En la sala de espera del hospital central de Tomoeda, un moreno espera por los galenos que atienden a su madre, la cual sufrió una aparatosa caída tras pisar mal un peldaño de las escaleras, la bella dama Zukuyomi se encuentra ahora debatiéndose entre la vida y la muerte.
Los médicos no le dan muchas esperanzas al moreno, quien sigue impaciente; sin saber que pasara a continuación con la vida de su amada madre, en casa de los Flourite un par de rubios cuidad de unos encantadores pequeños, una hermosa nena de ojos azules y cabellos negros y un jovencito de ojos rojos y rubios rizos, Yuui mira con detenimiento al par de niños y luego mida de reojo a Fye, quien esta angustiado por su amado Kuro-pon. No cabía dudas aquel par de pequeños se parecían mucho a Fye y Kurogane, esboza una pequeña sonrisa burlona pensando que estos dos harían una gran pareja y serian maravillosos padres de estos encantadores críos.
_Yuui_
---¡¡ Oí, Fye!! ¿¿Por qué no vas donde Kurogane?? No te preocupes por los chicos, yo les cuidare, creo que ahora te necesita más que nunca ¿¡No lo crees así!?---
_Fye_
----¿¿¡¡En verdad harías eso por mí!!??---
_Yuui_
-Pues claro baboso, para eso están los hermanos para apoyarse en todo momento-
_Fye_
--- Muchas gracias, Yuui te los encargo mucho, estaré llamando cada 30 minutos para saber cómo están ¿¿Vale?? Si sientes que no puedes o algo no dudes y avísame vendré volando hasta estar con mis Hijos----
_Yuui_
--- No te preocupes todo estará bien---
Fye sale a toda prisa de su casa y llega lo antes posible al hospital, entra a la sala de emergencias y busca con la mirada a su moreno, y si allí a lo lejos está él, con un semblante preocupado, mirando repetidamente el reloj y en momentos parece que le vence el sueño; el rubio avanzaba con rapidez hasta estar cercas del oji granada, cuando sale el médico de la sala de emergencias y se dedica directamente hablar con Kurogane, el semblante del moreno palidece cuando le dan el diagnóstico de su madre, Fye ve como Kurogane está temblando, es la primera vez que ve a ese hombre fuerte palidecer de esa manera; corre hasta llegar a Kurogane, este esta con su mirada fija a donde su madre, la cual se encuentra entre aparatos que le permiten vivir por medio de artificios simulados, dado que la dama está en un estado crítico. Fye duda en tomar de la mano a su moreno pero algo le dice que hoy más que nunca necesitara de su compañía.
_Fye_
---Kurogane… ¿estás bien?---
_Kurogane_
--- ¡¡¡Fye…!!!---
Kurogane se aferra al cuerpo del rubio como si este pudiera con ese abrazo alivianar un poco la carga que lleva en su corazón, Fye siente que el corazón se le salía por la garganta, nunca había tenido un acercamiento tan directo, ni tan intenso como este, eran pocas las veces que su Kuro-pon se mostrase así de vulnerable, como la vez que su padre falleciera, al recordar aquello el rubio siente que le estrujan el corazón y comprende el dolor de su amado, lo estrecha con fuerza, y es cuando siente su hombro humedecerse por las incontables lágrimas de su querido Kurogane, a nadie jamás le ha mostrado ese lado débil, ese lado frágil, a nadie le ha mostrado su corazón como lo hace con él, Fye y Kurogane permanecen por largo tiempo abrazados en el pasillo de urgencias mientras pasaban a la madre de Kurogane a otra habitación, Fye logra ver como la dama está completamente inconsciente y llena de tubos y mangueras, así como de extraños aparatos, ahora lo entiende todo.
Zukuyomi ha quedado en estado vegetal, es como si estuviese muerta en vida y es un duro golpe para su amado Kuro-rin, mas debe ser fuerte para él, para que su oji granada no se desvíe del buen camino y se convierta en alguien cruel y ruin, ahora solo lo tiene a él y a sus niños, es por eso que debe esforzarse y hacer que Kurogane se reponga, debe inyectarle esa esperanza de que pase lo que pase todo estará bien mientras estén juntos, mientras aún se tengan el uno al otro.
_Fye_
----Kurogane… vamos, debes de ser fuerte para Farrell y Valeria ellos te necesitaran más que nunca, no puedes quebrarte ahora-----
_Kurogane_
--- Lo sé, lo sé muy bien Fye, sol déjame estar así un poco más, necesito… yo… te necesito ahora a mi lado Fye, por favor… siento que me estoy quedando solo…. Tan salo y no sé qué hacer, no sé a dónde ir, Fye… abrázame fuerte, no me sueltes…
_Fye_
--- Kurogane… No estás solo, siempre estaré a tu lado, además están los niños, no estás solo Kuro-tontón, debes sobreponerte. La ciencia avanza a pasos agigantados y quizás podamos hacer algo por Okasan, ya lo veras, no te rindas, siempre has sido un hombre fuerte y valiente, no te puedes rendir ahora, ¿verdad que no te rendirás? Prométeme que no te dejaras vencer Kuro-sama, yo estoy aquí, siempre estaré aquí para ti… porque yo… t…¡¡¡mmmmm!!! ¡¡¡Ahhhmmm….!!!!----
Fye ya no pudo continuar por que aquellas palabras que le dedicaba a su amado le llegaron hasta lo más hondo del corazón, sus voz empezó a quebrarse y solo se apretó a él con fuerza y sin siquiera planearlo o proponérselo Fye y Kurogane una vez más unieron sus labios, Kurogane beso con gran amor y ansiedad a el rubio quien se entregaba a aquel beso, sintiendo como el moreno pareciera le robase el alma con este, sabía que no era el momento y quizás menos el lugar, pero el estar así con su amado era lo único que realmente le importaba.
6 MESES DESPUES…
_Fye_
----Yuui anda aprisa se nos hará tarde para el colegio ----
_Yuui_
----¡¡¿¿mmmhhh??!! Cinco minutos más por favor Má…-----
_Fye_
---- ¡¡¡Que mamá ni que nada!!! Anda flojo, no tarda en llegar Kuro-tan y si no estamos listos se enfadara----
_Yuui_
---- Si, si, si, Kuro-pon, Kuro-pon, ¿Qué no te sabes otra? Si tanto te gusta ¿Por qué no se casan de una vez? Si ya hasta parecen marido y mujer-----
_Fye_
---- ¡¡¡No digas tonterías!!! Eso… pues eso, n-no… no sé si un día pase---
Fye bajaba la mirada y giraba el rostro para un lado algo avergonzado, nada le encantaría más que casarse con Kurogane, pero aún era un chico y después de lo del hospital ya no ha pasado nada entre los dos, el moreno no le dirige ni una sola mirada, ni siquiera le ve de frente, siempre le habla solo por el móvil o por mensajes, cuando lo lleva o lo trae del colegio son las únicas ocasiones en las que lo ve, dado que desde que la madre de Kurogane quedo en estado vegetativo, el moreno se desvive en trabajar para pagar los caros mantenimientos de los aparatos que mantienen con vida a su madre y la renta de la hospitalización de su madre, sin contar la manutención de sus dos hermanos menores, el padre de los gemelos Flourite se ofreció a solventar los gastos de la madre del moreno, pero este se reusó, entonces le ofreció una beca universitaria, Kurogane la rechazo también, más por intercesión de Fye es que al final termino aceptando con la condición de que sería un préstamo y que él, le regresaría todo lo invertido en sus estudios al padre de Fye.
Ahora Kurogane se la pasa trabajando toda la noche en un Hosto Club, claro aún que no era uno de los chicos de compañía tenía mucha popularidad en el establecimiento él era barman y tenía mucho éxito en esto, el dueño de ese y otros tantos establecimientos como ese es un conocido Yakuza, le ha ofrecido unirse a su familia, mas Kurogane se ha reusado, no es que no le falten los billetes que pudiera ganar en un sitio así pero, él se debe a sus hijos pues al estar su madre imposibilitada para responsabilizarse de los niños Kurogane decidió adoptarles y se convirtió en su tutor legal.
Fye presionaba a Yuui para que se diera prisa y estuviera listo para cuando llegara Kurogane, mas el oji azul cielo estaba renuente a dejar la cama, por lo que decidió que ese día no iría a la primera clase del colegio, Fye no insistió más y al escuchar el claxon del auto de Kurogane el oji Zafiro bajo a toda prisa para encontrarse con su querido Kuro-sama.
Fye baja rápidamente y toma su maletín se ajustaba el corbatín y por las prisas no se ató bien las agujetas, ni se ajustó como era debido la corbatilla del uniforme, al llegar con Kurogane el rubio lucia algo agitado y muy desalineado, como si se acabase de levantar, el oji granada le mira de arriba abajo y suelta un apesadumbrado sus piro, sale del auto y antes de abrir la puerta de su querido rubio se le queda viendo fijamente.
_Fye_
--- ¿¡Q-Que… que pasa Kuro-pon!?---
_Kurogane_
---- Tu sí que nunca cambias ¿verdad?---
El rubio se sonroja cuando el moreno se inca frente suyo y le pide uno de sus pies para ajustar las agujetas de su mocasines, uno a uno le ata muy bien; luego se pone en pie y desabotona la camisa del rubio, así como le retira el corbatín, desajusta sus pantaloncillos y acomoda la camisa de Fye dentro de estos, va abotonando uno a uno los botones en los ojales y después coloca alrededor del cuello del rubio el corbatín le anuda y hace un perfecto nudo Oxford, termina por acomodar el cuello de la camisa de Fye y este todo el tiempo solo le contemplaba con adoración y un tremendo carmín en sus mejillas, Kurogane se comportaba como cuando niños, en que Fye por más que quería no podía ajustar sus prendas y siempre Kurogane terminaba acomodándole las ropas, el corazón de Fye latía fuertemente, sentía que seguramente el moreno podía escuchar sus latidos; pero la verdad era, que Kurogane estaba tanto o más nervioso al hacer todo aquello, pues a cada botón, a cada movimiento que tuviera que ver con tocar y mover a su amado no podía evitar rozar sutilmente su delgada y frágil piel, el percibir de su aliento, de esa fragancia que despedía cada poro de su piel, cada vez le costaba más trabajo el ver a Fye y no intentar devorárselo a besos, reclamar como suyo ese cuerpo delgado y grácil, era una tortura que no sabe cuánto tiempo aguante antes que olvide que son amigos y arruine su amistad y lo tome a la fuerza, eso era lo que pensaba el moreno sin saber que el rubio le pertenecía desde hacía tanto.
_Kurogane_
--- ¡¡Listo, parece que ya estas!!---
_Fye_
--- Muchas gracias Kuro-rin---
Sin siquiera proponérselo, el rubio se acercó al rostro del oji granada y le dio un tímido y casto beso en la mejilla, suficiente para hacer hervir la sangre a Kurogane que no resistía más.
Le tomaba del talle lo allega a su cuerpo y sin dudarlo le toma con una mano el mentón elevando un poco el rostro de Fye, el rubio siente que por fin sus esfuerzos y paciencia dan frutos, su Kuro-pon esta por besarle, se puede ver en su mirada la imperiosa necesidad de tomar de aquel elixir de sus labios, pero tal parece que ese no sería su día, pues justo cuando estaban a centímetros de concretar el beso el sobre protector padre de Fye aparece en el acto, cortando cualquier atmosfera romántica o pasional.
_Ashura_
---- Kurogane, que bueno que te veo hijo, ven necesito que hablemos de algo que te resultaría muy provechoso----
_Kurogane_
---- Por supuesto, en ese caso si no le importa, quisiera antes llevar a Fye al colegio---
_Ashura_
---- Nombre hijo, deja que uno de mis choferes lo lleve, ven el tiempo apremia, ¡¿no te importa verdad Fye?!----
_Fye_
---<<< ¡¡¡pues ya que!! ¬__¬ ¿¿Así o mas imprudente Papá?? ¡¡Me arruinas uno de mis mejores momentos con mi Kuro-sama!!>>> Pues si es tan importante y de beneficio para Kuro-tan, por supuesto que no, ^__^ anda Kuro-tontón ve con mi padre, yo me iré al colegio en bus o algo. No te ofendas papá pero si me ven bajar de uno de tus lujosos autos la verdad no me van a dejar tranquilo todo el día en el instituto---
_Ashura_
---¿¿Quieres decir que prefieres que te lleve Kurogane todos los días a ir en uno de mis autos??-
_Fye_
---<<<¿¿Qué no es obvio?? ¡¡¡Claro que prefiero que me Kuro-rin me lleve al cole todos los días>>> Lo que pasa es que a Kuro-pon todos le tienen miedo y no se atreven a preguntarme nada, y cuando llego en uno de tus vehículos y no ven a Kuro-sama, no dejan de acosarme---
_Kurogane_
--- ¿¿¡¡Acosarte!!?? ¿¿Qué basura mal parida se ha atrevido a propasarse contigo?? ¿¿Por qué no me lo habías dicho?? ¡¡Se morirá, esa mierda morirá sea quien sea!!---
_Fye_
----<<< n__n ¡¡¡kkkyyyaaa!!! Amo que me celes Kuro-rin >>> Hehehehe… No es para tanto Kuro-wan,wan, yo me are cargo de cualquier situación que se me pueda presentar, no es la primera ni la última vez que tenga que pasar esto, ¿verdad papá?—
_Ashura_
---- Kurogane… olvida lo que te dije, por favor lleva a mi hijo al colegio y…<<< Mátalos, mata a todos esos cerdos despreciables que intenten tocas a mi niño >>> … te encargo extermines a esa escoria por mí. ¿Lo harás hijo, defenderás el honor de mi pequeño?---
_Kurogane_
--- No quedara ni polvo de esa sabandija, se lo juro---
_Fye_
----Oí…Oí… no se aceleren no es para tanto, ya les dije que no es la gran cosa <<< Como adoro ver a Kuro-tontón celoso =^__^= >>>---
Una aura demoniaca desprendían aquel par de peli negros después de escuchar de propia boca de aquel rubio que le acosaban en el colegio, Kurogane tomo de la mano a Fye y le subió al auto, Ashura les despedía desde la entrada de su hogar, mientras les veía partir a lo lejos, el oji granada iba manejando como alma que lleva el diablo, estaba furioso y solo quería saber qué clase de basura era quien acosaba a su amado rubio.
En la mansión Flourite el otro rubio oji cielo apenas despabilaba y salía de esta aun algo adormilado, mira como su padre observaba al horizonte con una mirada perdida, como añorando algo con grandes esperanzas, en eso el padre de este le ve y lo abraza con fuerza en su regazo.
_Ashura_
--- ¡¡¡Oh!!! Hijo mío, no cabe duda que no tendrá mejor esposo mi Fye que ese Kurogane ¿no te parece?¿Y tú… cuando piensas encontrarte otro Kuro-tan o algo así?¡¡¡No me digas que te quedaras para vestir santos!!!---
_Yuui_
----¡¡¡Papá!!! ¿Pero qué cosas dices? Por supuesto que no me conseguiré a un Kuro-sama, tan horrible y con ese aspecto de diablo, si he de salir con alguien será con un Ángel, obviamente pues yo seré el Seme---
_Ashura_
--- ¿¡Tu… el seme!? ¿¿¡¡¡Enserio!!!?? Hahahahahahahahahahahahaha Hay hijito mío tu sí que sigues soñando---
_Yuui_
--- Ya lo veras papá, me conseguiré un novio tan lindo pero tan lindo que todos lo querrán Ukear---
Ashura reía a carcajadas de las palabras de su hijo, quien no dejaba el dedo del renglón y juraba y perjuraba que él se conseguiría a un Ángel como pareja, que sería tan bello y perfecto, que todos desearían poseerlo, Yuui sale molesto de casa y va al colegio, sabe que quizás hoy sea su día de suerte y encontraría a esa belleza que tanto sueña, y será el Seme, cuando por fin llega al colegio logra ver unas remarcadas marcas de llantas pintar el asfalto, también logra apreciar como la pared del jardín frontal esta medio caída, la puerta del instituto esta sostenida apenas por hilos y al ir ingresando logra apreciar a un grupo de chicos no mayores a él con varios golpes y raspones, los chicos le miran de reojo al rubio que recién ingresaba y todos se arrinconan a la pared, suelta un relajado suspiro y una risita burlona al parecer en sus labios, voltea a ver a sus compañeros y solo alcanza a decir:¿¡Kurogane verdad!?
Los chicos asintieron con la cabeza y el oji cielo caminaba con las manos en la cabeza muy relajado buscando a su querido hermano para que le contara la faena que armo su incontenible moreno, cuando estaba subiendo las escaleras que dan al segundo piso, una visión celestial lo saco de sus pensamientos dejándole inmóvil hasta verle irse, un jovencito no mayor a el de una blanca y pálida piel, de cabellera dorada con destellos platinos, de grandes ojos color plata, sus facciones celestiales, una pequeña nariz afilada y un poco respingada, de una fisionomía delgada y de altura baja, su expresión era etérea, parecía que cargaba una gran melancolía, el chiquillo pasaba por un costado y dejo a su paso una dulce fragancia que envolvió por completo Yuui, ese era, si no había ninguna duda, ese era su Ángel.
Estaba por seguir a tan angelical creatura cuando el timbre del primer receso sonaba y todos salieron de sus aulas y entre la muchedumbre aquella visión se perdió entre tantos y tantos rostros.
Después de un tiempo regreso el momento de entrar a clases, el timbre sonó y Yuui ingreso a su clase, era la tercera hora y el profesor Tashibana daba su clase, cuando un jovencito ingreso a la aula, todos los alumnos no podían creer lo que veían, era una visión angelical, pensaban si ese ser estaría allí para llevárselos al cielo o si estaban teniendo una alucinación grupal, cuando el profesor Tashibana lo ingresa para que se integre al grupo.
_Tashibana_
----Jóvenes, permítanme presentarles a un nuevo compañero que se integra a nuestra clase a partir de hoy, por favor joven presente se a sus nuevos compañeros y cuéntenos algo de usted---
_Owen_
--- Encantado en conocerles soy Owen Diam Spigtemberg, tengo 16 años, soy Tauro, me gusta las artes, en especial la pintura y la fotografía, soy de Japón, nací en Sapporo, pero a los 2 años me mude a Alemania con mi padre, después de un tiempo estuve viajando con mi madre por diversos países, he estado en Norteamérica, Inglaterra, España, Holanda y otros tantos más, mi educación ha sido en casa, por lo que es la primera vez que estoy en un instituto, por mi aleccionamiento privado me he adelantado un poco y es por eso que ahora curso con todos vosotros el décimo tercer grado y espero graduarme a la par con todos ustedes, espero me tengan paciencia y lleguemos a ser buenos compañeros de clase, Muchas gracias por cuidar de mí y aceptarme en su clase---
_Tashibana_
--- Muy interesante su trayectoria jovencito, haber déjeme ver, si , allí junto a Flourite allí podrá acomodarse bien---
_Owen_
---Sí, muchas gracias Profesor, con su permiso_
_Tashibana_
---- Quiero sean buenos con su compañero y aprendan algo de él ya que a su corta edad se ha adelantado hasta su nivel, por lo que esfuércense para salir con buenas notas ¿de acuerdo?---
Los alumnos asiente con la cabeza, mientras Diam se acomodaba en su pupitre, todos estaban fascinados, el chico de ojos platas miraba tranquilo y sereno asía el pintarron, prestando total atención al profesor, para Owen eran normal ser el centro de atención del lugar, siendo Japonés y tan alvino, nadie le podía creer, mas no conocían nadie a sus padres así que no sabían de dónde venían estos genes tan magníficos, una mirada intensa y penetrante está presente a su costado, era un bello y perfecto chico de ojos azul cielo de rizos casi tan rubios como los suyos de piel tan blanca como la suya, era un poco más alto era de esperarse después de todo, todos allí están por graduarse y el apenas tiene 16 años. aún le falta por crecer, la clase proseguía, mas de todas las miradas la que más le inquietaba era esta, que no dejaba de verle, se siente algo molesto, no es lindo que todo el mundo lo esté viendo, en eso el profesor Tashibana sale por un momento de la clase y es como si todos los chicos se abalanzaran asía el, todos menos el dueño de aquel par de ojos azul cielo, todos querían saber más del, que si hablaba inglés, alemán, holandés, polaco, etc ¿Cómo era posible que fuera Nipón, teniendo un aspecto tan extranjero? Owen estaba hartándose, realmente no le gusta estar rodeado de tanta gente y lo acosen tanto, nadie sabe pero él tiene un carácter de los mil demonios, el oji plata empieza a tamborilear sus dedos en el pupitre, recargado su rostro en una mano y mirando asía la ventana, cierra sus ojos y de repente da un fuerte golpe en el mesa banco, todos pegan un brinco algo sorprendidos, cuando Owen vuelve abrir sus ojos sonríe de una manera tan tétrica que no sabes que pensar sus compañeros, sin mencionar la mirada que les dedica a todos, es como si fuera un loco desquiciado, un acecino serial, se levanta de su asiento y va tranquilamente hasta el escritorio del sensei, allí había un bate de base ball, le toma con una mano y lo apunta a todos sus compañeros, les sonríe y gira el bate y después le toma con una sola mano y usando solo el dedo pulgar ejerciendo presión del lado más grueso rompe el bate como si este fuera un mondadientes, todos se quedaron aterrados y retrocedieron asía atrás un poco.
_Owen_
---- El primer idiota de mierda que me vuelva a preguntar otra pendejada será el siguiente en romperse, no me importa si creen que soy Nipón o no, me vale, ya déjenme en paz, ¡¡me hartan!! si yo quiero hablar hablare, si no es mejor que se aparten de mi o no responderé con palabras y su salud saldrá afectada, no me interesa una relación con nadie, chico o chica, no me molesten con sus estúpidos sentimientos falsos y bizarros, no quiero repetir las cosas otra vez, ahora que saben cómo actuar espero tengamos una buena relación, ¿me entendieron?-----
Al final de aquel sermón todos regresaron a su asiento y bajaron la cabeza, entendieron a la primera que ese lindo angelito no era más que un demonio disfrazado, un demonio que no se tentaría el corazón para arrancarles el corazón y aplastarlo a la menor provocación.
Yuui está que no sabe que pensar, es un sueño hecho realidad, sería su Uke perfecto, Tsundere, hermoso y solo para él, sonríe de lado y por un momento mira a otro lado dejando descansar de su poderosa mirada al oji plata que sintió un descanso al no ser el centro de atención del oji azul, más se sentía extraño ahora era él quien le miraba de vez en vez a aquel rubio, le mira de arriba abajo, debe admitir es un chico guapísimo, los chicos más apuestos de todo el salón al parecer se gustaban, se podía sentir esa extraña química en el aire, sus compañeros de clase lo notaron casi de inmediato, bueno no fue difícil después de que Yuui no dejo de verlo en toda la clase sin tomar ni la más minia atención a la clase, por parte de Owen el chico se sonrojaba de vez en vez cuando chocaban sus miradas, el primer día y parece se han flechado el uno al otro, ahora solo basta saber quién tomara el rol de quien.
Las semanas pasaron y Yuui decidió dar el primer paso pero las cosas no le saldrían como el esperaba, pues justo ese día, los acosadores de su hermano Fye cansados de ser aporreados por Kurogane, el cual aparecía como genio, de la nada y desaparecía al momento; es como si ese moreno apareciera solo cuando era conjurado por el oji Zafiro.
Pues en ese día los acosadores de Fye posaron sus ojos en el lindo gemelo del chico más guapo de todo el instituto, aunque ese puesto ya estaba siendo rivalizado por su gemelo y ahora por el nuevo ingresado, pues estos vivales acorralaron a Yuui en uno de los pasillos que van a los jardines traseros del instituto, el oji azul cielo realmente no le agrada la violencia aunque no quiere decir que no sepa defenderse llegado el momento, más un par de ojos platas lo vigilaban al ver que aquellos aprovechados se pensaban pasar de listos con Yuui, el pequeño Ángel entra en modo protector y va en rescate del mayor, su mejor arma, su angelical y dulce aspecto de conejillo indefenso.
_Ronald_
--- Hola lindo, que tal si tú y nosotros nos divertimos un rato, que dices, ¿te apuntas?---
_Yuui_
--- Vete al cuerno bastardo---
_Tomas_
--- ¿escuchaste eso Ron?, el nene tiene malos modales---
_Paul_
---- si habrá que aleccionarlo antes, hay que enseñarle como ser un buen cachorro----
_Yuui_
----¡¡No se atrevan a acercarse malditos cerdos!!----
Los vivales se acercaban con malicia a Yuui el cual retrocedía quedándose arrinconado en una pared y los tres tipos se acercaban con una risa burlona que ponían los pelos de punta al rubio, todo esto pasaba y aquellos tipos estaban por atacar a Yuui cuando una voz angelical los hace detenerse, se giran y allí está un angelito caído del cielo, de no más de 1: 60 de alto, 44 K, ojos grandes y plateados, de una belleza única, los tipos ríen con gran maldad en su mirada, Owen mira a aquellos sujetos con una mirada tan enternecedora, tan dulce, cualquiera quisiera comérselo, hasta el mismo Yuui siente ganas de tirárselo.
_Owen_
--- Disculpen, pero… están molestando a…. a mi… a mi N-Novio ¡¡¿P-Ppo… podrían dejarlo tranquilo por favor?!!----
Todos se quedaron de no creer lo que acababa de decir aquella creatura angelical, soltaron todos una risotada al ver a Yuui el cual les miraba con una risita nerviosa, estaba tanto o más sorprendido que los tipos estos, y aquellos sujetos sentían que se acababan de sacar la lotería, dos lindos, encantadores rubios, apetecibles y súper violables, ¿Qué más se podía pedir?
_Tomas_
--- Hahahahaa… ¿Escuchaste eso Ron? El rubiales es novio del querubín hahahaahhaa---
_Paul_
--- Huy chiquitos pero que monada, tan lindos y tan violables, yo pido al chaparrito---
_Ronald_
--- hahahahahahaha…. Estas idiota Paul, ese nene primero me lo cojo yo y Depsues sigue esta monada---
Ronald, se repagaba al cuerpo de Yuui, ha intento besarlo, pero este le da un rodillazo, Ronald evade el golpe e intenta golpear el rostro a Yuui cuando Owen hace una voz tan aguda y suplicante, que a cualquiera le rompería el kokoro, poniendo al 100 a aquellos bastardos.
_Owen_
----¡¡Por Favor, por favor no lo lastimes!! Yo haré lo que quieras pero no lo lastimes---
Todos sintieron que una flecha les traspasaba el corazón, era endemoniadamente lindo hasta Yuui estaba que le daba algo, se mordía el labio inferior aguantándose las ganas de tocar y abrazar a aquel chico pero recordó lo que paso en el salón por lo que sabe que esa carita de no rompo un plato disfrazaba a un verdadero diablo.
_Ronald_
---¡¡¿Así que harás lo que te pida?!! en ese caso ven aquí y quítate la ropa---
_Owen_
--- Esta b-bien pero… pero antes por favor, suelten a mi novio---
_Tomas_
--- Pero que ternurita, se sacrifica por su amorcito hahahaha aprende baboso, ¿ no te da vergüenza que tu Uke te quiera salvar el trasero?---
_Owen_
--- ¿¿¡¡Uke… Yo!!??---
_Paul_
--- Pues claro chiquito tu eres el lindo y chiquito, es obvio que tú eres el Uke---
_Owen_
---- Así, que es así como lo interpretan…. Hihihihihi… ¿podría, antes despedirme de mi novio?---
_Ronald_
--- Si, ¿Por qué no? Hasta espectáculo nos darán hahahahahaha---
Owen se acerca a Yuui quien está que no se acaba de creer lo que aquel chico está por hacer, el oji plata entrelaza sus manos y separa de puntillas para alcanzar la mejilla de Yuui, el Oji cielo no puede desaprovechar una ocasión como esta y abraza por el talle al Owen, este rio por lo bajo, puede sentir el temblor en las manos de Yuui y como su corazón late tan apresuradamente, Owen entiende que es lo que quiere el oji azul, el oji plata acerca sus labios, Yuui aproxima los suyos y poco a poco va cerrando los ojos; Owen le miraba fijamente con una sonrisa de medio lado, se paraba aún mas de puntillas y se abrazaba a su cuello, están a milímetros de besarse y los tres tipos estaban que se excitaban más por aquella imagen, dos chicos como caídos del cielo a punto de besarse, era tan sugestivo para ellos, en eso Owen le habla en secreto a Yuui mientras rozaba sus labios en los de Flourite, el oji cielo abre sus ojos con sorpresa después de escuchar a Owen y parpadea un par de veces, Owen le da un beso rápido en la nariz y gira soltándose del oji cielo.
_Owen_
--- Ahora bastardos, sabrán que no deben meterse con un chico lindo nunca en su miserable vida—
Owen empujo asía afuera a Yuui quien se apasto cuando este se puso en una posición de ataque, una posición que no conocían los tipos, mas estaban tan enojados que se lanzaron a atacar a el oji plata este de un par de patadas dejo fuera de combate a los tres tipos, se acercó y con una mirada endemoniada y una voz que parecía de ultratumba amenazo a aquellos tipos los cuales salieron despavoridos, Yuui se ha quedado sin palabras y no sabe que pensar-
_Owen_
--- Bueno, ahora que he salvado tu trasero, creo que me pertenece hahahaha, así que… olvídate de que seas Seme porque serás mi Uke, niño idiota---
_Yuui_
-----¡¡¡¿¿¡QUE QUEEEEEEEEE???!!! Oye pero yo no te pedí que me salvaras yo podía con… con… eh… ahmmm… mmmhhhh!!!---
Owen ignoro a Yuui por completo y aun y cuando este le reclamaba el oji plata se acercó, le jalo del corbatín acercándolo a su rostro y le beso, el oji cielo fue reclamado por el oji plata quien parecía no ser tan lindo ni tan tierno y que jamás será el Uke, así que Yuui ahora se ha conseguido un novio bellísimo como un Ángel, pero con un carácter de los mil demonios.
_Owen_
----Sera mejor que te acostumbres pronto, no me gusta repetir las cosas ojos de cielo----
_Yuui_
----¿Cómo me llamaste?--<> -----
_Owen_
---- Veo que te quedo claro mi querido ojos de cielo, a partir de hoy eres mío----
_Yuui_
--- S-Si… esta… bien---
_Owen_
--- Que lindo eres, así me gusta, no podía esperar nada menos de mi chico---
Owen lo abraza del cuello y lo vuelve a besar, Yuui está confundido mas no sabe de bien a bien que pensar, solo se deja llevar por esa sensación tan agradable y tan conocida, es tan familiar estar así con ese chico, le gusta, le gusta a rabiar aquel chico de ojos platas, se abraza al talle del más bajo y lo pega a su cuerpo, como deseando fundirse en él. El timbre de las clases daban inicio y su momento mágico termino, Yuui habría lentamente sus ojos como despertando de un especie de embrujo producido por los dulces labios de aquel oji plata que le miraba fijamente con una riza burlona, era obvio que le divertía ver las reacciones de aquel oji cielo, a Yuui le regresaron esos 5 minutos de cordura y racionalidad, regresado a una fase de negación y sorpresa, se aparta del chiquillo y se cubre la boca con sorpresa pegándose por completo a la pared, Owen reía a mas no poder, le resultaba divertida su nueva adquisición.
_Owen_
----- jajajajaja… ¡¡que divertido eres cariño!! Ajajajajajajaja estoy seguro que nos la pasaremos muy bien juntos…--
Owen se acercaba con malicia y una sensualidad que desbordaba por cada poro de su piel, Yuui suda frio, es verdad le gusta pero no tanto como para ser convertido en su Uke.
_Yuui_
---L-Las clases ya… ya comenzaron debemos irnos---
Yuui esquiva a Owen y sale como alma que lleva el diablo de aquel callejón, dejando a un oji plata muy divertido e ideando de qué manera será que pasaran su primera vez juntos, a decir verdad el oji plata solo estaba jugando con el rubio, pero al estar besándole se sintió tan bien que quería saber que otras y nuevas sensaciones despertaría en él, además era divertido poner nervioso a ese chico de ojos azul cielo, en eso una maravillosa idea se le vino a la mente una sonrisa burlona se pintó en su boca y camino con tranquilidad hasta el aula donde ya la clase había dado inicio, el profesor Tashibana estaba por llamarle la atención cuando Owen nuevamente uso su súper arma secreta, “Ojitos de cachorrito” el profesor no pudo resistir aquella mirada de “Lo siento no volverá a pasar” una hemorragia nasal se le vino al profesor como a mucho de los chicos y chicas que se encontraban atentos al oji plata, este jovencito de 16 años sabía muy bien cómo usar su belleza y sacar provecho a cualquier situación con esa carita tierna y dulce, librándose de muchas cosas aunque también se ganaba el acoso de muchos pervertidos, más él era muy fuerte y con el carácter que se cargaba era imposible que le tomaran por la fuerza.
Owen toma asiento a un lado de Yuui quien se ocultaba tras su libro, cuando el oji plata une su pupitre al suyo toma el libro de manos de Yuui y le dice con una voz tan dulce y tierna.
_Owen_
---- ¿Puedes compartir tu texto conmigo? No sé en qué parte sea quedado el mío, ¿No te molesta verdad? ¡¡Cielo!!----
Después de eso el corazón de Yuui recibió un disparo directo, dejando le herido hasta el alma, además de que Owen le dedico la más encantadora de las sonrisas, el oji celeste no sabía ni que responder, solo atino a asentir la cabeza, Owen se sentó pegadito, pegadito a Yuui y este sentía sudar frio por su espalda, casi se podía escuchar el latir de su corazón mientras el rubio oji plata leía atento aquel texto, los demás compañeros de aquel par de bellezas andantes no podían dar crédito a lo que veían, los dos chicos más atractivos del cole, juntos, si ya era difícil acceder a Fye D`Flourite y ahora su hermano estaba con el otro chico más encantador del instituto, las chicas del salón maldecían su suerte, ¿Cómo era posible que ambos chicos estuvieran saliendo? Aunque también por otro lado su alma Fujoshi ardió y emergió como el ave Fénix poniéndoles en modo perver.
La clase terminaba y todos se alistaban para ir a sus distintos clubes o trabajos sea cual sea la situación, Yuui tomo sus cosas y aduras penas sentía que se libraría de aquel encantador demonio de ojos plata, cuando estaba a punto de salir Owen le toma de la mano y con esos ojos tan lindos le miro casi como en una súplica. Yuui trago en seco y espero a ver qué era lo que ese lobo disfrazado de oveja quería del.
_Yuui_
---- ¿¡¡Q-Que quieres!!?---
_Owen_
---- ¿¿Podrías…. podrías ayudarme??---
_Yuui_
--- ¿Ayudarte yo? ¡¿De qué se trata?!---
_Owen_
---- Tengo… tengo clase de arte y quisiera saber si… si quisieras ser mi modelo y… y posar para mi… ¿me podrías ayudar?----
_Yuui_
--- ¿Exactamente cómo es eso?---
_Owen_
--- Si, ósea… tengo que pintar un Ángel y en toda la escuela tu eres el único que encaja con esa descripción, ¿podrías por favor ser mi Ángel?----
_Yuui_
---U///U ¿Crees que parezco un Ángel?<<< ¡¡¡No puedo creerlo me ha dicho que parezco un Ángel! ¿Cómo podría decirle que no? ¡¡¡Nnnyyyaaaaa es tan lindo, tan lindo me encanta!!!!---
_Owen_
--- Pues… si n__n---
_Yuui_
--- Es… está bien, ¿Cuándo y dónde?----
_Owen_
---Si no te importa, podría ser hoy, te prometo que no tardare, el salón de artes está cerca y el vicepresidente del grupo estudiantil me prestara las instalaciones para poder pintar sin interrupciones, ¿entonces me ayudas, serás mi modelo?---
_Yuui_
--- Si está bien, te ayudare<<< De hoy no pasas mocoso, serás mi Uke, hehehehehe>>>---
_Owen_
--- Muchas gracias, vamos entonces =^_^= <<<< Así o más tonto hihihih has caído muy fácil, esto será divertido hahaha>>>----
Owen así como Yuui tienen un plan muy similar para llevar a sus brazos a su rival se podría así decir, Yuui toda su vida a soñado con un chico tan perfecto y hermoso como un Ángel, sería su Uke y lo amaría y defendería toda la vida, Owen simplemente no ha estado con nadie desde el incidente con Kenichiro, el chico se aisló de las personas; pero algo en ese oji azul le atrae y después de ese beso siente una imperiosa necesidad de poseer cada parte de su ser, ser el dueño absoluto de aquel rubio ojos de cielo, ha ideado un plan llevarlo al salón de arte y por medio de su astucia y algo de su encanto seducir al oji cielo y poseerlo allí mismo de ser posible, por parte de Yuui, después de conocerlo noche a noche a soñado con tener entre sus sabanas a ese rubiecito oji plata, la oportunidad de estar ellos dos a solas en el salón de arte es de gran ventaja dado a que la mayoría de los clubs son al aire libre o fura del plantel por lo que prácticamente están solos en la institución.
Llegan al salón de arte, Owen como todo un profesional empieza a preparar sus pinceles brochas y demás aditamentos, selecciona el mejor ángulo en donde desea plasmar a su bello ángel, de entre los cachivaches que allí se encontraban esta un diván, lo mueve a un lugar en especial mientras Yuui mira todo el sitio, había bastantes cuadros y unos porta papeles con cientos de dibujos y bocetos Yuui queda fascinado con un cuaderno de trabajo donde están solo plasmados manos y ojos, son hermosa en la manera en que están plasmadas en el papel.
_Owen_
--- Ven por favor, ¡¡¿podrías colocarte aquí?!!---
_Yuui_
---- ¿Cómo dices, así?----
_Owen_
--- Si, así está bien, permíteme, creo que si te quitas esto y… tal vez esto también---
_Yuui_
---- ¿Solo la camisa verdad?----
_Owen_
--- Si… solo eso, a menos que quieras quitarte ¿algo más?---
Owen se inclinaba asía delante dejando caer un poco su cuerpo en el del oji celeste quien se recorría un poquito asía atrás, el oji plata ríe con un poco de malicia y sube más al cuerpo de Yuui, siente como le late el corazón tan aprisa que en cualquier momento podría salirse del pecho.
_Owen_
--- No estés nervioso, que no te voy hacer nada << todavía hahahaha>>---
_Yuui_
--- N-No estoy n-nervioso, ¡¡es solo que estas demasiado cercas!!<< Maldita sea porque me he puesto tan nervioso siento que Owen fuese alguien mayor, como si yo fuera una presa, oh vamos se supone que vine aquí para seducir a este mocoso y hacerlo mi Uke, debo de aprovechar todo a mi favor>>--
_Owen_
--- Que bueno me alegra que estés relajado, por favor toma la posición que más te plazca, comenzaremos de una vez ---
Después de aquel momento incomodo Owen bajo del cuerpo de Yuui y tomo su lugar detrás de un gran caballete que de vez en vez asomaba la mitad de su rostro para mirar a Yuui quien estaba semi recostado con la camisa desabotonada hasta el ombligo, descalzo y con el cabello algo alborotado, el oji cielo era toda una visión, realmente la posición en la que eligió posar era muy sugerente el tiempo corría y Owen hacia bastante había terminado de hacer su cuadro, tenía facilidad para la pintura y como le gustaba tanto Yuui no le resulto para nada difícil el pintarlo una y otra y otra vez, llevaba alrededor de 5 cuadros y cerca de 12 bocetos claro Yuui ni cuenta se había dado ya que en un momento se empezó a quedar dormido, para cuando empezó a despertar ya era de noche, Owen se quedó dormido sentado a un lado suyo y en sus manos un cuaderno de dibujo y un pincel, Yuui empezó a reincorporarse y contemplaba a aquel chiquillo dormir plácidamente, era toda una visión para él, se acerca tanto casi a punto de tocar sus labios con los suyos siente la respiración de oji plata en su rostro, se siente bien estando cercas del, toma con cuidado aquel cuadernillo y le da un par de hojeadas, a cada página solo eran imágenes del, de diferentes forma y en diferentes estilos, estaban empleadas varias técnicas, en realidad Owen era bastante bueno para las artes plásticas, tenía curiosidad por ver el cuadro que pinto del y se movió con sigilo esperando no despertar a este artista, Yuui se quedó sin palabras no solo encontró uno si no varios cuadros de su persona uno más maravilloso que el otro, estaba realmente impresionado sin querer tropezó con una lata de pintura que lo hizo caer, el estruendo producido consiguió despertar a Owen quien se paró de golpe al ver la hora que era, mas estallo en enojo cuando se percató que Yuui accidentalmente cayó encima de uno de sus cuadros haciéndolo pedazos, se acerca y de un fuerte tirón jala a Yuui quitándolo de su cuadro y lanzándolo al diván con gran fuerza, el oji celeste se ha quedado sorprendido de la fuerza de aquel jovencito si no fuera porque lo ha sentido al ser arrojado tan bruscamente no lo creer, Owen tomaba el cuadro donde estaba un joven de cabellos rubios y orbes esmeraldas, si no fuera porque este tenía los ojos verdes cualquiera pensaría que era un auto retrato, Owen regresa la mirada con enojo y desmonta el lienzo del bastidor con mucho cuidado toma una paño limpio y empieza a limpiar con mucho cuidado aquel cuadro.
_Yuui_
---- Lo siento mucho Owen, yo… no sé qué hacer para resarcir el daño---
_Owen_
--- Ya hiciste demasiado la sesión termino, muchas gracias, puedes irte---
_Yuui_
--- Pero ya es muy tarde, y no es bueno que un chico de tu edad ande solo por la noche yo te llevare a casa---
_Owen_
--- No lo necesito, mi hermano vendrá por mi así que… hazme el favor y déjame solo---
_Yuui_
--- De verdad lo siento mucho, por favor permíteme ayudar en algo---
_Owen_
---- ¡¡NO QUIERO YA LARGATE DE UNA PUTA VEZ!!----
Owen estaba realmente furioso pues Yuui accidentalmente destruyo uno de sus cuadros predilectos, y el que más quería aquel donde había pintado por primera vez a su Oniichan, su muy amado Oniichan aquel que se dedica al mundo de la farándula y el medio del espectáculo ese que casi nunca puede ver, da un pesado suspiro al ver que la pintura por más que la limpie no será recuperada, Owen empuña sus manos y da un pesado suspiro empieza a recoger sus pinceles sin prestar atención a Yuui quien se siente mal, nunca quiso dar la pintura y tampoco sabe por qué le destroza el kokoro que aquel chico este tan serio y molesto con él.
Owen sale y tira a la basura el cuadro de su hermano, todo está hecho guiñapos, sin dar vuelta a ver a Yuui el oji plata se aleja y llama por el móvil a su hermano mayor, quien en 15 minutos llega por el al instituto, Yuui estaba siendo esperado por Kurogane que al parecer estuvo al pendiente del hermano de su amado Fye y en un momento de descanso fue por Yuui para llevarle a casa.
Los días pasaron y Owen estaba tan enojado que ignoraba a todos y a todo, en especial a Yuui, esa situación ya no la podía soportar más el oji cielo, pues se sentía culpable esa cara insensible que le mostraba el oji plata lo devastaba, aunque apenas tenían poco de conocerse para Yuui ese chiquillo atrevido y de carácter de los mil demonios se había convertido en una persona importante en su kokoro.
Además de ser el chico más lindo de todo el instituto y ya se había puesto la meta de hacerlo su Uke, en uno de esos días Yuui llega al instituto con una bolsita de roja con un moño amarillo, busca con la mirada a donde pueda estar Owen y lo ve allá recargado en la reja del colegio, seguía teniendo esa mirada seria e inexpresiva, Yuui se dirige al jovencito y se planta frente a él, Yuui no sabe qué hacer o como empezar a disculparse esta que se lo comen los nervios, por primera vez comprende lo nerviosas que se ponen la chicas cuando quieren regalar algo al chico que les gusta y no tener la certeza que lo reciban o si les gustara, pensando en eso da un pesado suspiro llamando así la completa atención de su Ángel de ojos platas.
_Owen_
----- ¿Qué pasa, que quieres?----
_Yuui_
--- Esto… bueno… pues veras, bueno yo… hehehhe bueno yo… yo…----
_Owen_
--- ¿Tu qué? No recuerdo tengamos algo que hablar, se me hace tarde esta por dar inicio las clases compromiso---
Owen se disponía a ingresar al instituto, realmente no tenía intenciones de escuchar a Yuui y aun se sentía de mal humor, Yuui siente que el kokoro se le sale por la garganta, nunca le había pasado algo así, en cualquier otro momento este hubiera botado a cualquier pretendiente que tuviese, mucho más si está enojado lo dejaría hasta un favor le haría, pero ese oji plata era diferente, de verdad quería verle sonreír y que le dedicara esas miradas atrevidas y esa cercanía que aun y se sintiera nervioso por su proximidad, le gustaba esa sensación, quería que le viera así otra vez, realmente quería que ese chiquillo lo viera como en un principio, al sentir Yuui que Owen estar por retirarse le toma de la mano impidiendo su andar regresándolo al enrejado del colegio, Owen le mira molesto con aquel par de lunas platas tan grandes y resplandecientes, una mueca de reproche se presentaba en su rostro; Yuui esta con un condenado sonrojo tatuado en sus mejillas, aprieta con fuerza los labios no sabe cómo empezar aquello que quiere decirle.
_Yuui_
--- ¡¡Espera por favor!! Yo… yo solo quiero… yo quiero que….----
_Owen_
---- Si no me dices que diantres te traes me largare, así que suéltalo con un demonio---
_Yuui_
---- Esto…. Esto es para ti…. Yo lamento mucho lo del otro día, por favor ya no sigas molesto conmigo, por favor, por favor perdóname….
_Owen_
---- ¡¡¡¿¿Q-Que…??!!!----
Yuui le entregaba la bolsita roja en sus manos al oji plata y este se sorprende al recibir aquel presente, a Yuui le temblaban las manos al entregar aquel presente, el oji plata les mira con algo de sorpresa y una gran sonrisa se iba dibujando en su rostro, con timidez Owen tomaba el presente de Yuui, tomando entre sus manos aquella bolsa, y también tomaba junto con la bolsa las manos del oji cielo, aquel contacto tan sencillo parece haber sido muy importante para Flourite, quien tenía sus ojitos cerrados pues sentía tanta vergüenza que no quería ver cómo era que le observaba el oji plata.
_Owen_
---- Tú… ¿¿¡¡Tú los hiciste para mí!!??----
_Yuui_
--- Yo… yo no soy muy bueno en artes, por eso… bueno, por eso no pude por más que me esforcé volver a recrear tu cuadro pero… soy muy bueno preparando postres así que… te hice estos chocolates, por favor ya no estés enojado conmigo, de verdad lo lamento mucho, yo… yo no… ahhhmmmmm!!!! Mmmmhhhhmmmm!!!!!... es… espe…ahhhmmm… espera q-que… ¿¿¡¡qué haces!!?? Ahhhmmm…----
Owen se sintió tan contento por recibir aquel regalo y más porque era de parte de su ojos de cielo, no pudo más con la alegría y al ver lo apenado que estaba y ese carmín en sus mejillas no aguanto y le jalo con fuerza, acercando su rostro al suyo y le beso repetidamente, Yuui no sabe en qué momento aquel chico le tomo en brazos, y por más que tratara de zafarse de sus manos resultaba imposible, Owen estaba de puntillas colgado del cuello de Yuui con una mano y con la otra lo tenía jalándole el corbatín del uniforme, el oji cielo por fin y después de un par de besos forzados cedió, dejándose llevar por aquel pequeño impetuoso que le venía valiendo un cuerno que estuvieran dando comienzo las clases; ahora mismo tenía algo más importante por hacer, Yuui a cada beso se iba acercando más al cuerpo del Owen, estrechándolo entre sus brazos encorvando su espalda un poco para poder besarle mejor, desde el aula de cinésicas un oji zafiro miro de reojo a un par de chicos que se fundían en un largo beso, al principio no presto mucho interés pero al fijarse bien de quien se trataba por la sorpresa y novedad equivoca el químico y lo mescla con otro, provocando así una explosión dejando una estela color verde, todos en el salón quedaron impactados ¿Fye D’Flourite equivocándose en las formulas?, ¡¡eso era inaudito!!
Regresando con aquel par de rubiecillos, su beso por fin termino a falta de aire, la respiración de ambos era agitada, su pecho subía y bajaba, sus miradas estaban fijas, clavadas una en la otra ese par de ojos azules presentando ese color tan adorado por el oji plata, pareciese un par de cielos infinitos, cristalinos y puros, para Yuui el contemplar ese par de Lunas Platas, tan grandes, tan deslumbrantes y con ese brillo único, un par de albercas platas donde se sumergía en el brujo de su mirada, solo podía ver el reflejo de su ser en aquella plateada mirada, sin pensarlo o decir nada nuevamente y poco a poco fueron uniendo sus labios, Yuui intentaba marcar el ritmo de aquel beso esta vez, mas Owen era quien llevaba la batuta de ese apasionado beso, remarcando el paso acelerado y asfixiante, robándole el aliento a aquel oji azul, quien no podía romper con su intensa entrega, dejándose arrastrar por aquella marea pasional que desencadenaba el oji plata.
_Owen_
--- Entonces… somos novios ¿verdad?----
_Yuui_
---¡¡¡¡¿¿N-No…No…Novios??!!! Esto, bueno… yo… es… pues, creo que si---
_Owen_
--- Esta bien Ojos de cielo, te perdono, a partir de hoy eres mi chico, así que no quiero que coquetees por allí con nadie ¿entendido?---
_Yuui_
----¡¡¡¿¿¿Qué, que???!!! ¡¡Oye, no!! ¿Quién cuernos crees que soy para andar coqueteando con medio mundo?---
_Owen_
--- Eres muy lindo, y hay mucha gente perversa que te desea, no quiero tener que partirle la cara cada 5 minutos a cada estúpido que este viendo a mi chico---
_Yuui_
----- ¿¡¡No crees que estas exagerando!!?----
_Owen_
----¡¡Nop!! Mi chico es muy hermoso y debo cuidar de ti para que nadie intente robarte, eres solo para mí, ¿Verdad que si?----
_Yuui_
¡¡¡¿¿Gente perversa, que quieren robarme??!!! <> Oye pero se supone que yo soy quien debe cuidarte, así que eres tú el que no debe… ¡!!!!! ¿Qué crees que haces?---
_Owen_
--- ¿No es Obvio?----
Owen nuevamente besaba con demandante pasión al oji azul claro, quien por más que intento poner protesta a sus acciones termino cediendo una vez más, dejándose envolver en la imperiosa necesidad del oji plata de devorarle a besos, era así que Yuui y Owen se reencontraban después de una vida pasada cargada de tristes y dolorosos sucesos, ahora y tras haber pedido y pagado aquel deseo, es que cuentan con otra vida y una nueva oportunidad para poder vivir su amor, esta vez sin impedimentos.