Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

La maldición de la gota de agua por Keiran

[Reviews - 10]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

En este cap hay poquito lemon...

Bien en este capitulo se podría decir que le doy un pequeño descanso a los personajes, este es el ultimo cap de esta primera parte de la actualizacion, espero les vaya gustando y encantado recibire los reviews que quieran mandarme T__T 

 

Muy bien, gracias por seguir leyendome y en cuanto a "En las fauces del lobo" Pronto publicare nuevo capitulo, solo no desesperen... Gracias a mis lectoras y lectores y Chau! 

Hasta la proxima actualizacion :3

Llegamos a casa, y al entrar escuche como claramente Jack comenzaba a gritarle a Alexander… ¿Por qué estaba enojado? Estaban en la sala y yo simplemente no quise meterme en nada de lo que se estaban diciendo, prefería mantenerme calmado y tranquilo por él bebe, pero al escuchar a Jack llamarme… me quede petrificado en las escaleras, y a fuerzas tuve que voltear al escuchar esa pregunta.

—     ¿Está diciendo la verdad? — yo lo estaba mirando, ¿Por qué no nos creía?

—     Jack… fuimos a la penumbra por que Kyle se sentía mal, solo eso… ¿Por qué estas desconfiando de mí? — Alexander le pregunto enojado, Jack simplemente alzo su manos a la altura de la cara de Alexander, como si le dijera que se callara

—     Le he preguntado a él…— Jack me seguía mirando a mí con su ceño fruncido, estaba realmente enojado— Habla Kyle, no te quedes callado…—

—     F-Fuimos a la penumbra Jack… hable con el señor Link de la marca y me ha dicho que ahora es una marca que me identifica como un vampiro, todos los vampiros que se han convertido o nacido la tienen, solo para identificarlos… comenzó desde que el señor Link asumió el puesto del consejo— No sabía exactamente como estaba inventándome mentiras tan convincentes, pero había funcionado

—     Jack solo suspiro— Bien…— así, igual con el ceño fruncido solamente se dignó a ir a sentarse en el sofá, pero antes de que comenzara a subir de nuevo las escaleras el hablo— No quiero que vuelvan a dejar solo una maldita nota ¿entendieron? —

—     E-Esta bien…— le dije mientras Alexander veía como Jack encendía la televisión, simplemente negó algo molesto

—     Ve a darte un baño… debes de estar cansado—

—     Claro— le sonreí y subí rápidamente las escaleras

Los últimos días mi relación con Alexander cambio demasiado… ahora éramos mucho más cercanos, por las noches salíamos a caminar de vez en cuando con Jack, otras veces simplemente íbamos solos a un parque cercano mientras Alex me daba impulso en los columpios, ahora comenzaba a pensar que amaba más la noche que el día, jamás hubiera sabido que en este tiempo la noche y la oscuridad serían la mejor cosa que podría tener, era la única que me permitía vivir en paz…

Jack ahora por el contrario estaba muy irritable, por alguna razón no salía mucho de la casa, la mayoría del tiempo nos ignoraba cuando estábamos los tres juntos en la habitación y habían sido varias veces las que notaba como simplemente evitaba el verme cuando estaba riendo por alguna broma de Alex o cuando veíamos una película y yo lloraba aun peor que antes… creo que por las hormonas del embarazo, ahora tenía dos meses y medio y me sentía extraño… tenía más antojos, y menos nauseas, ya no vomitaba tanto pero si me daban muchas ganas de dormir, aunque había noches en las que no podía y simplemente lo dejaba pasar o me ponía de un muy mal humor, por el que prefería a veces no salir de mi habitación…

Sé que ya saben que yo soy delgado, pero ahora estos meses note que la ropa me sentaba mucho más apretada, según había subido de peso al ir a una pesa electrónica de un súper de por aquí… y era cierto, ahora los pantalones me dejaban una línea roja de donde me apretaban, tal vez por haber comido tanto después de que los vómitos se habían ido, y es que ahora casi toda mi dieta era liquida… gracias al señor Link y ese elixir que me había regalado en una botella podía comer los antojos que tenía, pastel, frituras, paletas, espagueti, y en estos momentos estaba en la cocina, comiendo fresas cubiertas de esa rica miel… o eso era lo que parecía…

—     ¿Q-Que estas comiendo? — preguntaron desde la entrada

—     ¿Mm…? — ni siquiera pude responder, una fresa en mi boca sabia tan bien que no quería dejar de comerla, presentía que mi bebe estaba sumamente feliz

—     ¿Qué que estas comiendo…? ¿No te da asco? — Jack me pregunto viendo como tomaba otra fresa del pequeño platillo hondo y lo embarraba de extra de “miel” — Kyle… solo verte hace que me den nauseas—

—     Saben rico…— le dije con la boca llena— Pruébala…—le tendí la fresa pero por un momento dude, era la última, y yo la quería.

—     No… ya sabes cómo me puse con el pastel que te había traído tu hermano— fue lo único que me dijo para ver como así sin hacerme esperar me la metía a la boca de un solo bocado, y parte del jugo de la frutilla se me escapaba por la comisura de los labios, la limpie con mis dedos al final… Vagamente vi que la cara de Jack se había llenado de pequeñas arrugas antes de que gritara— ¡Que asco! — me dijo y simplemente se alejó un paso de mi

—     Te dije que la probaras… sabe realmente deliciosa gracias al elixir que el señor Link me dio cuando fui a la penumbra, sabe exquisito, te diré que puedo volver a comer comida normal nuevamente— confesé después de haber tragado la fresa

—     ¿Un elixir? — pregunto

—     Sí, me lo regalo…— confesé— Pero es una pena que no la hayas querido…— tome el platillo y fui y lo guarde en el refrigerador que ahora todos los días estaba completamente vacío, y pensé, si tenía este elixir, podría usar el dinero acumulado que me daba Gabriel para poder comer comidas nuevamente, se me antojaban unas papas fritas, definitivamente eso es lo que compraría en el pequeño súper de la esquina, y al voltear vi que Jack seguía mirándome, por alguna razón recordé las veces en las que me miraba atentamente desde antes de que fuera un vampiro… me sentí como si me estuviera acechando, pero, sentí miedo… fue la primera vez que sentí eso estando cerca de el— ¿N-No hay un sabor de algún alimento que quieras recordar? — le pregunte yendo al fregadero y me serví un vaso con agua

—     Bueno, ya no recuerdo el sabor de ninguna cosa que haya comido cuando era un humano, han pasado muchos años… y la comida de ahora es una completa basura a como yo lo veo— me contesto caminando hasta llegar a mi lado, mientras tomaba un vaso y él también se lo llenaba de agua— No recuerdo los sabores de la comida… solo puedo reconocer el sabor neutro del agua cuando está muy helada—

—     ¿jamás llegaste a probar alguna hamburguesa? — pregunte y el solo negó— ¿Un sándwich? —también negó— ¿Una manzana? — allí fue cuando asintió— ¿quieres una? — le pregunte sonriendo

—     Ahora saben feo…— me dijo, estaba a mi lado, no podía creer el estar sintiendo esta clase de escalofríos aun, ya habían pasado dos meses y medio desde que me hizo tener relaciones con él a la fuerza y aún estaban allí esos impulsos de miedo

—     ¿Hay algún sabor que quieras recordar realmente? — le volví a preguntar

—     Bueno…— se volteó sobre sus talones y quedo frente a mí, mientras me miraba con sus oscuros ojos, los movía pausadamente como si observara cada milímetro de mi rostro, yo solo me incline un poco hacia atrás al sentir su mirada tan pesada— Hay un solo sabor que quisiera recordar…—

Las cosas para Jack siempre fueron simples… yo era el que siempre estaba pensando en los problemas, en las cosas malas que nos podían hacer daño o que todo saliera lo mejor posible, Jack actuaba bajo impulsos y emociones, sentimientos tal vez, no parecía que le preocupara mucho el que me hubiera hecho “eso” hace meses, al contrario, actuaba como si realmente no hubiera pasado nada, como si todo hubiese sido un juego en el que pagaba en un parque de diversiones y te daban unos cinco o diez minutos para dejarte con ganas de subir de nuevo y pagar por más… con Jack, nada era suficiente. Nada.

Sentí como me tomo por el mentón y lo elevo un poco, sus labios se dirigieron a los míos de una manera sugestiva y lenta, me quede totalmente petrificado al sentir sus labios sobre los míos una vez más, las únicas veces que esto había pasado fue de la vez en que yo lo bese cuando estaba sentado en el sofá de la sala, y le di una mordida que tardo en sanar cerca de un día y medio… ahora él era el que me estaba besando ¿Por qué? ¿Por qué hacia esta clase de cosas que contradecían todo lo que me había dicho desde un principio? Porque sus ojos esteban cerrados tan relajadamente como si en verdad estuviera disfrutando este beso… ¿Por qué?

Me aparte de él lo más rápido que pude, me miro, me miró fijamente, mis hombros estaban temblando, todo yo estaba temblando, confiaba en que lo que había pasado antes no se volviera a repetir… deseaba que eso no volviera a pasar nuevamente, porque si no, no lo soportaría… mi corazón se quebraría por completo si eso volvía a pasar.

—     N-No vuelvas… No…— Tartamudee, y di dos pasos hacia atrás, el me tomo de los hombros y automáticamente puse mis manos sobre su pecho para que no se acercara por completo a mi

—     No… No me temas… no tienes por qué tenerme miedo Kyle, yo no te are daño, no esta vez…—me dijo lentamente, tratando de que lo escuchara con la mayor claridad posible

—     Baje mi mirada y no pude evitar derramar lágrimas al temblar— No me beses…— le pedí

—     ¿Por qué? — me pregunto algo confundido, podía escuchar la sorpresa en su voz— ¿Por qué no puedo besarte? —

—     N-No lo sé…— le respondí

—     ¿Por qué no quieres que te bese? — me pregunto de una forma diferente, pude sentir un poco de enojo en su voz, de irritación

—     Porque tengo miedo…—reconocí, esta sensación no era como cualquier otra, lo que menos quería era tenerle miedo a Jack a pesar de amarlo, pero mi cuerpo actuaba solo— Tengo miedo que me vuelvas a hacer lo de antes Jack… tengo mucho miedo— me hice pequeño en mi lugar, ni siquiera me atrevía a ver su rostro

—     Kyle…—escuche otra voz, y Alexander había entrado a la cocina, cuando nos vio, él puso una cara de no saber qué era lo que estaba pasando aquí

—     Alex…— dije su nombre y automáticamente mi cuerpo se movió solo, sentí como Jack quiso detenerme, como quiso hacer que no me fuera de sus manos, pero fui muy escurridizo de sus dedos y llegue al lado de Alexander tan rápido como pude, no me importo tener que rodear la isla en la cocina, lo tome del brazo, y me limpie rápidamente las lágrimas del rostro— ¿P-Podemos salir al parque? — le pregunte quedamente, no quería que el malinterpretara mis lagrimas

—     ¿Qué fue lo que le hiciste? — Alexander le pregunto a Jack, y Jack simplemente se irguió de la manera correcta

—     No le hice nada…— le contesto

—     Alexander, vamos… salgamos a caminar— le insistí, el volteo a verme

—     ¿Por qué estas llorando? — me pregunto

—     No es nada importante— le jale el brazo— Vámonos… salgamos a caminar, quiero ir a comprar algo al súper— le insistí nuevamente, el solo suspiro y comenzó a caminar a donde yo lo llevaba, antes de salir le dirigí una mirada rápida a Jack, el solo me veía con resentimiento, con mucho disgusto… ¿Por qué me había besado?

Tome mi chaqueta del perchero y apresurado me puse a abrir la puerta, estaba nervioso… ansioso por escapar de este lugar. Al salir, lo primero que sentí fue una brisa helada por los principios del invierno.

—     ¿Puedes decirme por que estabas llorando? — me pregunto Alexander caminando a mi lado— no me gusta verte llorar… y menos cuando Jack es un estúpido contigo ¿Qué fue lo que te dijo? ¿O que te hizo Kyle…? Puedes confiar en mí…—

—     No me siento cómodo hablando de eso—le dije— Prefiero simplemente olvidarlo—

—     Kyle…— se quejó— Sé que tu relación con Jack ha cambiado mucho, de hecho también ha cambiado conmigo, a veces siento que me ve como si quiera matarme, pero eso no amerita a que tenga el derecho de hacernos daño, no porque le quieras significa que puedes aguantar todo lo que te diga o te haga… ¿entiendes? Sabes que somos amigos, los tres lo somos, pero hay algo que Jack siente, y no me deja verlo… no me ha dejado hacerlo— Alexander parecía impotente, yo solamente suspire de una manera cansada provocando que me volteara a ver de nuevo— ¿vas a decirme? — me pregunto

—     Yo… bueno, Jack me…— ¿estaba dispuesto a decírselo? Si le decía no solo Alexander iba a ir a golpearle y a pelear con él a mi hogar, si no que cuando llegara el momento en que les confesara lo del bebe, así de simple sería ponerse a pensar que fue en contra de mi voluntad, y quien sabe si Jack y Alexander se verían como amigos nuevamente— Perdóname…— solté desanimado, mi cara fue una de angustia al ver como Alexander se adelantaba echando un bufido molesto, me apresure a ir a su lado— ¡Alexander no es porque no confíe en ti! — se lo grite tomándolo del brazo y lo estire para que me viera— Es solo que no es fácil…—

—     ¿Qué tan grave es lo que te hizo para que te haga llorar de esa manera? — me abrazo suavemente y me transmito tranquilidad, sin duda Alexander era mi mejor amigo, pero Jack era la persona a la que amaba

—     Te lo diré cuando sea el momento adecuado Alex, es solo que… no quiero hacer problemas— lo abrace igual— Siento que Jack jamás me va a amar, no he hecho nada para que me trate de esa manera tan indiferente… y duele, duele mucho y me confunde— de nuevo deje escapar las lágrimas, me separe de él y Alexander las seco por mi

—     Bien… entiendo tu punto de vista— me sonrió— solo confía en que todo estará bien en unos días… el tiempo lo dirá todo, estoy seguro de que Jack dejara de odiar a los vampiros por ti—

—     Alex…— sonreí débilmente— ¿Y si no es así? ¿Y si a mí también me termina odiando como a los demás? — le pregunte

—     A mí me sobrelleva…— rio un poco— creo que a ti jamás sería capaz de odiarte…—

—     ¿en serio? — le pregunte

—     Claro que si…—

Después de haber hablado un rato más, pasamos al súper y compre mis papas… estaba ansioso por comer, de vez en cuando pasaba por mí las ganas de engordar y ver como simplemente me ponía gordito, después se me pasaba, no podía pasar por mi mente el pensamiento de verme enormemente gordo, o con esa barriga enorme… casi todo el tiempo fantaseaba con mi imagen y la de Jack cuidando, arrullando y bañando a nuestro bebe… era realmente hermoso y a veces hasta quería llorar.

Muy frecuentemente sobaba mi estómago, aun aunque ni siquiera estaba algo gordito sabía que allí estaba nuestro bebe, y en mi interior quería ser valiente para poder conquistar a Jack, que él se enamorara de mi… eso era lo que quería, o que al menos intentara algo conmigo, estaba dispuesto a hacer lo que sea por él.

Solo tenía que llegar a saber el por qué estaba pasándole esos cambios tan repentinos de humor…

///Fin Kyle///

///Narra Jack///

La paciencia jamás fue mi fuerte, no puedo expresar cuanto coraje y enojo sentí al ver como Kyle le pedía a Alexander que lo acompañara a caminar, no podía, y menos cuando me vio, como diciéndome “mantente alejado de mi” “no cruces esta línea” Eso me hizo enojar tanto que cuando supe que se habían ido tire el maldito vaso de vidrio al suelo… y lo estrelle contra la pared de un lado de la puerta.

Había pasado cerca de una hora y media y ellos seguían sin llegar, apenas tome mi saco para ir en busca de ellos escuche risas afuera… ¿ellos estaban riendo despreocupados? Esto era el maldito colmo… cuando abrieron la puerta me vieron con el saco en manos y simplemente me pasaron desapercibidos, definitivamente no me agradaba la manera en la que Kyle ahora pasaba más tiempo con Alexander, que conmigo, antes todo era lo contrario… ¿Qué habrá pasado en la penumbra? ¿A qué personas habrá conocido? ¿Por qué ahora Kyle disfrutaba mucho estar con Alexander? Kyle simplemente me tenía a mí para platicar, para conversar… definitivamente mi cuerpo no podía con toda esta furia.

Kyle estaba comiendo en la cocina de esas papas fritas que comía siempre antes de ser un vampiro, y las untaba de un tipo de líquido… ¿Cómo podía soportar esos sabores? ¿En verdad sabía bien como él decía? Dudaba. Cuando lo bese, sus labios me supieron aún más delicioso de lo que recordaba, quise volver a probar su sabor pero cuando lo hice, sabia a un dulce… no puedo expresar como sinceramente, recuerden el sabor de la mejor cosa que hayan probado en su vida, y se acercaran a lo que quiero explicarles realmente. Entre a la cocina y me le quede viendo desde la entrada, como comía y comía sin parar… era como antes, siempre que Alexander y yo llegábamos a su hogar, lo encontrábamos comiendo alguna cosa, ya fueran frituras, refrescos, algún guisado, o pasteles y panes. Yo recordaba algunos sabores, pero, ya tenía suficientes experiencias malas con la comida siendo vampiro, como para arriesgarme a tener otra bajo mi propia conciencia.

—     Dios, ni te había visto…— de repente escuche a Kyle y él me estaba viendo, allí recargado en el marco de la puerta

—     Ya llevo mucho tiempo aquí, estas comiendo demasiado— le dije, y una pequeña risa se asomó por mis labios al momento en que vi que volvía a tomar otra papa— Y se ve que no piensas parar…—

—     Es que hace unos dos meses que ya no había probado mis comidas favoritas, se me antojaron las papas fritas— me respondió, ahora parecía no sentirse nervioso por que estuviéramos solos en la misma habitación, pero sospechaba que si quería volver a acercarme… huiría.

—     ¿En verdad sabe tan bien? Lo comes como si fuera lo mejor del mundo— le dije desde mi lugar

—     Si, mira…— tomo una y la empapo por completo de esa miel amarrilla, yo me erguí en mi lugar y me incline un poco hacia atrás, Kyle seguía siendo igual de insistente que antes— Cómetela… te prometo que si te sabrá bien, si no, puedes decirme de cosas hasta que te canses… aguantare hasta bromas de mis ojos o mi boca— sonreí ante la oferta, pero no era necesario, tome la papa de sus manos y lentamente la introduje a mi boca, ahora viéndolo bien, sabia realmente delicioso, no sabía mal, a podrido como otras cosas que había probado, mire a Kyle y me lleve la mano a la boca por que la risa se me quiso salir de los labios al notar que él estaba sonriendo tratando de ver cada expresión de mi rostro

—     Ya, sabe rico…—le dije, mi voz fue amortiguada por mi mano, mientras que detrás de ella mi sonrisa estaba de lado a lado— Sabe muy rico Kyle... — le repetí al ver que no dejaba de verme, me quite la mano al sentir que mi sonrisa había disminuido un poco

—     Oh que bien que te ha gustado…— me dijo feliz, fue y se sentó nuevamente al banquillo y siguió comiendo— puedes seguir comiendo si quieres… yo ya casi me lleno—

—     No creo que te llenes…— fui a su lado y tome otra papa— Aprovéchate del señor Link y quítale litros y litros de esta cosa— inunde la papa en el pequeño platito e introduje otra a mi boca, este sabor podía ser adictivo

—     Jajá ya, se lo pediré como favor, aunque no creo que se niegue, el señor Link me quiere mucho— eso hizo que un pequeño tic se albergara en mi ojo, me daba mala espina el cómo se refería a ese hombre, como si lo conociera desde hace mucho tiempo, cuando vi esa nota que me había dejado Alexander en la mesita de la sala y saber que se habían ido sin mí, me hizo sentir impotente, inservible, me enojaba el no estar enterado de nada en lo absoluto

—     ¿Por qué no me avisaste que te sentías mal? — pregunte, aun con la papa frita entre los dedos

—     ¿Qué? — me pregunto, eso hizo que terminara por explotar

—     ¡¿Qué por qué demonios te fuiste sin mí, con Alexander a ese lugar?! — le grite enojado, Kyle, simplemente, se levantó asustadizo de su asiento

No sabía porque exactamente me sentía tan iracundo, tan enojado… todo me molestaba, absolutamente todo.  Me molestaba el que Kyle estuviera más con otras personas que conmigo, el haberle hecho eso hace meses fue uno de los peores errores de mi vida, lo tome por la fuerza, pensando en que seguramente pasando los minutos el fuera a aceptarme o desearlo igual que yo ¿y cuál fue el resultado? Lo deje en su habitación solo, después de que me miro de esa manera tan triste… me había dejado guiar por mis impulsos igual que esa vez que lo convertí en vampiro, no sabía cómo disculparme, no sabía en realidad si debía de hacerlo… no quería hacerlo sentir peor o seguramente recibir un montón de insultos de su boca, así que solamente calle, calle a pesar de sentir toda esta culpa sobre mis hombros. Después de eso nuestra relación cambio, a pesar de desear estar con el como antes, no lo hacía, me esforzaba por pensar que no estaba permitido, que ese derecho se había acabado para mi… pero…  ahora tenía miedo, miedo a que por lo que le había hecho el dejara de amarme como me había dicho, miedo a que ese amor fuera para alguien más, solo era eso, miedo. Miedo a que ese lazo que había visto al el alimentarse de mi desapareciera por completo…

Aun así mi orgullo estaba de por medio, y en algunas personas eso es más fuerte que nada… tenía que romperlo, romper mi orgullo para ser feliz y no mandar todo a la basura, tenía que aceptar el que Kyle ahora era alguien como yo, y verlo de la mejor manera posible… y eso era el solo hecho de saber que estaríamos juntos por siempre, por siempre junto a Kyle.

Después de que le grite de esa manera Kyle se levantó de su asiento tan rápidamente que ni me dio tiempo para voltear, había salido corriendo de la cocina, asustado… me dolía verle así, me dolía actuar así con él, así que me levante rápidamente y comencé a seguirlo por la casa, Alexander estaba sentado en la sala viendo la televisión y me sorprendió que no hubiera visto a Kyle pasar detrás de él, en cuanto subí las escaleras lo vi yendo a  la habitación de su madre… llegue hasta allí y lo vi queriendo ir apenas a la puerta con algo en las manos para cerrarla en mi cara. Por supuesto que lo detuve y entre sin mucho esfuerzo, cuando lo vi, estaba sosteniendo un portarretratos de su madre… y ese nudo permanente que tenía en el pecho se hizo aún más grande…

—     P-Por favor solo déjame solo— me dijo, y apretó aún más la fotografía de su mama contra su pecho

—     Cerré la puerta detrás de mí y fui y lo tome por los hombros, el trato de alejarse, pero no lo deje— Kyle… te lo ruego, no me tengas miedo— mi voz estuvo a punto de salir rota al verlo

—     No quiero que me grites, que estés enojado, que hables conmigo, que me toques… no quiero que hagas nada de eso— me dijo con la mirada gacha

Al escuchar eso una impotencia nació en mí, ya que me estaba negando a hacer cualquier cosa para poder consolarlo, lentamente tome el portarretratos de su madre, y comencé a quitárselo, pero lo apretó aún más fuerte…

—     ¡Ya no la tengo en vida Jack! — me grito llorando alejándose de mi dentro de la habitación— ¡¿Ahora también quieres quitarme su fotografía?! —

—     ¡Yo no mate a tu madre! — le grite yendo hacia él, se pegó completamente a la pared del lado de ese enorme closet negro

—     ¡Solo hablándole a su fotografía puedo sentirla cerca! ¡Y me siento solo a pesar de estar contigo! — me dijo viéndome frente a él, yo solo me detuve— Tu… me haces sentir muy solo—

—     Dámela…— tome el marco y al elevarlo el simplemente dejo caer los brazos a los lados, derrotado, puse el portarretratos en el suelo y voltee a verle nuevamente, pero las lágrimas no paraban de salir de sus ojos, como una fuente, pase mis dedos pulgares para limpiarlo de esos hilillos en su rostro, ´pero simplemente volvían a salir enormes lagrimas saladas que volvían a mancharlo— Perdóname…— le pedí— Perdóname Kyle…—lo tome de la cintura y lo acerque a mi lentamente, sus manos se posaron en mis hombros y completamos un abrazo, el cual fui haciendo más fuerte al hundir mi rostro en su cuello, pero él seguía llorando

—     ¿Por qué siempre estás enojado? No con Alex, si no conmigo… —

—     No lo sé— le respondí

—     Mentiroso— me contesto con la voz rota, sentí como paso sus brazos alrededor de mi cuello e hizo el abrazo más íntimo— Eres un mentiroso Jack…— me volvió a decir

—     ¡No me llames de esa manera! — le dije fuertemente mientras yo también lo abrazaba con fuerza— Odio todo lo que haces…—

—     ¿Lo que hago? No veo lo malo en eso—

—     ¡Kyle has estado separado de mi todo este tiempo! ¡Te has ido a la penumbra y has conocido a más malditos como yo! ¡Estás más tiempo con Alexander que conmigo! ¡no quiero que estas con Alexander, no voy a dejar que te vuelvas a acercar a él ni a ningún otro tipo, entiendes! — le dije y nos separe un poco para tomar su rostro, el solo estaba viéndome sorprendido— Porque, tú me amas a mi ¿No es así Kyle? —

—     Jack…— dijo mi nombre y me sentí tan tranquilo— Siempre te voy a amar, siempre, eres la única persona para mi Jack…— el nudo en mi estómago se hizo tan grande que sentí que dolía, dolía tanto que esta vez lo tome y uní nuestros labios de una manera tan desesperada… estaba desesperado.

Sus labios sabían realmente dulces, tan pequeño, tan hermoso, Kyle era un ángel al lado mío… y yo el maldito diablo.

Era el beso más largo que nos habíamos dado, al grado de sentir que nos faltaba el aire, nos separamos y pude notar que Kyle había dejado de llorar, volví a besarle, cada cosa llevaba a la otra, tan pronto como me di cuenta ya estaba despojándolo de su ropa… y el solamente suspiraba, en verdad… esto estaba pasando nuevamente. Pase mis manos hacia sus muslos y lo alce con gran facilidad, lo lleve a la cama y lo recosté… aun así no aguantaba mis ansias, mi hambre de él… pero lo que más me hacía feliz, era que Kyle me estaba aceptando, que deseaba estar conmigo, que quería que hiciéramos el amor.

Comencé a besar su cuello mientras él me dejaba hacer lo que deseara, suspiraba con cada uno de mis contactos con su piel, cuando succionaba y soltaba su piel enrojecida de un solo golpe, y todo mientras escuchábamos el rechinido de la cama de su madre, gracias al cómo me movía para despojarme de mis pantalones y los suyos.

Me sentía un irreverente, pero que más podía hacer, amaba a Kyle, lo amaba, pero me sentía incapaz de decírselo, era un estúpido, y tienen todo el maldito derecho de pensar así de mí. Hay veces que por más que quieres decir o confesar las cosas, tu maldita boca no se habrá para decir ni una sola palabra.

Comencé a deslizar mi lengua por todo su cuerpo, por sus pezones dejándolos rojizos y humectados, por su estómago… por encima de esa marca que se había hecho un rojizo realmente brillante, lo hacía ver aún más sexy de lo que ya lo estaba viendo debajo de mi, desnudo, por su vientre, bese sus piernas, y metí en mi boca sin ningún aviso su miembro que ya hacia completamente duro gracias a mis caricias… en verdad Kyle volvería a ser mío…

—     J-Jack… v-voy a correrme…— apenas si alcance a escuchar su aguda voz, deje su miembro de lado, enrojecido por los vaivenes que hacía con mi boca y me posicione sobre él, me tomo por el rostro y me beso lentamente… y por un momento las palabras estuvieron atoradas en mi garganta, ese “te amo” que siempre quise decir, que he querido decirle desde que le había conocido, pero el hablo antes que yo— Jack… te amo mucho, te amo— me lo dijo haciendo que me tragara esas palabras… no podía expresar el cómo me sentía, cuando estaba con el todo a mi alrededor se olvidaba, y exprese mis sentimientos de una manera muy diferente a la que yo hubiera querido hacerlo, sin aviso lagrimas salieron de mis ojos… y lo abrace con fuerza sobre la cama

—     Kyle…— su nombre fue lo único que salió de mi boca

Felicidad es una palabra que muy pocas veces alcanzas a decir al describir tu vida por completo, una palabra que pocas veces la define, así estaba definiendo mi vida en estos momentos, mi vida era felicidad… todo gracias a Kyle.

Esta vez trate de ser lo más gentil posible con él, al grado de prepararlo durante minutos, al grado de sentir que su interior estaba suplicando por mí, de escucharlo gemir con solo mis dedos, de ver su rostro enrojecido gracias al placer, y de oírlo decirme una y otra vez que me amaba como si la primer vez que lo dijo no hubiera sido suficiente.

Me posicione entre sus piernas, mientras sentía como su interior quería absorber mis dedos, tan dilatado estaba ya, que no pude aguantar mis ansias de entrar en el de una manera rápida y deseosa, vi como su rostro se contraía ligeramente pero aun así soltó un agudo gemido hacia mi rostro, mientras entremetía sus pies entre mis piernas… su interior era sumamente caliente y húmedo… nada se comparaba con su interior, me sentía unido a él, sentía que éramos uno en verdad, apoyado en mis manos comencé a moverme lentamente en su interior mientras hacía que su cuerpo debajo de mí se moviera a compás del mío, me había olvidado del mundo por completo y me perdía en su profunda mirada, una mirada tan hermosa como siempre había querido que me mirara… con amor.

Tome una de sus piernas y la alce para que estuviera apoyada encima de mi hombro, y comencé mis embestidas más rápidas, lo escuchaba gemir en mi oído mientras encajaba ligeramente sus uñas en la piel de mis brazos, decía mi nombre, lo decía una y otra vez sin ninguna vergüenza…

—     Ohhh Jack… J-Jack más rápido… P-Por favor— me lo dijo vagamente entre nuestros movimientos, baje su pierna de mi hombro y apoye mis manos a ambos lados de su cabeza, y nos miramos, no podía parar, estaba a punto de llegar al final, y dijo las palabras mágicas para que volviera a estallar en su interior…— T-Te amo Jack, te a-amo, te amo… — me lo dijo de una manera entrecortada, sentí como mis caderas se calentaron en sobremanera

Nuestros cuerpos estaban tan calientes entre tanta fricción, vi su rostro y el cómo gemía mi nombre una y otra vez mientras su cuerpo se tensaba bajo de mí, hundía su cabeza entre las almohadas y las sabanas ámbar de la cama… enredo sus piernas a mis caderas pegándome más a él, hundiéndome en su interior estalle con unos ásperos gruñidos, me apoye en mis codos sin dejar de moverme… y bese su cuello con vehemencia... respiraba tan difícilmente que apenas si podía halar aire, y me deje caer suavemente encima de su cuerpo, el me abrazo y sentí lo humedecida que estaba su piel gracias al sudor de nuestros cuerpos, sabía que entre la oscuridad de la habitación nuestros cuerpos se veían vagamente unidos sobre la cama, mientras respirábamos ya con poca dificultad… había sido tan rápido, pero eso no le quitaba ese significado tan importante…

—     Kyle… te quiero tanto…—le susurre al oído

—     Yo también Jack…— me lo dijo besando mi mejilla y solamente sonreí

Salí de su interior lentamente, y me recosté a su lado mientras veía su rostro de perfil, lentamente se volteó a verme… y me sonrió, en mi interior solamente se albergaron los deseos de decirle tantas cosas bellas, todo lo que sentía en realidad, y cuando estuve a punto de decírselo… vi sus ojos cerrados, tranquilamente dormido… bese su frente…

—     Te amo Kyle… demasiado— sonreí en medio de la oscuridad y un enorme peso se fue de mis hombros, aun aunque él no me hubiera escuchado, me había atrevido a decirlo, y eso era suficiente para mi

 

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).