Había despertado con un estremecimiento y notando las condiciones en las que se encontraba... Atado, amordazado y con un gran consolador metido en el culo, el cual lo había hecho despertar cuando comenzó a vibrar...
"¿cómo llegué aquí?"...
Fue lo primero que se preguntó... Pero, realmente solo recordaba haberse dirigido a la escuela y de ahí... Todo era obscuridad.
Más tarde los pezones le comenzaron a vibrar también, mientras el batallaba con los amarres en sus muñecas y tobillos que eran aprisionados por correajes de cuero rojos unidos por una corta cadena detrás de su espalda en el caso de las muñequeras mientras que las tobilleras le obligaban a mantener las piernas abiertas al estar enganchadas a unas argollas sobre salientes de los lados del colchón.
La habitación estaba a oscuras con algunas velas que iluminaban dejándolo ver un lugar muy lujoso, la cama con suaves y finas sabanas negras y sus rubios cabellos desparramados en los cojines negros...
Se removió desesperado soltando un sollozo, tenía miedo no podía negarlo y eso lo hacía sentir más frustrado.
Escucho un tintineo notando el collar de cuero rojo que rodeaba su cuello con una cadena atada a la cabecera de la cama... Esto lo enfureció.
¡¡¡Él no era ningún animal!!! ¡¡¡Era un ser humano, no podían tratarle como a un perro!!!
Un movimiento hizo que el vibrador entrara más al fondo de su ano, las lágrimas descendían por sus bellos orbes azules, respiró con dificultad al estar su boca ocupada con una mordaza en forma de bola que mordió con desespero.
En la base del pene sintió un nuevo vibrador causándole más desesperación removiéndose y soltando jadeos y sollozos pero para su sorpresa este aumento la velocidad.
-¡¡¡MMMGH!!!-nuevamente sus gemidos fueron amortiguados por la bola de goma en su boca.
Su cuerpo se estremeció de nuevo al sentir como la vibración aumentaba de nivel...
Los vibradores que torturaban sus pezones y su entrada parecían aumentar el nivel de las sacudidas también, pero no podía correrse, en el pene un listón que terminaba en un lindo moño se lo impedía...
-Mmgh...-otra nueva oleada de placer lo hizo retorcerse y su saliva comenzó a escurrirse por la comisura de sus labios mojando aún más su cuerpo que era decorado con un sexy camisón transparente en tonos obscuros como esos que usaban las mujeres recién casadas para seducir a sus esposos además de la fina lencería con encaje, unas medias negras decoraban sus piernas acaneladas...
Luego de varios minutos de constante tortura comenzaba a enloquecer por el dolor en su miembro al mismo tiempo que el placer que le recorría entero, una ligera capa de sudor perlaba su cuerpo haciendo que algunos mechones de cabello se pegaran a su frente, de su boca no paraban de salir jadeos y gemidos acallados por la mordaza ahora mojada con su saliva, había dejado de luchar contra los amarres, su cuerpo parecía estar débil y no respondía más que a los estímulos que ocasionaban las vibraciones...
Sus ojos empañados por las lágrimas y oscurecidos por el placer miraron como la puerta se abría la luz del exterior lo cegó pero aun así pudo ver la silueta de un hombre alto, delgado pero con un cuerpo atlético.
Cuando este se acercó un poco más pudo ver mejor a su secuestrador, era un hombre muy apuesto con cabellos azabaches hacia contraste con esos pozos negros que tenía como ojos y brillaban en la obscuridad con deseo y lujuria.
Aquella mirada hizo que se sintiera pequeño, vulnerable y completamente expuesto ante esa penetrante mirada que era acompañada por una sádica y lasciva sonrisa.
"no me mires, ¡No mires!"
Por reflejo intento cerrar las piernas resultando imposible hacerlo, y aun peor al retorcerse el consolador se resbalaba más al fondo de su recto
-NNNGH... -
-Naruto... Vaya que eres toda una putita... Mírate, estas todo mojado y duro...-le dice al oído y le acomoda un mechón de cabello mirando divertido los ojos azules que le miraban incrédulos, sin poder resistir suelta una risita burlona y le da un pequeño beso en la pelota que obstruía su boca.
Aquello le hizo comprenderlo todo y más al observar al hombre frente a él con el torso desnudo dejando ver su bien formado pecho y abdomen y esa piel de porcelana que poseía...
"Sasuke"
"¡¡¡maldito bastardo, suéltame!!!"
Se removía mirando al mayor y gritándole palabras que terminaban convertidos en jadeos y pujidos extraños que hicieron soltar al azabache una carcajada burlándose del rubio que dejaba salir lágrimas de rabia...-
-Te dije, Naruto… que yo siempre consigo lo que quiero...-observa el cuerpo del rubio acariciándole las piernas y los muslos hasta llegar a el miembro erecto el cual acaricia con movimientos suaves... Suelta una risita maliciosa al observar los gestos del rubio...- ¿te gusta lo que sientes?...-dice burlón lamiendo la saliva del rubio mientras este solo gemía al sentir las caricias del azabache en su cuerpo...
-Mmgh!...-suelta un grito ahogado y arquea la espalda al sentir como aquel demonio empuja el consolador más a fondo con una mano y con la otra aumenta el ritmo con el que masturbaba al chico que solo lloraba desesperado pidiendo se detuviera y negaba frenético.
-kukuku... ¿Qué, quieres sentir más placer? Eres una pequeña zorra pervertida...-saca de su bolcillo un control y se lo muestra al rubio...- aquí tienes...- dice moviendo el botón de "medio" a "extremo"...
-MMMMMGH!!!! NNGGHT!!!...-Se retuerce violentamente gritando y chillando por la intensidad de las sacudidas en sus pezones miembro y sobre todo en su ano, mientras el oji noche reía observando al chico, se acerca y le quita la mordaza para después tomarlo de las mejillas besándolo apasionadamente ahogando los gritos del menor en su boca y finalmente apaga las vibraciones dejando libre al rubio mientras él se desnuda...
-p-por, favor d-déjame ir, basta... -llora con desesperación mirando como el pelinegro se posiciona sobre el desatándole los tobillos y luego le apoya las piernas sobre sus níveos hombros...- no, Sasuke, por, por favor...-se retuerce intentando alejarse del mayor...
-tú te lo buscaste Naruto...-dice fríamente mientras sacaba el consolador de las entrañas del rubio cubierto de un líquido espeso y rojo. Miro en los ojos azules un miedo indescriptible y sonrió satisfecho…-jujuju así aprenderás… quien es tu dueño.-le dice al tomarlo de ambas mejillas lamiéndole las lágrimas mientras acerca su pene a la entrada dilatada del menor penetrándolo de una sola estocada.
-¡¡¡AAAAH!!!- su espalda se arqueo y no pudo evitar gritar desgarradamente aunque su entrada estaba dilatada por el vibrador que el azabache había metido anteriormente nada se comparaba con el pene de Sasuke, sus ojos dejaron escapar lagrimas por el dolor...- s-sácalo… ¡¡Sácalo!! Nngh… d-duele, m-.mucho!!… ¡¡sácalo!!-el Uchiha le mira indiferente mientras activa de nuevo en su máximo potencial los vibradores en sus pezones y el pene..- ¡¡AAAHMM, B-BASTA, NNGH S-A... SASU GAAH!!- se retuerce ante el placer y dolor que sentía gimiendo y jadeando con desespero sentía que sus pulmones ardían por esa sensación asfixiante, como si todo el oxígeno no fuera suficiente, el dolor y placer eran tan intensos..- ¡¡JAAH, s-sa.. Saca, MAAH!! ¡¡P-por JAAVOOOH!!- su respiración agitada dejaba escurrir saliva por la comisura de sus labios.
-qué cara tan lujuriosa… sabes... se siente delicioso dentro de ti...-le susurra en la oreja mientras el rubio sentía su cuerpo estremecerse intensamente perdido entre el placer, dolor y además la frustración de no poder controlar su cuerpo.
-M-maldito, Bastardo...-le susurro mirándolo con desprecio cuando el azabache bajo la velocidad de las vibraciones y comenzó a mover las caderas entrando y saliendo del interior del ojiazul que solo apretaba la mandíbula al sentir las embestidas y la mano del Uchiha masturbándolo al mismo ritmo.
-Hmph... Me alagas Naruto...-expresa sínicamente con una sonrisa de medio lado mientras miraba los labios entre abiertos del rubio, se acercó lamiendo la saliva que escurría por las comisuras y después intento besar los carnosos labios pero el menor no se lo permitió al voltear el rostro.
-¡Púdrete maldito hijo de puta!...-aquello hizo enfurecer al mayor que acelero el ritmo de la arremetidas y lo tomó de la quijada con fuerza haciendo que lo mirara a los ojos..
-¡¡Pronto aprenderás a respetarme pequeña putita!!-dice para después besarlo apasionadamente metiendo su lengua dentro de la boca del rubio mientras este se resistía intentando alejarlo de su cuerpo con ayuda de su torso removiéndose y mordiéndole el labio inferior consiguió que se alejara.
-¡¡JAMAS RESPETARÉ A UN MALDITO VIOLADOR ASQUEROSO COMO TU!!...-grita y le escupe en la cara antes de que una bofetada le cruzara el rostro y mirara asustado la expresión siniestra del ojinoche...
-Te arrepentirás de esto Naruto. Desde ahora aprenderás a respetarme… Te arrepentirás de haberme rechazado y jugado con mis sentimientos.- La expresión del mayor estaba llena de ira, locura y el Uzumaki miraba aterrado esa expresión…
-Por favor detente… ¡¡Detente!! Ahh…- El Uchiha coloco su dedo índice sobre sus labios acallándolo. - ¡¡¡AHHH!!!...-arqueo su espalda sintiendo el miembro de Sasuke llegar más lejos dentro de él tocando un punto llenándolo de placer con el que no pudo acallar sus chillidos.
-Sé que esto te va a gustar Naruto...-Le susurró al oído con voz dulce. Tan solo cerro sus ojos mientras de estos no dejaban de salir lágrimas, quería llevar su mente lejos de esa tortura, alejarse de ese intenso dolor. De esa humillación que sufría.
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Jamás hubiera imaginado... Que el conocer a ese hombre de tan buen ver fuera a cambiar completamente mi vida. Aquella vez en la fiesta de mi mejor amiga Hinata Hyuuga, lo conocí, era un joven empresario muy poderoso y muy apuesto también. Yo al igual que muchos en la el lugar centramos nuestra vista en él. No era extraño verle ahí puesto que las familias Hyuuga y Uchiha tenían lazos de sangre... Me pareció, simplemente irresistible y cuando Hinata nos presentó no pude quitar mis ojos de él, me sentía tan atraído por su elegante, misteriosa y arrogante figura y al parecer él pensaba lo mismo puesto que sentía sus abisales pozos negros sobre mi como si quisiera desnudarme.
Nos quedados solos luego que Hinata fuera a atender a los invitados. Sabía que ella quería dejarme a solas con el enigmático hombre que no dejaba de observarme y se lo hice saber.
"-Uchiha-san si continua viéndome así me voy a avergonzar.”
Recuerdo muy bien su sonrisa, aquella que me enloquecía al solo verla. Engreído, Orgulloso, Descarado y tan sensual.
“-Lo siento, No quise incomodarle… pero, no lo pude evitar... Es usted tan hermoso que mis ojos se han revelado en contra mía y no quieren dejar de mirarle. Me alegraría más si me llamaras por mi nombre.”
Y las cosas comenzaron a ser más directas, había confianza entre nosotros. Quizá las cosas nunca debieron pasar más allá de una simple charla, jamás pensé que me encontraría en manos de un psicópata, pero ya es tarde para pensar en eso.
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Todo su cuerpo estaba adolorido, tenía su ano lleno de él semen del mayor y sentía tanto asco de sí mismo.
Hace algunas horas que Sasuke había dejado la habitación tan solo había terminado corriéndose en su interior, le había desatado y finalmente había tenido ese forzado y asqueroso orgasmo, se había quitado todo eso que le había puesto el pelinegro exceptuando el collar eso no había podido quitárselo. Abrió todas las puertas que le fue posible todas cedieron menos por la que había salido el azabache. Su desesperación fue grande había sido secuestrado, no sabía dónde estaba, no tenía idea que pretendía hacerle el azabache, fuera de violarlo y nadie en esa ciudad lo conocía, nadie se preocuparía por él. Tomo la sabana de la cama y se envolvió en ella acurrucándose en una de las esquinas de esa habitación. De nuevo dio rienda suelta a su llanto.
¿Qué le esperaría de ahora en adelante?
No lo sabía. Y eso aumentaba aún más su desesperación.