Mi corazón latía rápido aun no puedo creer que me comporte de ese modo frente a él, se daría cuenta de que tuve celos, no eran celos solo estaba asegurándome que Yami no este cerca de Tea. Diablos esos eran celos y no fui muy sutil con mis acciones por poco y empujaba a Tea y le decía: esto es mío.
Me sonrojé bastante cuando sentí que Yami me tomaba de la mano y me llevaba a una zona menos visible para nuestros amigos. Desde que salimos de casa estuve mirando a Yami, su forma de vestir ahora era aún más sexy, claro si aquello fuera posible, él siempre tuvo ese don de verse increíble con cualquier ropa que usase.
-Por lo de antes yo…lo..la..men – trate de terminar mi frase, pero unos dedos en mis labios me lo impidieron, me sonroje aún más por aquella acción.
-No necesitamos palabras para lo que haremos, relájate y sigue el ritmo- lo dijo tan cerca de mi oído que provoco que mi cuerpo se estremeciera.
Rogaba a todos los dioses que no la canción que estuviese por sonar no fuese tan sugerente para no tener malentendidos con mi oscuridad, pero mi mala suerte o buena suerte, la verdad estaba siendo muy tímido al respecto y con la canción que empezó a resonar por todo el lugar no haría que de esta experiencia salga intacto.
(N/A: La canción que estaba escuchando mientras escribía esta parte era: https://www.youtube.com/watch?v=CL9S6W65UTE )
Acaso aquello que sonaba eran gemidos, traté de reír para quitarle importancia, pero lo que vi a continuación me dejo mudo, Yami tenía su mirada clavada en mi además de que el contacto visual que realizo me dejo desconectado y todo fue demasiado rápido empecé a sentir sus manos en mi y su forma de moverme y moverse me pedía reaccionar y hacerlo también.
La música nos sumergía a los dos y por Ra que Yami se movía tan sensualmente, sus caderas, sus brazos, todo su cuerpo, era tan sincronizados y me obligaba a mi a moverme a su ritmo. Mi espalda estaba contra su pecho y sentía sus manos en mis muslos, y yo no deje de moverme, pegue mi cuerpo aun mas al suyo. La canción estaba llegando al final y más sonidos de gemidos resonaron en mis oídos y con mi cerebro desconectado a mis acciones hice algo que dejo a Yami algo desconcertado, frote mi trasero contra su miembro y eso fue el límite para mí.
Sali del trance y de inmediato trate de correr, ese fue mi primer instinto, huir de Yami. La vergüenza que sentía, solo me decía corre.
-Tranquilo no pasa nada- sus brazos me mantenían cautivo en un abrazo reconfortante. -No me esperaba ese movimiento, pero déjame decirte que muy heterosexual no era-
Me deje llevar por Yami porque el parecía no querer soltarme, estaba tan tenso y el lo notaba por eso no me soltaba.
-Lo que paso ahí yo…no quise era la canción- las excusas salían de mi boca sin parar, pero Yami no me escuchaba, solo me llevaba de vuelta con nuestros amigos, pero ellos no estaban en la mesa.
-Vaya creo que nos dejamos llevar, ¿tan tarde es? – su voz tenia cargado tanto sarcasmo en ese momento, parecía recriminarme o eso sentía en ese momento.
-Quiero regresar a casa- dije un tanto molesto, estaba enojado y mucho, mi comportamiento fue desagradable mientras Yami se lo tomaba con humor yo me sentía lo peor.
De camino a casa Yami dejo de bromear sobre el asunto y yo no dejaba de recriminarme por lo sucedido prácticamente estaba diciéndole a Yami con mi comportamiento que era una perra necesitada o eso creía.
No quería hablar o pensar mas en lo que había hecho, apenas llegamos fui directo a mi habitación sin decir una palabra, di un portazo, espero que esto le deje claro a Yami que no lo quiero cerca por lo que quedaba de la noche o de mi dignidad.
Fin Pov Yugi.
Para Yami la situación le parecía bastante graciosa a la vez que reveladora, se acomodo en el sofá debido a que no tenia sueño, tenia mucho en que pensar, después de todo para el lo que acaba de ocurrir no era mas que una revelación. Si antes especulaba con el rol que cumpliría Yugi en una relación homosexual, ahora lo había marcado, de ahora en adelante para el, su hikari tendría un enorme letrero que dirá: SOY UKE.
Con aquel baile lo estaba probando y analizando para ver sus reacciones, como él se desenvolvía ante una presencia mas dominante, por eso el no cedió y guio los movimientos de su pareja. Sus resultados eran claros, pero ahora Yugi se sentía avergonzado, él lo sintió desde que realizo aquel atrevido movimiento si no hubiese sido por la reacción asustada de su aibou, Yami lo acorralaba contra cualquiera de esas paredes y terminarían así con aquel juego.
Suspiro de forma profunda, para el seria un gran reto, ahora Yugi debía estar debatiéndose entre sus preferencias sexuales, después de todo él había declarado querer gustarle a una chica mientras esa noche estaba frotándose contra un chico. Una pequeña sonrisa apareció en el rostro de Yami al recordarlo, todo sucedió tan rápido que apenas pudo procesarlo, quizás de haber durado en aquella posición hubiera terminado con una erección y eso pondría las cosas aún más incomodas.
-Mi dulce hikari quiero explorar ese lado tuyo que no conocía- es lo último que dijo por aquella noche.
Mañana será otro día, buscaría la manera de demostrarle a Yugi que aquello no era nada de qué avergonzarse y quizás llegarían a un avance en esa relación de solo amigos y llevarlo a otro nivel.
Continuara…..