Lovely Couple
—Él te gusta.-Escuchó Chanyeol, quien despegó su mirada de aquel chicol de piel apiñonada.
— ¿Qué? ¿De qué estás hablando, Jongdae?-Cuestionó.
— ¡Oh por favor!-Chilló el menor — ¿Sabes cómo te mirabas hace unos minutos? Tenías cara de bobo enamorado, Yeol. Vamos, admite que estas totalmente enamorado de Kim Jongin.
— ¡¿Qué?! ¡No!-Contestó apresuradamente el más alto —Claro que no, Jongdae. No, no, no, no y no, ¿entiendes?-Jongdae soltó una risita burlona.
—No sé porque estas negando lo obvio, Yeol.-Volvió a soltar una risita burlona, provocando que el gigante hiciera un tierno mohín.
—Porque no me gusta.-Negó, aunque era una total mentira. Chanyeol llevaba un tiempo enamorado de Jongin pero no se creía capaz de hablarle.
— ¿Enserio?-Cuestionó Jongdae —Porque déjame decirte que, ahora mismo, Jongin está caminando hacía nuestra mesa.
— ¡¿Qué?!-El gigante se sonrojó inevitablemente, provocando una estruendosa risa por parte de su acompañante.
—Actúa normal Chanyeol o lo asustaras.-Dijo con simpleza —Jongin es mi primo y podría ayudarte con él, pero no lo ahuyentes, ¿quieres?-Chanyeol asintió efusivamente para que luego quedarse congelado al escuchar esa, según el gigante, preciosa voz de Jongin.
—Hola.-Saludo el recién llegado — ¿Qué hay, Jongdae?-cuestionó Jongin, sentándose al lado del gigante, quien se mantenían tan quieto–algo sumamente extraño en él–.
—Que hay, Kai.-Saludó Jongdae, quien rápidamente le dirigió una mirada a su amigo —El gigante tonto a lado tuyo es Chanyeol.-presentó para que así Jongin mirara a Chanyeol.
—Hola Chanyeol.-Saludo un sonriente Kai.
—H-hola.-Tartamudeó el gigante.
— ¿Qué te trae por aquí, Kai?-El nombrado se encogió de hombros —Ni tú mismo te la crees, habla ahora.-demandó Jongdae. Jongin rió y Chanyeol se enamoró más del chico de piel apiñonada.
—Bien, entiendo,-Comenzó Jongin —en realidad necesitaba tu ayuda.-Jongdae arqueó las cejas mientras que Chanyeol miraba con admiración y amor a Jongin.
—Continua.-Soltó el primo de Jongin.
—Matemáticas.-Respondió.
—Chanyeol es grandioso con las matemáticas.-Respondió Jongdae —Tal vez él pueda ayudarte. ¿Sabes qué? Él va ayudarte.-aseguró Jongdae, recogiendo sus cosas de la mesa —ahora los dejo.-se despidió y Chanyeol estaba a nada de chillar como una niñita pero tenía que controlarse.
—Así que,-Comenzó Jongin — ¿Me ayudas?-preguntó sonriente.
—S-si, por supuesto.-Contestó Chanyeol, sonrojándose.
—Muchas gracias, Yeol.-El nombrado sonrió tan ampliamente al escuchar a Jongin llamarlo Yeol. El gigante lo comenzó amar aún más. Mientras que Chanyeol sonreía abiertamente por estar a solas con su crush de hace mucho tiempo, el otro buscaba en su mochila su libreta de la aterradora materia que le sacaba dolores de cabeza constantemente —Mira, esto se me complica demasiado.
—Eso es fácil.-Dijo un alegre Chanyeol. Chanyeol con emoción le explicó detalladamente a Jongin lo que no entendía sobre la materia. En algún momento, mientras que Jongin trabajaba arduamente con las matemáticas, Chanyeol lo quedó mirando directamente, embobado, cautivado, enamorado. Era un tonto tirando, literalmente, baba.
— ¿Qué tanto me miras?-Cuestionó Jongin, inclinando su cuerpo hacia un lado para luego mirar a Chanyeol, quien se encontraba a escasos centímetros de él — ¿Hay algo malo conmigo?-preguntó.
—No.-Suspiró Chanyeol —Sólo que eres muy hermoso.-el gigante contestó sin percatarse de lo que salía de su boca. No fue hasta que escuchó la risita del menor que se dio cuenta de lo que había dicho — ¡No!–quiero decir tú eres muy apuesto, tu sonrisa es encantadora, eres lindo y yo sólo–sólo, oh joder.-Chanyeol cubrió su sonrojado rostro con sus manos mientras que Jongin reía ligeramente.
—Gracias.-Contestó después de un rato —Tú eres también muy lindo.-Chanyeol se destapó la cara sólo para ver una deslumbrante sonrisa pintada en los labios de su acompañante. Chanyeol sonrió y, con todo su valor reunido, se inclinó para depositar un pequeño y lindo besito en la mejilla de Jongin —Y tan tierno.-añadió el menor —Tal vez deberíamos salir.-lo siguiente que se escuchó fue el chillido para nada masculino del gigante.