Naruto había llevado a su pequeño al parque. El pequeñín se llamaba Chitoru Uchiha. Tenía un año con 3 meses apenas cumplidos el 27 de Febrero de 2015. Su cumpleaños era el 27 de Noviembre. El rubio había extendido una manta cerca de la banca en la que estaba sentado para que Chitoru se colocara en ella y jugará con sus juguetes preferidos. El pequeñín sonreía y sus hermosos ojos verdes brillaban con tanta alegría que cuando Naruto los veía no podía evitar sonreír y recordar. Hace más de dos años Naruto estaba felizmente casado con Sabaku no Gaara, un empresario bastante influyente; sin embargo, Naruto empezó a sentir cambios en el comportamiento de su esposo desde Abril de 2012, si él se hubiera puesto a atar cabos tal vez no habría sufrido tanto como lo hizo.
Solo con mirarte
Ya lo vi venir
No hace falta que hables
Sé que vienes a decir
En Abril de 2012, Naruto había invitado a su primer aniversario de bodas a su mejor amigo, quería presentárselo a su marido. El rubio había preparado un vino tinto para celebrar que llevaban un año de casados; sin embargo, Gaara todavía no llegaba de trabajar. El rubio apenas había conocido a Sasuke, hace apenas unos nueve meses atrás, pero él era demasiado confiado en las personas así que bien pronto lo considero uno de sus mejores amigos. Naruto estaba preparando la mesa colocando un lindo mantel color arena y un par de velas en el centro de dicha mesa; también coloco las copas en los 3 lugares que había preparado previamente, Sasuke interrumpió su ardua labor con su voz arrogante – ¿No crees que es una pésima idea que me invites a la celebración de tu aniversario? – Naruto sonrió de lado – Si no te presento a mi esposo hoy, nunca lo haré – el azabache solo dijo – Hmph, solo espero no hacer mal tercio – y el rubio siguiendo con su labor – No lo serás – Después de su amena conversación escucharon el movimiento del picaporte de la puerta y después esta abrirse, por ella se asomó el cuerpo de un pelirrojo bastante atractivo, cabe destacar.
Era de esperarse
Desde el mes de abril
Basta con tus ojos
Basta con tu voz
En cuanto el rubio vio la silueta de su marido en la puerta fue corriendo a abrazarlo, Naruto era unos centímetros más bajo que su marido, lo abrazo por el cuello poniéndose de puntitas un poco; por lo tanto, su cabeza no pudo evitar que las miradas tanto de Sasuke como de Gaara se cruzaran. Fue inevitable, ambos sintieron una corriente eléctrica recorrerlos de la cabeza hasta los pies y después regresar de sus pies para instalarse en su estómago y empezaron a sentir revolotear mariposas en él. En ese momento ambos supieron que su atracción era demasiado para ellos y que no podrían hacerla a un lado. Sasuke quiso huir de la tentación, pero Naruto no se lo permitió. Agarro con un brazo el de su marido y con el otro el de su mejor amigo. No lo hacía con mala intención, jamás se le habría ocurrido que se sentirían tan atraídos el uno por el otro, era demasiado inocente y confiado.
Viendo como cuesta
Que termines la oración
Y no te lo haré fácil
Tienes mi atención
Después de que terminara el brindis, Sasuke invento una excusa para irse inmediatamente de ahí. Agradeció a Dios que Naruto le haya creído y prácticamente salió huyendo. Gaara, por otro lado, no pensaba igual que el azabache; él lo deseaba y lo tendría a toda costa. Amó al rubio hasta el momento en que vio al azabache, esa descarga eléctrica que sintió en cuanto lo vio hizo que se diera cuenta que el amor que alguna vez sintió por el rubio no era nada con el comparado con el que sentía por este nuevo hombre que había aparecido en su vida, después de haberse casado. Pero, el estar casado no le impediría saborear a su nueva presa. Al menos eso pensaba, que solo sería una aventura, que equivocado estaba.
Dolerá mucho más
Al oírlo de tu voz
Dolerá mucho más
Después de ese día, Gaara no había tocado al rubio. Después de ese día, el pelirrojo había contratado un investigador privado para que le proporcionará el teléfono celular y la dirección del hombre que lo había hechizado desde el primer momento en que lo vio. Primero, empezó enviándole mensajes de texto de amor, los cuales Sasuke rechazaba cruelmente diciéndole que él ya tenía una pareja y que Naruto era su amigo; sin embargo, Gaara no se daría por vencido tan fácilmente. Así transcurrió un mes enviándole mensajes de texto seduciéndole, pero siempre obtenía la misma respuesta. Posteriormente, comenzó a llamarlo, la primera vez Sasuke contesto solo para decirle que lo dejará tranquilo, que no le interesaba; sin embargo, lo que recibió a cambio de esas palabras fueron palabras cargadas de erotismo “Dices que no me deseas, pero tu voz es tan temblorosa que no creo en ellas”; cuando escucho esa voz erótica, Sasuke sintió como sus piernas empezaban a perder fuerza y se dio cuenta que estaba a punto de perder el control, entonces inmediatamente colgó el teléfono. El azabache estaba seguro que si caía en sus redes, muy difícilmente podría alejarse de él. Sabía que él se derritió por una caricia suya, después de todo él también había sentido esa descarga eléctrica recorrer todo su cuerpo y luego instalarse en su estómago como una mariposa revoloteando sin cesar. Sin embargo, también sabía que si caía en sus redes, perdería el control y estaría a su merced, cuando él se entregaba a alguien lo hacía por completo. Y así transcurrió otro mes, donde Gaara le llamaba; sin embargo el azabache no contestaba. Pero, eso no era un impedimento para que Gaara le dejará mensajes de voz, obviamente eróticos, que derretían a Sasuke. Muy pronto e irremediablemente caería en sus redes y lastimaría a la única persona que lo ha considerado un amigo verdadero.
Dime como sucedió
Si él fue quien te busco
O dirás que fue el destino quien allí los acerco
No me digas fue un error
Tampoco pidas perdón
Finalmente, Sasuke dejo de recibir mensajes y llamadas del pelirrojo. Creía que por fin se había dado por vencido. Cuando sintió que ya no estaba en peligro, decidió aceptar la invitación del rubio para beber, cada viernes lo invitaba; pero él las había rechazado temiendo que Naruto le dijera a Gaara donde irían a beber, después de todo era su esposo y probablemente le contaba todo. Pero al creer que Gaara se había dado por vencido él se sintió aliviado y también quería ir a beber para quitarse todo el estrés que había acumulado y olvidarse de su frustración sexual, porque gracias a las insinuaciones del pelirrojo no había podido tener encuentros sexuales con otras personas. Fueron a beber, tanto Naruto como Sasuke bebieron moderadamente, aunque a Gaara se le subió un poco porque no había bebido dos meses enteros. Así que se encontraba algo borracho. Salieron del bar y se despidieron, tomaron distintos caminos. Sasuke temía que si seguían más tiempo juntos y él en ese estado terminaría contándole todo lo que había hecho Gaara para tratar de conquistarlo.
Aunque se toda la historia quiero oírlo de tu voz
Basta con mirarte
No hace falta oír
Ni hay que ser muy listo para predecir
Que hay despedirse y esto acaba aquí
Sasuke se tambaleaba un poco, y sintió unas ganas enormes de vomitar, así que se fue a refugiar a un callejón y comenzó a sacar todo lo que se había bebido y se dijo a sí mismo – Sabia que no debía beber tanto – Cuando se puso de pie y volteo para salir de dicho callejón se encontró frente a frente con el pelirrojo, con el culpable de todas sus desgracias, pensó que era una alucinación así que intento pasar a lado de él, pero cuando había dado unos cuantos pasos sintió un fuerte brazo agarrando el suyo fuertemente y después sintió un fuerte dolor en su espalda y también escucho un golpe sordo, para cuando se dio cuenta que había sido lanzado bruscamente contra la pared, abrió sus ojos desmesuradamente y pensó “Estoy en problemas”. Después observo la situación en la que se encontraba, estaba contra la pared, sus dos brazos estaban siendo apretados fuertemente por unos brazos fuertes. Su entrepierna estaba extremadamente cerca de la entrepierna de la otra persona. Sus cuerpos estaban endemoniadamente cerca. Le dolían sus brazos, después de todo estaban siendo fuertemente apretados. Intento deshacerse de los agarres, es más estaba tan distraído intentándolo que no se percató de que Gaara estaba acercando sus labios peligrosamente a los suyos; cuando se dio cuenta ya era demasiado tarde. Los labios de Gaara ya estaban sobre los suyos, Sasuke los mantuvo cerrados con todas sus fuerzas, pero de pronto sintió que algo estaba apretando su miembro, era la rodilla de Gaara, estaba haciendo presión en él, causándole dolor. Se le escapo un gemido de dolor, al emitir ese sonido, sus labios se entreabrieron ligeramente, momento que aprovechó el pelirrojo para meter su lengua en su boca, empezó a explorar sus dientes hasta que encontró lo que tanto había anhelado, desde hace dos meses, su lengua. Empezó a saborearla, haciendo que Sasuke sintiera choques eléctricos en ella e inevitablemente, comenzó a ceder ante esa lengua tan experta. Sasuke había caído en sus redes y ya no podría oponerse a él.
Dolerá mucho más
Al oírlo de tu voz
Dime como sucedió
Si él fue quien te busco
O dirás que fue el destino quien ahí los acerco
No me digas fue un error
Tampoco pidas perdón
Desde ese día en que lo beso tan apasionadamente, Sasuke ya no pudo rechazar nada que proviniera de Gaara. Después de ese día había pasado un mes, tiempo donde no habían pasado más que besos apasionados que lo dejaban deseando más y más. Sabía que era lo que quería Gaara, él quería que lo deseará más para que no se pudiera resistir a la hora en que llegaran al acto final y que tampoco pudiera pensar en su “amigo”. Sin embargo, para Gaara la situación era realmente distinta, él no solo se conformaba con tener besos apasionados con Sasuke, no, después de su primer beso con Sasuke había vuelto a tener relaciones sexuales con Naruto. Y siempre las tenía después de darle un apasionado beso a Sasuke, solo tenía relaciones sexuales con Naruto para quitarse la frustración de no poder tenerlas con Sasuke, estaba entrenándolo para que no pudiera resistirse a él nunca más. Sasuke lo había herido en su orgullo, porque nadie se le había resistido por tanto tiempo, dos meses de sus rechazos los iba a pagar caros. Y así pasaron ocho meses donde Gaara besaba apasionadamente a Sasuke y lo tocaba, pero nunca llegaban al acto final, para eso tenía a Naruto.
Aunque se toda la historia
Quiero oírlo de tu voz
Para ya decir adiós
La última vez que Gaara y Naruto tendrían relaciones porque el primero ya tenía planeado tener relaciones con el azabache fue el 20 de Febrero del 2013. Naruto se había dado cuenta que el comportamiento de Gaara había cambiado pero cuando volvieron a tener intimidad intento hacerse de la vista gorda, pero algo en el sabía que todo estaba a punto de terminar por eso siempre le pedía que tuvieran relaciones sexuales con condón, Gaara se molestaba pero terminaba cediendo. A la hora de tener sexo el pelirrojo ya no hacia los actos preliminares a la penetración, así que ese día llego aún más lujurioso que siempre porque ya no se podía controlar cuando estaba con Sasuke, así que llego y ni siquiera le pregunto a Naruto, solo tomo lo que necesitaba. Naruto estaba en bata, acababa de bañarse buscando su ropa interior, cuando sintió los brazos de Gaara desnudándole y llevándole a la mesa más cercana, lo recostó sobre ella y lo penetro sin siquiera prepararlo y sin siquiera ponerse condón; fue doloroso, pero Naruto todo le perdonaba, lo amaba demasiado, sentía que moriría si no lo tenía a su lado.
Dime como sucedió
Si él fue quien te busco
O dirás que fue el destino quien ahí los acerco
No me digas fue un error
Tampoco pidas perdón
Aunque se toda la historia
Quiero oírlo de tu voz
Para ya decir adiós
El 27 de Febrero de 2013 el rubio se fue a hacer un chequeo general, que todos los hombres con las características de poder engendrar se tenían que hacer para mantener estable su salud e inmediatamente te daban los resultados. Ese día se enteró que estaba embarazado. Aunque la manera en que lo concibió no fue dulce ni mucho menos linda, estuvo feliz porque era fruto del amor correspondido. Sonrió ampliamente y dio las gracias al doctor y salió corriendo a contárselo a su marido, llego a su casa y los encontró, en su casa, en su cama. Su mejor amigo y su esposo lo estaban traicionando de la peor forma posible, estaban teniendo relaciones en la cama donde dormían, en el cuarto donde habían engendrado a su bebe. Las venas de su frente se hincharon y golpeo la puerta que habían dejado ligeramente abierta – ¿Porque me hacen esto, BASTARDOS? – Al escuchar su voz, Sasuke intento alejarse bruscamente de Gaara, pero este lo evito agarrando la espalda baja manteniéndolo en la posición en que estaban, después de todo él estaba dentro de él y manteniéndose en esa posición volteo a ver a Naruto – De verdad lo lamento, Naruto. Sé que está mal que lo hayamos hecho aquí, en tu cama, pero ya no aguantaba – Las lágrimas comenzaban a brotar de los ojos del rubio, pero el acaricio su estómago donde se estaba formando el huevo que sería el hogar de su bebe y pensó “Debo ser fuerte por ti hijo” y Gaara continuó – Ya no te amo, divorciémonos – y Naruto ya no podía ser más fuerte, derramo una lágrima – Eso es lo que quieres… pues ya está y tu – viendo con ojos llenos de decepción a Sasuke – eres un maldito traidor Uchicha, nunca volveré a confiar en un Uchiha, ¡lo juro! – Y se marchó de ahí, sin mirar atrás, sin decirle a Gaara que esperaba un hijo suyo y despreciando a los Uchihas.
Naruto sonrió amargamente recordando esa lejana vida, pero después su expresión cambio al mirar a su adorado hijo – Solo espero que Dios no me castigue por haber hecho un juramento y no cumplirlo. Pero, es casi imposible no enamorarse de Itachi Uchiha, tu padre –