= Itachi =
Verlo en esa posición tan vulnerable estrujo mi corazón, mi corazón estaba lleno de sentimientos encontrados: tristeza por verlo tan vulnerable, con los ojos cerrados y lágrimas recorriendo sus mejillas y sosteniendo sus rodillas en alto separando sus piernas y esperando la estocada del malnacido aquel. Mi corazón dio un vuelco de tristeza a rabia e ira: Rabia de que mi pareja se estuviera entregando tan fácilmente a ese hombre, por un momento pensé que lo hacía porque todavía lo amaba y después pude ver la jeringa que tenía en su mano y fue entonces cuando recordé lo que hace apenas unos segundos estaba escuchando cuando estaba en el pasillo que conducía a este cuarto en el sótano «─Como desees Naruto. Si lo harás sin drogas, será mucho más fácil poseerte y, por supuesto, más satisfactorio. Abre las piernas para papi» y fue entonces que ate cabos: Mi Naruto se estaba entregando a él para proteger a nuestro hijo, era más que evidente que él sentía asco de semejante acto. Esos pensamientos fluyeron en mi cabeza tan rápido que la ira me domino y con toda la fuerza de la que fui capaz le propine semejante golpe que creo que hasta un elefante habría caído. Lo golpe justo en el momento en que se acercaba a mi hombre, en el momento que iba a poner sus asquerosos dedos en él. De un momento a otro, Gaara estaba tendido en el suelo, con la comisura de los labios sangrando y uno que otro moretón en la cara «Es lo mínimo que te mereces por intentar lastimar por segunda vez a mi pareja»
Sentí como mi mirada cambio de asco e ira a amor, tristeza y más amor cuando deje de mirar a aquel bastardo y vi a mi Naruto, se veía tan incómodo en esa posición y tan miserable por lo que él creía que estaba a punto de suceder, de sus ojos seguían emanando lágrimas y no me dejaba ver el azul que tanto alivio me proporcionaba porque sus ojos seguían cerrados, lo único que me inspiraba era consolarlo, sostenerlo en mis brazos y nunca más dejarlo ir. Supongo que lo deseaba tanto que ni cuenta me di de lo que estaba haciendo, todo sucedió tan rápido, mi cuerpo se movió solo. En tan solo unos instantes mis brazos ya estaban alrededor del cuerpo frio y algo flaco del amor de mi vida, inconscientemente él me rechazaba. Tal vez creía que yo era Gaara, podía sentir su rechazo y aun así lo abrace con mayor intensidad, de mis ojos empezaban a escurrir lágrimas y mis ojos ardían incesantemente y fue entonces que le dije «¿En qué estabas pensando, bastardo idiota?, ¿Dejar que te posean solo por mantener a salvo a nuestro hijo? Eres más valiente de lo que pensé, pero creí haberte dicho que no hicieras cosas estúpidas, ¿Por qué nunca me haces caso?» Parecía como si mi rubio tuviera miedo de abrir los ojos porque tardo mucho tiempo en abrirlos y dejarme ver ese azul que tanto me gustaba. Le señale a Gaara «Le di un buen puñetazo, se lo merecía el desgraciado»
Los ojos de mi hombre estaban confundidos, pero pronto echo a un lado esa confusión y volvieron a brillar con la misma intensidad de antes. Gracias a Dios había llegado a tiempo para salvar esa mirada llena de alegría e ilusión y, por supuesto, la sonrisa que tanto me enamora. Mi rubio sonrió y pude ver el profundo corte que había hecho con sus dientes, lo acaricie cuidadosamente para no lastimarlo todavía más ─ Te mordiste tu labio, ¿Te duele mucho? ─ Naruto sonrió y negó con su cabeza, luego sus ojos también sonrieron y me dijo ─¿Cómo supiste que estoy embarazado?, ¿Estas bien con ello o no? ─ De pronto vi un destello de preocupación en su rostro ─ Supongo que primero te contestaré la segunda pregunta, que al parecer es la que más te preocupa y la verdad es que no sé, claro que no estoy bien con que estés esperando un hijo mío… Por Dios, ¿Cómo no podría estarlo? Ese niño o niña sería la prueba fehaciente de nuestro amor, ¿Cómo siquiera puedes dudar que estoy feliz?─ No sé en qué momento sucedió, pero yo estaba llorando como un bebe, de alegría y por qué estaba seguro que en nuestro futuro solo dicha habría.
Los ojos de mi amado volvieron a brillar con dicha y por, un momento, se ensombrecieron como si algo recordará y fue cuando pronuncio las palabras y empezó a quererse levantar bruscamente aunque aún seguía atado porque no lo había desatado. Fue tanta la emoción de volver a estar en el mismo perímetro que él que se me olvido por completo en la posición y situación en la que estaba ─ Cariño, cálmate, te desataré. Si sigues forcejeando de semejante manera te lastimarás ─ Con lágrimas en sus ojos me dijo ─ Mis hijos Itachi, ¿Dónde están?, debemos despertar a Gaara para que nos entregue a nuestros hijos, ¿No le diste demasiado fuerte como para matarlo, ¿Cierto? ─ Mi rubio no dejaba de forcejear, no me dejaba desatarlo adecuadamente, así que tuve que someterlo. Cuando lo abrace yo tuve que inclinarme y acercar su rostro a mi pecho, en esa posición estuvimos en todo momento en que estuvimos conversando, en ningún momento me separe de él y, al parecer, tampoco él tenía pensado separarse de mí. Fue tanto el tiempo que lo estuvimos que era insoportable pensar en que pudiera volver a suceder. Sin embargo, ahora tenía que tranquilizarlo para que no se hiciera más daño forcejeando de esa manera. Ni siquiera escuchaba, estaba tan preocupado por nuestros hijos. Lo deje de abrazar y me senté a horcajadas sobre él, y sostuve con fuerza sus brazos ─ Necesitas tranquilizarte ¿Acaso no escuchaste lo que te dije? Gaara no es tan inteligente como creíamos, no tiene de rehenes a los niños. Nuestros hijos están bien con Tsunade sama y con Shikamaru. Tsunade los está revisando ─
Al parecer la cordura regreso a Naruto, dejo de moverse. Yo estaba a horcajadas sobre él, pero en ningún momento puse mi peso en su cuerpo. Mi rubio también necesitaba ser revisado, el embarazo era un riesgo aun mayor para los hombres y él no estaba dispuesto a perder a su hombre, ni hoy ni nunca. Aprovechando que se había calmado y que la serenidad y la paz habían regresado a Naruto, me dispuse a desatarlo, y lo hice rápidamente. Cuando se sintió libre empezó a sobarse sus muñecas, estaban rojas y había un poco de sangre en ellas. El rubio sonrió y le dijo a Itachi ─ Quiero verlos, llévame con ellos… ¿Cómo me encontraste, amor? ─ Después que me preguntará, le conté toda la hazaña que había hecho Shikamaru y lo del GPS, después de que termine de contarle todo, mi rubio parecía más sereno ─ ¿Lo que estaba en la USB te ayudará a probar tu inocencia? ─ Sonreí gratamente ─ Así es, ya estamos libre de ese tipo que solo nos ha herido. Espero que pase algunos años en la cárcel o que, por lo menos, le quiten sus derechos sobre sus hijos por ser incapaz de cuidar de ellos y así, nunca más podrá chantajearte de ninguna manera ─
─ Sí, esa sería una excelente idea… Itachi ─ Me miro a los ojos y me sentí desfallecer cuando vi sus hermosos ojos azules llenándose nuevamente de lágrimas ─ Gracias por salvarme, gracias por haber entrado a mi vida cuando más lo necesitaba, gracias por enseñarme lo que es ser amado, gracias por amarme como nunca nadie lo hizo ─ Acariciando su barriga ─ Gracias por darme una familia, gracias por haberme hecho el hombre más feliz sobre la tierra y por seguir haciéndome muy pero muy feliz… Gracias por demostrarme que el amor bonito si existe y que tú eres el príncipe azul que toda mi vida estuve esperando. Gracias por haberle dado una familia a mi hijo Chitoru, gracias por darle la bienvenida a Ryu a nuestra familia pero, sobre todo, GRACIAS POR DARME LA DICHA DE VOLVER A SER PADRE DE LA CRIATURA MÁS AMADA Y QUERIDA DEL MUNDO, ESTE NIÑO O NIÑA QUE LLEVO EN MI VIENTRE ES EL FRUTO DE NUESTRO AMOR. NUNCA ME DEJES, ITACHI PORQUE SI LO HACES NO CREO PODER SOBREVIVIR ─ Me quede sin palabras, solo sentí como mi labio inferior empezó a temblar, como mis piernas comenzaron a temblar y como comencé a sollozar con una alegría aplastante en mi pecho como cuando logras algo que siempre quisiste lograr. Lo abrace fuertemente, no quería soltarlo y las únicas y verdaderas palabras que salieron de mi boca hicieron que ambos rompiéramos el llanto ─ Yo soy el que está agradecido, agradecido de que estés en mi vida, que me hagas padre y que me dejes estar a tu lado. Yo soy el agradecido, no tu… Mi tonto amor…. TE AMO UZUMAKI NARUTO Y SIEMPRE TE AMARÉ. SIN IMPORTAR LO QUE SUCEDA YO SIEMPRE ESTARE A TU LADO. JAMÁS TE ABANDONARÉ. AHORA VAYAMOS A BUSCAR A NUESTROS HIJOS ─ Naruto solo asintió.
Subimos del sótano, me mantuve cerca de Naruto para sostenerlo por si perdía el equilibrio, después de todo estuvo bastante tiempo en cautiverio. Aunque no fue del todo necesario porque Naruto se recuperó rápidamente y camino correctamente, después de su abrazo lleno de lágrimas y sentimientos subieron las escaleras y ahí estaban esperándoles Shikamaru y Tsunade, la primera en hablar fue ella ─ Los niños están bien. Necesito revisarte a ti, pero eso será en el consultorio ─ Estirando la mano a la suya le dijo ─¿Me acompañas?─ mi chico acepto y tomo su mano e instintivamente yo di un paso adelante para seguirlos, no pensaba separarme ni un momento de él, hasta que Tsunade me dijo ─ Creo que es mejor que Naruto vaya solo conmigo, yo lo llevaré a casa en cuanto termine el chequeo. Además tú debes cuidar de los bebés. Debemos estar agradecidos con estos sirvientes, gracias a que desobedecieron a Gaara de que los dejará morir de hambre es que ellos siguen vivos ─ Pude ver la expresión de indignación que mi rubio tenía y le lance una mirada de reproche a Tsunade inconscientemente y ella solo movió sus labios con un “Lo siento”, pero Shikamaru rompió el silencio y la tensión ─ No lo odies demasiado Naruto, gracias a esa expresión que uso es muy probable que le quiten todos sus derechos sobre sus hijos y así, tú podrás pedir la custodia completa de Chitoru y adoptar a Ryu, si es que quieren después de todo tendrían prioridad porque Itachi es su tío. Me llevaré a Gaara a que rinda cuentas con la justicia. Mientras ustedes hagan lo que tengan que hacer. Itachi, entrégame la USB para mostrar tu inocencia y, probablemente, esta es la última vez que los veo, así que aquí me despido ─ Y con un apretón de manos lo despedí.
Hice una labor titánica para dormir a mis hiperactivos hijos, estaba impaciente, Naruto no llegaba de sus chequeos. E inevitablemente estaba preocupado, pensando lo peor cuando escuche la puerta. Sentí un gran alivio cuando vi en el umbral a Naruto y Tsunade, esta última sonrió ─ Todo está perfecto con su estado de salud. Tienen que seguir yendo a sus chequeos y no sé si sea una buena o mala noticia pero de ahora en adelante, hasta que el niño o niña nazca tendrás que ayudar a Naruto a cuidar a Ryu y a Chitoru ─ Naruto sonrió y hablo, antes de que yo pudiera contestar ─ Ese no será un problema. Mi Itachi es un hombre en toda la extensión de la palabra, él siempre está al pendiente de mí y de mis necesidades, es por eso que lo amo tanto, tantoooo ─ Tsunade sonrió y se despidió de ellos, dejando a una hermosa familia feliz.
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= Gaara =
Hace 3 años fui encontrado culpable de difamar a un hombre llamado Itachi Uchiha, el mismo hombre que en este momento está disfrutando de una felicidad que no supe valorar. Sigo sintiendo envidia y mucha rabia por haberlo perdido, por no haber sabido valorar lo que poseía. Me encerraron año y medio en el manicomio, aún sigo medicándome para no perder el control, el siguiente año y medio pague por mis errores en la cárcel y aun así, ahora mismo sigo siendo castigado por mis errores. Aunque estoy libre, hay una persona que me vigila todo el tiempo para asegurarse de que no vuelva a interferir en la vida de esos dos tortolos. El nombre de la persona que me sigue vigilando es Shikamaru y otra vez volví a cometer el mismo error de siempre, este hombre ha estado tan al pendiente de mis actos que me he llegado a enamorar de él, de un hombre que está enamorado de Itachi Uchiha ¿Cómo es que me di cuenta? Pues simplemente porque ningún hombre se ataría a la vida de otro hombre más que para proteger a la persona que ama. Mi castigo por todos los errores cometidos es enamorarme de hombres que ya tienen ocupado su corazón por un hombre que si lo es…
Ahora estoy más solo que nunca, ni siquiera me queda algo del único hombre que me amo de verdad, estoy seguro que si él siguiera vivo, tal vez yo no me hubiera dado cuenta de lo importante que ese hombre siempre fue en mi vida. A veces pienso que lo mejor es suicidarme, pero con los ojos de Shikamaru sobre mí no creo que me deje hacerlo, pero encontraré la manera de deshacerme de esta infernal existencia…