…
-¿Aquí vives?- pregunté mirando su sala de estar, es muy ammm pequeño. Algo que pareciera está con unan pareja solida. Es más, su casa se siente como un hogar de matrimonio.
-Vivo con mi mamá.- contestó, escuché que la cerradura de su puerta se cerró. –Desde hace un par de años. Quizá cuatro.-
-¿Habías dicho que eras de Canadá?- o fue otro, no me acuerdo.
-Sí, viví en Canadá un tiempo, luego nos mudamos aquí. En cualquier momento nos volveremos a mudar, lo presiento.- Yifan me tomó de los antebrazos para moverme a un lado, creo que se fue hacia la cocina. –¿Quieres cenar?-
-Una aspirina y un vaso de agua no me vendrían mal.- hace mucho que no bebía alcohol de esa manera.
-En un momento.- miré el resto de su hogar, se siente incluso muy cálido, no como mi casa.
-¿Vives con tu papá?- lo busqué con la mirada, Kris salió de su cocina con un vaso con agua y una pastilla en un platito más pequeño. –Uy, qué modestias.- la tomé para llevarla a mi lengua, la puse al final y luego bebí agua.
-¿Quieres ver una película o prefieres ir a dormir?-
-La película está bien.- contesté dejando el vaso con agua en su mesa del comedor.
-¿Has visto Romance Adolescente VI?-
-La quería ir a ver al cine.- contesté entrando a su sala de estar, él estaba donde el televisor, frente al sofá más grande. -¿La tienes?-
-No, pero la podemos ver por internet.- se levantó del suelo, me miró sonriendo y apuntó a mi lado. –Pásame la compu.- volteé a donde me señalaba, estaba una laptop negra, así que la tomé para dársela.
-¿Puedo pasar a tu baño?-
-Al fondo a la derecha.- susurró. Me levanté del sofá para ir hacia donde me dijo, antes de entrar, saqué mi celular para ver al hora, las dos de la mañana. Aun es temprano.
Al regresar ya estaba la película en sus inicios, Yifan estaba en el sofá con una cobija y al mirarme la abrió para que también me sentara a su lado y cubriera con la cobija.
Lo hice. Se siente muy cómodo estar a su lado, la cobija me cubría del frio y en algún momento recargué mi cabeza en su hombro, a él no le molestó que no se quitó ni me dijo nada, sólo pasó su brazo por mis hombros.
…
Sentía como Kris no dejaba de mover su mano en mi hombro, como sobándolo. Yo mantenía los ojos cerrados disfrutando de eso.
Suspiré y lentamente, sin mover la cobija que nos cubría o sin que se notara el movimiento, llevé mi mano hasta su entrepierna. Kris mantenía sus piernas semi abiertas así que al sentir mi mano, lejos de retirarse, las abrió un poco más, sonreí pícaro mientras tomaba su miembro.
Estaba ya erguido, recordé que estaba sobándome, de que el movimiento en su mano sobre mi hombro era casi similar a cuando uno se masturba. Eso me hizo sentir deseado.
Relamí mis labios mientras me aferraba más a su falo, Kris sólo suspiró.
Comencé a mover mi mano, masturbándolo. Notaba el movimiento en la cobija cada que llegaba a su glande y cuando volvía a bajar. Volteé a verlo al rostro, él seguía con los ojos cerrados.
Su miembro se sentía diferente al de Jonghyun, más grueso, más grande. Pasé la saliva que había segregado mi boca.
Dejé de masturbarlo para mirarlo al rostro, Yifan abrió los ojos y me miró.
Sonreí.
Me acerqué lento a sus labios para besarlo, fue un beso lento en el que me detuve a morder su labio inferior y tirar de él.
-Si tú me quieres, podría empezar a quererte también.- susurré separándome de él. Me senté bien en el sofá, sonreí cuando asintió entonces tomé la cobija para cubrirme con ella, me deslicé por el sofá hasta estar hincado frente a Yifan y bajo la cobija.
Tomé el botón de su pantalón para desabrocharlo, bajé también la cremallera, suspiré excitado, no negaré que la forma en la que sobaba mi hombro me excitó, de otra manera no hubiera hecho lo que ya hice.
Descubrí su miembro de toda la tela, este salió erguido en un ángulo de noventa grados perfecto. Mis manos temblaban por la excitación al tomarlo, que tuve que aférrame a él para dejar de temblar. Comencé a marcar un vaivén lento.
Dejé salir el aire de mis pulmones por mi boca, haciendo que mi aliento chocara contra su piel, escuché como suspiraba así que me acerqué a su glande para lamerlo.
Era un sabor diferente, pero se sentía igual de suave.
Pasé mi lengua por todo el contorno del glande, lo sentía segregando pre semen, delineé el borde de la circuncisión y succioné de su orificio.
-Ahh~-
Sonreí sin dejar de lamer su falo, su glande es tan, excitante. Seguí pasando mi lengua por el borde, quería probarlo y disfrutarlo a la perfección, pasé la saliva que había acumulado para atrapar con mis labios el resto de su miembro.
Comencé a marcar un vaivén lento, presionaba con mis labios su falo y marcaba un vaivén lento, sentía su glande en mi garganta, sentía mi miembro punzar contra mi pantalón y las manos de Yifan en mi cabello, enredaba sus dedos en mis mechones así que dejé que me manipulara.