-Se te ve hermoso.- fruncí el entrecejo un poco incómodo, miré por el espejo hasta ver a mi mamá, tenía los brazos cruzados sosteniendo mi playera y la chaqueta. –¿Te gusta?- me miré notando el saco negro y la corbata azul marino.
-No.- susurré, aunque se siente muy cómodo y sé que a Taemin le gustaría verme así. –Pero si digo que sí, ¿ya nos vamos?- me giré sobre mis talones para mirarla.
-No, entonces buscaremos uno más.-
-Tengo un saco que me consiguió Taemin hace un tiempo.- el de plumas. –Podría usar ese.-
-Ya vi cómo es el traje de Taemin y estoy buscando uno que se asemeje a ese.- ¿qué?
-¿Ya vio el de Taemin?- pregunté sonriendo.
-Sólo te diré que es negro.- asentí y me miré de nuevo en el espejo, incluso acomodé las solapas y me sonreí. –Se verá muy guapo cuando lo tenga puesto. Y no quiero que entre ustedes él se robe el protagonismo, por eso quiero que encuentres uno en el que te sientas cómodo.-
-¿Pero tiene que ser hoy?- ya es cerca del medio día, Taemin no me ha vuelto a hablar y acabo de acordarme de Nicky. –No estoy cómodo.- me quité el saco y lo doblé como me lo entregó la señorita. –De verdad, mamá, quiero irme.-
-Vámonos, pero después quiero que busques tu traje.- asentí por eso, salí del probador detrás de mi mamá.
-Key me ayudará.- contesté. –Pero ahora vámonos.-
…
-¿Taemin?- pregunté cuando escuché que tomó mi llamada, ya estaba en mi habitación abriendo mi ventana. –Acabo de llegar, ¿estás enojado?-
-¿Recién llegaste? ¿No es muy tarde?- miré el reloj despertador, las trece horas. –¿Estás cansado? ¿Comiste algo?-
-Sí a todo, pero dime ¿estás molesto? Se supone que era un fin de semana de pareja.- me quería acostar en mi cama pero será mejor ir a verlo.
-La semana siguiente también tendrán sábado y domingo, lo investigué hoy en internet.- sólo tomé mi chaqueta y caminé para salir de mi habitación. –Así que descuida.-
-¿Estás en tu casa?- pregunté bajando las escaleras. –Voy a salir.- susurré mirando a mi mamá que estaba en la cocina.
-Cuídate.- contestó así que asentí lento, le indiqué que iba a tomar las llaves del auto pero me dijo que no, no me pareció mala idea así que asentí. Supongo que no tiene gasolina o sólo no quiere que lo maneje hoy.
-Entonces te espero.- asentí saliendo de mi casa. –Aún hay un pedacito del domingo que podemos salvar.-
-Lo sé, por eso me recién llegué pensé en ir contigo.- contesté suspirando intentando no bostezar. –¿Ya hiciste tu tarea?-
-Sí, hoy en la mañana aproveché que no estabas. Así que básicamente, tengo todo el domingo para nosotros.- asentí sonriendo.
…
-Ya te vi.- susurré notando como Taemin lanzaba el disco para que Jocker fuera tras de él, luego volteó por encima de su hombro entonces le saludé.
-¡Yo también!-
-Creo que deberíamos de finalizar ahora.- susurré por la bocina del celular para saludarlo también.
-Jocker va contigo.- escuché incluso su risita al tomar el disco del hocico de Jocker, no irá a… -¡Ve con Minho, amigo!- odio mis reflejos porque tomé el disco.
-¡No, no, alto, para, para!- quise detener al perro mostrando mis manos y que no soy peligroso, como lo dice el manual, pero terminó saltando por el disco. –Ahh~ ¡Jocker!-
-¡Jocker!- sentí que su lengua húmeda y grande pasaba por toda mi cara. –¡Hey! ¡No, eso sólo yo!- ¿qué? Pero igual agradezco que me lo sacara de encima. –¿Estás bien?- me senté en la acera y limpié mi cara de la saliva del perro, luego miré a Taemin. –Te quiere mucho, pues.-
-Lo noté.- contesté levantándome del suelo y sacudiendo mi ropa, ¡¿mi celular?! Ah~ en el suelo.
-Lo siento.- negué mientras Taemin me lo entregaba. –¿Cómo te fue en Ciudad Universitaria?- le puso la correa a Jocker y comenzamos a caminar hacia su casa.
-No quiero hablar de eso.- susurré, ya pasamos su casa. –Oye…- apunté por encima de mi hombro pues sigue caminando como si nada.
-¿De qué quiera hablar?- preguntó aun caminando, supongo que estamos paseando a Jocker así que me encogí de hombros y suspiré. –¿Del clima?- me miró sonriendo, sentí cómo mis mejillas se tornaban rojas.
-De lo que desayunaste, de lo que me quieras contar.- juré no volver a hablar con Taemin acerca del clima, ni del pasto o cualquier otra trivialidad.
-De que noté que desde que tengo novio descuido mucho a Jocker.-
-¿Sí?- ahora me siento un poco culpable por el otro Jocker, quizá si Taemin no pasara mucho tiempo conmigo se hubiera dado cuenta de que estaba mal, porque si recuerdo bien, fue su mamá quien lo llevó al veterinario. –Vaya.- ¿yo lo maté?