Baekhyun frunció el ceño por segunda vez en todo el día. Observaba como, a lo lejos, Chanyeol y Kyungsoo se sonreían mutuamente mientras entonaban Billionaire a todo pulmón. De vez en cuando, forzaba una sonrisa en el momento en que los ojos de Chanyeol se posaban sobre él. Quería hacer como si no le importaba, como si le era indiferente con quién Chanyeol estaba o dejaba de estar, ya que después de todo, ellos no eran nada, ¿cierto?
Jamás lo admitiría, pero aquella repentina aproximación entre ambos no dejaba de disgustarle, y por más de que intentase convencerse que lo único que lograba con todo aquello era joderse a sí mismo, estaba molesto.Aquel maldito fanservice lo molestaba. Chansoo lo molestaba.
Cuando la canción finalizó, Baekhyun suspiró con alivio; ya no soportaba verlos mientras sus rostros se aproximaban cada vez que dividían el micrófono, y no era simplemente por eso que estaba irritado, sino que su pecho dolía y sentía infinitas ganas de darle un puñetazo a Kyungsoo cada vez que recordaba las palabras de Chanyeol en TLP, y jamás de los jamases sentiría eso hacia un amigo.
“¡Me gusta D.O!”
Baekhyun apretó el puño cerrado que yacía en su muslo izquierdo. “Te gusta D.O y una mierda, Yoda desgraciado”, pensó, pero su ensueño se vio interrumpido por los presentadores del programa, quienes aplaudían férvidamente. Miró a Chanyeol, viéndolo levantarse y caminar de vuelta a su asiento luego de hacer una pequeña reverencia en forma de agradecimiento.
Para su suerte, no volvió a haber aproximación de ambos chicos durante el programa. Gracias a eso, Baekhyun deshizo su mueca de malhumor y se permitió a si mismo sonreír. Sin embargo, EXO fue dividido en dos equipos: el azul y el rojo. En el momento que se dio cuenta de que en Kyungsoo formaba parte del equipo rival, no pudo sino contener una sonrisa competitiva.
“Contrincante en el amor y ahora en el juego, ¿eh? “
Cuando fue su turno de competir, Baekhyun se sentó en la silla giratoria y suspiró profundamente, reuniendo la máxima energía posible, y cuando el silbido de la sirena se hizo presente, ambos chicos se impulsaron hacia adelante, usando únicamente las piernas para deslizarse por el gran salón.
1, 2, 3 minutos se pasaron.
Empate.
Chanyeol le dedicó a Kyungsoo una sonrisa encantadora, susurrando un inaudible “lo hiciste bien”. Baekhyun, en ese instante, se sintió desfallecer. Su mirar cargado de rabia pasó a ser de angustia y nuevamente, cerró el puño con fuerza. Se suponía que Chanyeol debía felicitarlo a él, no a Kyungsoo. D.O ni siquiera era de su equipo, Baekhyun sí.
En la segunda actividad, todos los objetos debían estar dentro del equipaje y el apremiado sería el primer equipo que lograra tocar la campanilla. Entonces, Baekhyun encontró la perfecta oportunidad de acercarse a Chanyeol cuando lo vio sentado en el piso, intentado inútilmente desinflar un ridículo salvavidas de colores.
— Deja que te ayude. — se inclinó sobre el más alto y lo ayudó con su ardua tarea, y mordisqueando levemente su labio inferior, acortó gran parte de la distancia.
Mientras tanto, Chanyeol estaba inquieto. Sentir el perfume caro de Baekhyun y su cuerpo tan cerca de él casi podía considerarse como una tentación, aún más cuando el más bajo insistía en permanecer en aquella posición tan poco inocente. Inconscientemente, se removió bajo Baekhyun provocando que su rodilla rozara la intimidad de este, provocando que mordiera sus labios con fuerza. Baekhyun se levantó súbitamente.
— ¿Acaso estás provocándome? — susurró Chanyeol en tono bajo para que únicamente el mayor pudiera oírlo.
Baekhyun no respondió, simplemente corrió hacia sus otros miembros, dejando a un perplejo Chanyeol arrojado en el piso. Obviamente, no demostraron lo inquietos que habían quedado debido a ese incidente. Después de todo, seguían en cadena nacional.
Los muchachos de EXO se encontraban en la van, dirigiéndose al dormitorio rápidamente. Algunos conversaban animadamente sobre el programa, otros, sin embargo, dormían (en el caso de Kai). Sin embargo, había un integrante que se encontraba completamente quieto, y quizás lo estaba hasta demasiado.
Chanyeol nunca encajó con el estereotipo de tranquilo y, al parecer de Suho, algo estaba muy mal. Él podía jurar que ese algo tenía que ver con Baekhyun.
— ¿Estás bien? — le preguntó. Su asiento en el vehículo era justamente detrás del más alto, por lo que no le fue difícil ver su rostro atontado a través del reflejo de la ventana.
— ¿Eh? ¡Sí! ¡Estoy bien! ¡Claro que sí! — Chanyeol sonrió forzadamente. — Simplemente estoy cansado.
— Entonces descansa cuando lleguemos. — el líder le dedicó una pequeña sonrisa.
— Claro.
Chanyeol pudo percibir que Baekhyun, en ese momento, conversaba animadamente con Sehun sobre algo que observaban en su celular. Park entrecerró los ojos recelosamente. Pensaba las acciones de ambos eran completamente innecesarias, siento que claramente, Chanbaek era mucho más popular que Sebaek.
Sebaek.
Chenbaek.
Taobaek.
En el aeropuerto, en The Lost Planet, en todo. ¿Acaso Baekhyun trataba de molestarlo? Estaba claro que todo no era más que simple fanservice, como la interacción que Chansoo había tenido esa mañana en el programa, ¿pero cuál era la inminente necesidad por hacer semejante tontería en la van? No estaban frente a una cámara, entonces definitivamente no había ninguna.
— Creo que estoy siendo demasiado posesivo… — murmuró para sí, llamando la atención de Kyungsoo, quien se encontraba en el banco de al lado.
— ¿Dijiste algo?
— No, nada.
Luego de comer una pizza de tamaño familiar (comprada tras mucha insistencia de Jongdae), ya todos se encontraban preparándose para ir a dormir a excepción de Baekhyun, quien yacía postrado en la cama de la habitación que compartía con el gigante del grupo.
— ¿Se movió o fue impresión mía? — preguntó a la nada, sintiéndose completamente frustrado. — No, el realmente se movió. Lo hizo a propósito.
— ¿Hablando solo?
Baekhyun estaba tan concentrado en su disputa mental que ni siquiera advirtió cuando Chanyeol entró en la habitación, vistiendo sus típicos pantalones holgados grises y una camiseta negra.
— Ah, hola. Simplemente estaba pensando.
— Todo el mundo fue a dormir, deberías hacer lo mismo, estás cansado. — el mayor suspiró, acomodándose en la pequeña cama y tomando su celular con una mano.
— No tengo sueño.
— A decir verdad, yo tampoco. — Chanyeol rió por lo bajo, acostándose en su cama, e imitando la acción del otro pelinegro, agarró su teléfono. — ¿Estás en Instagram?
— Sí, a veces me meto para ver los mensajes de las fans. — sonrió mientras deslizaba el dedo por la pantalla del teléfono, leyendo y releyendo cada uno de los mensajes que sus fans le dejaban. — Solamente hablan de couples, es comiquísimo.
— Puedo imaginar de qué couple se trata.
— Sebaek.
Ah, se estaba demorando demasiado. Chanyeol sintió el odio correr por sus venas, pero no se la dejaría fácil.
— Últimamente mis fans dejan mensajes de Chansoo.
— ¿Ah sí? — el menor rió libertinamente. — No tengo idea qué Kyungsoo querría con un Yoda como tú, tiene a Kai a su completa disposición.
— ¡Oye! — exclamó Chanyeol con aires de ofendido. — ¡Yo no me imagino por qué Sehun querría algo contigo! Tiene a Luhan sólo para él, y creo que estamos de acuerdo al decir que Luhan no es de arrojarse por ahí.
— ¿¡Estás insinuando que soy dispensable!?
— ¿Y qué si lo he hecho? ¿Acaso te ofendí, su alteza?
— Como si me importara lo que tú dices. Ya no me importas, y mucho menos me importa “Chanbaek”. — masculló entre dientes. — Todo lo que pasamos hasta ahora fue fanservice, Chanyeol. Lo sabes. — el menor de ambos puso los ojos en blanco, observando al pelinegro con expresión dolida y llena de ira.
— ¿¡Fanservice!? ¿¡Fanservice, Baekhyun!?
— ¿Qué pasa? ¿Te dolió? — rió el mayor. — Ve y llama a Kyungsoo para que te consuele.
— ¡Vete a la mierda, Baekhyun! — gritó fuertemente. — ¡Prácticamente te me frotaste en la porquería de aquél programa y ahora vienes y me hablas de fanservice!
— ¿¡Y me dirás acaso que no te gustó!? — Chanyeol hizo el amago de responder, pero se detuvo en el momento que unos leves golpes hicieron acto de presencia en la puerta de la habitación.
— ¿Está todo en orden? — oyeron decir a Joonmyun.
— Sí, Suho hyung. No te preocupes, aquí no ha pasado absolutamente nada. — respondió Chanyeol, observando a Baekhyun con completa fiereza.
— Bueno, os quedéis hasta muy tarde, buenas noches.
— Sí, buenas noches.
Y en el momento que confirmó que Suho ya se había devuelto a su habitación, Chanyeol se incorporó y caminó a paso rápido hacia el interruptor de luz, presionándolo con fuerza casi bruta, sumiendo a la habitación en una completa oscuridad.
— ¿Por qué apagaste la luz?
— Cállate.
La respiración de Baekhyun se volvió sumamente agitada cuando percibió que los pasos del más alto iban en su dirección. De repente, sintió un peso extra sobre su cama: el orejón se había sentado a un lado suyo.
— ¿Qué cojones haces? — preguntó en el justo momento que la cama se removió y Chanyeol se posicionó sobre él. Podía ver su rostro debido a los tenues brillos de la luna que se colaban a través de la ventana semi-cerrada, y por lo que podía observar en él, el azabache estaba visiblemente molesto.
— Estoy furioso. Mucho, a decir verdad.
— Chanyeol…
— He dicho que te calles. — ordenó, tomando al menor por las muñecas, haciéndolo estremecer a producto del miedo. Jamás había visto Chanyeol de esa manera. — No te soltaré hasta que respondas todas mis preguntas.
— ¿Y qué te hace pensar que responderé?
— Yo que tú respondía. — contestó.
— Si respondo, ¿me soltarás, dumbo? — Chanyeol sonrió abiertamente.
— Lo haré.
— Está bien.
El más alto se inclinó hacia Baekhyun y acercó su rostro al pálido cuello de este, haciéndolo estremecer al sentir la respiración del orejón chocando contra su sensible piel.
— Chanyeol, dijiste que — intentó decir, mas fue interrumpido por la ronca voz del mayor.
— Primera pregunta. — musitó. — ¿Te gusta alguien?
— ¿Q-Qué? Eso no es de tu incumben- Ah… — gimió con levedad al sentir como el menor besaba su cuello, para luego morderlo. — ¿Qué crees que haces?
— Te castigo. Te hice una pregunta y me gusta que me respondan.
— Chanyeol…
— Responde, Baekhyun. — el nombrado suspiró, resignado.
— S-Sí, me gusta alguien.
— Es bueno saberlo. — dijo, cesando las caricias en el cuello del azabache y devolviéndose a sus caderas, mirándolo directamente a los ojos. — Ahora, dime de quién se trata. — los ojos del menor se ampliaron sorpresivamente.
— ¿¡Q-Qué? Eso es…
— Dilo, Baekhyun. ¿Cuál es el problema? — deslizó sus manos a través de su abdomen semi-marcado, escondido por una fina camiseta blanca. — Somos mejores amigos, ¿o no?
— Chanyeol…
— ¿Es Taeyeon? — y por segunda vez en todo el día, Baekhyun abrió los ojos desmesuradamente.
— ¿Qué? ¡No! Sabes que es puro marketing.
— ¿Entonces quién es? — posó una mano en su pierna izquierda. — ¿Es Sehun?
— ¿Y qué si así es? — Chanyeol no pareció muy grato por la respuesta, dado a que apretó su extremidad con fuerza bruta.
— ¿Sebaek? Pero por favor…
— ¡A-Ay, Chanyeol!
No obtuvo respuesta alguna, pero se sintió desesperado al momento que el más alto se posicionaba entre sus piernas, acostándose sobre su pecho. Podía sentir a sus corazones latir unísonamente y eso lo aterraba.
— ¿Sehun te toca así, Baekhyun? — Chanyeol pasó sus manos por los muslos del mayor.
— Chanyeol, detente…
— ¿¡Eh!? ¿Ya te tocó aquí? — preguntó, deslizando sus dedos sobre la pierna de Baekhyun hasta llegar a su miembro, apenas posando su mano. — ¿O aquí?
— Chanyeol, si no paras, yo…
— ¿Tú qué? ¿Y si dejas de ser un debilucho orgulloso y admites de una vez que también me deseas? — Baekhyun ladeó la cabeza, mordiendo su labio inferior.
— ¿Quién dijo que te deseo?
— No hace falta que alguien lo diga, tus acciones hablan por ti mismo. — sonrió con convicción. — ¿O crees que no me di cuenta de la mirada asesina que le dedicaste a Kyungsoo mientras cantábamos? — al mayor le fue imposible contener un enorme sonrojo.
— ¡Y-Yo no hice tal cosa!
— Lo hiciste, pero está bien, te perdono. Después de todo, yo también morí de celos aquél día en el aeropuerto. — bufó, acordándose de como Baekhyun recostó la cabeza en el hombro de Sehun mientras le sonreía adorablemente. — Y también hoy de mañana.
— ¿Hoy?
— Sí, se podría decir que tonteaste demasiado con Jongdae. — Baekhyun miró al mayor fijamente durante unos segundos antes de sonreír tontamente.
— ¿En serio te pusiste celoso, Chanyeol?
El happy virus, por primera vez en todo lo que llevaba de día, se sonrojó, pero escondió nuevamente el rostro entre el cuello de Baekhyun.
— Responde, Chanyeol.
Pero Chanyeol no respondió, sino que comenzó a besar sus mejillas con ímpetu, bajando lentamente a su cuello, en donde volvió a morderlo. Sus manos se posaron nuevamente en los grandes muslos del mayor.
— Tus piernas son las mejores.
— Ah… N-No cambies de asunto. ..
Chanyeol subió sus besos hasta llegar al rostro de Baekhyun, y por primera vez, lo besó en los labios. Se sorprendió al ver que este no intentaba apartarlo, simplemente permanecía estático, y entonces, aprovechando la situación, el menor succionó el labio inferior de Byun, besándolo como si se tratase de la majestuosidad más grande de ese mundo. Y, de hecho, para Chanyeol así era.
En medio del beso, sus caderas acabaron chocando una contra la otra, provocando que sus erecciones se rozasen de forma placentera, por lo que Baekhyun se sonrojó enormemente al percibir que el más joven estaba igual de caliente que él.
En lo único que lograba pensar Chanyeol era cuan adorable lograba ser Baekhyun incluso en un momento nada casto como ese.
El beso que anteriormente era repleto de cariño y ternura había ganado una pizca de lujuria y brutalidad, tornándolo aún más ardiente.
El menor llevó sus manos al borde de la camiseta que Baekhyun vestía para arrancarla de su cuerpo, deleitándose con la visión del pálido abdomen que estaba a su disposición, así como los pequeños botoncitos que ahora acariciaba con descaro. Y si antes Baekhyun estaba sonrojado, en esos momentos estaba tan colorado como una mismísima pimienta a producto de las miradas que Chanyeol le dedicaba.
— A-Ah… Chanyeol… No hagas eso. — el más bajo se encogió cuando el contrario se dispuso a retirarle sus pantalones.
— ¿Eso qué? — preguntó irónicamente. — ¿Esto? — jaló finalmente la prenda que el mayor vestía, haciéndolo encogerse aún más en el intento de que el más alto no notase la enorme erección que le había causado.
— Deja de mirar tanto, pervertido.
— ¿Eso es por mí o para mí? — preguntó con los ojos fijos en el bulto que había bajo el bóxer blanco de Baekhyun.
— Ambos. — y cuando percibió la magnitud de sus palabras, Baekhyun abrió los ojos con asombro, completamente sonrojado, mientras observaba a Chanyeol lucir su perfecta sonrisa llena de satisfacción.
— Genial — dijo, tomando la mano del mayor y llevándola hasta su pantalón holgado, prácticamente obligando a Baekhyun a acariciar su erección por encima de la tela. —, porque estoy así por ti también.
Retiró la mano de Byun de su erección y se inclinó nuevamente sobre su cuerpo, tomando sus sonrosados e hinchados labios. Llevó su mano hasta el bóxer del bajito y comenzó a sacarlo lentamente, torturándolo a él y a sí mismo. Cuando lo desnudó totalmente, Baekhyun intentó cerrar las piernas, avergonzado.
— No te escondas de mí.
— Jódete, dumbo.
— Estás muy maleducado últimamente, hyung. — y al decir esto, tomó firmemente el miembro de Baekhyun. — Comenzando por provocarme en red nacional…por cambiarme…por dejar que otros de abracen…
— A-Ah… no me toques ahí… — intentó inútilmente hacer que el más alto dejase de acariciarlo, contorsionándose y mordiendo su labio con fiereza para no gemir alto: seguían en el dormitorio, después de todo, pero no es como si Chanyeol le estuviese ayudando a controlar su sanidad.
— Me encanta cuando gimes así. Sólo yo puedo oírte gemir así. Sólo yo puedo tocarte así… — Chanyeol guió sus labios hasta el lóbulo de la oreja de Baekhyun, mordiéndolo levemente y acelerando el ritmo de la masturbación que le proporcionaba.
— N-No sabía que eras…ah…no sabía que eras así de celoso… — provocó.
— Lo soy, y también soy posesivo. — cesó los toques, bajando su cuerpo a través de la suave cama, deteniéndose entre las piernas del pelinegro, quién tenía la vista fija en un punto muerto del techo, intentando controlar su respiración.
— ¿Por qué paras-…ah! — a Baekhyun le fue imposible contener un gutural gemido en el momento que Chanyeol devoró su virilidad. Mordió su mano, dirigiendo tímidamente la mirada hasta abajo, observando la más privilegiada imagen del más joven engullendo su miembro. — Ah…Chanyeol…ah…
Con cuidado, el mayor bajó por la dura extensión de Byun, acomodándolo dentro de su boca y dando una última succión antes de levantarse. Miró a Baekhyun, quién lo observaba con frustración.
— ¿Por qué has parado, Yoda?
— ¿Entonces admites que me deseas, eh? Genial, ahora tendrás que implorar si quieres un poco más, Baekkie. — el bajito arqueó las cejas: jamás rogaría, era demasiado para su orgullo.
— No voy a rogarte.
— Entonces te quedas duro, o probablemente no si consideramos que irás al baño a aliviarte pensando en mí. — dijo con una sonrisa petulante e hizo el amago de levantarse, pero fue claramente impedido por Baekhyun, quien lo agarró por la espalda y lo arrojó sobre sí nuevamente. — ¿Qué pasa?
— No me dejarás así como así, orejón.
— Si tú lo pides… — Baekhyun suspiró.
— Chanyeol…no compliques las cosas.
— ¿Complicarlas? Que va, sólo me lo tienes que pedir y haré que te olvides rapidísimo de Sehun.
— Deja de hablar de Sehun, dumbo. — reclamó, acercándolo más a sí mismo y haciendo que la erección tapada de Chanyeol rozase la suya. — Ah…Chanyeol…por favor…
— ¿Por favor qué, Baekkie?
Harto de todo, Baekhyun empujó a Chanyeol hasta que este cayó sentado, caminó a gatas hasta él y se acomodó sobre sus caderas, sujetando su bragueta con descaro. El joven lo observaba de arriba a abajo, atónito.
— ¿Qué haces, Baekhyun?
— Ahora mando yo.
El más alto no creyó en la desfachatez de aquella trampa, pero sin embargo se dejó llevar meramente para ver lo que el mayor era capaz de hacer. Lo observó boquiabierto mientras este llevaba una de sus manos al borde de su camiseta blanca, intentando quitarla.
— Ayúdame aquí. — pidió.
Chanyeol sonrió y lo retiró delicadamente de encima de él, levantándose mínimamente y exponiendo así sus fornidos brazos al retirar la molesta camisa. Llevó una mano a su pantalón holgado y lo bajó, provocando que este se deslizara por sus piernas.
— Listo, enano. Ahora estamos igual. — Chanyeol lo empujó contra la cama, colocando sus manos en ambas rodillas y separándolas. Avergonzado, el contrario intentó cerrarlas, pero Chanyeol (como buen hijo de puta que era) sujetaba sus piernas con fuerza, impidiendo todo movimiento. — Vaya visión…
— ¡Gilipollas!
— Oye, Baekhyun…tenemos un problema.
— ¿Qué pasa? — Chanyeol mordió su labio inferior con nerviosismo.
— Pues…no tengo lubricante ni condón. Si tan sólo hubiera sabido que iba a follar hoy…
— ¿¡Y me lo dices ahora!?
— Tranquilo, hay otra forma.
— ¿Cuál?
Chanyeol no respondió. Llevó dos dedos a sus labios acorazados, sorprendiendo enormemente al mayor cuando empezó a chuparlos con ímpetu.
— ¿Dónde aprendiste a hacer eso?
— Fanfictions.
— No puedo creer que tú-, ¡ah, mierda, despacio! — reclamó cuando Chanyeol metió el dedo medio dentro de su agujero sin siquiera avisar.
Sintió una molestia incómoda en el momento que el mayor empezó a mover el dedo con lentitud. ¿Cómo es que alguien conseguía placer con eso?, se preguntó. Estaba más que seguro que la incomodidad iba a incrementar y, cuando Chanyeol enterró el segundo dedo, sus sospechas fueron confirmadas.
— ¿Te estoy lastimando? — preguntó el más alto con preocupación.
— Un poco…
— Pasará.
Y realmente lo hizo, ya que luego de varios minutos, Baekhyun no sentía aquél dolor inicial, y hasta se permitía a si mismo gemir silenciosamente por el placer. Pero como el mayor amaba molestarlo, retiró los dedos.
— J-Joder…
— Cálmate. — rió Chanyeol, posicionándose entre las extremidades del mayor. — Voy a entrar, Baekkie. Sujétate de mis hombros y relájate lo más posible. — Baekhyun se abrazó al más alto y escondió el rostro entre el cuello de este, esperando lo peor (o lo mejor).
Chanyeol, muerto de ansiedad, quería enterrar su pen… No, no iba a poder hacer eso, o al menos no en esos momentos. Lentamente, acercó el glande a la entrada del pelinegro e hizo fuerza, haciendo a su hombría entrar de a poco. “Ok, ahora sólo falta el resto”, pensó irónicamente. Continuó ingresando con suavidad y me cago en la puta, que apretado está. El gigante sentía el interior del mayor contraerse y adaptándose a él. Aquello era demasiado bueno para ser verdad.
— Ah… — gimió ronco cuando estuvo completamente dentro. Levantó su mirar al rostro de Baekhyun, observando como este cerraba los ojos con fuerza. Una línea perfecta de humedad yacía en su mejilla. Había llorado. — ¿Estás… estás bien, Baekkie?
— S-Sí…sólo estate quieto.
Acostumbrándose al dolor, Baekhyun miró al muchacho. Era simplemente perfecto. Sabía ser tierno cuando quería, pero también sabía ser perverso, como en aquél exacto momento en el que miraba a Baekhyun, prácticamente implorando para que le diera luz verde. Los fuertes brazos que sujetaban la cintura del mayor temblaban a producto del placer y el este lo creía reconfortante. Él también dominaba a Chanyeol.
— ¿Qué esperas para moverte?
Lentamente, Chanyeol empezó a penetrarlo y Baekhyun tuvo que admitir que la sensación de ser llenado era peculiarmente caliente. Chanyeol lo abrazó con amabilidad y Baekhyun correspondió mientras de sus labios se escapaban tenues gemidos al sentir como el pene del más joven entraba y salía de él con lentitud.
— Dime, Baekhyun — dijo el contrario, aumentando el ritmo de sus estocadas. —, nadie nunca te hizo sentir así, ¿no?
— A-Ah…n-nunca…sólo tú…
— ¿Ni siquiera Sehun?
— Ni siquiera él.
Sonriendo, Chanyeol retiró su miembro y lo penetró fuertemente, por lo que Baekhyun tuvo que morder el brazo del muchacho para contener un grito de placer.
— C-Chanyeol…despacio, joder…alguien nos oirá.
El nombrado poco o nada se importó con la advertencia. Continuó con la misma velocidad frenética, mordiendo la nívea clavícula de Byun, al borde del delirio. Quería descargar todos sus celos en ese momento.
La próstata del más bajo había sido acertada varias veces y juró que podría haber llegado al orgasmo sólo con eso. De sus labios se escapaban temblorosos y ahogados gemidos. Sus cuerpos abrazados se complementaban perfectamente, ¿quién podía dudar de que fueran hechos uno para el otro?
Chanyeol aumentó considerablemente el ritmo de sus estocadas (como si fuera posible) y se impulsó para adentro del contrario, enterrándose completamente en él, teniendo así el mejor orgasmo de su vida. Sujetó a Baekhyun con mayor firmeza, mordiendo su cuello fuertemente y reprimiendo un gemido de alivio. Byun, al sentir el semen del menor llenarlo por completo, contuvo un gemido alto y lloroso, corriéndose luego de varios segundos. Su cuerpo tuvo un espasmo de placer y se abrazó a Chanyeol con mayor fuerza, temblando de cabeza a pies.
— Sal de encima de mí…eres muy pesado. — reclamó Baekhyun únicamente para acabar con aquél incómodo silencio que se había formado entre ambos luego de varios minutos.
— Lo siento. — Chanyeol se levantó y se dejó caer al lado de Baekhyun, observando fijamente al techo, justo como hacía el otro muchacho.
— ¿Qué cojones acabamos de hacer, Chanyeol?
— No lo sé… — en los rojizos labios de Baekhyun se formó una mueca de incomodidad.
— Ah…me duele el culo.
Chanyeol soltó una carcajada.
— Lo siento. — y, nuevamente, se hizo el silencio.
— Oye, Chanyeol…
— ¿Qué?
— ¿Qué piensas de Kyungsoo?
— ¿En serio lo preguntas? Es obvio que te prefiero a ti, él es simplemente un hermano. — sonrió. — A decir verdad, ni siquiera me gusta Chansoo. Mucho menos Sebaek.
— A mí tampoco me gusta… Creo que combino mejor con Tao, ¿o tú qué dices? — preguntó, riendo estrepitosamente al notar la cara de disgusto del más alto. — Estoy de coña, Yoda.
Ambos se sonrieron mutuamente. Ya no era necesario decir nada, Chanbaek era real, y por más de que al mayor lo obligasen a admitir una relación con Taeyeon, nadie sabía lo que sucedía en la habitación de ambos.
Aunque…bueno, ahora lo sabes tú, pero no se lo digas a nadie, será nuestro pequeño secreto, ¿está bien?