Era la primera vez, su primera cita con Trunks luego de que admitieran sus mutuos sentimientos. Debía admitir que estaba nervioso, no era su primera cita con un chico, y tampoco la de Trunks, pero que fuera con el pelilila lo hacia especial…
-¿Cual seria mejor? – Se preguntaba el pelinegro menor frente al espejo debatiéndose entre dos conjuntos de ropa – ¿Cuál crees que es el mejor, Gohan?
-No lo se, no deberías preocuparte por eso – decía Gohan quien se encontraba recostado en la cama de goten, divirtiéndose con el nerviosismo de su hermano pequeño – ¿De que tanto te preocupas? No es tu primera cita
-Lo se pero... <<Que sea con el lo hace especial…>>
Goten trago duro luego de escuchar el timbre la puerta, y luego escuchar a su madre avisarle que El ya había llegado. Su hermano mayor solo rio y simplemente se fue, pero antes de atravesar la puerta le dijo a su hermano;
-Se tu mismo, después de todo el se enamoro del Tonto y desordenado Goten, no del Elegante o “Demostrador de piel” Goten - Finalizo refiriéndose a los dos conjuntos que el tenia en sus manos, luego simplemente salió.
-Bien… - susurro y simplemente bajo con la ropa que ya tenia puesta, su típica vestimenta con la camiseta que tenia su nombre, sus pantalones, y sus botines cafés, bajo a paso lento pero se encontró en la puerta a Trunks hablando animadamente con su madre.
-Hola – susurro nervioso
-Hola Goten, ¿Ya nos vamos? – dijo el y goten asintió, Trunks no se veía para nada nervioso, en alguna parte pensó que tal vez para Trunks su cita no era tan importante como pensaba el, lo cual lo desanimaba un poco pero no lo demostró, salieron de la casa del pelinegro mientras se dirigían a una cafetería, en donde Trunks pidió simplemente un café para entrar en calor ya que estaban en invierno, ya hacia mucho frio, pero aun ni siquiera comenzaba a nevar. Goten pidió un montón de dulces, pasteles y bebidas que había en el menú, Trunks sonrió al ver la cara de la camarera cuando goten le pidió sus dulces, aunque no le importaba mucho había traído bastante dinero ya que estaba preparado para su cita con el pelinegro.
-Esta deliciosa – comentaba el pelinegro mientras comía su tarta de fresas
-¿De verdad?
-¡Si! – comento animado y siguió comiendo de la tarta
-¿Me dejarías probar?
-Claro – dijo y acerco la tarta a Trunks, este para que el pelinegro entendiera el mensaje abrió su boca, al comienzo Goten no entendía la acción del pelilila, así que este con su vista dirigió sus ojos a el tenedor que Goten tenia en su mano, cuando el pelinegro capto el mensaje, se sonrojo como nunca antes lo había hecho en su vida, con el tenedor tomo una fresa con crema y la dirigió a la boca de Trunks manchando un poco su labio de crema, con su pulgar limpio la crema y luego se la llevo a la boca, ahora sonrojando al pelilila.
-Trunks…
-¿Qué?
-Estas… Estas bastante sonrojado – sonrió
-Claro que no – desvió la mirada, luego sintió el tono de su celular, por lo que contesto la llamada.
-Diga – contesto
-Hijo, soy tu madre
-¿Mama? ¿Por qué llamas? ¿Hay algún problema?
-¡Oh! – Exclamo – Un gran problema con los sirvientes robots
-¿Y eso que tiene que ver conmigo?
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Media hora después….
-¡Hermano, hermano! ¡Quiero un helado! – exclamo la pequeña
-Estamos en invierno tonta, es imposible que estén vendiendo helados
-Uff… – suspiro el pelinegro, aun recuerda como su ahora suegra llamo a su novio para decirle que hubo un gran problema con los sirvientes robots, entonces le pidió el favor de que cuidara a su hermana pequeña, obviamente el pelilila se quejo por varios minutos pero luego termino aceptando, así que ahora era una cita entre los 2 y su pequeña cuñadita. Aunque disfrutaría su cita si solo estuvieran los dos también se divertía al ver como Trunks discutía por cosas tontas con la pequeña bra.
-¡Quiero un helado!
-¡Te están diciendo que es imposible! ¡Donde quieres que compre si todas las heladerías de la ciudad están cerradas, porque nadie compra helados en esta época del año!
-Bueno – al fin intervino goten y se arrodillo para quedar a la altura de la pequeña – por ahora no podemos comprar helado porque no venden, pero cuando sea verano y haga mucho calor, nosotros vendremos y pediremos todos los sabores que hayan. Y todo lo pagara tu hermano.
-¡¿Eh?! ¡Si yo pago por ustedes me quedare pobre! – exclamo Trunks
-Esta bien, pero mejor vengamos solo los dos – dijo y le dio la mano a Goten, quien solo sonrió
-¡Me niego! – Dijo y los separo y se dirigió a su hermana - ¿Quién te crees? Goten es MI novio por si no lo habías captado – dijo y beso la sonrojada mejilla del pelinegro.
-¡Es injusto! Yo lo vi primero
-¡Claro que no! Yo lo vi primero ¡Hace 16 años atrás!
Goten solo sonrió y de repente sintió algo frio sobre su cabeza
-¿Nieve? – Exclamo la pequeña - ¡Nieve! – esta vez grito emocionada mientras comenzaba a correr en círculos la pareja solo sonrió al ver como la pequeña se divertía
-Que bueno que me puse el abrigo que me dio mi mama – dijo Goten mientras miraba a la pequeña haciendo un muñeco de nieve.
-Es verdad – dijo Trunks y rio al recordar como goten al principio no quería llevar el abrigo, pero luego acepto al ver como su madre lloraba, gritaba y pataleaba que era un rebelde.
-Sabes Trunks, yo al principio tenia la tonta idea de que esta cita no era importante para ti, pero al comenzar y todo lo que ha pasado hasta ahora, me siento un idiota al pensar eso.
-Esta bien goten, pero debes saber que nuestra cita no es algo que me tomo a la ligera, nunca me interesaron estas cosas, pero ahora que estoy contigo, es diferente – decía el pelilila y tomo la mano derecha del pelinegro y la beso – Que sea contigo, lo hace especial…