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Los labios de Minnho recorren la suave y cálida piel de un nervioso Taemin, quien simplemente se deja hacer entre leves gemidos, observando las acciones de su hyung a través del espejo.
Las manos poco expertas del más alto comienzan a vagar lentamente por el cuerpo ajeno mientras sube poco a poco la ligera camiseta del menor, acelerando la respiración de éste último con cada movimiento y roce de sus dedos.
El silencio de la habitación únicamente se ve interrumpido por los sonidos placenteros de Taemin y sus agitadas respiraciones.
Minho continúa repartiendo besos por el cuello del menor tras haber terminado por sacar su camiseta sin pudor alguno, mientras las manos del pequeño bailarín recorren los muslos del moreno, aun sin darse la vuelta y siendo guiado por Minho, tratando de mostrar cuánto disfruta del momento y lo nervioso que se encuentra por cómo sucedieron las cosas.
Tan sólo cinco minutos antes se encontraban ensayando la nueva coreografía, ya que como cada vez que se preparaban para un comeback Taemin ayudaba un poco más a su hyung, y justo después de que Minho colocara sus manos a los costados de Taemin, sobre sus caderas, la atmósfera cambió sorpresivamente y los llevó a esto: ambos tumbados en el frío piso de la sala de ensayos, con Minho sobre Taemin repartiendo besos por todo el cuerpo del menor.
No hacen falta palabras en este momento, sino actos, y es justo lo que Minho lleva a cabo sin dudar.
Sus labios se encuentran en un necesitado beso mientras Minho dirige sus manos al estorboso pantalón del menor, deshaciéndose de él y rápidamente procediendo a retirar el suyo hasta las rodillas, lo justo para lo que tiene planeado.
Tras contemplar unos segundos el cuerpo desnudo de Taemin y bajo la atenta mirada de él, lleva su pulgar hasta sus labios comenzando a lubricarlo con su saliva sin romper el contacto visual, con Taemin mordiendo su labio inferior tras descubrir lo que el moreno planea, cerrando los ojos y una vez más poniéndose a merced del mas alto.
La mano de Minho se dirige a la estrecha entrada de Tae, robándole un grito ahogado al momento de adentrar su dedo lubricado en ella y recompensándolo con un suave beso en los labios mientras continúa entrando y saliendo del menor, ahora también con el dedo índice.
Los gemidos del menor es lo único que resuena por la vacía habitación, opacando el leve ruido de los labios de Minho repartiendo besos por su cuello y pecho. Sin embargo, los leves gemidos se detienen por un momento para dar paso a uno más audible, tras la entrada del duro y muy erecto miembro de Minho en Taemin, quien clava las uñas en los hombros del mayor por la intrusión repentina y por el cambio tan notorio de tamaño.
Los labios de Minho se encuentra una vez más con los del bailarín antes de comenzar a moverse muy lentamente, dando paso a que el pequeño se acostumbre un poco y comience a disfrutar del momento, lo cual sucede en pocos minutos y lleva al menor a mover sus caderas en busca de mayor velocidad, dedicándole una mirada tierna y deseosa a Minho.
Los gemidos de ambos son sonoros, pero no les importa ser escuchados, únicamente se encuentran concentrados en el momento y en ese vaivén tan placentero.
El necesitado miembro de Taemin, tras estar atrapado entre los dos cuerpos en continuo roce llega a su liberación, dejándose venir sobre el abdomen del menor y manchando un poco el suelo de la sala, mientras que Minho continúa con las estocadas, llegando al climax en cuestión de segundos, dejándose desplomar sobre el pequeño bailarín para después depositar un tierno y fugaz beso en los labios ajenos...
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-Minho...hyung?- Sus miradas se encontraron en el reflejo del espejo de la sala de ensayos, regresando a Minho a la realidad.- Puedes relajar el agarre, no debes sotenerme tan fuerte en este paso, no me iré.
Una vez más Minho había fantaseado con hacer suyo a Taemin, como cada ocasión que le ayudaba a mejorar en las coreografías, que en realidad sólo era un pretexto del más alto para estar más tiempo con el maknae.
Tal vez algún día sus fantasías se hicieran realidad.