-“Si tan sólo pudiera entender, lo que ahora mismo piensas” –se decía-
-“Me pregunto, si esto que está sucediendo es normal... ¿Valdrá la pena seguir adelante? Me prometí a mí mismo ser lo más fuerte posible desde que terminó aquel suplicio... No quiero romperme otra vez... Pero con Kakashi, ¿Por qué las cosas tienen que ser tan diferentes? Es como si en verdad...”
-“¿Acaso lo que siente por mí, será real? –Pensaba Kakashi- he intentado hasta el cansancio acercarme todo lo que se pueda. Sasuke es de piedra, no se rinde fácilmente, y aun así... Es tan susceptible a todo lo que le rodea... Tal vez eso me guste. Al fin y al cabo es tan sólo un chico asustado con la vida. La odia y la maldice cuando duerme... Tratando de aparentar que nada malo le pasa, que nada malo lo corroe, cuando en verdad... Se está callando a pedazos, incluso si es así él... Trata de cualquier forma posible de no mostrarlo, es tan ilógico pensar que es de esas personas que nada las inmuta, cuando la verdad es otra.
La mente de Sasuke es tan frágil, que podría caerse en cualquier momento; es sorprendente que hasta la fecha no haya tenido un verdadero colapso... Al menos hasta donde yo tengo entendido, no lo ha sufrido todavía... Y tampoco quisiera que lo sufriera... Quisiera estar aquí para él, siempre. Pero, ¿realmente me dejará estarlo? He luchado incansablemente por recuperarlo, aunque reciba solo migajas de su parte. Tampoco es que me importe mucho, quiero pensar que en el fondo realmente me ama. Todo indica que es así, de lo contrario no hubiera sufrido tanto mi ausencia... Tampoco es que me maraville por lo que hice, pero ciertamente su futuro estaba en juego, y no podía permitir que se fuera a la borda. Especialmente por una bola de niños envidiosos como esos.
Como me hubiera gustado, hacer algo contra ellos... Pero al final los padres de Sasuke dejaron todo arreglado. Lamento la forma en la que nos ataron... Creo que no sanará hasta que en verdad cierre ese ciclo, aunque eso implique tener que verlos de nuevo. Y pensar que toda la culpa fue de Naruto y Karin... Y justamente cuando estaba pasando una época tan dolorosa en su vida. Creo que los chicos hoy en día no tienen juicio, no razonan, no piensan, ya no sienten nada... Haberle hecho “eso” a Sasuke... Y solo por envidia, por tenerle coraje, por no haberlo querido nunca ni como compañero ni como amigo... ¿De verdad las academias permiten la entrada a gente así?
¿Por qué no dejas que me acerque más? Necesito hacerlo para poder ayudarte... Ábrete conmigo como lo hacías antes Sasuke, por favor, déjame resolver esto por ti...”
-“No quisiera, convertirme en una carga para Kakashi. Siempre lo inundo de problemas y cosas que seguramente lo tienen sin interés alguno. Al final, él ya ha de haber pasado por todo esto, sino es que cosas peores... A veces siento como si fuera un niño tonto que viene a correr para esconderse atrás de él... No puedo permitirme eso, es imposible... He recibido ya suficiente de su ayuda como para pedir más, es como si... No puedo... Yo debo de cargar con todo esto, además no es que me cueste tanto trabajo, y mi mente aun funciona lo suficiente... Aunque a veces ni siquiera sé si lo que estoy viendo es real o no. A veces cuando todo se desmorona, me digo que tal vez sería bueno ceder y dejar a alguien más entrar, pero... Al final mi cordura me gana, y no puedo… ni si quiera si se trata de Kakashi.
En otro sentido, me da demasiada... Pena, el ir y plantarme frente a frente sólo para pedir ayuda... Seguramente está ocupado con cosas realmente importantes como para que todavía venga con cosas de niños tontos... Yo.... Yo.... Quiero derrumbarme en los brazos de alguien, llorarle a alguien y dejar que me abrace. La verdad es que desde hace mucho me siento así pero no puedo aceptarlo públicamente. Solo puedo pensar cuando me estoy durmiendo, al menos no siento realmente el dolor cuando lo estoy haciendo. Cada día mi mente me pide a gritos que la deje descansar, quiero ya no torturarme con todo eso pero... Es inevitable, cuando algo me llega a la mente, es... Confuso, me provoca... Un gran disturbio, y cuando trato de escapar, la sensación es tan grande, que terminó con un colapso, tras otro... Tras otro. Por lo menos nadie se ha enterado de eso. Actualmente debería tomar medicamentos, pero no quiero... No los quiero, porque cuando comencé con ellos me perdía aún más de la realidad... No quiero sentirme así. Sólo quiero paz, un poco de paz es lo que necesito.
¿Qué podría hacer? Cada vez que escribo es como hundirme más en el fango que tengo entre las piernas. Entre más lucho, más me hundo, y aun así prefiero escribir y dejar que mi mente se pierda... Al menos en algunas ocasiones se ha perdido en cosas bellas... Kakashi siempre ha dicho que tengo talento para escribir, quiero ser escritor... Mi mente y mi vida están lo demasiado quebrados como para poder hacerlo. Mi alma esta tan adolorida que puedo plasmar una gran historia con todos los sentimientos encontrados en ella. Puedo marcar mi esencia en cada renglón, dejando a todos impactados por la verdad de las heridas y lo sangrante de cada oración. Muchas veces parecen historias de mentira, cuando en realidad los lectores son más que ficción. Siempre que alguien logra percibir lo que declaró entre líneas, llega la cruda decepción....
En teoría eso debe de ser bueno para cada tipo de libro y cada ocasión, pero la verdad es que con cada relato que pasa pierdo más la razón... Porque imprimo una parte de mi alma que ya no tiene salvación....
Actualmente, para la clase de Kakashi estoy preparando un nuevo relato... No sé como lo tome; la historia está basada en los dos, no sé que hacer a ciencia cierta... Me da curiosidad la objetividad que pueda llegar a tener... Pero la verdad es que también me aterra, lo que de mi llegue a creer…. Lo que más me da tristeza es que todo esto que pienso no se lo puedo decir… simplemente… no puedo” –Sasuke no dejaba de pensar todas esas cosas a velocidad luz, mientras Kakashi lo empujaba ligeramente hacia atrás para tirarlo en la cama. Se colocó arriba de él, con suma elegancia como siempre. Ambos se miraron, ambos captaron que sus mentes estaban en otro lado, pensando tal vez, cosas importantes, tratando de aclarar sus ideas; y a pesar de eso, se sentía como antes.
Esa emoción intensa y exquisita, de saber lo que está a punto de pasar, ese calor que excita, ese respirar que insinúa a llevar algo más…
Kakashi comenzó a besar su cuello, y a tocar su pecho. Sasuke comenzaba a reaccionar, dado que pasó uno de sus brazos por detrás de la cabeza del mayor para sujetarlo de la nuca con fuerza, y así jalarlo a sus labios, besarlo, tan fuerte, que parecía que estaban a punto de sangrar; Sasuke mordió el labio inferior del de los cabellos grises, provocando un gemido suave en él… pareciendo entonces que al fin… ambos habían despertado….
-“¿Cuándo entenderá que yo siempre lo voy a querer? No importa lo que pase... ¿Cómo le hago ver que no tenga miedo a equivocarse o a pensar como realmente lo hace? Si al final lo que más me gusta es como es en verdad, cuando no hay nadie, y sólo estamos los dos... Este chico en todos los sentidos me vuelve loco. Muchas veces no tengo idea de que hacer, pero a su vez, cuando lo miro, en sus ojos siempre me quiero perder... Sasuke, deja de dudar y se cómo tu eres... Que es lo que en verdad me gusta de ti... Tan elegante y tan sensual, veneno natural que en las noches se deshace... Robaste todo de mí, has sacado lo mejor de mí hasta este momento... Y lo único que quiero es que seas feliz conmigo. Yo puedo darte lo que necesitas, tú puedes darme lo que necesitas, simplemente... Déjate fluir, déjate llevar... Si llegas a caerte, yo te sostendré por detrás... No temas, para protegerte aquí estaré yo, para que incluso en el final, nadie te haga daño yo... Lo único que quiero es a ti.... ¿Acaso lo único que tu quisieras es a mí? ¿Qué es lo que piensas Sasuke? ¿Qué es lo que en verdad piensas? Si tan sólo pudiera decirte todo esto… ¿pero cómo lo hago? ¿Cómo lo hago para que aceptes y no me des la vuelta como siempre? –se decía
-¿Kakashi? –hablaba por debajo, en un leve suspiro-
-¿Qué sucede Sasuke? –levantó la mirada para encontrarse con los ojos negros del menor
-Yo… no quiero perderte… nunca más –agachaba la cabeza-
-Eso no volverá a pasar –trataba de buscar de nuevo su mirada. Comenzaba a anochecer y al ser casi otoño, la oscuridad comenzaba a reinar en esa habitación; por lo cual le era más difícil para Kakashi poder ver las verdaderas reacciones de Sasuke.- Te lo prometo
-Me da miedo que prometas… en el pasado lo hiciste y…
-¿Cuándo entenderás que eso fue en el pasado? Hoy es hoy, este es nuestro presente, las cosas han cambiado, eso no volverá a suceder, ¿qué puedo hacer para que lo entiendas?
-Lo siento… -agachaba más la cabeza-
-Sólo… corre hacia mí –suspiraba- cuando haya algo que te aqueje o te moleste, siempre estaré aquí, -sonreía- Sasuke, mírame –lo tomaba del mentón- nada malo volverá a suceder, de ahora en adelante estaremos juntos, no importa que pase… será diferente, esta vez nada ni nadie nos separará… ¿confías en mí?
-Confío…
-Entonces déjame llevar la batuta esta vez, tú ya has hecho mucho –volvía a aprisionarlo contra la cabecera de su cama- ¿de acuerdo?
-De acuerdo –suspiraba a punto de romperse en la debilidad que tanto había ocultado hasta el momento- voy… a dejarte entrar, esta vez… -puesto que se encontraban sentados en la cama, delicadamente abría las piernas para dejar a Kakashi acercarse más; entendiendo a Sasuke, y estando frente a frente, lo tomó de las caderas para ayudarlo a impulsarse y sentarse sobre él. Las manos del mayor recorrían su cintura, el cuello y espalda de Sasuke, rasguñándolo, agitándolo, a lo que el respondía mordiendo el lóbulo de la oreja del mayor, pasando ambos brazos por su cuello para atraerlo más hacia él, sentirlo con más fuerza, dejar que los besos que le propinaba por todo el cuerpo fueran con más intensidad. La cabeza de Sasuke giraba de un lado a otro, de una forma suave y sutil, para darle espacio a Kakashi para besar cada centímetro de su piel. El chico cerraba los ojos, dejándose llevar por la sensación, con manos algo temblorosas y muy frías comenzaba a delinear con las yemas de los dedos, la espalda bien ejercitada del mayor; se estremecía levemente al sentir a Sasuke tan frío…
Kakashi bajaba más las manos, llegando hasta los glúteos de Sasuke, los apretaba levemente, los acariciaba, los hacía parte de sí mismo. Con cuidado, una de ellas pasó al cierre del pantalón, para bajarlo y empezar a bajarlo con calma y serenidad; los suspiros y un leve sonrojo en el rostro de Sasuke se hacían cada vez más evidentes. Su cuerpo correspondía, sus caderas reaccionaban moviéndose en círculos justo por arriba del pantalón de Kakashi. Lo aprisionaba con ambas piernas; con fuerza, con presión, para sentirlo por completo. Sasuke le quitaba la bufanda, camisa y comenzaba a abrir su pantalón, quería quitarlo del camino de una vez. Tuvo que levantarse para que Kakashi le terminara de quitar toda la ropa, y que él mismo se quitara lo que le faltara.
Volvieron a besarse, derritiéndose en los brazos del otro, Sasuke estaba debajo de Kakashi, dejándose hacer por él, dejándose llevar, realmente lo disfrutaba, comenzaba a sentirse vivo de nuevo. Y Kakashi bajó aún más, para meter en su boca el miembro ya erecto del menor, lo movía de arriba abajo y de regreso, desde la punta hasta el fondo, mordiéndolo y masajeándolo; provocando en Sasuke toda una serie de sensaciones por las cuales no podía dejar de gemir, cada vez un poco más alto.
Al notar que todo su cuerpo se relajaba, Kakashi aprovechó para tratar de introducir un dedo en él; paró un momento y comenzó a masajear la entrada que de hecho se encontraba ya algo dilatada. No le fue muy difícil posicionar el primer dedo y luego meter un segundo. Los movía en círculos, tenía las piernas de Sasuke abiertas y levantadas por completo, arriba de sus hombros, el verlo era tan erótico; su cuerpo cedía y los gemidos del chico lo hacían tener más ansias de poder entrar por completo. Terminó con un tercer dedo, y ya que estaba lo suficientemente dilatada, se levantó, miró al chico, éste le regresó la mirada, ni siquiera necesitaron palabras para comprender lo que proseguía.
Kakashi colocó su miembro en la entrada y fue entrando poco en poco, al parecer no le molestaba tanto a Sasuke, a pesar de que ya tenía el tiempo suficiente de dejar de tener ese tipo de sensaciones. Entró por completo de una sola estocada, provocando que la espalda de Sasuke se arqueara lo suficiente como para que sus gemidos fueran silenciados entre las sábanas color crema de su cama.
Se movía suavemente para después hacerlo con más fuerza y más profundidad, Sasuke se aferraba de las orillas de la cama, mientras que el mayor levantaba más sus piernas, llevándolo a una posición un tanto incómoda pero a su vez demasiado placentera como para dejarlas bajar.
El chico movía la cadera con fuerza, para dejarle a Kakashi entrar más profundo, dejaba que lo tomara por completo, esa noche se estaba entregando de nuevo a él; más deseoso más ansioso y pasional que la última vez. De un momento a otro, Sasuke se encontraba de nuevo sentado en él; el chico llevaba el ritmo de cada penetración mientras que el otro lo masturbaba con una mano y con la otra lo tomaba de la nuca para besarlo fuerte. Se cruzaban sus miradas y los suspiros de los dos; conforme pasaba el tiempo Sasuke gemía más fuerte, mientras Kakashi lo penetraba más, cada aliento que emanaba se convertía en grito, en lujuria, en placer… Sasuke enloquecía de sobremanera, Kakashi lograba sacar en él, la poca vida que le quedaba; al parecer el vacío estando con él desaparecía. Sólo le quedaba algo; ese sentimiento de sentirse amado, pleno, y deseado por alguien.
Sasuke miraba hacia el techo de su recámara gritaba con fuerza, se movía con rapidez, estaba llegando al clímax; abrió sus ojos de par en par, al sentirse inundado por Kakashi, al parecer había acabado unos momentos antes de él. Pero al tener tantas emociones juntas, terminó casi de inmediato que el mayor.
-Sasuke…
-…….-acariciaba suavemente el rostro de Kakashi-
-¿No fue muy rápido?
-Descuida… -sólo se alcanzaba a ver una ligera sonrisa- está bien
-Yo… es sólo que te extrañaba mucho
-Y yo a ti… Kakashi –agachó la mirada y lo único que el mayor pudo sentir fue, como algo en su abdomen lo mojaba. Era parecido a…-
-¿Estás llorando? –Kakashi colocó sus codos en la cama para intentar sentarse-
-Estoy bien –la voz de Sasuke se oía algo apagada-
-¿Hice algo mal?
-No es eso
-¿Entonces?
-No es nada
-¿Sasuke? Creí que ya habíamos quedado en algo
-Lo sé
-¿Entonces?
-………….
-¿No me vas a decir? –En ese momento Sasuke lo empujó de nuevo a la cama, y lo abrazó con todas las fuerzas que tenía en ese momento-
-Es sólo… que soy muy feliz
-Kakashi sólo pudo abrir los ojos de la impresión-
-Sigo sin poder creer, que al fin hayas regresado. Es como si me hubieras dejado en el parque… y nunca más hubieras vuelto por mí…
-Sasuke… -no podía evitar sonreír y sentirse feliz también. Alejaba un poco el rostro del chico que se encontraba en su pecho para poder verlo directamente a los ojos-
-Pero ya he vuelto por ti –sonreía- bienvenido a casa… Sasuke
-No pudo evitar seguir llorando mientras Kakashi lo acariciaba suavemente- Voy a hacerte feliz esta vez…
-Puedes empezar con algo…-su voz cambiaba a un poco más serena y alegre-
-¿Qué?
-Repetir… fue muy rápido… y tienes que complacerme –de nuevo parecía más él-
-¿Sabes algo? –Lo miraba- extrañaba esa pasión tan grande que hay en ti –ambos se sonrieron para seguir con lo suyo. Al menos una cosa les quedaba claro. Esa noche definitivamente no dormirían ni una hora-