Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

La lluvia entre la Luna por -oOYUKI-NII-Oo

[Reviews - 12]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

∞ Titulo: "La lluvia entre la luna"
∞ Autor:YUKI-NII.
∞ Género: Friendship
∞Ranting NC17
∞ N/A Haikyuu no me pertenece. Todo es de su gran autor, Haruichi Furadate
∞ Resumen: Y hubo un momento donde los truenos fueron demasiados intensos, donde descubrió el miedo de Hinata y quiso, pese a sus propias barreras, cubrirlos con música de jazz a todo volumen y sus ojos fijos. Para que Hinata dejara de temblar, para que su corazón dejara de traicionarlo pero más importante aún, para no terminar enamorado.
.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:. .:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.

Sus ojos se encuentran a través de la multitud que va saliendo despacio por la entrada principal de la escuela. A Hinata se le hace mágico, el cómo las pupilas ámbar de Kenma se dilatan de a poco, como un gato viendo a través de la oscuridad una pequeña luz que le guiara a casa. La carnada de Karasuno le sonríe, ladeando un poco la cabeza, antes de comenzar a caminar para dirigirse hasta el setter.

Kenma guarda su nueva consola de PSP vita, y se mantiene quieto, para que Hinata no le pierda de vista, se va moviendo, danzando entre los estudiantes de Nekoma que se dirigen hasta sus actividades extraescolares y con el sol de media tarde redibujándole el aura, un pequeño pajarillo sumergiéndose entre la gente y dando saltitos para no perder la noción de la dirección hacia donde vea. Pronto la conmoción por la llegada de un autobús foráneo estacionado cerca de la entrada llama la atención de todos los demás jugadores de su esquipo que ya iban camino al gimnasio.

Ha sido inevitable cuando ambos se han visto, Taketora ha corrido como un niño pequeño persiguiendo a su más grande estrella, Takeda no se ha contenido tampoco, yendo directamente a los brazos del bloqueador de Nekoma, ambos con lagrimas en los ojos y siendo solo entre ellos mismos, los que entiendan los balbuceos que se dicen. Suga y Yaku han pensado en intervenir pero ha sido su manager la responsable de separarlos al pasar por el medio de ese apretado abrazo, abriéndose paso de forma natural y marcada y así llevar hasta la entrada del gimnasio con un par de maletas que contienen los almuerzos y bebidas de esa tarde.

Ambos se han soltado como si fuera una orden dada por telepatía de la chica. Yanchi que le sigue detrás no puede evitar soltar una risita ante la meuca el par de bloqueadores tienen en ese momento con ese escenario de manga shojo tras de ellos plagado de brillos y rosa floreciendo.

Karasuno ha llegado dos horas antes de lo planeado y Kozume no puede estar más satisfecho con eso. Pues significa que los entrenadores deberán reunirse para organizar todo y la practica será cancelada. En honor a la verdad Kenma no se encontraba de ánimos –no es que regularmente lo esté – para tener un juego en ese momento, demasiado enfurruñado al enterarse esa mañana que él sería quien alojara a Tsukishima, todo porque Kuroo dudo seriamente de él y sus hormonas revolucionadas ante esa chica de primer grado que se le ha estado insinuando.

r13;Si Tsukki está ahí, todo será tan incomodo. Ese cuatro ojos se darán cuenta si ella va a casa, o mucho peor, ella podría enamorarse de él. Déjame a chibi, podre engañarlo con cualquier cosa. Además solo causa ternura, igual que tu.

Kenma que siempre se ha considerado paciente con su mejor amigo, pauso su nuevo juego RPG solo para darle una certera patada en la espinilla al capitán, por su última declaración sobre él siendo tierno junto a Shoyo. Kuroo lo miro mal antes de subir ambos hombros y dejarlo pasar. El de cabellos rubio teñido nunca confeso que tal chica ya no existía, no es como si él de verdad fuese a tragarse eso, era un observador innato y Kuroo había rechazado a la chica días atrás, eso era más sospechoso todavía.

"No he visto a Shoyo en tres meses. Así que no quiero."

"Venga Kenma, hagamos un trato. Ya que has gastado todo tu dinero de este mes en tu nueva consola, te daré un juego para ella".

"No lo quiero.

"No seas terco, tómalo como una orden de tu capitán. No te presentes como un candidato para alojarlo, lo hare yo".

"No"

Kenma comenzaba a enfadarse de verdad con ese jueguito de Kuroo. El más alto dejo caer su cabeza hacia atrás de forma cansada, él sabía desde un principio que no sería fácil hacer que su mejor amigo desistiera de dejar a chibi, cuando desde un primer momento se había notado la fascinación que sentía por él al verle jugar. Sin embargo no había dudado en atacar a Yamaguchi con mensajes por celular ante la reforzada frialdad con la que el bloqueador ahora contestaba a su Whatsapp, el pobre tirador del flotante termino confesando como último recurso y con más resistencia de la que aparentaba que Tsukki estaba actuando de forma extraña desde un incidente con Hinata y nada mas saldría de él. La fidelidad de Yamaguchi era digna de alabar pero el de cabellos negros tan solo había obtenido un acertijo que resolver contra tiempo, averiguar qué era lo que tenía últimamente distraído al bloqueador del equipo lo suficiente como para que su capitán le llamara la atención.

El problema dentro de todo, Tsukishima nunca diría que es lo que le pasaba, Testsurô dudaba que existiera una forma ortodoxa de hacer que el alto rubio hablara por su cuenta, era por eso que debía acorralar al chibi. Él si cantaría como un cuervito bebe.

Kenma no se lo iba a poner tan fácil, desplegando toda su presencia para tener bajo su protección a Hinata. Lo veía ahí, con el ceño fruncido y una línea de boca, esperando por su próximo movimiento. Ellos que se conocían de niños sabían que esto estaba a punto de convertirse en una batalla, de esas en las que Kuroo insistiría hasta el cansancio para hacerle ceder, Kenma nunca había podido resistir tanto el alboroto que el más alto armaba. Esta figuraba como una muy posible en convertirse en la primera vez que Kuroo perdería.


"Lo veras durante las prácticas y puedes ir a mi casa si quieres pasar más tiempo con él".

 "¿Por qué querría algo así, cuando puede quedarse conmigo?"

"Él es diferente, quiere jugar a todas horas del día, quiere ser el mejor. No existe otra cosa en su cabeza que no sea el voleibol, lo sabes ".Le acuso despiadadamente. Kenma pretendió no escucharlo. Y continúo en su posición.

"Se quedara conmigo".

"No, si puedo evitarlo".

Y se dio la media vuelta, dejando a un Kenma meditabundo, no parecía molesto, su rostro ya no expresaba nada. Eso solo asusto mas a Kuroo, eso no era buena señal. El capitán sintió como si hubiera querido arrebatarle su más valioso juego al setter y que si lo lograban las consecuencias serian inimaginables. Trato de ignorar el escalofrió en su espina dorsal y se dirigió hasta el gimnasio para hablar con el entrenador y arreglar todo para que chibi se quedara con él.

Y pensó, que todo lo que estaba haciendo por ese cuatro ojos, aún si que lo supiera, seria cobrado con creces después, si es que sobrevivía a la mente de Kenma.

.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:. .:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.
Set 4.
.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:. .:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.:.

Hinata entra un poco tembloroso y sin saber muy bien si quedarse parado en la puerta o comenzar a seguir a Kuroo por toda su casa. El capitán parece estar revisando cada habitación del primer piso. Da una vuelta por la cocina y sale por el comedor. Recorre la sala y apaga el televisor que esta silencioso y que solo servía para iluminar el lugar. Enciende la luz en cambio y regresa hasta donde Hinata, quien continúa mirando todo de manera curiosa.

Se nota que está nervioso, tiene un leve tic en la mejilla que no estaba ahí hasta que Kenma fue obligado a irse por la hora, y las indirectas desagradables de Tsukishima sobre lo tarde que era y lo temprano que tendría que estar al día siguiente para el calentamiento y la práctica.

Todos habían terminando hablando sobre la inter hight que se acercaba y el futuro campamento que llevaría a Karasuno a Tokio en tan solo dos semanas más, junto a otros equipos que les ayudaría Ambos capitanes tuvieron que darle la razón, y después de recoger los vasos y platos de la cena improvisada a las afueras del gimnasio cada quien siguió a su respectivo alojador.

O al menos eso pretendió hacer él junto a un sonriente peli naranja que reía ante alguna mala mueca del gran rey, Kenma interfirió en el paso, mirada fija en la partida, voz baja.

"Si molestas a Shoyo…

"Tranquilo, nada pasara. Mejor concéntrate en Tsukki, puede llegar a ser un poco…Sabes que, olvídalo. Tú podrás manejarlo a la perfección".Kuroo le sonríe, cabello cayendo hacia un lado y brillo de ojos a través de la oscuridad

Kenma lo vio por unos segundos, antes de que Hinata se acercara hasta él, preguntándole por decima vez si es que no podía cambiar con Tsukishima e irse con él. El Kozume arqueo las cejas ante el tono necesitado del peli naranja, para después darle una mirada cansada a Kuroo, que tenía promesas de ley de hielo y sabotaje.

"El entrenador fue el que escogió eso. Así que no puedo cambiarlo Shoyo".

"Podríamos hacer un intento, tal vez con Lev o Yaku-San. Por favor".

Kenma querida decirle que Kuroo era un idiota pero no una mala persona, después recordó porque es que Shoyo no se iba a quedar con él, y el sentimiento de consuelo se convirtió en algo muy parecido a la molestia. Así que solo tomo mucho aire y le paso su PS Vita a Hinata.

"Puedes ignorarlo con esto".

Hinata parpadeo igual de sorprendido que Kuroo y el equipo entero que habían visto desde lejos como el peli naranja se resistía a irse, todos lo adjudicaran a su decepción por no haber podido jugar ni una vez en el gimnasio.

Tsukishima en cambio, se había detenido a observar cómo es que Hinata entraba en pánico, como rechaza el aparato que se le daba y miraba hacia todos lados como si buscara ayuda.

Al final el setter solo tomo la mano del peli naranja con naturalidad y deposito su consola en ella.

"Tiene pocos juegos pero servirá".

Y sin más se retiro.

Hinata siente la consola portátil contra su espalda, la ha metido en su mochila a la primera oportunidad, continua esperando en la entrada principal, Kuroo lo mira, manos en la cadera y sonrisa de medio lado.

"Puedes entrar. Mi cuarto es el primero a la derecha al subir las escaleras, iré por el futon y unas mantas".

Shoyo asiente, como si le digieran que fuera directo a la boca del lobo y observa la habitación, está plagada con posters de jugadores internacionales, sus ojos recorren las paredes hasta llegar a un punto especifico, de una esquina cuelga un candelario que le hace sentir como las mejillas se le calientan, hay una chica recostada sobre la arena, le falta la parte superior de su traje de baño y se cubre con sus brazos, tiene un ojo cerrado y parece coquetearle a la cámara, su vista de ojos color oscuro fijos, como si estuviesen viéndote a trapes del papel, es un efecto que le hace tragar en seco.

"Si, mi querida Hana-chan siempre provoca eso"

Hinata da un respingo y gira para ver la sonrisa ladina de Kuroo que se alza de hombros como si le perdonase haberse quedado a solas con la chica del calendario. Se inclina para destender el futon, puede casi ver como humo saldrá de las orejas del más pequeño que balbucea y mueve sus manos en todas direcciones como si le hiciese falta justificarse.

"No me digas, chibi-chan que jamás has visto un par de estas". Kuroo hace un movimiento en forma circular delante de sus pectorales, si porque no ha salido solo por el futon, sino que ahora viste el pantalón de un pijama desgastado. Lo ve negar apresuradamente, Kuroo piensa ahora que si existe la manera de morirse de vergüenza, Hinata parece un candidato en potencia para que esa teoría se vuelva una verdad. Kenma va a asesinarle si eso pasa. "Eres de primer año, y tu cabeza solo está llena de voleibol los cambios no parecen haber llegado aún en ti".

"Cambios, ¿Cuáles cambios?"

Kuroo termina de poner una de las dos almohadas que tiene y suspira, porque no, él no va tener esa charla con el más pequeño de los cuervos, eso era para el capitán y el setter de tercer año que parecen más un matrimonio antiguo que simplemente mejores amigos, “esos dos tienen algo, puedo olerlo en el aire” así que se deja caer sobre esa cama improvisada y toma mucho aire.

"Estoy seguro que tienes clases de biología humana y anatomía chibi-chan, un libro puede explicarlo mejor que yo".

Hinata mueve la cabeza hacia un lado confundido, no sabe que tiene que ver los cambios con los libros, porque de hecho él no puede recordar nada sobre esos cursos que paso como un milagro sustentado por Yanchi y los métodos espartanos de Tsukishima. Un leve escalofrió le recorre el cuerpo de solo recordar al rubio mirándole desde arriba, con un reflejo aterrador sobre los lentes y robándole el bollo de carne como compensación por hacerle perder el tiempo con un cabeza hueca como él.

"Bien, supongo que subestime tu capacidad para recordar clases al parecer "porque ahora que Kuroo ponía atención Hinata tenía toda la imagen de ser el tipo de estudiante que solo estudia antes de un examen y al terminarlo se resetea, es como una computadora deshaciéndose de información que no considera valiosa "Si tanto quieres saber puedes preguntarle al Setter de tercer año, ese el del lunar en el ojo".

"¡Suga-san!"Grita de pronto, poniendo un puño sobre su palma abierta como si hubiese sido iluminado de repente con la respuesta correcta de ese laberinto en el que Kuroo le había empujado "los cambios de los que habla Kuroo-san no sería mejor preguntárselos a Kageyama, él es después de todo quien levanta para mí en los partidos".

"¿Partidos, Kageyama? ¿De qué hablas chibi-chan?"

"De los cambios Kuroo-san"

Kuroo entonces lo entiende, no se trata de que el problema sea Tsukishima, Hinata se sienta frente a él y comienza, como no, hablar sobre el entrenamiento que se ha impuesto con Kageyama como una forma de competencia entre ellos, se queja, salta, lloriquea y en cierto punto parece deprimirse, para después darse ánimos a sí mismo y continuar sobre la afición del rey por la leche sabor fresa y la mirada aterradora que pone cuando se enoja. Kuroo solo asiente para no hacer sentir al pequeño que no le está prestando atención, la mente del capitán de Nekoma solo puede imaginar cuan frustrado debe de sentirse el cuatro ojos por haberse dado cuenta que le gusta un idiota. Sonríe, por el karma que persigue al rubio a la vez que el gesto alienta a Hinata para relatar sobre que será la estrella de Karasuno.

"¿Sueles decirle rey a Kageyama? "pregunta después de la quinta vez que Hinata se ha puesto en plan imitador, con una corona improvisada y la sabana como capa. Le mira unos momentos antes de asentir.

"A Kageyama le molesta, pero ese el apodo con el que es conocido. No le gusta mucho y siempre me golpea cuando lo llamo de esa manera, pero es verdad. Kageyama es un genio, puede hacer cualquier clase de levantada con el balón y ama el voleibol como yo, queremos derrotar al gran rey, Oikawa-san, él es mejor que Kageyama así que se esfuerza por superarlo".

Kuroo le observa, el brillo en los ojos, lo ha visto antes en Hinata ¿a quien ve de esa forma, a quien? Hinata se deja caer de forma agotada sobre el futon, y el capitán le hace espacio, porque ahora puede comprender que la situación que rodea a la carnada es más complicada de lo que él creía.

"Kuroo-san". Le llama con voz adormilada después de estar más de una hora hablando y que Kuroo haya puesto fin, para poder descansar y madrugar.

 "¿Si? ". Kuroo camina hasta la puerta en donde está el interruptor para apagar la luz.

"Creo que después de todo no necesitare el videojuego que me dio Kenma"

La oscuridad cae sobre el cuarto y Kuroo siente que es él quien a entrado en un juego peligroso con Tsukishima, Kageyama y Kenma en una guerra que esta por explotar.

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).