Cada golpe se fue haciendo más débil que el otro, poco a poco sus chakras iban agotándose, sabían que ese golpe iba a ser el decisivo y en medio del estruendo de ambas técnicas lo comprendió, no tenia que luchar más, todo había terminado, no le quedaba más fuerza, simplemente podía escuchar lo último que le diría aquel rubio
-¿Por qué te empeñas en seguir en mi camino?, caí en la oscuridad y obtuve poder para cortar todo en mi camino, no importaba de quien se tratara, yo solo quería cortar mis lazos con todos los que me rodeaban, pero tú nunca pensaste en cortar tus lazos conmigo, entonces ¡¿Por qué te preocupas tanto por mi?! – pregunto ansioso el pelinegro
-¿De verdad no lo sabes aun?, Je mírate hablando tanto solo porque no puedes moverte – se burlo el oijazul
-¡Solo cállate y respóndeme de una vez! – exigió molesto
-Porque somos amigos- le mintió una vez más, ya que un amigo no hace todo lo que él había hecho por el azabache
-Ya me habías dicho eso antes, pero ¿Qué significa eso para ti?
-En realidad no sabría como explicarlo, simplemente que cuando te escucho hablar sobre cargar todo sobre tus hombros, de cierta forma yo también siento tu dolor y duele tanto que no puedo dejarte solo – no puedo dejarte solo, amándote tanto
- Naruto, siempre supe que estabas solo, igual que yo el ultimo Uchiha, eras evitado por todos en la aldea, hacías travesuras para ser regañado a propósito y así notaran tu existencia, al principio pensé que no valía la pena considerarte en absoluto que solo eras un debilucho que siempre quería jugar y hacer desorden, pero cuando veía que te regañaban todo el tiempo por alguna razón comencé a fijarme en ti, con el tiempo me di cuenta que tu dolor también lo empezaba a sentir yo. No podía dejar de prestarte atención, cuanto te veía hacer todo por crear lazos con otras personas me recordabas a mi familia y de algún modo me calmaba, sin embargo también pensé que era debilidad asi que entrene duro para escapar de esa debilidad y poder vengarme de mi hermano, pero después terminamos en el mismo equipo y comencé a recordar de nuevo a mi familia, después de terminar misiones contigo, de escucharte parlotear acerca de convertirte en Hokage y tu queriéndote volver más fuerte junto a mí, también comencé a sentir que algún día quería pelear contigo, así fue como empecé a ver al equipo 7 como mi familia y es por eso que cuando te veo sufrir yo también siento dolor, cuando entendí tu dolor, por primera vez te considere mi amigo pero al mismo no te podía dejar ser más fuerte, cuando vi que tan fuerte te habías vuelto yo…yo te tenia envidia porque tenias un tipo de fuerza que yo no, siempre caminaste frente a mi al igual que lo hacia mi hermano, y hoy no fue diferente.
- Mierda todavía no me puedo mover, quería terminar de hacerte entrar en razón – decía enojado el rubio ya que no podía moverse en absoluto
- Esta bien, lo admito yo perdí- dijo con resignación el Uchiha
-Esto no se trata de perder o ganar, se trata de hacerte entrar en razón, mi sueño es que todos los shinobis trabajemos juntos y eso te incluye a ti – replico el rubio
-Aun si eso es lo que quieres ¿Qué hay de los demás? – objeto el pelinegro
-Deja de pensar estupideces o te juro que te daré una paliza – dijo molesto el rubio
-¿Qué tal si al final termino oponiéndome a ti de nuevo? – pregunto curioso
-Entonces te detendría de nuevo, ¡Pero no lo volverás a hacer! – replico convencido el ojiazul
-¿Cómo puedes estar tan seguro? – volvió a preguntar
-No me hagas repetir de nuevo, mierda, ¿todavía no lo entiendes?, bueno, no hay nada que hacer, siempre fuiste muy estúpido después de todo – dejo de hablar al observar como de esos color ébano salían lagrimas
-Cállate Usuratonkashi – dijo con una sonrisa en su rostro
El rubio nada más lo siguió observando, a él y a sus brazos desangrándose, se iban a morir que más daba que por fin le dijera lo que sentía, pero antes de gestionar palabra fue interrumpido por el Uchiha.
-Nee Naruto, solo tengo una duda mas, ¿Por todos tus amigos dejas de lado tu sueño y pierdes un brazo en el proceso? – pregunto con cierto deje de diversión, esto dejo sorprendido al ojiazul, por un momento olvido lo perspicaz que podía llegar a ser el moreno.
-No – respondió firme – esto es solo porque se trata de ti
-Que me hace diferente de los demás Naruto – exigió saber
- La diferencia es que yo – ¡Demonios!, ya había decidido decirle, ¿Entonces porque era tan difícil?, ¡Al carajo con todo de todas formas se iban a morir! – Yo te amo Sasuke, me di cuenta en nuestro último encuentro, cuando por fin pude entenderte, yo quería devolverte primero a la aldea para así – no pudo continuar ya que unos labios se posaron sobre los suyos, fue solo un leve rose pero cargado de todos los sentimientos que él tampoco nunca dijo.
-Si serás un dobe, todo el tiempo yo también te observe, yo también te ame y ahora será como tu dijiste ambos moriremos aquí, solo espero que tengas razón y en la otra vida podamos comprendernos.
Y así fue como ambos dieron su último aliento, como en medio de todo al fin pudieron expresarse, muchos dirían demasiado tarde o tal vez no.
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Kioto, Enero 2015
Juro que te traeré de vuelta, porque somos amigos, Sasuke, Sasuke, ¡SASUKE!
-Sasuke, ¡despierta!- sacudió fuertemente al pelinegro
-Itachi te he dicho que no entres a mi cuarto – dijo con molestia mientras tallaba sus ojos
-No despertabas así que subí antes de que se te hiciera tarde para ir al instituto, arréglate y baja a desayunar – dijo mientras salía de la habitación
De nuevo tenía ese sueño, en el solo podía divisar la espalda de un rubio y cuando este volteaba solo se podían enfocar sus ojos, esos ojos azul zafiro, el lo llamaba con desesperación, le decía cosas sin sentido como que lo traería de vuelta, que eran amigos, no lo podía entender, al único rubio de ojos azules que conocía era al novio de su hermano Deidara, pero el azul de esos ojos nunca lo había visto, ese azul que reflejaba tanta calidad y pureza, decidió dejar de lado su estúpido sueño recurrente para comenzar a arreglarse para el instituto, una vez listo bajo las escaleras hacia la cocina
-Sasuke, recuerda llegar temprano para discutir lo de tu intercambio – le recordó el pelinegro
-Si lo sé, tenemos que discutir al lugar que me iré – suspiro el pelinegro
-Bueno nos vemos en la tarde – dicho esto se retiro del comedor
Una vez terminado su desayuno, Sasuke también emprendió camino al instituto, no quedaba lejos de su casa, solo a algunas cuadras, una vez en su salón de clases se sentó en su pupitre para tomar su clase.
No estaba seguro en donde se encontraba, era un lugar frio y había miles de espejos a su alrededor, tenía un sentimiento de angustia, luego pudo ver, de nuevo esa cabellera rubia que tanto aparecía en sus sueños, estaba ahí tumbado en el suelo, luego vio otro chico con una máscara que se dirigía a él con la intención de herirlo con una especie de agujas, su cuerpo se movió solo, tenía que correr a salvarlo, en eso sintió las agujas penetrar en su cuerpo y el rubio despertó viéndolo, por fin podía verlo, esas marcas en sus mejillas, esos ojos que siempre habían estado desde un principio, en eso sintió su cuerpo desfallecer y el grito desgarrador del rubio: ¡SASUKE! (N/A: quise describir el momento en el que Sasuke salvo a Naruto de Haku, disculpen si no se entiende muy bien u.u)
-Fujioka, Fujioka Sasuke-kun – dijo el profesor golpeando el mesabanco del mencionado, este despertó sobresaltado.
-Disculpe Orochimaru-sensei es que realmente no me siento muy bien – dijo aun sobresaltado por su sueño, ¡demonios! Se había dormido en clase.
-Si quieres puedes retirarte a la enfermería Sasuke-kun – dijo el pelilargo
Después de ello se levanto de su mesabanco, pero en vez de dirigirse a la enfermería se fue a la azotea, estaba muy alterado por su sueño, por fin había podido verlo, ver quién era el protagonista de sus sueños sin sentido, pero ¿Por qué?, ¿Por qué aparecía tanto ese rubio en sus sueño?, ¿Quién era?, mientras se perdía en sus pensamientos fijo su vista hacia el cielo y en la cerca de contención pudo divisar al rubio de sus sueños, ¿Qué hacia el ahí?, nunca antes lo había visto en su escuela, ¿Entonces como demonios era que estaba ahí?, en eso este abrió su boca y pronuncio lo mismo que en todos su sueños: Sasuke, tirándose de espaldas, en eso el mencionado corrió para alcanzarlo y detenerlo, cuando reacciono el mismo estaba a punto de caer al vacío, cuando sintió una mano que lo sostuvo.
-Sasuke ¡qué demonios pasa contigo! – Grito un peliblanco mientras lo sostenía ya que este quedo colgando solo de su brazo – resiste en lo que te subo – pero él no reaccionaba por su mente pasaban mil y un imágenes
Mi cuerpo se movió por sí solo, ¿estás herido? Gatito asustadizo, yo también quiero luchar contra ti, no dejare que ninguno de mis amigos muera, así tenga que romperte cada uno de tus huesos no dejare que te vayas con Orochimaru, si no te mate fue por capricho, ¿Cómo podría convertirse en Hokage alguien que no puede salvar ni a su mejor amigo?, yo cargare con todo tu odio y moriremos juntos, cuando tú hablas de cargar con todo me duele y no puedo dejarte solo, tu eres diferente porque yo te amo. (N/A: imagínense todo un collage con estas escenas u.u)
-Suiguetsu súbeme – grito después de reaccionar
-Sasuke ¿Qué te paso?, te seguí después de que terminara la clase y solo pude ver cómo te lanzabas al vacio, ¿En qué pensabas? – pregunto alterado
-Puedo recordar, recuerdo todo – decía con la vista aun perdida
-¿Qué es lo que recuerdas? – pregunto aun asustado por su amigo
-A él, por fin lo recordé…por fin recordé a Naruto – dijo al fin saliendo de su transe