Como la quinta Hokage tengo que resolver esto, no puedo permitir que lastimen a Naruto, ni a sus hijos.
Itachi realmente le ama, ha pasado tanto tiempo desde que salve a Naruto, me recuerda a mí, me recuerda lo enamorado que esta de Itachi, cómo yo lo estuve de Dan.
Jiraiya ya debió haber llegado, puedo confiar mucho en él, porque estos sentimientos no pasan desapercibidos, sigo amando a Dan pero… No se puede vivir atado al pasado, cada sentimiento llega probablemente a ser algo errante.
Algo de lo que estoy segura, es que quiero ver a las siguientes generaciones hasta el día en que muera.
Estamos cerca de la guarida de Akatsuki, veo que Itachi está muy preocupado, lo entiendo perfectamente, es tan doloroso perder a la persona que más amas.
No importa, volveré a proteger a Naruto como aquella vez, no solo va ser a Naruto, debo proteger a sus hijos porque… Yo soy la única que puede hacer que sus hijos nazcan sanos y salvos.
Estoy al mando de esta batalla y voy a ganarla!
La desesperación que nace en todos, crece cada minuto, salvarlo más que nada es una gran prioridad, no importa que muchos de sus compañeros arriesguen su vida, cada uno de ellos está dispuesto a correr el riesgo.
-Lady Tsunade estamos cera- la voz de Sakura acaparo la atención de su maestra.
-¡Estoy lista!, tenemos que rescatar a tres personas importantes para la aldea.
-Sakura…! ¡Lo has logrado!- la voz de Tsunade fue un poco lacónica, su alumna estaba preparada, le había alcanzado o posiblemente supero.
Itachi siente ese sentimiento que hace vibrar, que cada vez que su mano toca alguna parte de la piel de Naruto, le hace estremecerse y que su corazón lata de una manera inexplicable, todos han sentido ese sentimiento, solo los besos de Naruto le hacen sentir tan bien.
La guarida de Akatsuki está demasiado cerca pero… Se les hace totalmente extraño a los ninjas de Konoha que no les hayan atacado, probablemente les espere alguna trampa más adelante.
-Itachi- la voz que escuchaba no era de su agrado- Por alguna extraña razón, parece que sea algo irónico que nos hayamos puesto de acuerdo en algo- tan tranquilo era Kakashi, es cómo Itachi, solo que Itachi logro superarlo.
-¡Ah sí! ¿Qué significado tiene eso Kakashi?- realmente para Itachi la charla que mantenía con Kakashi no era del todo grato.
-¿Por qué me preguntas algo así? Ya deberías saberlo tú mismo, después de todo eres el prodigio Uchiha.
Sabía perfectamente la respuesta que le tenía que dirigir a Kakashi pero… El oir su voz y de que él es una persona importante para Naruto, tenía tantas ganas de asesinarlo pero no podía y pensar que ese tipo de cabello platinado ama a su Naruto.
Su mirada lacónica que le dirigió a Kakashi era suficiente para Itachi, con una sonrisa de que estaba de acuerdo, estaban juntos, ambos deseaban ver a la persona de la cual se enamoraron.
Las cosas son primordiales, los pensamientos y la preocupación de cada uno de ellos era lo que los mantenía unidos, no significa que todos se odien. Porque se aman es que están unidos todos… No importa quien sea, si fuera alguien cercano a Naruto, él sería el primero en salir.
-Itachi-san- Sakura le hablaba con cierto temor, nunca había socializado con él a solas, solo estaba con Naruto, ciertamente no era el ninja que todos creían.
Hay amor en su corazón y aunque algunos digan que es solo una falsedad, Sakura podía ver la sinceridad de Itachi.
-Dime Sakura- era algo extraño que la pelirosa le hablara, pero le llamo la atención- Qui…Quiero saber, ¿Por qué antes no estabas dispuesto a luchar por Naruto?
Aaquella pregunta resonba en su corazón, Sakura en cierta parte tenía razón, no había peleado por Naruto antes. Trago en sexo dispuesto a contestarle a la que es la mejor amiga de Naruto.
-Sakura… yo- dio un gran suspiro para proseguir- Es cierto que yo no luche por Naruto antes, si estaba enamorado de él, tan enamorado para estar con él, cada hermoso segundo de sentirlo, abrazarlo, decirle todo lo que lo amaba en ese tiempo, Sakura… Yo lo lamento tanto por no lucha antes por él… Soy demasiado débil- las lágrimas resbalaban por sus mejillas en aquellas prominentes ojeras.
Su melancólica sonrisa atraviesa por los ojos de Sakura, a pesar de todo era capaz de sonreír, mostrar sus verdaderos sentimientos.
Sakura pensaba que lo de Itachi era real, a pesar de no conocerlo bien, lo que sentía por Naruto era como si él pudiera rescatar a Natuto, el amor de su vida.
Si Itachi pudiera pensar claramente podría hacerlo solo, pero… aquella desesperación que se ven en un Uchiha es más clara que el agua, porque lo que ellos sientes, es tan sincero y real.
Esta Clan que está regido por un amor ciego, porque eso es algo que nadie entiende… Los pensamientos de Sakura hacia Itachi cree que realmente lo entiende y es verdad porque lo hace.
Es lo mismo que ella siente por Sasuke, comprendía como se siente Itachi, el amar a una persona con todo tu corazón, error… No solo es amar con el corazón, si no amar con el alma.
Porque alguna vez todos han sentido este sentimiento tan abstracto, que realmente para muchos podría ser algo efímero. No era asi, todo aquello es sincero, podría Sakura no lidiar mucho con Itachi pero… al mirar aquella expresión de sinceridad estaba dispuesta a todo, incluso a morir.
Porque aunque ella no pudiera realizar su sueño de que estuviera a lado de Sasuke, le haría muy feliz ver a Naruto con la persona que ama, aun creía en el amor y el de Naruto hacia Itachi era de los más hermosos que había visto.
-Itachi-san- la miraba con cierta curiosidad, la mirada de Sakura había cambiado radicalmente, que decisión habrá tomado aquella chica de cabellos rosados.
-Dime Sakura ¿Qué sucede?- la mirada de aquella chica era tan determinante, que nunca había visto a una chica con aquella determinación, ni siquiera Uzumi que era una chica muy tenaz, pero parece que las nuevas generaciones superan a las antiguas.
-Estoy dispuesta a darlo todo por Naruto es cierto que te pueda parecer algo extraño pero… Creo en ustedes dos, sacrificare mi vida si es necesaria, quiero ver sus sueños realizados.
-¡Sakura! Yo… Yo no sé qué decir, estoy agradecido con cada uno de ustedes. No había conocido a alguien con tanta tenacidad, ni siquiera a mi antigua amante que fue Izumi Uchiha.
-Bueno aquella chica debió ser muy bondadosa, no puedo compararme con ella, tampoco puedo superarla no por el simple hecho de que fue una Uchiha, sino por la gran diferencia de mente que cada una tiene, tampoco ella puede superarme por el mismo simple hecho de cómo somos cada una-Sakura tenía razón, ninguna persona debe ser comparada aunque podríamos sentir admiración por otra, la única forma en que se podría superar a una persona es que seas su aprendiz.
Diferenciamos todo, pero no las personas que son hermosas, esas las admiramos y apreciamos por su belleza, aunque haya diferentes formas de admirar lo que nos gusta de otra persona. Incluso si sentimos más admiración de lo que nos atrajo la belleza que nos cautivos, seriamos capaz de protegerlo.
Definitivamente eso fu lo que le sucedió al prodigio Uchiha, mientras tenía un pensamiento totalmente diferente al de su padre, mientras este comparaba a su pequeño hermano con él, tan complicados eran Fukaku e Itachi teniendo diferentes ideales.
Lo que Itachi admiro de Naruto fue aparte de su belleza adictiva como una droga, a pesar de que era aislado de todos, no era diferente le gustaba jugar y sonreír como todo niño pero… Naruto quería ser algo grande, algo que a las personas que veían ese ideal era muy complicado.
No se había equivocado de que todos los lazo que Naruto había formado eran totalmente reales, y no una vil falacia, fue uniendo las piezas correctas para su propio rompecabezas, para sentirse bien todo lo que ha trabajado por sí solo.
Hay cosas que fluyen de manera espontánea y son maravillosas aparentemente eso existe en la vida de todos, aunque no nos demos cuenta ahí está pasando frente a nuestros ojos.
Ahora comprendía lo que es correcto y lo verdadero, que no son solo cosas abstractas y vagas como lo había planteado, Naruto le enseño por qué pelear en ese momento tenía un motivo. Naruto no tenía limites, no cómo él mismo se planteaba.
-Sakura- la chica de cabello rosado volteo a verlo con detenimiento, desconocía mucho de las facciones Itachi, pero en aquellos ojos ónix lo decían todo.
-Gracias- aquellas palabras fueron, las mismas que utilizo Sasuke con ella, en esa noche fría que la abandono.
Las lágrimas fluían de aquellas orbes verdes, resbalando por su piel tan pálida, Itachi no comprendía el por qué lloraba, iba a decirle algo pero… algo lo detuvo, cuando se le formo una sonrisa resplandeciente en su rostro.
-Lo lamento, no tienes que agradecer Itachi por… porque somos la familia de Nnaruto y tú, eres el integrante principal de Naruto. Damos todo por los que amamos- Itachi solo atino asentir con la cabeza.
Solo estaban a unos cuantos metros, había completado llegar a la guarida de los Akatsuki, Itachi conocía aquella guarida pero ahora era diferente, porque se volvió enemigo de donde se había unido y principalmente que tenía que salvar a cierto rubio escandaloso, que amaba con toda su alma, ahora que aquel chico lo convertiría en padre, estaba dispuesto a salvar a su familia.