Capítulo 4
Mi hermano trataba de calmarme, pero es que… es qué, no odio a Gakuko, no ella es muy buena persona y todo. Pero odio a su cretino hermano menor. Lo odio lo desprecio y lo quiero muerto, y el solo pensar que de alguna forma estoy emparentado con él me asquea asqueadamente, no sé si la palabra exista. Pero así me asquea.
-Así que mi hermana y tu hermano –Dijo él para comenzar a reírse –
-Cierra tu maldita boca –Dije molesto pero él no dejaba de reírse de mi desgracia –
-Es que de alguna forma es divertido –Dijo él solo le di un fuerte golpe en la cabeza y me salí de aquel lugar hecho una furia para salir a cualquier lugar menos donde estaba él no quería ver nuevamente su estúpida cara, me molestaba de sobremanera verlo –Vamos azulino, si te sigues enojando de esa manera te saldrán arrugas antes de tiempo.
-¿Entonces por qué me hacer ver tu estúpida cara si sabes que me enfurece verla? –Dije arqueando una ceja para que él suspirara –
-Realmente no sé por qué me odias tanto –Dijo rascándose la cabeza – ¿Realmente por qué lo haces?
-Por qué si –Dije ya sin más –
-¿Por qué sí y ya? –Me dijo arqueando una ceja a lo que yo asentí –No tienes razones ni para odiarme
-Si tengo una razón –Dije cruzándome de brazos –
-¿Cuál? –Me dijo –
-¿Acaso ya se te olvido? –Dije molesto –Espera te refrescare la memoria –Dije para sacar unos lentes de mis bolsillos –
-¿t….tú eres?
-Si soy yo –Dije muy serio –
-Has cambiado, mucho –Me dijo –
-Lo sé, por tú maldita culpa cambie –Dije para querer seguir mi camino –
-Oye yo… lo siento si…no sabía que eso te iba a afectar tanto –Me dijo tomando mi brazo –
-¿No creíste que me afectaría? ¡No creíste que me afectaría humillarme delante de toda la escuela diciendo que no debía sentir mariconadas como esa, un sentimiento estúpido, ilusorio e irracional y además para terminar con broche de oro me humillaste durante todo los días junto con Miku y Luka! ¡No creíste que no me dolería! ¡Me tuve que cambiar de escuela! ¡Solo por sentir lo que sentía! ¡Solo por ti, solo por tu maldita culpa! –Dije molesto con él, tenía ganas de llorar más que nada… sentía un fuerte dolor en el pecho –
-Kaito…yo
-Ni se te ocurra decir que lo sientes…. No lo hagas, el simple hecho de que quieras decirlo me asquea, aléjate de mí ¡Déjame en paz! ¡No te quiero ver jamás! ¡Jamás entiendes! ¡Te odio te desprecio no te quiero ver jamás en mi vida! ¡Eres un desgraciado que solo sabe arruinarla! –Le grite, estaba a punto de quebrarme jamás le había contado esto a nadie ni a mis padres, pero ¿por qué debería? Lo único que ellos sabían era que me maltrataban en la escuela y ya –Solo déjame en paz…
Con eso me fui de aquel lugar, me eche a correr sin dirección aparente solo quería sacar todo lo que sentía en este momento todo lo que me dolía. Lo odio, lo odio…. Lo odio.
Continuara…