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Una simple atracción por mikuuchan

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Notas del capitulo:

¡Hola gente bonita! No me he demorada nada en actualizar, tuve la fortuna de que esta semana estuve bastante libre de tareas de la universidad, así que tuve el día de hoy para escribir.

Fugaku no sopesó jamás en escuchar palabras tan seguras por parte de su hijo menor, conocía a su vástago lo suficiente para figurarse el porqué del cambio de parecer, si no hubiera una condición de por medio o una negociación conveniente para salir favorecido del presunto panorama al que estaría involucrado de no aceptar por voluntad propia la búsqueda de una pareja. Sin embargo, terminó por reconocer la sabia audacia y eficaz estrategia del pelinegro para lograr convencerlo de su plan de escape seguro y evadir por tiempo prudente a las autoridades del círculo autoritario.

Sonrió imperceptible aceptando una derrota que no tenía derecho a réplica, admitiendo por primera vez que al observar con detalle la confianza que reflejaba el moreno le enorgullecía como padre.

—Me parece bien que hayas tomado la decisión correcta en asistir al festejo de convivio de la preparatoria, Sasuke. El consejo jerárquico no tendrá potestad en hacer uso de la autoridad que les favorece como dirigentes absolutos del régimen en forzar un compromiso con un miembro del clan si te presentas en el acto de celebración por interés personal —el azabache permanecía sentado en uno de los cómodos sillones del despacho de su padre, mientras le miraba con la seriedad que le caracterizaba, intentando ver un ligero indicio de suspicacia por parte de su progenitor.

—Itachi me comentó el interés del régimen en forzar un enlace de compromiso con Naori, al ser ésta una de las pocas mujeres Omegas en despertar la habilidad especial del clan Uchiha. Por obvias razones, me veo en la necesidad de acudir al convivio y mostrarme interesado en encontrar pareja como única alternativa viable para ganar tiempo de distracción con los malditos viejos del consejo. En realidad, entre mis ambiciones personales no figuran comprometerme de forma precipitada, y bien conoces que no suelo retractarme ante lo mencionado, padre.

—Mi posición de que te comprometas con un Omega a la brevedad posible no es únicamente para continuar con la prevalencia del clan Uchiha, es para evitar involucrarte en los nefastos designios que el consejo jerárquico planea realizar. Itachi te ha mencionado ciertos pormenores que enfrenta las clases nobles de Konoha, a pesar de que tu abuelo y yo se lo prohibimos por el bien de tu seguridad y la suya propia. Sin embargo, manifestar al resto de los miembros, especulaciones que se dicen a voces terminará por alarmar las masas, acción que de alguna manera u otra afectaría a cada familia que conforma la jerarquía. Nuestra obligación como padres es velar por el bienestar de las futuras generaciones y en este caso la ignorancia a lo desconocido es el medio para apaciguar de forma momentánea los posibles conflictos que no se podrán evitar.

—No hay necesidad de ser un completo ignorante para llegar a la conclusión de que detrás de la maraña de corrupción que existe dentro del círculo autoritario, se maneja una turbulenta organización que dicta las normas retrogradas sin ningún tipo de escrúpulo, siempre lo he sabido y estoy completamente seguro que el resto de los clanes también conocen de ello.

—¿A qué punto quieres llegar, Sasuke? —Fugaku apoyó sus manos sobre el escritorio, mirando con seriedad el rostro inexpresivo de su hijo.

—Llegará el momento en que el abuelo y tú tomarán la decisión de ceder el puesto hacia uno de los miembros de la rama principal del clan Uchiha, es decir que tanto Itachi como yo asumiremos tal responsabilidad. Por ende, se me debe informar de las decisiones y movimientos que se realicen dentro de esta familia, padre. Si desean que cumpla con las expectativas al cargo de líder se deberá empezar con evitar el desconocimiento por parte de ustedes.

—El liderazgo del clan lo tomarán Itachi y tú, hijo. Los Alfas capacitados para este cargo solo puede ser manejado por ustedes, y es por la sencilla razón de que ambos se complementan de forma mutua. Tu hermano mayor es la conciencia mientras que tú, Sasuke... eres el temple que distingue a los Uchiha del resto. No obstante, es bien sabido que dentro de las normas que constituyen la democracia del régimen, solo se permite un dirigente por cada clase noble de Konoha. Itachi al ser el primogénito deberá convertirse en la cabeza de la familia, pero él heredó el carácter noble de tu madre, una actitud altruista que podría considerarse de débil en un ambiente tosco donde se evidencia constantemente la dominancia —el azabache miró de soslayo a su padre, preguntándose el porqué del comentario a medias del castaño.

—No comprendo lo que tratas de decir, padre...

—Itachi ha mostrado cualidades para ser la cabeza de los Uchiha, pero la nobleza más que describirla como una virtud es un defecto para el cargo de líder. Se debe tomar decisiones en base a las prioridades de cada miembro que conforma nuestra familia, pensar en el bienestar de los Omegas, Betas y Alfas que son parte indispensable del clan, es una enorme responsabilidad. Una acción errónea que se cometa bajo el mandato de un Alfa es la destrucción para la estirpe, Sasuke. Un dirigente también debe olvidar parte de su humanidad para garantizar la armonía de cada persona. No todo se resume a sabia determinación, también existe un oscuro nexo que va de la mano por el porvenir de un pueblo. Tu hermano no sería capaz de soportar la carga negativa que se inmiscuye dentro del pluralismo —el pelinegro menor meditó las palabras de su padre, entendiendo el pensamiento objetivo que su progenitor exponía.

—Si el consejo no aprueba la propuesta de liderazgo del clan bajo el mando de dos Alfas que comparten parentesco de sangre, la opción para líder sería yo —Fugaku le dio la razón a su hijo, observando detenidamente la expresión estoica del azabache.

—La presión que he ejercido a lo largo de los años a tu hermano y a ti es para prepararlos a cumplir con un rol que ha sido trasmitido en generación a generación, hijo. Sin embargo, tu obligación como Alfa y futuro líder en caso tal, es velar por la seguridad de cada miembro. Por ello, tu orgullo es lo que se necesita para ser la cabeza del clan. Tú sabrías afrontar con decisión los intereses que favorezcan a nuestra familia. Itachi y el resto de Omegas, Betas y Alfas Uchiha ven con buenos ojos de que seas el indicado para gobernar, sino se llegase a escoger a dos líderes dominantes como dirigentes.

—Ahora entiendo con mayor detalle tu pensamiento, papá. Un Alfa que se convertirá en líder debe estar dispuesto a tomar decisiones que van en contra de su palabra sin verse afectado en el proceso.

—Efectivamente, hijo. El cargo de líder de un clan poderoso suma responsabilidades sobre los hombros, algunas veces hay que sacrificar piezas importantes para asegurar la integridad de la mayoría. Itachi sabe de ello y no se opone a la decisión que se ha tomado al respecto. Sin embargo, al percatarse de tu carácter orgulloso la opción adecuada para gobernar y ser frente a las órdenes del alto mando de Konoha serías tú, Sasuke. Tu abuelo, el consejo Uchiha y yo, respectivamente. Hemos pensado en ti como única alternativa, si el círculo autoritario se opone a nuestro ideal, pero eso no quiere decir que asumirás el liderazgo de forma inmediata, nuestra prioridad como familia es proteger a la descendencia. Por tal razón, nos aseguraremos de arrinconar al corrupto régimen, brindándote el apoyo justo para tomar las riendas como un dirigente Alfa —el azabache asintió con la cabeza, para mirar con fijeza el enorme logo de abanico de colores blanco y rojo que permanecía a espaldas de su padre.

—Por el momento no insistiré en conocer el verdadero motivo que se oculta recelosamente entre los miembros del clan, pero eso no quiere decir que no estaré al pendiente, padre —Fugaku se mantuvo sereno, entrelazando sus manos entre sí, analizando las palabras de su hijo menor.

—Cuando sea prudente ahondar sobre el tema, no tendré ningún reparo en informarte de la situación que acontece dentro de las clases nobles de Konoha, en especial al clan Uchiha. Por ahora es preferible que este asunto se mantenga al margen, Sasuke —el pelinegro enarcó una de sus oscuras cejas, observando detenidamente el inexpresivo rostro de su progenitor.

—Si no hay nada que decir... me retiro a mi habitación —el moreno se levantó con parsimonia de la cómoda silla, dispuesto a marcharse a su pieza cuando la mirada penetrante de Fugaku lo detuvo de su acción.

—Espera un momento, Sasuke. Hay algo más que quiero conversar contigo, y es sobre el día de convivio. La importancia que tiene ese festejo sobre la jerarquía de clanes.

—Itachi se encargó personalmente de compartir su "maravillosa experiencia" sobre aquel festejo que se realizará, papá. El haber tomado la decisión de presentarme, no significa que tomaré a mi futura pareja a través de mi asistencia a esa actividad. Iré con la única intención de despistar a los miembros del consejo jerárquico y evitar un posible compromiso forzoso.

Fugaku frunció el entrecejo, suponiendo las razones de su hijo menor, sabía que su pelinegro vástago no cambiaría de parecer hasta mostrarse interesado por un Omega que despertara el instinto animal característico de un Alfa, acción que él dudaba que se diera por la imperiosa necesidad que comparte el moreno de manifestar su pensamiento liberal.

—Tu forma de ser me recuerda tanto a mí en su momento, Sasuke. Cuando mi ciclo se dio al cumplir con la mayoría de edad como todo Alfa que completa su transición de adolescente a adulto, compartía los mismos pensamientos que hoy defiendes solemnemente. Me negaba a tomar pareja porque deseaba recorrer las Cinco Grandes Naciones sin importar lo que pudiese ocurrir con el resto de los miembros del clan. Sin embargo, llegó el momento en que expuse mis razones a tu abuelo para desligarme de la responsabilidad de asumir un rol de líder que no creía conveniente para mí, pero ya era un hecho irrefutable que estaba destinado a ser la cabeza de la familia y como tal, debía tomar a un Omega como compañero de vida. Esa acción por parte de mi padre lo consideré una verdadera canallada, no me sentía preparado para formar una familia y mucho menos me veía capacitado en ser el dirigente de una de las clases nobles con mayor poder dentro de la jerarquía. Pensé en abandonar el clan, huyendo como un vil cobarde, olvidándome de los principios que se me inculcó de pequeño con la única intención de llevar la contra como muestra de repudio a la decisión que se había tomado, sin prestar verdadera atención a mis sueños. Estaba molesto con la imposición que se me obligaba. No titubee en llevar a acabo mi objetivo, hasta que conocí a tu madre, solo bastó una simple mirada para darme cuenta que ella era mi vida. Lo supe solo con verla, mi malestar e indignación pasó a segundo plano al conocer su modo de pensar. Mikoto me hizo recapacitar sobre mi egoísmo y reconocí mi error con valor.

—No estaba al tanto de tu experiencia, padre —el azabache musitó sorprendido, mirando a su progenitor con curiosidad, mientras éste sonreía imperceptible recordando su pasado.

—Mikoto y yo no habíamos considerado comentarlo, pero es necesario que nuestros hijos conozcan parte de la historia que han vivido sus padres —el pelinegro le sonrió al castaño, dándole la razón, para más tarde acomodarse en la silla que se encontraba al frente de su progenitor, escuchando las palabras sabias del Alfa—. Con esto que te acabo de compartir me puedo figurar tu sentir, Sasuke. Las personas nacemos con responsabilidades que se deben cumplir sin importar el valor de la acción que hay que acatar, y más cuando existe gente a nuestro alrededor que dependen de ti. Tu madre me enseñó ese juicio que desconocía por ser un Alfa soberbio, pensando únicamente en mí, pero agradezco que haya aparecido en mi vida, cambiándola por completo y regalándome la dicha de ser padre de dos maravillosos hijos que me enorgullecen —el azabache se mantuvo con un gesto afable en el rostro, comprendiendo el mensaje que su padre deseaba transmitirle.

—Una pareja en la vida de un Alfa también es importante. ¿No es así?

—Absolutamente, Sasuke. Compartir los buenos y malos momentos siempre se apañan mejor en compañía de una persona que es tu soporte.

—Comprendo lo que tratas de decirme, quizás muestre algo de interés en conocer a algunos Omegas durante el día de convivio —el azabache inquirió irónico, mientras que Fugaku suspiraba con cierta tranquilidad al oír el comentario de su hijo.

Sasuke se levantó de la silla del espacioso despacho de su padre para encaminarse hacia su habitación. Sin embargo, se detuvo justamente en el umbral de la puerta, girándose sobre sus pies, observando a su padre.

—Dentro de las clases nobles de Konoha muchos clanes suelen mostrar ciertas características específicas heredadas a sus hijos, en el caso de los Uchiha nos distinguimos por ser de piel clara, cabellos y ojos oscuros, ¿pero en qué clan del País del Fuego hay Omegas rubios de ojos azules, papá? —Fugaku miró de reojo a su hijo, notándolo ligeramente incómodo por la pregunta.

—El clan Yamanaka muestra esas características que describes, aunque los últimos años la tasa de natalidad en cuanto Omega se refiere es relativamente baja, su mayoría solo logra concebir Betas —el azabache negó con la cabeza, él estaba seguro que el blondo que había visto horas antes era un Omega en toda la extensión de la palabra y no podía pertenecer a esa clase noble en particular.

—¿De casualidad no existe otro clan?  —cuestionó el Uchiha menor. 

—El clan Namikaze es la élite dentro de la nobleza de Konoha, poseen la singularidad de procrear únicamente Alfas. Dicha razón, los convierte en uno de los clanes más poderosos dentro del País del Fuego. Sin embargo, la unión del líder de los Namikaze con la primogénita de los Senju dio origen a que la siguiente generación se mezclara con los Uzumaki, éstos tienden a concebir en su mayoría a Omegas. Las crías que nacen de los matrimonios Namikaze-Uzumaki heredan las características distintivas de los Namikaze: rubios de ojos azules y de piel bronceada, aunque también suelen conservar las marcas en sus mejillas indicativo de la estirpe Uzumaki, peculiaridad del linaje animal al que pertenecen, los zorros de nueve colas —el azabache abrió sus oscuros ojos con sorpresa, mientras hacia el esfuerzo de refrenar la sonrisa que se dibujaba en su apuesto rostro al escuchar a su padre.

—¿Puedo pedirte un enorme favor, papá? —el castaño asintió extrañado, al notar el peculiar comportamiento de su hijo menor.

—¿Qué necesitas, Sasuke? —Fugaku preguntó con interés. 

—Quiero averiguar el nombre de los Omegas del clan Uzumaki cuyas edades oscilan entre los quince y dieciocho años antes del día de convivio, padre —el Alfa mayor no pudo evitar expresar su asombro al ser testigo de la petición que le solicitaba su hijo con total seguridad.

—Estoy completamente desconcertado, Sasuke...

—Seré sincero contigo, papá. El único Omega que quizás haya captado mi atención se encuentra en el clan Uzumaki. Si pienso emparejarme solo será únicamente con él.

El castaño mayor parpadeó varias veces, intentando analizar el pedido del azabache, nunca se esperó que su rebelde y enfurruñado vástago tuviera en mente una posible pareja.

—Antes de que partas al colegio el día de mañana, tendrás los nombres de los Omegas del clan Uzumaki que estudian en la preparatoria de Konoha —Fugaku habló con su usual tono de voz seguro, confirmándole a través de su modesta inexpresividad el apoyo de su búsqueda.

—Te lo agradezco, padre —Sasuke sonrió con ligereza, retirándose del despacho de su progenitor, mientras el castaño salía del desconcierto que le abrumó en demasía, recuperándose inmediatamente del shock inicial para contactarse con sus allegados más cercanos. Si su hijo quería a ese Omega en especial, daba fe de que así sería.

 

...

 

Naruto observaba con detenimiento el inmaculado diseño que se encontraba en la parte superior del cabezal de su pieza, adornado por las llamativas líneas de trazos que formaban un hermoso dibujo de árboles que, se acoplaba con el resto de colores cálidos que componía su espaciosa habitación. No pensaba en nada en particular, más que en rememorar aquellos ojos negros que le miraban con detalle, sin rastro de emoción únicamente fijos en él.

Su corazón golpeteaba de forma rítmica, al recordar al Alfa que no salía de sus pensamientos desde el instante que lo vio, detallaba su atractivo rostro y su expresión estoica que, en su momento, quizás le hubiera molestado ser testigo de tanta impasividad por parte de alguien, pero en vez de hacerlo enojar le causaba una enorme curiosidad.

—¡¿En qué estoy pensado?! Jamás me he interesado en un Alfa para que tenga que ocurrir en este momento —el blondo tomó una de sus almohadas, abrazándola con fuerza contenida, tratando de apaciguar su frustración.

—Las probabilidades de que lo vuelva a ver son prácticamente nulas, no sé su nombre y lo más lógico es que esté comprometido con un Omega. Además, entre mis ambiciones a futuro no se encuentran emparejarme con un Alfa, aunque fuese él mismo quien me lo pidiera —Naruto cerró sus azulinos ojos, intentando desviar su atención de los pensamientos ilusorios que formulaba su mente.

—En vez de perder mi valioso tiempo pensando en alguien a quien no volveré a ver, debería de idear la forma de escapar durante el convivio. La seguridad en el festejo sobrepasa los límites de lo que puedo imaginar, por lo que sería una operación suicida intentar huir con el kimono ostentoso que mis padres me obligarán a usar. Sin embargo, puedo optar por buscar un lugar seguro, mientras la celebración se encuentre en su máximo apogeo. Al no contar con presencia de estro, mi aroma pasará desapercibido para el resto de Alfas y Betas presentes, estaría a salvo de ser emparejado. Además, debo convencer a papá y a mamá de mi supuesto interés en participar en el festejo.

El rubio analizaba de forma metódica cada detalle de lo que podría hacer en eludir un compromiso que no estaba dispuesto a aceptar, y más cuando su razonamiento se centraba en un Alfa en particular...

Notas finales:

Ya pronto el par se conocerá, si esto va lento es por que me gusta detallar y explicar las cosas, no me agrada adelantar todo de golpe, solo les pido paciencia, yo sé que están ansiosas/os en que se dé ese encuentro, pero valdrá la pena ahahaha

Comentarios, peticiones, dudas las respondo gustosamente, así que siéntanse con la confianza de comentar...

Nos estamos leyendo!


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