Kyuhyun se sienta en las escalerillas de la puerta, mirando el extenso bosque que esta delante de sus narices. Y por primera vez en todo ese tiempo siente que la envidia y los celos le corroen.
Posiblemente es por que allá en la lejanía, Siwon, Hyuk y Hae corren libremente por entre los árboles. Y no envidia eso de ser peludo, con largas garras y unos dientes enormes que sobresalen de sus bocotas, u hocico, ya no esta seguro. Simplemente envida eso de ser iguales, de no sentirse inferior, por que si él siquiera intentara correr un poco, seguramente le va a dar un soponcio o algo así.
No es como si antes de que Hyuk fuera lobo, ellos corrieran por ahí como un par de cachorros, pero por lo menos no tenia que estar preocupándose por que su mejor amigo pudiese escuchar sus latidos del corazón para verificar si esta mintiendo o no, o vivir preguntándose si huele bien o si el desodorante que usa no es demasiado fuerte para el sensible olfato de los de su manada.
Si todos fueran humanos todavía, ni siquiera tendría que preocuparse de que Siwon es demasiado musculoso y perfecto para haberse fijado en alguien como el, por que lo mas probable es que nunca se hubiese dado la vuelta al verlo pasar, tal vez ni siquiera se conocerían.
- Kyuhyun?
El Alfa le mira de hito en hito, con los ojos oscuros clavándose más allá de sus pupilas. Seguramente ha olido toda la mezcla de sentimientos que le asediaban hace cinco minutos atrás, cuando se suponía que todos corrían, ahora al mirar sobre el hombro del lobo no ve a nadie y eso le preocupa un poco.
- ¿Dónde están Hyuk y Hae?
- Los mande por helado.
- Helado?
- Hueles y te ves como deprimido.
- Oh…
Asiente distraídamente, pensando en alguna excusa que inventarse para su momento de reflexión profunda, pero no encuentra ninguna muy convincente. Y de todas formas, ¿De que le sirven las excusas? Ellos le van a descubrir en sus mentiras de todas formas.
- Kyu, ¿estas bien?
- A veces me pregunto como seria todo si los cuatro fuéramos humanos. ¿Hyuk y Hae se hablarían? ¿Tú te habrías acercado alguna vez a nosotros? E incluso… ¿Tú y yo, seriamos lo que sea que seamos ahora?
Siwon se sienta a su lado, no sin antes empujarlo con demasiada fuerza aun lado. Estupido Lobo descuidado, piensa, pero no lo exterioriza, en cambio una sonrisa se abre paso por entre sus labios sin su consentimiento. Kyuhyun se pasa una mano por la nuca y nota que Siwon le mira, pero no se atreve a corresponderle así que se levanta y empieza a andar y piensa en si esa noche se atreverá a contestarle las cosas absurdas que repentinamente ha dejado salir de su garganta. Humano tenia que ser, haciendo y diciendo estupideces que no debería.
- Oye, ¿por que me llenas de preguntas y luego huyes?
- No estoy huyendo. Veo que tu cerebro de perro no puede con tanto y te evito la humillación de admitir que no tienes idea de nada.
Da un respingo asustado cuando en menos de lo que se demora en pestañear el lobo ya esta a su lado con una sonrisa retorcida mirándole. Por muchos meses que lleve con la manada no se acostumbra a eso de que sean tan silenciosos (bueno, todos menos Hyuk, él no tiene remedio)
- Seguramente, Hyuk y Hae estarían de la misma forma que ahora lo están. Riéndose como idiotas cada vez que están juntos y corriéndose mano cuando creen que nadie los ve. En cuanto a lo otro…Posiblemente no me habría acercado a ustedes jamás.
- Lo suponía – responde con amargura, intentando alejarse con rapidez de ahí.
- Por que lo más probable es que solo te hubiese buscado a ti.
- ¿Qué?
Su corazón se acelera sin su permiso. La temperatura le sube a niveles alarmantes y se pregunta vagamente si será por culpa de las dos poleras que decidió ponerse ese día.
- Eso, y por cierto, esto que tenemos tu y yo tiene nombre.
- Ah si?
- Novios. O que crees, que voy y abuso de cualquier chico bonito que se me cruce por ahí?
- No se, eres un Lobo bastante pervertido.
- Y tu un humano bastante desquiciante.
- Gracias por el cumplido.
- No hay de que. Después de todo, es por eso que te quiero tanto.
Kyuhyun se le queda viendo por un rato, súbitamente impactado por el peso de la declaración de Siwon. Y cuando cree que su corazón ha hablado en su nombre, se encoge de hombros y sonríe un poco. Siwon repite el gesto y lo guía de vuelta a la casa, donde les esperan Hyuk y Hae, manoseándose descaradamente, como siempre