Con ese molesto ruido que chocaba contra las paredes de roca gris, las horas pasaban como de costumbre, tal vez sin ninguna novedad, sin algo emocionante que contar.
Pero bueno, eso es lo que uno solo ve a primera vista y sin indagara más en aquellos rostros que muestran comodidad y naturalidad. Por que no siempre el que una persona sonría significa que sea feliz o que si llora es por tristeza.
Entre las diferentes aulas llenas de estudiantes las charlas eran las típicas.
Y como en otras partes, un grupo conversa animadamente sobre cualquier tema sin importancia.
-te digo que no, o sea ¿qué onda?-comentaba una de las chicas que estaba sentada sobre su pupitre. Entre ese grupo mínimo, solo se encontraban Celeste, Tatiana, Alex, Jonathan y Carlos.
Un grupo de amigos que nada en especial tienen, o al menos eso dicen sus rostros.
Entre el sonido de esa platica aburrida, su propia mente divagaba hasta perderse en su propio universo donde solo él era dueño y amo de ese plano.
En realidad no aguantaba esa clase de charlas vacías, pero ahí estaba. Y se preguntaran ¿por qué hacer algo que no te gusta? ¿No sería más fácil dejarlos y buscar más gente?
Sí, en realidad si lo es, pero para Alex había una pequeña, o mejor dicho, una gran razón de permanecer ahí.
Su mirada cayó sobre un rostro luminoso y al mismo tiempo sombrío. Sobre la de su mejor amigo desde hace tres años.
Mejor amigo….no lo creía.
Alex era alguien de apariencia muy pacífica a primera vista, callado y con una sonrisa que pocas veces mostraba al igual que su enojo. El era de los dé paciencia, pero una vez el límite se ha roto es hora de mostrar quien es él.
Amigos…solo estos mismos y el más especial era Carlos.
Carlos…….El se podría decir era como un príncipe, de una manera irónica. Al menos esa era su percepción.
Lo conocía hace solo tres años y fue su primera migo y la primera persona que quiso con todo el corazón, a quien dedico horas para escuchar los problemas con sus padres y hermana menor, con quien se carteaba más de dos veces al día.
Pero….sentía que con cada día que pasaba lo conocía más y no era exactamente algo de alegrarse….o tal vez sí.
-me parece bien-comentó el susodicho de su mente con una risa.
Sí, todos a primera vista decían que era muy alegre, pero……..recordaba que cuando se hizo su amigo mucha gente le dijo que no le convenía, que era un crío inmaduro que nadie aguanto en la primaria y que disfrutaban de hacerle creer que lo apreciaban, pero Alex…Alex quiso no escuchar y arriesgarse porque en verdad que lo quería con su alma.
Los primeros días rieron juntos, compartieron muchas cosas. Y Alex lo defendía a espada y escudo a los demás que insistían era un crío inmaduro que aún vivía en su mundo de fantasías.
Y bueno, si se sinceraba si lo era….inmaduro, pero con esa pequeña atracción de querer acercarte y conocerlo porque piensas “es buen tipo”.
-bien, ya basta de tanto arguende-se escuchó decir al profesor de Química al entrar al salón-todos a sus lugares-ordenó.
Todos se acomodaron.
Del lado de la pared, hasta atrás en la esquina se acomodaba Jonathan, uno de los amigos más cercanos de Alex y Carlos, luego enfrente de él se sentaba Carlos y a la izquierda de Carlos estaba Alex.
La clase comenzó como de costumbre; pocos participaban por temor de ser ridiculizados por el profesor al responder incorrectamente.
-hey Jonathan-Alex giró su mirada a Carlos que aprovechaba el profesor estaba ocupado con alguien para mostrarle una de sus tantas cosas a Jonathan-mira, lo encontré ayer-decía con una sonrisa.
-que feo-
-ah, que malo eres-se quejó Carlos mientras Jonathan se seguí burlando. Alex sintió un poco de tristeza al ver esa situación, deseaba decir “Jonathan, no lo lastimes”, pero dentro de sí sabia no serviría de nada.
El lo sabía y le partía el corazón, porque el conocía a Jonathan desde los ocho años y el mismo le había confesado.
“Carlos me cae de la….es que pone su jeta de malhumor. Ya sabes, que quiere todo sea como un cuento de hadas y luego si se enoja se indigna y te contesta con su “ay, sí” Pero le echó indirectas para que piense juego con él”
Su interior se revolvió al saber que de verdad Carlos pensaba lo estimaban.
Y bueno….. ¿por qué seguía a su lado si tanto se dañaba a su lado?
Las clase siguieron pasando entre risas y más, incluso hizo tres trabajos de pareja con Carlos. Se divertía con él, pero….pero…..sabía se estaba dañando.
-Tatiana, quilate de mi lugar-se quejó Carlos al ver que su amiga estaba en su lugar y sin escucharlo-te lo estoy pidiendo bien-
Tatiana le sonrió y le dio unas palmaditas en el cachete-ay Carlos, es que me encanta molestarte-contestó.
-en serio Tatiana, deja a Carlos sentarse-interpuso Alex, pero desde la esquina Jonathan le hacía señas de que lo dejara. Alcanzo a leer sus labios.
“Déjala, para que lo moleste” y sonrió divertido. De nuevo le dolió, pero aún así, sin escuhar a esas palabras dijo.
-Tatiana, quitate o te quito-amenazó mostrando su lado ofensivo, la chica le mostró un gesto de desagrado y se retiro.
-ay Alexito, no seas salvaje-dijo, pero el chico lo ignoro y sonrió a Carlos.
-gracias-
-de nada-
Otra clase más.
Otro recuerdo para Alex.
“Aunque estemos enojados, yo te cuidare de lejos, te lo prometo Carlos” Esa fue su promesa la cual nunca había roto. Tenían varias peleas, pero aunque le doliera y Carlos no le hablara el procuraba protegerlo con cariño. Regañando a Tatiana cuando lo insultaba a sus espaldas, que Jonathan no se burlara de las cosas que le mostraba Carlos, pero…..pero…..
Llegó el descanso.
-¿estas enojado?-preguntó Alex a su amigo. Solo le había echo un comentario y este se había molestado y solo le respondía con monosílabos. Se fueron a sentar donde siempre.
-tu lo sabes-respondió Carlos mirando a otra parte.
-dime que, anda-
-tu lo sabes-repitió con las palabras duras. Lejos Alex divisó a Celeste y demás que le hacían señas de que lo dejara solo, pero no. No quería, porque el quería a Carlos a pesar de lo dañino, doloroso que fuera eso.
-perdóname Carlos, pero no puedo adivinar las cosas-pidió acercándose a él e intentando abrazarlo, pero mejor se retracto. Cuidaba a Carlos con tanto cariño y con tanto dolor a si mismo.
-mira-Carlos tomó sus libros y lo miró de reojo con gesto ofendido-mejor olvídalo, ¿sí?-hizó un sonido de molestia y se marchó-anda, ve y vete con Jonathan-ordenó con asco y se fue con unos chicos que conocía de otro salón.
Alex intentó seguirlo, pero en ese momento llegó Celeste y Jonathan.
-dejalo-
-vente con nosotros-
-pero…es que Carlos-Jonathan lo abrazó con fraternidad-esta enojado y yo…-
-no nos gusta como te trata-dijo Celeste-te habla cuando le conviene y cuando no, no te dice ni por que se enoja y se va con sus amigos-eso dolió dentro del corazón de Alex.
Luego llegó Tatiana-pareces su perro-
Luego de un rato, Jonathan, Celeste y un poco de Tatiana le consolaban y decían que si Carlos le volvía a hacer otra jugada, le dejarían de hablar.
-no, no lo hagan-pidió Alex con firmeza-no quiero verlo solo y triste, es que el…-pero sin poder decir nada más los otros tres se decidieron formular un plan en su contra.
-miren-comenzó Jonathan-a mi cae de la patada Carlos-
-a media escuela-aportó Tatiana con risa irónica.
-cállate-ordenó Jonathan-no le vamos a hablar para que vea como se siente-Alex no quería, pero…..pero….-nadie le habla ni la junta ni nada-luego se giró a Alex-se que lo quieres mucho y tal vez demasiado, pero debes de dejar que te trate como basura-
-pro yo lo quiero-respondió Alex evitando sus miradas.
Celeste puso una mano en su hombro-se lo merece, por favor Alex, haznos casi, nada más mírate-señaló a su rostro sombrío y lastimado sentimentalmente-tu le escuchas sus problemas, le ayudas y solo te habla cuando le conviene porque Jonathan lo le habla-
-y luego anda con sus tonterías-
-¡ya cállate Tatiana!-gritó Alex-¡no quiero lastimarlo, no me importa que….!-calló un momento; Jonathan lo volvió a abrazar.
-Alex, nos caes mejor que él y no nos gusta verte todo mal. Yo veo como te trata y como habla de ti-
Con dolor, con lágrimas le contaron que Carlos lo criticaba, que una vez que se juntaron para hacer un trabajo Carlos se mostró muy calmado al principio, pero….
-cuando te fuiste luego, luego se ánimo y empezó a bromear. La neta eso nos cayó de la fregada-dijo Celeste-acepta-
Sí, la amistad con Carlos le dañaba, le entristecía, le maltrataba el corazón, le mataba, pero no podía dejar de quererlo.
-esta bien-
Después del descanso y con los planes echos Alex regresó a su lugar, vio entrar a Carlos que sin saludarlo se sentó y comenzó a revisar sus cosas.
-oye Carlos-llamó, pero este haciéndose el que no escuchaba lo ignoro. Jonathan le hizo ceñas y en voz baja le susurró que lo ignorara y haciendo un juego imitó que le pateaba el trasero a Carlos.
Durante las siguientes semanas Carlos fue ignorado y se cerró, Alex lo veía y le partía el corazón; intentó convencerlos de que le volvieran a hablar, pero ellos insistían que no.
Carlos le sonreía y le hacia gestos lindos que solo atormentaban a Alex, que le hacían sufrir.
“Nuestra amistad es mi pecado” Escribió una vez en clase de Dibujo, donde a pesar de todo estaba dolido de ver a Carlos tan solo, por eso….por eso firmemente pidió una vez a si mismo.
“Por favor, que encuentre a alguien más”-Lloró-“Si esta conmigo se lastimara”-hasta en esos instantes el pensaba primero en él-“Haz que me odie, que me odie con todo su ser, que me odie tanto que encuentre a alguien mejor, porque……..nos lastimamos, me lastimo y se lastima”
Con fuerza y en secreto el mismo se alejo de Celeste, Jonathan y Tatiana y se hizo amigo de una chica y un chico de otro salón, que le abrieron su corazón y comenzaron a curar sus heridas.
Pero a pesar de todo……..no podía hablar mal de Carlos, lo quería y rogaba, rogaba que encontrara a alguien más. Por eso fingió ya no hacerle caso, mostrarse sarcástico y superior, lo cual dolía.
-fui yo, yo empecé y demás-Alex fue un idiota al echarse la culpa del casi de no hablarle, cosa que ya había pasado.
Carlos se mostró atento, pero distante a sus palabras, o al menos eso percibió el-por favor, perdóname-derramo lágrimas frente a los demás, cosa que le avergonzaba, pero solo por Carlos lo haría-yo…-
-esta bien. Lo mejor es nos ser amigos-
Misión cumplida, misión con sangre de alguien que quería tanto a alguien que fue capaz de matarse, de lastimarse, de echarse la culpa…….solo para mejorar las cosas.
-no, ¿por qué lo hiciste Alex?-Jonathan mostraba cara de preocupación-no te debiste echar la culpa si sabes fuimos nosotros quienes comenzamos-lo abrazó-pero ya vera ese idiota. A mi no me importa si no me habla, yo-pero antes de moverse la mano de Alex lo detuvo-pero-
-déjalo así, yo lo quiero mucho y solo busco su bien, aunque me lastime-Carlos conoció a un chavo muy amigable que le comprendía y a pesar de que este seguía tratándolo igual, Alex escribió.
“Te lo prometí, siempre te protegería y buscaría tu bien” pero nunca le dijo a Carlos “sin importar que sea yo el sacrificio”
Volvieron a ser algo así como amigos, pero Alex sabía que solo estar juntos era más dolor y encima Jonathan seguía insultando a Carlos a espaldas de este y Alex, confundido porque….sabía que quería ahora más a Jonathan. No de la forma en que lo hizo con Carlos, si no de una forma más sana y tranquila donde su sangre no era derramada.
Se graduaron de la escuela y Carlos y Alex se seguían hablando, pero……..pero…….
-solo tengo que esperar el momento-ese día Jonathan lo había invitado a su casa.
-pero ya te vez mejor y más animado Alex-le sonrió abiertamente-por mi que Carlos se vaya muy a la-se detuvo al ver la expresión de “no sigas” de su amigo-se ve que aún lo quieres-dijo
-así es-respondió-y pienso por fin acabar de cumplir mi promesa-
-no manches, tú y él si parecían mejores amigos-
-como dijiste, parecíamos-sonrió con alivio-de verdad que lo quiero, pero si seguimos juntos yo me lastimare. Lo respeto mucho porque ha sabido salir adelante y a madurado-
-¿de dónde ha madurado?-preguntó irónico su amigo-yo lo veo igual de idiota-rió-todavía se cree el príncipe del cuento. Tu porque ya no estas con él no lo ves-
-ya párale Jonathan-advirtió Alex-tengo una nueva vida y por eso quiero cerrar todo y lo mejor es acabar con esta amistad. Espero a que llegue el momento justo para que todo acabe-
“Finalizare mi promesa y te dejare libre, porque se que tienes la fuerza para salir adelante y ser exitoso. Por este cariño que aún queda te deseo lo mejor y por favor, perdona que lo haga de esta manera, pero así…por fin acabo de cumplir mi promesa de protección y te dejo libre….Carlos”
Fue la fiesta de Carlos y a pesar de que dijo que sí, Alex tenía que irse a la capital y por eso lo hizo así. Carlos no le volvería a hablar y por fin dejaba el dolor atrás.
Esa noche en que Jonathan le comunico que Carlos no le volvería hablar escribió.
“No puedo odiarte a pesar del daño que nos causamos, pero confió en que encontraras más amigos y maduraras. Te respeto y te quiero y serás un muy bello recuerdo en mi vida. Te quiero y te deseo lo mejor a futuro, pero….pero….al fin puedo decirte. Adiós”
-No se donde estes y si me odias por lo que hice, pero se feliz y cumple tus sueños. No eras idiota ni nada de lo que te decían, solo eres un ser humano que le falta crecer como yo y los demás, pero por favor….se feliz y si te llegas a caer recuerda que aunque haya oscuridad recuerda mi luz que te dejo, jamás romperé tus recuerdos, porque gracias a ti aprendía crecer y ver por mí. Gracias, Carlos y espero encuentres a tu princesa como anhelas.-
El fin de una amistad ponzoñosa y hermosa.
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Aclaro que todo esto es un hecho real de mi vida, pero con los nombres claramente arreglados, amiga mía, si lees esto comprenderás el porque de nuestra vida en la secundaria y la de los demás.
Perdóname por lo que hice, pero te dije que nos lastimábamos.
Se feliz y cumple tu sueño, lucha por él y no te dejes caer.
Disfrute tu compañía, tus sonrisas, tus muestras de odio y demás.
Crecí y se que crecerás.
Guardaré tus valiosas cartas y con eso finalizo esa promesa a ti, cuídate mucho y cuida a tus amados. A veces a las personas que más amamos son a las que lastimamos (tu y yo) y lo hacemos por eso, porque las amamos.
Vive y estate atenta a los demás. Vive por ti.
Atte.
TU Lima-chan. Tomoyo-chan, Len-chan, Loca-chan, Kaiba-chan,
TU Yuki-chan, Mia-chan, Mari-chan
Bye bye na no da, se feliz.
Besos.
TT TT me duele, pero se estarás bien, porque eres fuerte.
Y pika pika for ever my nice Sakura-chan, Shu-chan, Lima-chan, Yoh-chan, Sora-chan………I am very happy, because I met you.
Take care of your Rosetta-chan, because she is a really nicest person and I know that your new friends are going to love you.
Amor Yaoi
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