Ya no serbia pasearme de un lado a otro de mi habitación o incluso por mi casa, mi madre y hermana habían salido a la playa unos días y yo por fin había tenido un día de descanso entre tanta grabación y evento por mi debut como solista.
Pero dado que por naturaleza o mala costumbre, por más que tuviera sueño no lograba dormirme, y mi mente fue iluminada “Jonghyun… a ver videos se ha dicho”, hablar solo también se había vuelto costumbre cuando estaba aburrido
Y rondando por la web me encontré con muchas Fancam dedicadas a todos los miembros de SHINee incluyéndome, pero una me llamo la atención ya que era bastante antigua, del 2011 para ser exactos, en ella aparecía Minho y Onew Hyung recostados en el pasto con una pegajosa canción de A pink de fondo, el pelinegro tratando de quitarle el teléfono a Jinki, bromeando, pero el ambiente se volvió extraño cuando apareció Sungmin en aquel video, cuando comenzó a masajear con sus dedos el trasero de MI líder, pero la cosa no paro allí… luego poso ambas manos en las sentaderas de Jinki, masajeando… que masajeando, eso era un agarrón con todas sus letras, el video continuo con Jinki jugando con un paraguas para cubrirse del sol.
-que… carajo…acabo… de ver –una ira incontrolable creció en mí, ¿cómo no me di cuenta antes de que eso había pasado?, fue casi en mis narices – ¿en que estaba pensando que no lo vi?, claro Jonghyun estabas saliendo de un relación amorosa que en verdad jamás existió
Baje a la sala, tal vez si trataba de cocinar algo mi mente se despejaba, pero no fue así el cuchillo estuvo a punto de cortarme como cinco veces y yo solo pensaba en las manos de mi Sunbae en el trasero de Jinki y el además se había dejado, y ahora que lo pensaba Jinki se dejaba ser “querido” por todos menos por mí, a Minho, Taemin y Key los dejaba abrazarlo, cuando se encontraba con Joon jugaban por largas horas en las cuales los abrazos no faltaban
-¿qué mierda tienen los demás que no tengo yo? –tome mi teléfono y sin pensarlo dos veces lo llame
-¿mmmmm…? –el sonido flojo como respuesta, de seguro estaba durmiendo
-¿te desperté? –quise asegurarme, tal vez estaba compartiendo con otro de sus amigos
-no… ¿qué pasa? –su voz somnolienta me contagiaba, era como una canción de cuna y yo estaba a punto de sucumbir ante ella
-¿estás muy ocupado?, ¿que estabas haciendo? –comencé a jugar con la pelota que le lanzaba a Roo cuando quería que corriera a buscarla
-vegetando –soltó una carcajada del otro lado que también me hizo reír – ¿estás en alguna grabación? –su voz había tomado un poco mas de vida, lo había sacado de su trance para convertirse en lechuga
-no, tengo el día, más bien la tarde/noche libre y me aburro como almeja en acuario… ¿podrías venir?, no es lejos –hice un puchero olvidando que él no podía verme, por lo tanto no serviría para convencerlo
-¿tienes algo de comer? –eso era un si disfrazado como condición
-pedimos lo que quieras cuando llegues aquí, ¿de acuerdo?
-en diez minutos estoy allá –colgó y yo corrí escaleras arriba a cambiarme de ropa, ya que estaba en casa solo, me había disfrazado de mendigo
Puntualmente diez minutos después sonó el timbre, haciendo ladrar a Roo quien curiosamente solo se ponía así de emocionada cuando veía a Jinki, abrí la puerta y comenzó a saltar en las contorneadas piernas de mi líder y entonces la tomo en brazos
-¿algún día sabré por que se emociona tanto cuando me ve? –se saco los zapatos mientras yo le hacía espacio para que pasara –bueno… primero que todo ¿dónde está mi comida? y segundo, ¿como estas?
-pediré la comida ahora mismo y estoy muy bien, solo algo aburrido pero se me pasara, ¿y tú?
-estaba vegetando hasta que cierta persona que no diré quién es, pero que podría ser parte de la aldea de los pitufos, me interrumpió y me hizo venir –me saco la lengua – es broma, Jjong
-mas te vale –le advertí y tomé el teléfono pidiendo una caja de pollo frito, parecida a las que nosotros mismos promocionábamos en el tiempo de Hello Baby, y pude ver que me miraba con dedicación como si yo fuera un cuadro en un museo – ¿tengo monos en la cara?
-no… es solo que estas un poco Muy delgado –torció la boca –debes comer urgente
-es producto del estrés y los ensayos, además el tour japonés nos dejo muertos a todos, iré recuperando peso de a poco, lo prometo –le sonreí y la acción me fue devuelta haciendo que sus pequeños ojos se tornaran en esas medias lunas que me enloquecían
-bueno señor Kim Jonghyun, ¿cuál es la razón de que me hicieras venir? –se sentó en el sofá, esperando una respuesta, en los programas podría pasar por despistado y en verdad lo era, pero de tonto no tenía un pelo
-¿no puedo llamar a mi líder y amigo para que me venga hacer compañía? –esta vez sí vio mi puchero, me senté a su lado
-tienes a un centenar de amigos más interesantes que yo, unas diez chicas novatas que matarían por salir contigo y de todas esas posibilidades me llamas a mí, ¿no crees que es lógico que me pregunte por qué? –por dios esa cara de seriedad me estaba haciendo tener un problema en mis pantalones, si seguíamos así todo podría terminar con la temperatura por las nubes
-sé que tengo muchos amigos pero no me apetecía estar con ninguno de ellos, las chicas de las que hablas no me interesan y te quería aquí conmigo, eres el Hyung con el cual me siento protegido, hemos estado lado a lado por casi diez años, desde la adolescencia y es un sentimiento de que nada puede pasar si Jinki Hyung está allí –sonrió, pero no esas sonrisas que todo el mundo conocía, era una sonrisa de sentirse halagado y avergonzado al mismo tiempo – en fin te quería aquí
-y aquí me quedare… pero sería mejor si hubiera comida –y como por arte de magia el timbre sonó, el repartidor al parecer se había equivocado y nos dejo dos porciones de pollo por lo cual le dejamos una propina muy generosa, aun que estuviera incluido en la cuenta –comamos o se enfriara
Disfrutamos del pobre ave que se sacrifico para nuestro deleite, Jinki por supuesto estaba feliz y yo me sentía feliz de verlo así, pero el video de hace unas horas rondo mi cabeza y cuando nos sentamos a ver una película no pude aguantar más la curiosidad
-¿recuerdas cuando Sungmin te masajeo el trasero? –me quedo mirando con un signo de interrogación gigante en la cara – mira esto – saque mi teléfono y le mostré el video
-no me acordaba de eso y ahora que lo veo recuerdo que me dolió –se sobo su trasero y me dieron ganas de hacerlo por él, referente a ese sentimiento había nacido en el momento en que lo vi y lo confundí con mi dongsaeng, Jinki era la persona más maravillosa del mundo y yo me sentía complacido de amarlo – a todo esto ¿por qué encontraste esa Fancam más antigua que Boa Noona?
-aburrimiento… Jinki, ¿por qué te dejas querer tanto? –solté sin poder evitarlo, los celos que estaba escondiendo me estaban matando
-no lo sé, me gustan los abrazos, me gusta la confianza que se crea con la gente que me agrada, pareces policía interrogándome, ¿hay algo que quieres saber puntualmente? –mordió su labio y yo tuve que resistir tirarme encima y comérmelo a besos
-si te gusta la confianza entre amigos, ¿quieres jugar? –acaricie sus suaves mejillas y curiosamente me imagine que las nubes deberían ser igual de suaves que el
-¿jugar a qué? –Comenzó a sobar sus manos en contra del sillón, lo que indicaba que estaba nervioso, yo lo ponía nervioso de hecho, eso siempre lo había notado – ¿acaso me usaras de conejillo de indias?
-es buen nombre, pero no… lo que quiero hacerte es mucho más que un experimento –en ese momento apague mi botón de autocontrol y pudor, este hombre tenía que ser mío aun que me costara la amistad con el mas adelante – ¿estás dispuesto a jugar conmigo?
-dado que ya estoy aquí… juguemos
Me levante del sofá y fui a buscar unas gomitas que me regalaron hace unos días, no era fanático de los dulces pero sospechaba que para algo podrían servir
Llegue devuelta y automáticamente se robo una gomita, disfrutando de su sabor con un exquisito “mmmmm “que salió de su boca el cual me dejo pensando en cosas poco decorosas
-¿comeremos dulces?, ya me habías asustado, pensé que… –se cayó cuando tome su nuca y bese sus labios, delicado como cuando soplas un diente de león –exactamente eso pensé que harías –paso su lengua por los labios recién besados
-entonces esperabas que pasara, dime entonces, Líder, ¿seguimos? –puse una gomita entre mis dientes
-sigamos –esta vez el beso mis labios adquiriendo el dulce y masticándolo con gusto
Un rato de juego provocativo, sin arriesgarse a mas que solo roces de labios y ganas infinitas de probar el sabor en su boca, aun que lo que en verdad quería, era que el viniera por mas y entonces solo así tendría seguridad de ir más allá con el
-quiero el de piña –reclamo cuando solo quedaban dos gomitas, la de piña y la de fresa – no se te ocurra mirarla, es mía –inflo sus cachetes en un adorable mohín
-no lo creo –lo saque del envoltorio y ante sus ojos impactados lo comí –mmmmm exquisito- exclame para provocarlo - creo que te quedaste con el de fresa
-no lo creo –en un movimiento digno de un ninja (principiante), se sentó a horcajadas sobre mí, mordiendo mi labio inferior para colar su lengua, tenia sabor a multi fruta ya que casi nos habíamos acabado toda la bolsa de dulces –sabes exquisito –comento susurrando en mis labios, terminando de enloquecerme
-te hare cosas en verdad exquisitas – lo aparte para tomar su mano y subiéramos las escaleras a mi habitación, la cual cerré con seguro porsiacaso – dime que lo quieres tanto como yo – un beso corto en esos labios regordetes – dímelo Jinki
-lo quiero más que tu, incluso – esa inocencia mezclada con descarada sinceridad y un erotismo que él desconocía por completo, era lo que me tenían enamorado
La ropa por supuesto comenzó a molestar demasiado y a pesar de estar en pleno invierno, el ambiente en la habitación quemaba, todo estaba a oscuras por excepción de las velas aromáticas que siempre mantenía encendidas
Su cuerpo… un misterio tan grande como la cura a muchas enfermedades y yo era el afortunado de mirarlo, tocarlo y ahora besarlo, sus suspiros y jadeos me indicaban que iba por buen camino y que le gustaba lo que estaba haciendo
-quiero… quiero – se sonrojo por un momento, tome su barbilla entre mis dedos
-¿qué quieres? –comencé a besar su manzana de Adam tratando de darle valentía para que dijera lo que quería
-quiero chupártela, Jjong –me detuve de inmediato, mi erección llego a doler con aquella declaración – ¿me dejarías? – “Te dejaría violarme” pensé
-hazlo… te lo suplico – no iba a mentir deseaba aquellos labios carnosos recorrer mi erección y antes de que lo hiciera me imagine que tan bien se sentiría
Se puso de rodilla en la alfombra, mientras yo seguía sentado en la cama y sin decir nada y sin prepararme psicológicamente para lo que venía, sentí algo húmedo y caliente recorrer mi pene de arriba abajo, haciendo que enroscara los dedos de los pies y las manos por el placer que llegaba tan abrumador, provocando más calor y mas cosquilleo en la zona de mi bajo vientre, comenzó más rápido y con eso mis ganas de correrme aumentaron
-así… ahí… ahhhhhh –eran las únicas palabras que lograban salí de mi boca, y cuando me sentí casi al borde de correrme en su boca, tome sus cabellos de manera algo violenta –me encanta lo que estas haciéndome, Hyung, pero no quiero…
-entiendo –volvió a sentarse encima de mí con su bóxer aun puesto, yo ultra duro y caliente y lo dijo después solo aumento mi estado por mil –córrete dentro de mi –susurro – no hay nada que podría hacer más feliz a tu Líder que lo complacieras en eso
-y yo adoro complacer a mi Líder – lo tire a la cama y saque sus bóxer, me acerque a su entrada que esperaba por mi y devolviendo un poco el favor del placer antes dado, pase mi lengua por aquel delicado lugar y tome su pene que cuya descripción dada por las fans se quedaba corta, era grande… enorme y erecto, mojado también y deseaba tenerlo solo para mí – eres hermoso, Jinki
Le sentía dilatado y en verdad deseaba poseerlo, me acomode en su entrada y comencé a empujar de a poco, algunas lagrimas salieron por el costado de sus ojos, las cuales borre con besos, se agarro de las sabanas cuando la cabeza de mi pene entro por completo
-entero… lo quiero entero –pidió y yo solo vivía para complacerlo en este momento –seamos uno, Jjong
Sin poder resistirlo más, lo penetre por completo sacando el primer gemido real de placer y dolor que me supieron a gloria y por sus gemidos interminables cuando empecé un ritmo parejo supe que para el también era así
-si pudiera hacer un pacto con alguien para no dejar de sentirme así, lo haría –embestí con más fuerza logrando que sus brazos se enchancharan en mi cuello – Líder… yo lo amo
-vaya que eres lento Jjong, y luego dicen que el lento soy yo – apretó las paredes que tenían a mi pene suplicando por más de esa presión – yo te amo desde que te conocí
Con aquella declaración, su olor embriagante, sus besos y caricias, y con solo existir para hacerme feliz, me corrí llegando al punto máximo de placer y entregándole a él también el placer que merecía, haciendo que se corriera sonoramente gritando mi nombre
No sé en qué momento fue que me dormir, tal vez sus caricias me adormitaron y sentía como si hubiera descansado un siglo, me sentía liviano, des estresado y por sobre todo feliz, estire mi brazo aun sin abrir los ojos y sentí el vacio a mi lado, llegue a pensar que todo eso había sido un sueño, pero me encontraba desnudo y con claros “chupones” en mi cuerpo, tome la sabana y la amarre en mi cintura, cuando salí de la habitación escuche algunas risas en la sala y baje de inmediato
Me encontré con Jinki sentado en el sofá viendo una película de humor y Roo en su pierna cómodamente dormida, al caminar hasta donde él se encontraba choque con los zapatos de la entrada llamando su atención
-si te paseas semi desnudo por allí, pescaras un resfriado – en su mirada había algo más brillante de lo normal, simplemente era… perfecto – ¿te quedaras mirándome toda la noche?
-si pudiera lo haría, Jinki yo… creo que sabes el motivo por el cual te llame, por el cual te mostré el video y porque empecé el juego con las gomitas –me acerque al sofá, haciendo que el colgara la cabeza para acabar mirándome al revés
-no digas nada Jjong, yo también te amo –sonrió derritiéndome por enésima vez en el día –hacer el amor contigo me dio hambre, así que pedí comida nuevamente, ve a ducharte y luego comemos, ¿te parece?
-¿cómo lo haces? –Mi corazón quería saltar de mi pecho para correr literalmente a sus manos –lo sabes todo y pretendes no hacerlo, me tienes enamorado como un loco, necesitándote demasiado
-puedo ser buen novio también –se carcajeo contagiándome
-qué casualidad ando buscando uno, entonces acepto la oferta… seremos novios – lo bese y comencé el camino a mi habitación para ducharme, pero me detuve a pleno camino –si eres mi novio, no quiero que nadie más te toquetee demás, ni te bese y mucho menos que robe tu atención como para lograr que me dejes
-eres lennnnnnnto Jonghyun, llevo enamorado de ti casi diez años, desde que éramos aprendices y ahora que somos novios, ¿crees que te dejaría por otro?, te amo más que al pollo
-wow entonces es demasiado, yo te amo más que a mis plantillas –nos fundimos en un tierno beso, con sentimientos correspondidos y siendo mucho más que amigos
Después de todo creo que debo agradecerle a la fan de aquella Fancam, a mi día libre y las gomitas, ahora mi vida era un gran rompecabezas completo.
Fin