–Kise, qué tienes? Por qué caminas así?
Preguntó Aomine Daiki, quien se encontraba parado en medio de la sala, observando curioso y algo preocupado al rubio que acababa de entrar por la puerta caminando un poco lento y lo miraba fijamente con la típica mirada de un niño que hizo alguna travesura y sabía, iba a ser regañado.
–Yo... Lo siento Aominechii,– respondió Kise Ryouta con una leve sonrisa en sus labios y siguió mientras contraia su rostro por el dolor– esta mañana... te engañe
<3
<3
–Tetsu, Kagami que hacen aqui?
–Kuroko queria hacerles una visita – respondió el alto pelirrojo de cejas extrañas, entrando en casa del moreno detras de su sombra.– Por qué? Tiene algún problema?
Aomine cerró la puerta y acompaño al dúo hacia la sala. –No exactamente... solo que no es... buen momento.
–Ocurrio algo?– se interesó Kagami viendo el ceño fruncido del otro. Pero antes de siquiera decir una palabra, la chillona voz del rubio se hizo presente en el lugar.
–Kurokochii~ Kagamichii~ que bueno que nos visiten!!
La luz y la sombra de Seirin observaron extrañados al As de Kaijou, que se encontraba sentado sobre unos cuatro almohadones en un largo sofa.
–Kise-kun, estas bien?– Kuroko fue el primero en preguntar.
–He? aaah~ no se preocupen por esto, solo tengo algunos problemas para sentarme
Ambos chicos quedaron en silencio ante la declaración del rubio. Si Kise estaba tan mal como para no poder sentarse, solo podía significar una cosa. Al menos para cierto pelirrojo era demasiado obvio lo que estaba pasando y un leve tinte rosado adorno sus mejillas.
–Valla!– exclamó luego de unos segundos de silencio– Nosotros nunca excedimos ese limite. Verdad Kuroko?
–Mn,– asintió– a veces Kagami-kun queda un poco adolorido, pero no como para no poder cami--
–Mejor baja de tus nube de sueño, Kuroko!- le corto revolviendo sus cabellos celestes bruscamente, siendo apartado por el mas bajo quien lo miro molesto–. Pero en serio Ahomine, No crees que te pasaste un poco?
Aomine que permanecía aún a su lado en el medio de la sala, caminó hasta el sofa donde se encontraba su rubio y se dejo caer a su lado rodeandolo con uno de sus brazos. El rubio y el moreno se miraron un momento hasta que el último respondió– Dejen de decir tantas estupideces ustedes dos! No fui yo quien lo dejo asi!
–He?
Ahora si que estaban por demás confundidos. No podia ser lo que estaba pensando... o si? No!
–K-Kasamatsu volvio a golpearte?- intentó adivinar Kagami. Era sabido que frecuentemente el capitán de su equipo solia molestarse con él dandole algún que otro golpe. Quiza se le haya ido la mano?
–Claro que no! Kasamatsu-senpai no tiene nada que ver!
–Ah!- exclamó repentinamente Kuroko, como si hubiese recordado alguna cosa.– Entonces... no puede ser, Kise-kun tu no...
–Si Kurokochii~ fue eso! Es que era demasiada tentación!
–Tetsu tu lo sabías?– gritó Aomine mirando incrédulo a su ex-sombra
–Bueno... solo me comentó alguna cosa, pero no creí que en verdad fuera a hacerlo.
–Qué? Pero... Cómo..?- el tigre sentia que se habia perdido alguna cosa, pero al parecer todo era cierto. La única conclusión que se podía sacar de todo aquello, era que Kise habia engañado a Aomine!!
Sin poderselo creer aún, miro hacia el peliazul que permanecía con su ceño fruncido en señal de molestia, pero nada mas fuera de lo normal– Cómo puedes estar tan tranquilo?
–No es asi Kagamichii~– le respondió el rubio en su lugar– Aominechii me regaño feo por haberlo hecho!
Flash back
–Qué tienes en la cabeza Kise? Cómo pudiste dejar que otro tipo te toque de esa forma? No te entiendo- Gritaba el moreno con su cara roja de ira. Estaba que hervía de celos.
–Calmate Aominechii! No fue para tanto. Ademas él era un profesional!– explicaba el otro sentado sobre un par de almohadones en el sofa.
–Profesional y una mierda! Míra como te dejo! Además el único que puede tocarte soy yo!
–Lo se Aominechii! Pero tu sabes que no puedes hacer este típo de cosas.
Eso si habia tocado el orgullo del chico– Tsk, pues lo siento por no tener ese talento, pero esa no es escusa!
–Pues lo lamento! Es mi cuerpo y yo decido que hacer con el!
–Entonces has lo que de de la maldita gana!
–Aominechii~
Fin Flash Back
–Luego de eso se encerró en el cuarto y no quiso hablarme en todo el día.– terminó soltando un suspiro de resignación
–Pues qué esperabas?– gruño el moreno– Engañandome de esa forma. Diciendome que irias a una sesion de modelaje y volviendo con tu trasero adolorido!
–Ya te pedi disculpas por eso~
–Es en serio? Aomine, a pesar de todo te lo tomaste bastante bien.
Kagami creía entender un poco mejor como fueron las cosas. Al parecer Kise habia ido con uno de esos terapeutas del sexo, que no solo te explican lo que se debe hacer, sino que tambien lo experimentan. Quizá por eso Aomine no lo considerara un engaño como tal y lo haya perdonado.
–Que dices Bakagami? Es que no estabas escuchando? – respondió fregandose los cabellos azules con una mano– Ademas, ya estaba echo, no podia hacer otra cosa. Y ahora que lo pienso no es algo malo, pero solo el pensar que otro tipo te tocara me pone de los cojones– Terminó fulminando de nueva cuenta al rubio con la mirada.
–Bueno, fue algo incomodo sí –admitió–, pero yo sabia que el solo hacia su trabajo asi que no fue problema... si te hace sentir mejor, todo el tiempo pense en tí!
–No digas cosas tan obvias, por supuesto que pensabas en mi. Si no porque razón hiciste eso?
–Es cierto~
Kagami aún no podia creer lo que oia de sus amigos –Siempre estan que se matan por los celos y ahora hablan como si fuera algo tan normal! No lo entiendo!
–Estas exagerando Kagami, ni que fueramos a cortar por eso!
–Si pero...
–Por cierto Kurokochii- irrumpió Kise- no quieres intentarlo también?
–Q-Que diablos estas diciendo Kise!? Kuroko jamas haría algo asi!– gritó Kagami horrorizado al imaginarse a su sombra en esas condiciones.
–Calmate Bakagami, al menos a ti si te esta avisando!– comentó Aomine.
–La verdad también estaba pensando en hacerlo– mencionó el chico fantasma sorprendiendo al pelirrojo
–Kuroko!!e Tsk, Qué diablos pasa con todos ustedes? Acaso es esto común entre los japoneses?
–Pero Kagamichii, en America no es mas comun este tipo de cosas?– preguntó Kise totalmente serio.
–Es verdad! El 90% de la población lo hace– apoyó Kuroko.
–No es cierto!!
–Pero Kise-kun, no es muy doloroso?– Siguió Kuroko sin hacer caso a su luz.
–Oí!
–Bueno eso depende! Quizá si lo haces en un lugar mejor no te duela tanto, yo lo hice de esta forma por mi trabajo de modelo!
–Es cierto
–Además, si no es muy grande tal vez duela menos!
Y con esas palabras Kagami ya no soporto mas tiempo– Se acabó! Por supuesto que no lo aceptaré!! Esto es demasiado. Nos vamos!– Y tomando la mano de Kuroko salió del lugar dejando oír un fuerte portazo.
Aomine y Kise quedaron un momento observando el camino por el que los jovenes habían desaparecido y luego se miraron seriamente antes de distorsionar sus gestos y comenzar a reír a carcajadas.
–No lo entendió verdad?– preguntó Daiki
–Definitivamente no lo entendió!– respondió Aomine
–Jajajajaj
<3
–No puedo creerlo! Que diablos fue todo eso!
Kagami caminaba a paso rápido murmurando por las callles mientras aún jalaba de la mano a su compañero.
–No entiendo por que estas tan enojado Kagami-kun?– cuestionó el chico tratando de no tropezar por la velocidad con la que era arrastrado.
–Y además me lo preguntas! Cómo pueden gustarte ese tipo de cosas?
–Bueno, no es que me gusten, pero hacerme un pequeño tigrecito no estaria malo.
Paro de golpe al escuchar lo último que no tenia nigún sentido en la conversación actual –Hacerte.. Qué?
–Un tigre Kagami-kun.. quiza en la espalda, o una pierna?
Kagami sintió entonces su cara arder al darse cuenta de sus hasta ahora errados pensamientos.
-Estas bien Kagami-kun?– Sin responder Kagami se dio la vuelta siguiendo su camino con la cabeza baja y sintiéndose burlado.
<3
–Eres malvado Aominechii~
Kise estaba acostado boca abajo en el sofa, mientras el moreno se encontraba en el piso acariciando su baja espalda.
–No pude evitarlo. Viste su cara?
–Si! Valla a saber cuantas cosas habrán pasado por su cabeza.
–Tetsu tampoco dijo nada.
–A veces puede ser muy travieso, Kurokochii~
–Siento pena por Bakagami. Aunque también me asusté en la mañana...
Flash Back
–Cómo que me engañaste? Kise tú...o no puede ser!– Aomine miraba a cada segundo mas horrorizado al chico frente a él.
–E-Espera Aominechii no es lo que piensas!!!!– Se apresuró a aclarar– Estoy hablando sobre lo de las sesión de modelaje! Era mentira que iría allí.
–Diablos Kise! No juegues con esas cosas! casi me da un infarto!– Murmuró aliviado pasando las manos por su rostro recuperando la compostura.– Entonces a donde fuiste?
–Hacerme un tatuaje!
–Un tatuaje? pero con tu trabajo de modelo no puedes....
–Lo hice en un lugar que no se... viera
-–...–
–...–
–Estas muerto!
Fin Flash Back
–Hehe~ Lo siento!
–Claro.– La mano de Aomine viajo hasta el trasero del rubio rozandolo suavemente sobre la ropa– Y? qué fue lo que te hiciste entonces?
Con una sonrisa algo pervertida díjo mirando a los ojos azules– Por qué no lo averiguas tu mismo?
Sonriendo de lado, el moreno aceptó bajando lentamente el pantalón junto con el boxer dejando expuesta la piel nívea del rubio donde se encontraba pintado aque bello dibujo y lo admiró acariciando suavemente con los dedos la pantera negra de ojos azules estampada en su nalga derecha y que además tenia "Aominechii" grabado en un precioso formato de letras. –Es hermosa.
–Como tú~
–De todas formas esta piel es solo mía y no permitire que nadie vuelva a tocarla– expresó dejando también un pequeño beso en el lugar.
–Por supuesto que es solo tuya, sino de quién crees que es ese nombre?
–Mío– díjo con una orgullosa sonrisa.
–Túyo– afirmó besando luego sus labios
'Tus besos se quedan en mi piel como tatuajes que jamas se borran."