End Pov’s Key
En casa de Jonghyun…
Pov’s Jonghyun
-¿Cómo te fue?- tallé mi ojo derecho para cerrar la puerta de mi casa, volteé hacia la sala de estar, ahí estaba Nana y Yui.
-No lo sé.- susurré riendo nostálgico. –Quiero estar solo.- caminé hacia mi habitación.
-¿Solo de soltero o solo de sin nadie?- escuché a Yui así que la miré antes de tomar las escaleras.
-Solo de sin nadie.- contesté.
-Estoy segura de que hiciste lo correcto.- dijo Nana pero me encogí de hombros para seguir subiendo las escaleras.
-Ahora si verdaderamente quieres volver a estar con Key-san, tienes que ganarte a Minho primero.- me quedé en el descanso de las escaleras.
¿Si verdaderamente quiero volver con él?
-Es que…- me mordí el labio inferior. –Yo terminé con Key.- susurré. La conversación de Yui y Nana se detuvo, incluso el segundero del reloj de la pared lo hizo. –Sólo somos amigos.- retomé mi camino a la habitación y todo volvió a andar.
Menos las dos niponas que no dijeron nada.
Entré a mi habitación y caminé hacia mi cama para dejarme caer. Abracé la almohada y suspiré.
¿Por qué si hice “lo correcto” no me siento bien? Debería de haber sido placentero cerrar ese ciclo pero no lo siento así.
Suspiré tan profundo que toda mi fuerza se fue con esa exhalada. Me giré sobre mi lado derecho para ver hacia la ventana, buscar esa estrella fugaz y reclamarle acerca de mi deseo.
Yo sólo quiero ser feliz.
Fruncí el entrecejo porque algo me lastima, me senté y metí las manos a la chaqueta, saqué mi celular y la billetera, pero también salió un anillo.
Lo tomé entre mis dedos para mirarlo mejor.
Es el anillo de la abuela de Key.
Sonreí pero mis comisuras se curvearon hacia abajo, lo dejé sobre mi mesa de noche para volverme a acostar, lo miré, era el trozo de oro más hermoso que había visto.
Suspiré y cerré los ojos.
-Jonghyun.- fruncí el entrecejo. –Yui ya se va.- susurró Nana, pero no escuché que entrara a la habitación. –Te desea suerte.-
-Yo también.- susurré. –Buenas noches.-
…
Vi a Key sonriendo, riéndose, mirándome, llorando por mi culpa, seduciéndome, besándome, lanzándome sus cosas, gritándome, abrazándome, pero sobre todo siendo él.
De repente abrí los ojos y me senté en mi cama.
¡Una libreta!
Me levanté rápido para salir de mi habitación, ¡necesito una hoja de papel!
La busqué por todos lados pero no encontré al menos una completa, así que fui corriendo pero sin hacer tanto ruido a la oficina de mi papá, tomé una hoja de la impresora y bajé a prisa hacia el comedor.
Tomé la lapicera.
Guilty Plearuse, escribí.
End Pov’s Jonghyun
Al día siguiente…
Pov’s Taemin
-¿Ayer te quedaste hasta las cinco?- miré a YoungMin sentado a mi lado, en su lugar. Sonreí mientras bostezaba y lo abracé. –Creí que ya lo habías superado.-
-Tonto.- lo solté y limpié mis lágrimas, tengo mucho sueño. –Salí a las cuatro, gracias.- volví a acostarme sobre la mesa.
-Ya es el quinto día de clases, se supone que tuviste que haberte acostumbrado a levantarte temprano.- miré a YoungMin aun sin levantarme.
-No es eso.- contesté. –Sí me despierto a las seis pero el problema es la hora de dormir.- reí nervioso, ayer me quedé hablando con Minho hasta la media noche, eso fue por la video llamada, luego le marqué a su celular y estuvimos hablando una hora más, incluso al finalizar salí por mi ventana para ir a su casa, estuve con él hasta las tres de la mañana, luego me llevó a mi casa.
Sé que también estará agotado.
Y todo por ser un débil de mente.
-Hay algo que se llama “condicionamiento clásico”.- sí~ ya extrañaba a YoungMin. –Duérmete durante catorce días seguidos a las diez de la noche.- negué riendo, a las diez de la noches muy temprano. –Hazlo por Minho.- entonces me comenzaré a dormir temprano.
-Eso haré.- susurré sonriendo.
-Tengo entendido que hoy tendrá que ir al diplomado, y lo dejaste dormir hasta las tres de la mañana.-
-Yah, me haces sentir mal.- susurré levantándome de la mesa. –Oye YoungMin.- le susurré para que se acercara. –¿La maestra Jung quiere con Minho?-
-No.- susurró mirándome. –¿Por qué?-