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SAKURA GAKUEN por Karenlauren

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Notas del capitulo:

HOLIIIIS <3

LO SÉ.... TIENEN TODO EL DERECHO DEL MUNDO A LINCHARME POR ON HABER ACTUALIZADO ANTES.... TT.TT GOMEN!!!

LES DEJO AQUÍ EL ENLACE DE LA CANCIÓN DEL CAP ;)

https://www.youtube.com/watch?v=OdSMjCVW1tk 

ESPERO QUE LES GUSTE!!! 

GRACIAS POR LEER Y COMENTAR!!!!

 

K. <3

¿Pagar? ¿A qué se refería?, pensé, Que tipo tan raro. 

Entré en la sala de música y vi que era bastante amplia, había veinte pupitres, dos pianos, y otros instrumentos a parte de un par de armarios y la mesa de la profesora.

Sasuke pasó por mi lado y me cogió la mano sin pararse, me arrastró hasta la segunda fila, él se sentó en el segundo asiento y me indicó con un gesto que me sentara en el primero.

Me senté y saqué el libro a la vez que entraba la profesora de música. Era una mujer mayor, probablemente unos cuarenta años, tenía el pelo recogido en un moño bajo y un par de mechones se le caían a la cara, vestía muy elegante y llevaba gafas.

Empezó:

- Soy Kurenai-sensei, y este año os impartiré música. Hoy, al ser la primera clase comprobaré vuestro nivel cultural con una prueba de canto.- hubo un murmullo de quejas general... No podía ser tan malo... ¿verdad?- el primero en empezar serás tú.- Dijo señalándome a mí a la vez que me retractaba de mis pensamientos.... no podía ir peor. 

- Colócate al lado del piano, yo tocaré una pieza. Si te la sabes cántala, si no, ya tendrás la primera nota del curso.

Me dirigí al lado del piano en que ella se había sentado y permanecí ahí derecho mientras todos me miraban con miradas de curiosidad –por saber quién era- y compasión, creo que ya han deducido que era mi primer día de clase.

Estaba muy nervioso, sin embargo, cuando la profesora empezó a tocar la introducción, me calmé de golpe. Era una melodía suave pero muy triste. Demasiado triste, pero esa tristeza se colaba en mi corazón y de alguna manera me hizo sentir especial. Junté las manos apoyadas en mi pecho. Y de pronto tuve una vaga sensación de familiaridad: yo esa canción ya la había escuchado antes.

Enseguida que noté que empezaba la primera estrofa la canté con un muy triste y lentamente:

Musing through memories,
Losing my grip in the grey.
Numbing the senses,
I feel you slipping away.
Fighting to hold on,
Clinging to just one more day
Love turns to ashes,
With all that I wish could say...

 

Tomé aire y seguí cantando ante la mirada sorprendida de la clase con una voz suave pero triste, como la melodía:

 

I'd die to be where you are.
I tried to be where you are.

Every night, I dream you still here.
The ghost by my side, so perfect so clear.
When I awake, you disappear,
Back to the shadows
With all I hold dear...
With all I hold dear...
I dream you're still here...

 

Cerré los ojos sintiendo como la triste melodía entraba en mi cuerpo y sintiendo una extraña calidez por las extremidades:

 

Hidden companion
Phantom be still in my heart
Make me a promise that
Time won't erase us
That we were not lost from the start.

I'd die to be where you are
I tried to be where you are...


Every night, I dream you still here.
The ghost by my side, so perfect so clear.
When I awake, you disappear,
Back to the shadows
With all I hold dear..
With all I hold dear..
I dream you're still here..

 


Al terminar, abrí los ojos y vi que toda la clase se quedó en silencio. La profesora aplaudió lentamente:

- Tiene usted una bonita voz Uzumaki, tiene un cinco. Fantástico.- dijo.- Pero, tengo curiosidad. ¿Dónde aprendió la letra de esta canción?

- No me acuerdo exactamente.-mentí, la verdad es que no la conocía de nada.- Pero, ¿por qué un cinco? - Eso me molestó pero enseguida sentí que debería haberme callado. 

- Verá, esta canción es una canción muy antigua, no se sabe cuándo se escribió ni tan siquiera el autor. Tan sólo se sabe una antigua leyenda: se dice que el escritor era un hombre huraño y antisocial además de solitario, dicen que fue a pasear por la playa un día y oyó la melodía cantada por una hermosa voz. Se acercó impresionado y dicen que vio a un ser hermoso, brillaba tanto que casi no podía mirar tuvo que apartar la vista, sin embargo no se rindió y miró con más atención. Tan sólo pudo vislumbrar la forma de una mujer, después se quedó ciego. Pero dicen que la canción se le quedó grabada en la memoria y que él la pasó a papel y gracias a eso la tenemos hoy en día. Sin embargo, no se escribió la letra. Así que todo y ser una letra preciosa, me temo que es inventada. – dijo la profesora con una mirada inquisitiva.

Me quedé helado al oír eso.

- Vaya…- dije nervioso y bajando la mirada al suelo.- Bu…bu…bueno, me voy a sentar.- tartamudee más nervioso al fijarme que todos los de la clase me miraban.

Volví rápidamente a mi pupitre mientras la maestra llamaba al siguiente alumno. Sasuke me miró interrogante y fruncí los hombros, indiferente.

Me senté, y casi al momento recibí una nota:

¿Dónde has aprendido esa canción?

Miré a mí alrededor, y vi que era Sasuke quién me la había enviado. Sonreí pícaro y le respondí en la otra cara del papel. 

Es un secreto. 

le devolví disimuladamente la nota.

Él tiene una letra muy bonita, pensé después de ver la letra alargada y elegante. En cambio, la mía, era más bien de niño de primaria: pequeña y redondita.

Los exámenes vocales terminaron a la vez que sonó el timbre para el descanso. Yo no iba a comer a casa, así que recogí mis cosas lentamente.

Estaba a punto de salir por la puerta cuando una mano me agarró de la muñeca y tiró de mí hacia atrás con tanta brusquedad que tropecé y me caí encima de esa misma persona. Me levanté y vi que estaba sentado encima de Sasuke. Me puse rojo y salí inmediatamente de encima de él. Me senté a su lado y observé el aula alerta: todos ya habían salido y la profesora seguramente ya se había ido a comer.

Menos mal, pensé aliviado, si alguien nos hubiera visto hubiera podido malinterpretar la situación…

De repente, algo me sacó de mis pensamientos: Sasuke se había colocado encima de mí a cuatro patas, tenía sus brazos al lado de mi cabeza, uno a cada lado.

- ¿Por qué pareces aliviado?- dijo divertido.

No podía pensar, estaba demasiado nervioso. Aunque en el instituto ya me había pasado esto pero... Sai siempre me salvaba y ahora él ya no estaba aquí. 

De pronto me vino una oleada de nostalgia, le echaba mucho de menos. Se me humedecieron los ojos, estaba a punto de llorar.

No me di cuenta de la frustración de Sasuke por hacerme reaccionar, así que me dio un golpe en la cabeza:

- ¡Ai! ¡Duele!- dije con una mano en el lugar donde me había golpeado.

- Eso te pasa por no prestar atención, si una persona te está acosando sexualmente no puedes simplemente pasar de él como si nada.- dijo molesto.

- ¡Lo siento!- me disculpé enseguida avergonzado...- Un momento, -reaccioné- ¿porque me estoy disculpando? ¡Sal de encima de mí!

Empecé a forcejear y traté de apartarle con las manos pero me las sujetó rápidamente encima de la cabeza.

- ¡No me obligues a hacer eso!- grité asustada.

Él tan solo se rió de mí. Su risa era grave pero suave.

- Si así lo quieres…- no terminé la frase, ya que levanté mi rodilla derecha de forma automática y con mucho impulso: le golpee en… bueno, en sus partes.

Él lanzó un grito de dolor y cayó de lado haciéndose un ovillo. Traté de levantarme, pero aún tenía sujeta mi mano y tiró de mí hacia atrás. Caí de espaldas y me volví a levantar rápidamente, él trató de sujetarme de nuevo, pero lo único que consiguió fue quitarme el pañuelo. Salí de la clase corriendo hasta el marco de la puerta, donde me giré y vi que mi cartera con los libros estaba al lado de la cabeza de Sasuke.

No es tan importante, pensé. Me volví a girar y fui corriendo a la Dirección.

Corrí hasta las escaleras, las bajé como una bala. Todos los estudiantes me miraban extrañados. Hasta que uno se puso delante de mí en medio del pasillo. Frené a tiempo, antes de darme de bruces contra él.

- Tú eres la pareja de Natsume, ¿no?- Muy rápidamente todos los chicos me rodearon y me miraron como si fuera su presa.

- Para nada, -dije nervioso - solo somos compañeros de clase.

- Entonces, ¿por qué corrías?

- Tsk- dije apartando la mirada. Me han pillado, pensé, tengo que hacer algo o se van a dar cuenta. Les dije lo primero que se me pasó por la cabeza haciendo gestos exageradamente: - Verás, es que estábamos saliendo de clase y de repente vimos una sombra a lo lejos que se acercaba rápidamente y luego apareció una nave alienígena en el cielo de dónde salieron unas luces raras y de repente pararon y un hombrecito pequeño y verde con la cabeza enorme salió y le pegó a Sasuke una patada en la entrepierna. Y eso es todo.- cuando terminé de explicarles estaba más alterado que cuando había empezado a contarles, seguramente no habían entendido nada de lo que les había dicho.  

Miré a los chicos, se habían quedado de piedra y creo que no sabían si creerme o no. De pronto, entre la multitud llegó un chico que gritó:

- ¡Id rápido a la sala de música!- todos se giraron hacia él y dejaron de prestarme atención, yo aproveché ese momento para escapar abriéndome paso entre los chicos que me rodeaban.- Parece que alguien le ha dado una patada a Sasuke en los…

A partir de ahí, no pude oír nada más ya que me había alejado bastante. Bajé las escaleras aún más rápido que antes y fui a la Dirección.

La misma secretaria  que me había atendido esa mañana me preguntó:

-¿Qué ocurre? Estás muy rojo... – Puso una mirada de preocupación.-Pareces enfermo, mejor vete a casa hoy.

- Pero las clases…- dije fingiendo preocupación, ese era el menor de mis problemas en ese momento.

- Será nuestro secreto.- dijo guiñando un ojo.

Ella parecía muy amable, además, su apariencia física era muy familiar. Parecía una ama de casa con ojos grandes, que parecían comprenderlo todo, de color marrón verdoso, pelo largo negro recogido en un moño y piel blanca, de joven seguramente hubiera sido muy bonita. 

- Muchas gracias, me voy ya entonces. – Me pasó el permiso de salida escrito en el papel y me giré rápidamente antes de que preguntara por mi cartera, por suerte llevaba las llaves encima.

Me moriría si tuviera que ir a buscarla.

Salí por la puerta principal, fui corriendo hasta que salí del recinto de la escuela, pero primero, tuve que enseñar el permiso que me había dado la secretaria al vigilante para poder salir. A partir de ahí, caminé tranquilamente hasta mi casa.

Cuando entré, me apoyé en la puerta y respiré hondo: me sentía a salvo por primera vez des de que había conocido a Sasuke y había puesto un pie en esa escuela infernal.

Fui al salón y puse el televisor, daban un programa sobre un concurso de baile donde los perdedores caían en una piscina llena de agua.

Dejé el mando encima de la mesa y me dirigí a la cocina y me preparé la comida. No me tomó mucho tiempo hacerla. Entré en el comedor de nuevo, esta vez con una bandeja con la comida. La dejé sobre la mesa y me dejé caer pesadamente sobre el enorme y suave sofá. 

Acabe enseguida de comer. De pronto, tuve una sensación de pesadez en mis párpados. Cogí el mando de la televisión y la apagué mientras me dejaba caer de lado sobre el sofá y me hice un ovillo.

Me dormí tranquilamente.

 

 


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