que me dijeron que me quedase cuidando de ti, pero... ya he quedado, me debes de entender- Le echo una pequeña mirada y sigo buscando alguna comida que me llamase más la atención.
-¿Cómo quieres que entienda que te guste Namjoon?- Él abre los ojos lo más que puede.
-Y-yo no he... ¿Qué?
-Hyung, seré más pequeño que tú, pero se cuando a alguien le gusta otra persona. Por lo menos a ti se te nota mucho- El traga duro y aparta su mirada de mi.
-Encontraré alguna solución para que yo pueda salir tranquilo- Sonrío.
-Suerte- Me voy hacia la mesa donde está otro de nuestros compañeros, dejando a mi hermano muy avergonzado- Hola Hoseok hyung.
-Hey, hola kook- Sonríe mientras me señala al asiento que estaba a su lado para que me sentara junto a él- ¿Taehyung no ha venido contigo?
-Estaba con Namjoon hablando, iban a pedir ahora.
-Ya le he dicho muchas veces que venga a mi clase cuando termine, pero le da un poco de vergüenza tener que esperar fuera. Dice que los chicos de mi clase le miran raro.
-No está acostumbrado.
-Pero él debe de estar conmigo todo el tiempo que pueda.
-Eres posesivo con él.
-Solo dejo claro lo que es mio.
-Eso suena más posesivo aún.
-Hoseok- Los dos miramos a Yoongi que venía con un fuerte brillo en sus ojos- Dime que hoy a las ocho no tienes nada- Namjoon y Taehyung se sentaron frente a nosotros dos con unas miradas de curiosos.
-Lo siento, pero sí que tengo algo- Mira a V mientras sonríe.
-¿Por qué me miras a mi? Y... ¿Por qué me miras así?- Oh, no quiero saberlo. Ya es demasiada información.
-Joder, ¿Es que no voy a tener a nadie para que pueda cuidar de mi hermanito?
-¿Y Jin?- Namjoon lleva algo de comida a su boca después de preguntar.
-Él tampoco puede, Kidoh le ha obligado a que le acompañe a una fiesta. Él no quería pero...
-¿Es que ellos dos no se llevaban mal?
-Eso creía yo, pero parece ser que algo está pasando entre ellos. Lo peor es que Jin no me lo quiere contar.
-Taehyung, tú como sabes tanto sobre eso.
-Hyung, él es muy cercano a mi, y siempre me ha contado todo, pero esto se lo tiene bien callado- V mira a Hoseok, este solo se le queda mirando unos segundos con intensidad.
-Te recuerdo de quién eres- Taehyung extiendo la mano hacia su novio.
-Chicos, os recuerdo que aquí hay un menor, y menos aún si es mi hermano- Ellos ponen un puchero cada uno. Sonreí ante tal escena.
-Como veo solo faltaba yo- El recién llegado se rasca la nuca y sonríe- Siento la tardanza.
-Jimin, la verdad es que ya no me acordaba de ti- Hoseok dice aquellas palabras sin vacilación. Y se le notaba serio.
-Hyung, no comencéis con esas tonterías- Frunce el ceño y se sienta en la única silla que sobraba, que era la que estaba al otro lado de Hoseok.
-Como eres tan bajito pensaba que estabas aquí y por eso no te veíamos- Jimin me echa una mirada fulminante y luego me sonríe.
-Kookie, no seas tan gracioso- Él fue el que me puso ese mote, y desde ese día no para de llamarme así.
-¡Jimin! Eres mi único salvador- Yoongi le mira con desesperación- ¿Tienes algo que hacer hoy a las ocho?
-Hyung, lo siento pero tú no eres mi tipo.
-No te voy a pedir una cita. Yo ya he quedado con Namjoon- Jimin le mira con curiosidad- Para jugar- Su cara cambió a una con picardía- Al baloncesto- Jimin sonríe ante el nerviosismo que tenía mi hermano. Parece ser que él también sabe algo sobre esto.
-Vale, lo comprendo. Pues no, pensaba en quedarme en mi casa a jugar a algo, no se. ¿Y por qué me preguntas?
-Es por si te podías quedar con mi hermano, es que mis padres hoy habían quedado con unos amigos, y yo he quedado con Namjoon para jugar al baloncesto- Jimin se aguanta la risa al escuchar esto último- Se me había olvidado que mis padres se iban y he quedado, así que no puedo dejar a mi hermano solo, pero tampoco puedo decirle ahora que no a Namjoon.
-Hyung, que si no puedes no pasa nada. Entiendo que es tu hermano y necesita compañía.
-No importa- Yoongi interrumpe a Namjoon- Jimin se va a encargar de él, ¿verdad?
-Pues yo tenía ganas de pasar la noche tranquilo- Mi hermano le mira furioso y el más bajo se ríe- No, no me importa.
-Pues bien, todos felices- Yoongi se levanta al escuchar el timbre que señala la vuelta a clase. Hoseok se levanta y coge la mano de Taehyung para luego despedirse y salir de allí. Yoongi y Namjoon se despiden rápidamente porque tenían un examen y no podían llegar tarde. Yo iba a disponerme a salir, pero noté como alguien pasó sus brazos por mi cintura y dejó apoyar su cabeza sobre mi hombro. Al girar un poco la cabeza vi que se trataba de Jimin.
-Kookie, ya nos veremos luego. No puedo esperar a que sean ya las ocho- Parpadeé muchas veces y dejé de notar el contacto, después vi delante mía como se iba alejando de mi. Iba a pasar una noche muy extraña, o esa era mi intuición. Al acabar las clases mi hermano me esperaba fuera con Namjoon, él tenía suerte de que su amigo viviese cerca de nosotros, porque sino no podría ir todos los días con nosotros. Y mi hermano cuanto más tiempo estuviese con él mejor. Lo que no entiendo es porque no se creyó que yo supiera que le gustaba. A las seis mis padres se despidieron de nosotros, pusieron unas normas para que fuéramos responsables. Aunque mi hermano ya iba a romper una de ellas. Dos horas más tarde llamaron a la puerta, cuando fui a abrirla me encontré a Namjoon hablando con Jimin. Los dos estaban muy felices y no paraban de reírse.
-Hola Kook, ¿Cómo estás?- El rubio me sonríe mientras se quita las gafas de sol que llevaba puesta para poder mirarme mejor.
-Hola hyung, estoy bien.
-Kookie, ¿A mi no me saludas?- Le echo una simple mirada a Jimin.
-Hola enano- Pone un puchero y me da un pequeño empujón, Namjoon se ríe ante nuestro comportamiento.
-Kook, ¿Ya han llegado?
-Sí, hyung- Les dejo espacio para que pasen, ellos pasan y se quedan enfrente de las escaleras.
-Yoongi, no tardes mucho, los demás ya deben de estar esperándonos.
-Ya bajo.
-Hyung- Namjoon me mira- Si vais después a un restaurante tener cuidado a cual vais, mis padres habían ido a uno pero no me acuerdo como se llamaba.
-Tranquilo, yo tendré buena vista, y si los veo nos iremos de allí lo más rápido que podamos- Yoongi baja las escaleras con una mochila sobre su espalda.
-Kook, luego de jugar al baloncesto iré a casa de Namjoon para ducharme, así que no vendré hasta un poco más tarde. No se si me pasaré por casa para ver como te encuentras.
-No te preocupes hyung, yo me ocuparé de él- Sonríe.
-Yoongi, Jimin tiene razón, solo tienes que relajarte. Jeongguk sabe cuidarse por si solo, y encima tiene a este renacuajo- El más bajo le da un empujón a Namjoon provocando que se tambalee.
-Juro que te mataré si le haces algo a mi hermano- Jimin asintió ante la amenaza del mayor.
-Bueno, es hora de irnos.
-Kook, ten cuidado, y después te traeré galletas por no poder cumplir mi promesa- Sonrío y él me da un abrazo.
-Hyung, suerte con Namjoon, y no te pongas nervioso- Susurro para que los otros dos no se enterasen.
-No pienso confesarle nada, puesto que no hay nada- Me aparto de él y ruedo los ojos- Adiós pequeño- Me despido de los dos y suspiro cuando cierro la puerta detrás de ellos. Jimin se acercó a mi y puso su cabeza sobre mi hombro.
-Kookie, ¿Qué te apetece hacer?
-No se- comienzo a andar y provoco que el mayor casi se cayera al suelo al no tener apoyo- Yo tenía planeado jugar con mi hermano a los videojuegos, pero como me ha abandonado...
-¿Quieres que juegue yo contigo? Será muy divertido- Sale corriendo hacia el salón. Yo le sigo con pasos lentos, no tenía ganas de jugar con Jimin, yo quería jugar con Yoongi.
-Jimin, no tengo muchas ganas de jugar.
-¡Oh! Tienes Call of duty ¡Quiero jugar!- Me quedo mirando como sus ojos se iluminan mientras miraba el disco que tenía en sus manos.
-Pero ese juego solo es de un jugador.
-¿No decías que no tenías ganas?- Me había escuchado.
-Bueno, pues ahora sí tengo- Él me sonríe tiernamente, aunque yo estaba confundido. Llevaba un tiempo que se comportaba raro conmigo.
-Tierno- Dice en voz baja, pero se podía oír perfectamente- ¿Entonces quieres jugar a un partido de fútbol? Seguro que te gano.
-No te lo crees ni tú- Me acerco hacia donde él se encuentra, que estaba sentado en el suelo para poder ver mejor la televisión, me siento junto a él, y cojo el mando de la consola.
-¿Por qué nunca me llamas hyung?- Me sorprendo por sus repentinas palabras- Siempre me fijo que a todos les dices hyung, pero a mi nunca me lo has dicho. No has hecho ni el intento.
-Tampoco es para tanto. Si te llamara hyung ¿Cambiaría algo?- Jimin se queda pensativo.
-Pero por lo menos se que me tienes respeto- Pone un puchero.
-Empecemos a jugar antes de que se me quiten las ganas- Meto el juego y comienzo a prepararlo. Durante todo ese momento notaba como Jimin tenía su mirada posada en mi. Me sentía acosado.
-¿Tú hermano sabe cuando va ha confesarle a Namjoon sus sentimientos?- Le echo un pequeño vistazo de reojo y sigo buscando cuál equipo podría coger para meterle a Jimin la mayor paliza de su vida.
-Él no me ha dicho nada- Escojo un equipo y espero a que el enano escoja el suyo.
-Él es demasiado estúpido a veces.
-Yoongi ya ha sufrido por Namjoon- El más bajo aparta la mirada de la pantalla para llevarle hacia mi.
-¿Qué es lo que ha pasado?
-Mi hermano lleva enamorado de su amigo desde hace ya mucho tiempo, por lo menos desde cuando yo me he dado cuenta. Ellos son amigos desde que eran muy pequeños, es difícil que no haya empezado a sentir algo por él. Namjoon se comporta muy bien con mi hermano, nos cuida a ambos. Cuando se han ido haciendo más mayores Namjoon ha comenzado a tener novias, algún que otro royo, ya sabes, lo típico de un chico como él. Yoongi sufría al verle con otra persona que no era él, pero nunca ha querido reconocerlo. No me lo ha dicho nunca, pero se le nota. Se encerraba en su cuarto, solo salía para comer algo y luego volvía, aunque a veces no tenía ni hambre. Yo solo deseo que estén juntos, que Namjoon pueda aceptar los sentimientos de mi hermano. Odio tener que verle sufrir de esta manera.
-Tú eres su hermano y puedes ver lo que ocurre mejor que otra persona, pero yo también he podido notarlo. He notado a Yoongi distante algunos días.
-Lo único que le animaba era estar junto a Namjoon y saber que no estaba con otra persona que no era él.
-Yo nunca haría lo que Namjoon le está haciendo a Yoongi. Bueno, se nota desde lejos que tu hermano tiene algún sentimiento hacia él. Debería de haber notado algo, si yo estuviese en su lugar lo notaría- Un silencio se creó en la sala. Noté como Jimin movía la cabeza de un lado a otro y volvía la mirada hacia la pantalla- Ahora juguemos, quiero saborear la victoria- Río irónicamente ante sus palabras y le doy al botón para comenzar el partido. Durante la primera parte los goles estaban igualados, pero en la segunda iba ganando yo por dos más. Formé una sonrisa, ganaría a Jimin y con mucho orgullo. Jimin comenzó a hacer movimientos para entretenerme y que no pueda marcar otro gol, aunque mis movimientos en el campo eran imparables- Kookie, deja de hacer trampas.
-Pero si no estoy haciendo nada- Le doy un empujón y me rio al ver como se cae de lado.
-Eso no me lo esperaba- Frunce el ceño para luego devolverme el empujón y comenzar a reírse- Perdón.
-Enano, pero si al final eres tú el que hace trampas- Sonrío mientras me incorporo.
-¡Yah! Deja de llamarme así. Eso es muy cruel- Le enseño la lengua y sigo jugando con movimientos especiales como antes estaba haciendo. Mi mente solo estaba pendiente al juego. Tenía que ganar y pasárselo por la cara a Jimin.
-Kookie- Aunque el mayor me susurró muy cerca de mi oído y provocó que temblara por ello, luego me mordió el lóbulo de la oreja. Yo dejé el mando sobre el suelo y me aparté de él. Jimin comenzó a reírse por mi acto- Tan mono- Puso una mano sobre mi pierna y comenzó a subir peligrosamente hacia mis muslos. Yo no pude aguantar más y empecé a echarme hacia atrás para alejarme lo más lejos de él- No tengas miedo.
-¿Q-qué es... lo que intentas hacer?- Mi voz comenzó a sonar entrecortada. Me odié por ello.
-¿Estás tenso?- Me lleva hacia una pared, me disponía a levantarme pero él me lo impidió, y hizo que me apoyara sobre la pared- He tenido a más personas en esta situación, aunque nunca había deseado esto tanto- Sus ojos expresaban un sentimiento que no podía explicar.
-A-apártate- Intenté apartarlo, pero fue imposible. Jimin se inclinó más cerca de mi, su cara estaba peligrosamente demasiado cerca de la mía.
-Voy ha hacer que me llames hyung siempre- Fruncí el ceño al escuchar eso.
-¿Estás haciendo esto para que te llame hyung? ¿Es una broma?- Posa su cabeza en mi hombro y acerca su cara a mi cuello para después olerlo
-No es del todo correcto, aunque si lo quieres ver de esa manera, sí- Mi cuerpo tembló al notar su cálido aliento.
-Jimin... Si Yoongi se entera de esto él...- Me callo al sentir como el mayor comenzó a posar besos sobre mi cuello.
-¿Y quién se lo va ha decir?
-Yo- Mi respiración comenzó a acelerarse. Jimin me dio palmadas en las piernas para que las abriera, involuntariamente le hice caso y él se acomodó entre el hueco de mis piernas.
-¿Alguna vez has hecho esto?
-¿Qué?- Abrí los ojos lo más que pude y empecé a moverme para salir de ahí. Jimin me cogió de los hombros para que dejara de hacer movimientos.
-Jeongguk- Era una de las pocas veces que me llamaba así- Relájate, te va a gustar.
-Pero yo no quiero esto- Solté un gemido al sentir un pequeño mordisco en una parte muy sensible de mi cuello.
-Si te está gustando- Me da una lamida y levanta la cabeza para mirarme a los ojos.
-No es así- Aparto la mirada de él. En estos momentos no me atrevía, aunque su mirada me volvía nervioso.
-Kookie, mírame.
-Eres demasiado bajito.
-¿Y eso a que viene ahora?- Pude notar como él fruncía el ceño. Yo solté una pequeña risa y me enfrenté a él- Eres tan hermoso.
-Cursi- Él sonríe.
-Tú provocas que me vuelva cursi- Le doy un empujón y hago que se caiga al suelo de espalda- Me has cogido cuando estaba distraído, eso no vale- Se queda tirado en el suelo mientras infla los mofletes. Yo suspiro y pongo las manos en el suelo para levantarme, pero una mano me coge de mi muñeca derecha para que no me levantara. Miré a Jimin, él tenía una sonrisa en su rostro mientras se incorporaba como antes, y se posiciona en el mismo lugar. Mi cuerpo se volvió rígido al notar la cercanía de su cuerpo- ¿A dónde crees que vas?
-Es mi casa, puedo hacer lo que quiera.
-Pero esta noche yo soy el que manda aquí, ya que te estoy cuidando.
-No soy ningún niño pequeño como mi hermano cree- Jimin se ríe y pone sus manos sobre mis muslos. Un escalofrío pasa por todo mi cuerpo.
-Kookie, aún no eres mayor de edad como para andar diciendo que no eres pequeño. Cuando cumplas los dieciocho podrás decir eso- Sube y baja sus manos lentamente por mis muslos, haciendo pequeños círculos cuando pasa muy cerca de mi zona privada. Al principio me dejo llevar pero después le doy un golpe a sus manos.
-Pues cuando te cases conmigo podremos tener relaciones sexuales- Él vuelve a reírse.
-Que católico ha sonado eso- Debía de decir cualquier cosa para salir de esa situación, aunque veo que a Jimin no le importaba eso- ¿Sabes? Yo entiendo perfectamente como se siente tu hermano- Me sentía confuso ante sus palabras- Es duro estar enamorado de una persona y tener miedo a confesarte por culpa del rechazo- Jimin mira hacia sus manos, que estas las estaba volviendo a poner sobre mis piernas, aunque esta vez no hacía ningún movimiento- Pensar que la otra persona te ama es solo una mera ilusión. Pero ¿Y si es cierto? Los dos nos estamos haciendo la misma pregunta. Pero nos da miedo de aceptar todo esto. Y de nuevo nos vuelve a venir la misma pregunta que siempre nos acecha. ¿Por qué tenía que ser un chico? Se ve muy mal el amor entre personas del mismo sexo. Pero nosotros no tenemos culpa de esto, es nuestro corazón el que nos hace caer en esta tentación... Jeongguk...- Levanta la cabeza y me mira a los ojos mientras se va acercando lentamente hacia mi cara- Ámame aunque solo sea un día- Mis ojos se agrandaron al notar sus labios sobre los míos. Mi cuerpo comenzó a temblar, y mi respiración y corazón iban más rápido de lo normal. No hice ningún movimiento, solo dejé que Jimin me besara sin oponerme a ello. Al poco tiempo él se separó de mi y empezó a darme besos por la cara, primero por las mejillas, por la frente, luego cerca de mis labios, y por último por mi cuello- Kookie, ¿puedes cumplir mi deseo?
-Jimin...- Cierro los ojos al sentir su mano entrando por debajo de mi camiseta mientras seguía esparciendo besos- ¿Desde cuándo tú...?- No puedo terminar mi pregunta puesto que él no me dejaba. Sus labios sobre mi piel eran tan suaves.
-Desde el primer momento en que te vi. Cuando esos chicos se estaban metiendo contigo algo ocurrió en mi interior y provocó que te ayudara de esos gamberros. Y luego Yoongi nos presentó y comenzaron a formarse sentimientos desconocidos en mi- Entreabrí los ojos y los posé sobre él. Mordí mi labio inferior, cogí del filo de mi camiseta y la levanté hasta sacarla de mi y tirarla a algún lugar. Jimin se sorprendió por mi acción, aunque luego se quedó mirándome con unos ojos llenos de lujuria- Te he deseado siempre- Pone sus manos sobre mi abdomen y comienza a hacer caricias placenteras. Suelto un gemido al sentir más cerca el cuerpo de Jimin. Poso mis manos sobre sus hombros y hago pequeños círculos sobre ellos- Jeongguk, aquí hace mucha calor, ¿no?- Sonríe mientras empieza a morder mi lóbulo.
-Sí...- Vuelvo a gemir al sentir como Jimin me levanta del suelo y me sienta sobre su regazo. Mis manos pasan hasta sus brazos y comienzo a tocar sus músculos.
-¿Quieres jugar un rato?- Lleva sus manos hacia mis pantalones y estira del elástico provocando que este me hiciese la piel rojiza por el lugar del impacto- Pero tranquilo, ahora al juego que quiero jugar no es de un solo jugador- Hago una pequeña, y casi innotable, sonrisa al escuchar su comentario. Vuelvo a gemir al sentir como dio un pequeño pellizco a mi pezón. Era tan doloroso y placentero a la vez- ¿Eres virgen?- Siento mis mejillas arder al escuchar su pregunta.
-Un poco- Jimin se ríe, y luego levanta sus caderas para poder hacer más contacto conmigo. Nuestras entrepiernas se rozan y provocan que cada uno de nosotros soltase un sonoro gemido.
-... Eso quiere decir que sí- Levanto la cabeza, y apreto mis uñas contra la carne de sus hombros al sentir otro movimiento más en mi pelvis. El más bajo da una lamida a mi cuello mientras sigue dando embestidas contra mi cuerpo. Mi móvil, que está en el bolsillo de mis pantalones, empieza a sonar. Jimin sigue con lo suyo y impide que pueda cogerlo. Yo no paraba de gemir y mis manos me temblaban como para poder coger el aparato con facilidad. El móvil para de sonar. Mi curiosidad por esa llamada no se iba. ¿Y si fuese mi hermano? ¿O mis padres? Aunque el mayor estuviera dándome placer esos pensamientos no se iban de mi cabeza, y no lograba relajarme. Noto como él me agarra dulcemente por mi nuca y lleva mi cabeza hasta que estuviese a la distancia de la mía. Deja su acción anterior para luego hacer que me acueste sobre el suelo, posicionándose él a horcajadas de mi. Acerca su cara peligrosamente hacia la mía, pero mi móvil comenzó a sonar cuando se disponía a besarme. O eso era lo que yo pensaba. Él suspiró con pesadez y yo cogí mi móvil antes de que él volviera a prohibirme que lo hiciera. Se sentó sobre mi cadera mientras me miraba con duda, ya que quería saber de quién se trataba.
-¡Kook! ¿Por qué no me lo has cogido antes?- La voz de Yoongi sonaba por el otro lado, aunque se le notaba extraño.
-Estaba... jugando- Jimin sonríe mientras lleva sus manos por mi abdomen. Yo me muerdo el labio inferior para no gemir.
-¿De verdad? Te noto raro, ¿estás bien?
-Mejor que nunca- Susurra el mayor.
-¿Ese era Jimin? ¿Qué es lo que ha dicho? No lo he podido escuchar muy bien.
-Ahora mismo estábamos echando una partida de fútbol- Estaba nervioso ante el tacto del otro, pero por el momento me podía controlar. Aunque si alguien me estuviese viendo perfectamente se podía notar que yo estaba sufriendo.
-Entonces ¿estás bien de verdad?
-Sí, hyung- Jimin infla los mofletes y me da un pequeño toque en mi entrepierna. Me da un espasmo por su repentino tacto y suelto un pequeño gemido. Tapo mi boca rápidamente.
-¿Kook? ¿Te ha pasado algo?- Iba a hablar pero Jimin cogió mi móvil y se lo acercó a la oreja.
-Hyung, ahora mismo nos íbamos a disponer a comer, por eso Kookie ha gemido por resignación. Lo que pasa que no se atreve a decirte que vamos a comer porque le da pena tener que cortar tu llamada.
-Ah, mi pequeño es tan inocente y mono.
-Yo no soy nada de eso- Me quejo. Yo no quiero que me traten como a un niño pequeño. Jimin sonríe.
-Espero que te lo estés pasando muy bien con Namjoon.
-¿Qué...- Solo pude escuchar unas simples palabras de mi hermano antes de que el mayor cortara la llamada.
-Dejémosles intimidad- Jimin aleja el móvil de nuestra posición y vuelve a agacharse sobre mi piel para pasar sus labios por todo mi pecho. Mi respiración se aceleraba cada vez más y comencé a arañar el suelo, aunque esto no impedía que me acelerara más. Jimin empieza a jugar con mis pezones mientras tarareaba una canción. Las vibraciones que producía eran insoportables, provocaban que gimiera más aún. Pero por lo menos yo no era el único que se estaba excitando con todo esto. El mayor soltaba pequeños suspiros al oírme y al sentir su entrepierna rozar contra uno de mis muslos. Jimin se alejó de mi para poder desabrochar mis pantalones y quitármelos sin ninguna dificultad. Se lamió los labios al quedarse mirando mi entrepierna por encima de mis calzoncillos. Yo giré la cabeza hacia uno de los lados para no hacerle frente. Mi mente en esos momentos estaba luchando internamente contra el placer que sentía. No estaba muy seguro de si de verdad quería hacer esto. Nunca lo había hecho, y menos aún había llegado a pensar que sería con un chico.
-N....no estoy seguro de esto- Jimin comenzó a tocar mi entrepierna por encima del calzoncillo mientras se acercaba peligrosamente a mi oído.
-Si te lo estás pasando muy bien. Solo tienes que escucharte. Además, tus gemidos provocan que tenga más ganas de quitarte la virginidad ahora mismo, haciendo que grites tanto mi nombre para que todo el mundo se entere de quién eres. Y no solo eso, haré que mañana no puedas ni andar- Da un mordisco a mi oreja para luego empezar a lamer esa zona y después dirigirse hacia mi cuello. Yo no sabía como podía seguir teniendo conciencia con todo lo que me estaba haciendo. En un ápice de razón puse mis manos sobre su pecho para poder apartarlo de mi, aunque este no me hacía ningún caso. Sus movimientos seguían inversos en mi, pero yo no quería que esto sucediera. Me sentía utilizado.
-Jimin... Para... Hyung- No supe cuándo y porque esa palabra salió de mis labios. Solo se que hizo que Jimin parara y se quedara mirándome con dolor en sus ojos. Mi mirada divagó por la suya y después me aparté de su cuerpo, yéndome unos centímetros lejos de él para sentirme a salvo.
-Pensé que tú...
-Quería complacerte, pero...- Jimin niega y fuerza una sonrisa en su rostro. Yo no sabía cómo podía intentar ser feliz en estos momentos.
-No digas nada más. No tienes porque hacerlo si no quieres. Yo no te obligo- Se levanta del suelo y lleva su atención hacia la televisión- Como no me puedo ir, puesto que prometí a tu hermano que no te dejaría solo, pues me iré a la cocina para no molestarte. No creo que quieras verme ahora la cara después de lo que te acabo de hacer. Y por mi culpa no voy a hacer que te vayas a tu habitación- Algo dentro de mi me decía que debía de levantarme y hacer que no se fuese de mi lado, pero no sabía si tenía que hacerle caso. El mayor entró en la cocina y cerró la puerta tras él. Mi corazón empezó a dolerme al ver tal imagen.
-¿Por qué haces esto más difícil de lo que ya es?- Susurro para que el otro no se enterase. No se que son estos sentimientos que estoy sintiendo. No se si debería de llamarlo amor. Jimin es un buen chico y no quiero herirle de esta manera. Él se merece a otra persona mejor que yo. Que de verdad le ame, o que por lo menos le sepa decir lo que siente por él. Yo siempre le he visto como mi hyung, que no lo diría, aunque es diferente a los demás. Llamaron a mi móvil y fui corriendo a cogerlo. No tenía muchas ganas en estos momentos pero necesitaba algo con lo que distraerme ahora mismo- ¿Si?
-¡Kook! ¿Cómo está mi pequeño Kook?- ¿Qué era lo que quería ahora Taehyung?
-Bien.
-Mentira, puedo notar en tu voz algo diferente. ¿Es que te ha ocurrido algo?
-Nada, tan solo es que no me encuentro muy bien. Pero puedo seguir viviendo.
-No me des estos sustos. Pídele a Jimin que te cuide, ya que yo ahora no puedo. Hoseok no quiere que me vaya de su lado.
-Oye, hyung. Necesito que me ayudes en una duda que tengo- No sabía si era correcto lo que estaba haciendo.
-Dime Baby JungKook- No me gustaba el mote que me habían puesto entre él, Hoseok y Jimin. Yo no era un niño pequeño.
-¿Cómo supiste que estabas enamorado de Hoseok?
-El principio es algo que no deben de escuchar los menores- Escuché unos murmullos de alguien en el fondo de la llamada- Tranquilo, casi lo tengo.
-¿De qué estáis hablando?
-De nada, de nada... Iba a contarte como supe que estaba enamorado de Hoseok, así que atiende y escucha. Sabes cuando estás enamorado de alguien cuando lo extrañas a todas horas y cuentas los minutos que te faltan para verle. Cuando no puedes sacarlo de tu mente en ningún momento y cada segundo está en tu pensamiento. Cuando una mirada, una caricia, un abrazo, un beso, etc., te hacen bailar mariposas en el estómago. Cuando te late el corazón a mil por hora cada vez que le ves o estás cerca de él. Cuando su felicidad es la tuya. Cuando no existe nadie más por la calle. Cuando tus prioridades han cambiado y dejas a tus amigos o a tu familia por estar con él. Cuando a cada cosa que ves, escuchas o hueles, te recuerda a él. Cuando cualquier excusa es buena para comprarle lo que le gusta. Cuando te sientes la persona más feliz de la tierra y sonríes y lloras sin ninguna razón aparente. Cuando el tiempo a su lado pasa volando y siempre quieres más, volviéndote adicto a su contacto.
-Vale, creo que ya me he hecho a una idea.
-¿Y se puedes saber por qué quieres saberlo?
-Nada más era por mera intriga- Suspiro y dirijo mi mirada hacia la cocina, aunque no conseguía ver ningún movimiento en ella.
-¿Tienes otra pregunta más?
-Si lo que quiere es hablar de sexo dejámelo a mi. Yo se mucho sobre eso- Podía escuchar a Hoseok hablar fuerte tras el móvil- ¿Crees que tengo razón, Taehyung?
-Hyung, ya es suficiente, tengo demasiada información ya- Antes de colgar la llamada podía escuchar como Hoseok seguía hablando sobre sus intimidades. Suspiro al saber que me he salvado. Aunque mis pasos se dirigen rápidamente hacia la cocina al escuchar un fuerte estruendo- ¿Qué ha pasado?- Miro alrededor y encuentro como un plato estaba partido a pedazos en el suelo. Mi mirada se dirigió hacia Jimin al ver aquello. Él estaba con los ojos abiertos mientras miraba el estruendo que había sucedido.
-Perdón... no estaba atento- Me acerqué hacia el plato y comencé a recoger los pedazos con cuidado de no cortarme.
-No pasa nada- Él se agachó y empezó a ayudarme también, pero me alarmé al ver como su mano derecha comenzaba a sangrar. Dejé los pedazos y cogí rápidamente su mano- Estás sangrando.
-No es nada- Intentó apartarla, aunque yo no se lo permití- Es solo un poco de sangre en el dedo- Me dio un espasmo al notar su otra mano sobre la mía, ya que intentaba apartarse de mi.
-Se te puede infectar.
-No hace falta que te preocupes por mi- Me sonrió. Comencé a pensar en todo lo que me dijo Taehyung, y eso no me ayudaba mucho en lo que en esos momentos estaba sintiendo.
-Jimin- Escapó un mísero susurro de mis labios. Él rompió el contacto y se levantó.
-¿Sí?- Apreté los puños y me arrepentí de estar sintiendo todo esto. Me levanté y salí de la habitación para dirigirme al servicio sin decirle ni una sola palabra más. Cogí el botiquín y volví notando como mi cara comenzaba a arder al verle frente al fregadero lavándose la mano, dejándome ver su cuerpo por detrás. Moví la cabeza de un lado a otro al darme cuenta que había dejado mi mirada posada en su trasero. ¿Por qué me ocurre esto? ¿Es que algo de lo que me ha dicho Taehyung me ha surgido efecto? No entiendo nada- Kookie- Me concentré en él- ¿Te sucede algo?- Más quisiera saber yo lo que me ocurre.
-Traigo el botiquín, déjame que te vea eso- Se sentó en la mesa de la cocina y esperó a que me acercara a él. Puse el botiquín cerca y saqué agua oxigenada para comenzar a echarle un poco en su dedo- ¿Te duele?
-Tranquilo, he pasado por cosas peores- Me fijé que su mirada estaba posada sobre su dedo herido. Suspiré y posé mi mano sobre su barbilla- No te sientas mal por mis sentimientos. Te pido perdón por haber tenido que enamorarme de ti- Mi corazón comenzó a bombear más rápido al notar como lentamente me iba acercando más a su rostro- No me lo hagas más difícil- Cerré la distancia que nos separaba, y comencé a mover lentamente mis labios sobre los suyos. Noté como miles de mariposas comenzaban a volar por mi estómago, después de que Taehyung me explicara todo supe lo que significaba este sentimiento. Al principio él estaba paralizado, y al separarnos sus ojos se notaban que estaban como aguados, ya que parecía que iba a llorar- Jeongguk, yo te amo. ¿Por qué juegas con mis sentimientos?- Volví a cortar la distancia entre nosotros y puse mis brazos alrededor de su cuello para atraerlo más. Jimin me cogió por mis muslos y me levantó del suelo para hacer que me sentara en su regazo. Nos volvimos a separar, pero esta vez fue por la falta de oxígeno- No aguanto más, aún sigo excitado por lo de antes, aunque si sigo no podré parar y me haré aún más daño. Y no solo a mi, también te haré daño a ti. Eso es lo que menos quiero que ocurra en este mundo- Muevo mis caderas sobre las suyas y provoco que nuestros miembros choquen entre si.
-..Hazlo- Todo esto me estaba haciendo ver que no solo sentía cariño por Jimin, había sentimientos más profundos hacia él. Y quería comprobarlo. Él trago duro y me puso en el suelo para que él se pudiera levantar. Luego me dio la vuelta y provocó que mis manos las apoyara sobre la mesa quedando de espaldas hacia él. Mi parte trasera estaba ahora mismo a su disposición.
-Te dolerá- Bajó mis pantalones junto a mis boxers- Pero luego lo disfrutarás- Se apoyó contra mi y comenzó a darme lamidas por mi nuca y alrededor de la oreja mientras me acercaba tres dedos hacia mi boca.
-Tu herida.
-Solo chupa, después acabaré de curarme. Aunque creo que esto es el mejor relajante para este dolor- Mordí mi labio inferior al notar una mordida en mi hombro que ahora había dejado expuesto. Lamí sus dedos mientras Jimin jugaba con cada parte de mi cuerpo, todo esto me estaba excitando demasiado. Cuando acabé llevó sus dedos hacia mi entrada y introdujo uno sin que me diera cuenta. Esto era nuevo para mi, y se notaba extraño en mi interior, aunque no era doloroso. Luego vino el segundo, comenzaba a ser extraño pero era pasable. El tercero fue peor, ya que notaba más presión sobre mi entrada y produjo que soltara un leve gritito de dolor. Más tarde solo movía mis caderas contra sus dedos y Jimin disfrutaba viéndome de esa manera. Mis gemidos inundaban la casa, y más duro fue cuando tocó algo dentro de mi que hizo que gimiera más aún.
-Ji...Jimin... ah... yo... joder.
-Tranquilo- Lamió mi oreja y sacó sus dedos de mi, yo me quejé de ello pero me callé al notar como hacía un movimiento, no me giré puesto que no quería saber lo que estaba haciendo, pero me di una idea al escuchar una cremallera. Ahora algo más grande empujando sobre mi entrada. Cerré mis ojos con fuerza mientras Jimin empujaba más y más su miembro. Pensaba que en cualquier momento me partiría en dos, es tan doloroso este dolor. Notó como estaba tenso debajo suya y llevó su mano hacia mi miembro para que no le prestara mucha atención al dolor. Eso me relajó un poco, y más cuando noté que había entrado completamente. Arañé la mesa mientras Jimin seguía sin moverse del sitio. A los minutos comencé a mover mis caderas y el mayor dio un gemido por ello- Se paciente- Me dio una embestida y mi vista se fue por unos segundos. Eso había sido maravilloso. Nunca pensé que hacer esto gustara tanto. Empezó a dar embestidas lentas, pero a los minutos comenzaron a ser desenfrenadas. Mis caderas las movía en contra suya para hacer las embestidas más fuertes- Da..date la vuelta... Quiero verte- Paró para salir de mi. Yo le hice caso y me giré. Me mordí mi labio al ver como su cara reflejaba el estado de lujuria y pasión. Sus manos me recorrieron como si fuera de porcelana y volvió a entrar en mi, apoyándome un poco sobre la mesa para levantar mis piernas y dejarle más fácil la entrada- Eres tan estrecho- Repartió besos sobre todo mi abdomen, después de quitarme la camiseta, y sus manos comenzaron a recorrerme las piernas y muslos, tocando muy cerca de mi entrepierna. Empezó con duras embestidas, tal y como las dejó antes y llevó su mano sobre mi miembro para prestarle atención, ya que lo necesitaba con urgencia. Mi boca estaba entreabierta y posé mis manos sobre la mesa para estar más cómodo. Jimin tenía una de sus manos sobre mi cadera para hacer las embestidas más profundas- Mírame- Llevé mi mirada hacia la suya y se acercó con ansias hacia mi rostro para comenzar a besarlo con dulzura. Todo esto estaba fuera de mis sentidos, me estaba embistiendo lo más duro que podía, pero aún así seguía siendo dulce. Cuando pasó cerca de mis labios doblé un poco la cabeza para que estos se conectaran. Llevé una de mis manos hacia su nuca y comencé a besarlo lo más apasionado que podía. Nuestras lenguas chocaban entre si, y gemidos salían por parte de cada uno. Tocó algo dentro de mi que hizo que me separara de esos dulces labios, y comencé a gemir más aún. Jimin aumentó más las embestidas y comenzó a masturbarme más rápido.
-Jimin... Jimin... Ah... sí... más.
-Kookie... ¿Te gusta aquí?
-Sí... joder... más- No se cuánto más duramos de esa manera pero un intenso orgasmo vino y provocó que me corriera sobre nuestros abdomen- Ji... Jimin hyung- Él vino un poco más tarde. Noté como su semen estaba por toda mi entrada.
-Jeongguk, te amo- Me bajó de la mesa con cuidado, pero me sostuvo para que no me cayera. Me sentía muy débil y dolorido. Se agachó hasta llegar a mi abdomen y comenzó a lamerme- Necesitas que te limpie.
-Jimin... yo puedo solo- Intenté separarme, me sentía avergonzado por lo que estaba haciendo. Él se levantó para estar a mi altura. Solté una pequeña risa al ver que él era un poco más bajo que yo, siempre me había metido con él por eso. Pero sabía que era con cariño. Me acordé que estaba desnudo y intenté taparme mi parte íntima, aunque Jimin ya había visto demasiado. Él solo sonrió por mi estúpida acción.
-Jeongguk, entenderé que ahora te vayas y no me quieras volver a ver más en toda tu vida. Te he obligado a que hicieses esto. Me siento asqueroso.
-He hablado antes con Taehyung- Mi respiración ya estaba mejorando, aunque aún soltaba suspiros por todo lo que había pasado. Jimin me miraba curioso. Comienzo a recoger mi ropa para ponérmela. Mis nervios me estaban controlando y no sabía que decirle a Jimin.
-¿Y qué te ha dicho?- Él aún seguía desnudo, aunque cogió sus boxers al ver que me sentía avergonzado viéndolo así.
-Nada interesante...- No me atrevía ha decirle nada. Creo que le amo, pero no lo sabía con claridad.
-Kookie, haré la cena y luego te la llevo- Cambió de tema. Él sabía que no quería hablar sobre eso.
-Termina de curarte el dedo... y ponte algo de ropa- Iba a salir pero me detuve en la puerta-... será siempre.
-¿Qué?- Jimin me mira con confusión. Yo trago duro y después suspiro.
-Lo que me pediste antes cuando estábamos en el salón- Él seguía mirándome con los mismos ojos-... que te amara aunque solo fuese un día.
-¿Qué es lo que me intentas decir?- Podía notar una sonrisa formándose en sus labios. Frunzo el ceño y me muerdo el labio inferior.
-No lo voy a repetir- Él infla los mofletes-... que te amaré siempre- Llevo mi mirada hacia otro lado al notar como mis mejillas comenzaban a arder.
-Kookie, que tierno eres- Va corriendo hacia a mi para darme un abrazo, yo me dejo llevar. Veo que aún no se había acabado de vestir y mis mejillas arden más- Hoseok me llamó antes y hizo que Taehyung hablara contigo. Ellos lo tenían ya planeado, aunque yo no sabía nada- Jimin se ríe mientras sigue abrazándome.
-¿Entonces hicieron que Namjoon quedara con mi hermano para quedarme contigo a solas?
-No se- Se aleja un poco de mi y me planta un pequeño beso en los labios. De pronto noto como mi móvil vibra y al desbloquearlo veo una foto que me impactó de inmediato, aunque sonreí a los pocos segundos. Jimin estaba a mi lado y sonrió también. En esa foto salían Namjoon y Yoongi besándose en la puerta de una discoteca, ellos se veían muy felices. Vi quién me envió la foto y comprobé que era Taehyung. Esta venía junto a un mensaje. “Hoseok y yo somos el nuevo cupido ^^” Y luego un mensaje de Hoseok. “ Os prestaré un libro sobre posturas sexuales. Seguro que Jimin lo aceptará” Abrí los ojos fuertemente y me sonrojé a más no poder cerrando el móvil rápidamente- ¿Quién era?
-Mi madre preguntando cómo estábamos- No estoy muy seguro de que me creyera, aunque me libraba de que viera el mensaje. Pero no creo que Hoseok se calle lo de ese libro cuando vea a Jimin.