–Ji… ¡ME CASO!
Wow, wow, wow, alto ahí ¿Qué es lo que estaba escuchando? SeungRi, mi mejor amigo, el tipo de hombre que aunque solo vea a una escoba con falda se va detrás de ella, ese mismo SeungRi se va a…se va a ¿casar?
– ¿Qué? – fue lo único coherente que salió de mi boca.
–JI ¡Me voy a casar!
–Espera Ri… ¿De qué me perdí?
–No seas ridículo tu sabes que mi relación con Taeyang iba en serio ¿de qué te sorprende?
Taeyang ¿en serio? Wow, eso no me lo esperaba. Taeyang era un amigo de mi amigo Dae que, cierto día que andaba comiendo en un Subway con SeungRi nos encontramos con ellos y Dae nos presento a su amigo que al instante tuvo un flechazo con SeungRi, Taeyang es muy buena persona, que si lo hubiera conocido antes que a SeungRi sería mi mejor amigo, aun así sus 2 años de noviazgo no los percibí, es decir, SeungRi siempre es alegre, pero desde que está con Taeyang no solo es alegría, es felicidad. Valla estoy feliz por los dos, a pesar de mi felicidad ¿Qué no podía decírmelo más tranquilo? ¿No simplemente llegar con la noticia?
–Ya lo sé Ri, ya lo sé… lo que pregunto es que cuando pasó todo eso del compromiso. No todos los días mi mejor amigo me dice de un día para otro que se va a casar.
–Ji, a mí también me tomó por sorpresa, pero sé que él es el indicado. Y quise decirte a ti primero.
Se notaba la alegría de mi amigo en sus ojos y él tendría todo mi apoyo. Pero, por favor hay que ser realistas SeungRi me va a pedir algo, lo conozco lo suficiente que ya sé cuáles son sus chantajes.
– ¿Y bien? ¿Qué tienes planeado?
–Anímate, lo dices como resignado.
–Y lo estoy, sé que planeas algo, y sé que estoy en tus planes.
–Jaja tranquilo. Solo quiero que me acompañes a mi despedida de soltero. Dae se encargó de organizarla.
–Está bien, iré – dije con un tono de esfuerzo.
–Sé que te encantan las fiestas, tu solo diviértete y lúcete pero no más que yo ¿entendiste?
–Claro claro, es tu fiesta, ni siquiera notarás mi presencia
Si solo se trataba de ir a la fiesta está bien, llevarán a chicas con unos senos gigantes y finas cinturas y nada más me la pasaría genial.
Ya había llegado el día bueno en realidad ayer fue cuando Ri me dio la noticia así que no fue mucho tiempo. Me había arreglado, ¡DIOS que me veía hermoso! Pero SeungRi era el principal así que me cambie a un atuendo más simple a mi gusto.
La dirección que me dio era de una casa, por un momento pensé en que iba a ser en un club algo ruidoso pero al recordar que fue Dae el que lo organizo empecé a pensar de que la mencionada despedida terminaría siendo una reunión con pizza y por ser SeungRi habría películas porno.
La dirección me decía que estaba en el lugar, pero el lugar me decía que no estaba en la dirección, es decir, esta mansión no puede ser la dirección.
– ¿Ji? –responde SeungRi en la línea del teléfono.
–Sabes…decir habla con Seung Hyun o decir un Hola por teléfono es más normal.
–No solo que pensé que estabas ya aquí en la casa.
–Si bueno… ¿Dónde es?
– ¿El qué?
–La fiesta.
– ¿No estás aquí?
–Si pregunto donde es la fiesta lo más seguro es que este bailando en el medio de la casa.
–Jajaja ¿Dónde estás?
–Ni idea. Solo sé que estoy fuera de una mansión.
–Ahí es.
–Pero…
–Ya bájate del carro Ji ya te vi –Y colgó
Salí y vi a Ri que salió a recibirme ¿De dónde demonios saco Dae el dinero para pagar esto?
–Bienvenido Ji –me dice Ri para jalarme hacia dentro de la casa/mansión.
En definitiva no me lo esperaba. Hay que dejarle a Dae hacer fiestas más seguido. Esta fiesta era obviamente algo que no te esperas de él tranquilo, inocente y un poco ingenuo Dae. Había alcohol por todos lados chicas hermosas que claramente cabían en la descripción 90, 60,90 en vestidos que no dejaban nada a la imaginación e inclusive había hombres que WOW perfectos era la palabra que los describía. Desde que conocí a Ri mi amigo 100% de mente abierta comencé a decir más abiertamente lo que pensaba y, en mi situación, soy bisexual.
Empecé a caminar dentro de la casa en definitiva era la fiesta del año no me sorprendería ver a celebridades aquí
–Ji voy a saludar a más gente no puedo estar toda la fiesta contigo así que solo diviértete.
Dicho esto me dejo y se fue, perdiéndose entre las personas. No es como si hubiera tantas como en un club, pero si había bastantitas. Tomé una copa de lo que al parecer era whisky y me dediqué a ver el lugar. Cada esquina y cada objeto que estaba en esta mansión casi villa eran descritos en una palabra LUJO. Estaba entre lo moderno y lo clásico pero todo con lujo, casi parecía que las cosas hablaban y me decían si me tocas tendrás que pagar por haberme molestado. Fue en ese momento cuando deje el whisky, ya me había pasado de copas, no recordaba cuantas había tomado mientras veía la casa pero me di cuenta que tomé suficiente como para creer que las cosas hablaban, una risa tonta se me formó en los labios ¿Qué clase de pensamientos tontos tengo?
– ¡Ji! ¿Qué te parece la fiesta?
– ¿Dae?
– ¡Por supuesto que sí! ¿Quién más? Pero…Ji, estoy a tu derecha. – sin darme cuenta no lo estaba viendo al parecer yo hablaba con la pared.
–Perdóname Dae. Creo que me pasé con el whisky
–Por lo menos no estás tan borracho como para hablar decente.
–Dae ¿Cómo conseguiste esta mansión?
– ¿La casa? Es de un amigo…Seung Hyun, te lo he querido presentar pero las cosas simplemente no se dan.
–No te preocupes Dae.
–Es más, me supongo que está por aquí, esta es su casa. Te lo presentaré pero…primero vamos al baño necesitas componerte pareces vagabundo.
–Dae solo me lo vas a presentar no vas a hacerme que se case conmigo.
–Lo digo por tu salud babo, no te ves bien.
– ¿A quién le dices babo? Soy tu Hyung exijo respeto.
–Ok hyung, solo vamos al baño y después me regañas.
–Yo puedo ir solito. Donde están.
–Subiendo las escaleras a la izquierda.
No dije más ¿Qué se creía para tratarme como mi mama? Subí las escaleras ¿Qué el lujo no se terminaba? Pero llegando a la cima de ellas se me olvido donde me dijo Dae que estaba el baño. Derecha o izquierda…me supongo que a la derecha, los baños siempre están al fondo a la derecha. Convencido de mi mismo seguí hacia la derecha. Llegue a una puerta blanca y entré ahí, pero, lo extraño era que no parecía un baño, parecía una habitación normal, pero seguí caminando hasta encontrarme con otra puerta, ese si era un baño, demasiado grande para decir verdad pero era un baño. Lavé mi rostro y al verme frente al espejo de cristal del baño vi que Dae tenía razón me veía enfermo ¿Cómo me pudieron hacer esto solo unas copas de whisky?
Al salir del baño me encuentro con una cama, que no había visto al entrar a la habitación. Me recordó a mi cama, mi dulce y suave cama que me esperaba en casa así que decidí acostarme ¿No le hacía mal a nadie cierto? Solo me recostaba un momento hasta sentirme mejor. Y en el momento en que me acuesto en la cama algo o más bien alguien se remueva a mi lado, pero eso no fue todo, se removió y se giró y me abrazó. Tratando de moverlo, intentaba removerme pero este se aferraba más a mí.
–Unos minutos más Ji, solo unos minutos más.
¿Ji? ¿Esta persona sabía mi nombre? ¡¿Cómo rayos?! A pesar de sus intentos por pegarme más a él; porque si, era un él, me aparte de él, o bueno, lo intenté.
–Ji siempre te alejas y me tengo que despertar, hoy simplemente quédate conmigo, quiero seguir soñando.
–Mira, no sé quien seas o que te propones ni mucho menos se como sabes mi nombre pero te pido que me sueltes.
Estaba asustado y mucho. ¡Qué borrachera ni que nada! Asustado, punto. La persona que estaba a mi lado me soltó para luego ponerse encima de mí.
–No te creo, si no estuviera soñando ¿Qué haces aquí Ji Yong?
– ¿Ah? Y-yo…yo solo
– ¿Tu solo qué Ji?
–Solo quería entrar al baño y me equivoque de habitación.
–Sabes algo. No te creo.
–Ni siquiera se tu nombre ¿Cómo voy a querer estar contigo en la cama?
–Así que es eso, te quieres acostar conmigo. Es extraño ya que normalmente sueño con que estoy acostado contigo mientras me acaricias el cabello diciéndome “Seung…Hyunie despierta” pero si quieres que nos acostemos pues…yo no me niego.
¿Qué carajo le pasaba a este tipo? ¿Sueña conmigo? ¿Quiere tener sexo conmigo? Y como si me leyera la mente, respondiendo a todas mis preguntas aun encima de mí empieza a tocar mi miembro con su mano, mientras que con la otra empieza a subir mi camiseta.
–O-oye ¿Dónde estás tocando?
– ¿Quieres hacer esto más despacio? Como quieras.
Y sin dejarme protestar sus labios sellaron los míos comenzando un masaje que al principio rechazaba pero ¡Dios! Si que era bueno besando. Con maestría introdujo su lengua en mi boca mientras que sus manos, que nunca estuvieron quietas empezaron a quitarme la camiseta. Se separó de mis labios y bajo dejando marcas en todo mi cuello hasta mi clavícula hasta llegar a mis pezones. No tenía idea de cuan erógena era esa parte en mi pero bueno, sentía que me podía correr con solo eso.
–Mírate pequeño temblando con solo eso… ¿puedo?
Me estaba pidiendo permiso para introducir su mano en mi pantalón, pero ¿Qué hacer? Con solo chupar mis pezones me tiene casi al límite. Así que asentí y pude notar como su sonrisa creció más.
No se tomo mucho tiempo y me desprendió de mi pantalón junto con el bóxer, me miro detenidamente y sentí vergüenza y me cubrí con mis manos mi miembro. El no dijo nada solo se puso a la altura de mi miembro y continuo sin decir nada, hasta que, empezó a lamber mis dedos, chupándolos como si fueran otra parte de mi cuerpo e incluso los mordía, cuando logró que apartara mis manos de mi miembro empezó a lamberlo desde la base hasta el glande.
– ¿Q-Que estas ha-haciendo?
–Shh…tu solo disfruta y di mi nombre – solo dijo eso y se engullo mi miembro en su boca y mientras jugaba con él sus manos no dejaban de pasearse por mis testículos. Jamás nadie se había preocupado por darme tanto placer, cuando me hacían una felación lo único que hacían era dedicarse a lamber, tanto así que pasaba a la monotonía pero él, él se está tomando muchas molestias.
– ¿P-por qué? –logré articular ya que él seguía con su trabajo haciendo que se me empezara, de a poco, a nublar la vista.
Y como si nuestras mentes estuvieran conectadas, supo a que me refería así que contestó.
–Porque estoy enamorado de ti. Porque me gustas. Porque desde que Dae me hablo de ti me interesaste y cuando te vi, aunque fue a lo lejos me cautivaste y desde entonces solo quiero que disfrutes mi compañía y estés feliz conmigo…aunque sea en sueños, pero quiero que seas feliz.
¡Dios este hombre sabía cómo enamorar! Por supuesto que si mientras lo decía no me estuviera masturbando y jugando con mis testículos esto habría sido mucho más romántico, pero la intención es lo que cuenta. Volvió a meterse mi pene en su boca y cuando estaba por tocar las estrellas cerré mis ojos por inercia a lo que recibí un regaño.
–Mírame, mírame solo a mi Ji.
Abriendo mis ojos vi la escena frente a mí. Seung tenía mis testículos entre sus manos mientras que mi miembro desaparecía en su boca para después aparecer, en un entra y sale exquisito en su húmeda cavidad bucal. Y sorprendiéndonos a ambos llegué a mi orgasmo con un grito no muy común.
– ¡S-SEUNG! – mi grito salió tan natural que me sorprendió. Fue como si siempre lo hubiera hecho, como si siempre estuviera pensando en él.
Y aun recuperándome de mí recién orgasmo sentí algo extraño.
–Mm-nn Se-Seung
Desde que grité su nombre fue la única palabra que mi cerebro tenía en la cabeza ya que estaba más ocupado disfrutando del nuevo toque. Aun con los restos de semen en mi cuerpo él los recogió todos y cada uno con su lengua de una manera tan erótica y descendió con ella hasta mis muslos dejando marcas y besos mientras paseaba su lengua hasta que llego a mi entrada. Chupo y lambió desde mis testículos hasta mi entrada y empezó a darme penetraciones con ella. Me sentía en el paraíso, tal vez era algo sucio pero al final seguía dándome placer solo a mí. Continuo con su trabajo del mete y saca de su lengua en mi entrada mientras metía un dedo y lo introdujo en mi aun sin dejar de lamberme luego introdujo otro y otro y otro más hasta que toco algo dentro de mí que me hizo tocar las nubes.
–Seung ahh-ah ahí.
No podía con los espasmos, cada vez que tocaba ese punto sentía como todo dentro de mí se movía de una manera deliciosa.
–Voy a entrar Ji –anunció retirando sus dedos y lengua de mi entrada.
Con su miembro empezó a dar simulaciones, por un momento pensé en que le gustaba torturarme hasta que vi su rostro. En él se veía la preocupación, la preocupación de hacerme daño ¡Dios! ¿Por qué tiene que ser tan lindo y perfecto? Con un astuto movimiento ahora yo quede arriba y con una mano apoyada en su firme pecho y con la otra en su miembro me auto-penetré. La sensación fue única, por primera vez me sentí lleno, completo como si fuera un rompecabezas sin mitad que ahora encajaba a la perfección en todos los sentidos. Empecé lento con el sube y baja hasta que toque un punto que me convirtió en miles de temblores. Seung aprovechó eso y ahora me volvía a encontrar debajo de él, quien, con suma delicadeza tomo mis piernas y las subió a sus hombros sin separarse de mí continuando con el lento vaivén hasta que volvió a dar con mi punto.
–Ah ah ahh ¡ahí Seung ahí!
–Oh Ji eres tan estrecho.
En cada estocada que daba tocaba mi punto y al mismo tiempo se acercaba a mi boca a besarla con desesperación masajeando con su húmedo musculo mi boca mientras que con una mano se sostenía y con la otra me masturbaba. Se separo de mi boca aun en contra mía y sonrió con malicia ya había encontrado una debilidad mía, y lo más curioso es que me encontré a mi mismo feliz por haber concordado con él en que su boca ya me era adicción.
Aun con el mete y saca duro y directo, y con su mano masturbándome, agregándole a eso empezó a lamber los dedos de mis pues dándome toques de calor por toda mi espina este hombre si sabe cómo hacer que disfrute. Espera un segundo eso quiere decir que tiene mucha experiencia en este ámbito ¿no? quiere decir que ya se ha acostado con mucho ¿cierto?
Y, como si pudiera, trate de alejarme de él solo ocasionando que sus estocadas llegarán más a dentro.
–Tranquilo pequeño, no quiero que después me reclames por no poder caminar aunque…esto es un sueño dudo que me reclames.
–Deja ahh…de d-decir que…ah ah…que e-estas so-soñando S-Seung
–Si te preocupa… ¡oh dios Ji me vuelves loco! –Gritó en medio de su oración- si…si te preocupa eres mi primer hombre.
Ya más calmado me volví a dejar hacer, solo a mí se me ocurre tener mi escenitas en pleno sexo.
Terminamos con unas cuantas estocadas más. Yo primero gritando el nombre de Seung como aferrándome a su nombre y el grito el mío. Salió despacio y con cuidado de mi interior y se recostó encima de mi pecho aferrándose a mí. Yo por mi parte lo abrace y caí rendido.
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–Seung…Hyunie despierta –dije acariciando sus cabellos, me reí por lo bajo al recordar que el normalmente despertaba con un sueño parecido.
–Mmm- murmuró.
– ¡Hyun! ¡Despierta hyung! La fiesta termino y me pediste que…- no terminó la frase. Apareció un Daesung sorprendido en la puerta de lo que pienso es la habitación de Sung con unas llaves en la mano.
– ¡¿Ji?! –Gritó Dae.
–H-hola – fue lo único que se me ocurrió decir.
–Vaya veo que ustedes no perdieron el tiempo… ¡Sabia que se verían lindos juntos!
De pronto Seung despertó de golpe y se me quedo observando medio asustado.
–Te dije que yo no era un sueño.
– ¡Dae! ¿Por qué tardas tanto? Prometiste que iríamos a ver las… ¡Oh por Dios! ¡Ji! Dijiste que te comportarías ¿q-que excusa tienes? ¿Ah?
–B-bueno tal vez no es escusa pero…Feliz despedida de soltero.
Si no fuera porque Seung estaba ahí, abría estado muerto de vergüenza pero, el estaba ahí y algo me decía que siempre lo estaría.