Capitulo 9
Después de la calentura
Luffy había despertado con la garganta seca, el vaso de agua que normalmente estaba junto a su cómoda se hallaba vacio y a regañadientes había tenido que deshacerse del agradable abrazo en el que le mantenía su hermano para ir por algo de beber, bajando de la cama con cuidado había podido sentir el fresco de la noche haciéndole temblar ligeramente, con sus sandalias puestas había buscado la camisa del pijama y colocándose aquella sin abrochar antes de bajar a la cocina, el ver la luz de esta encendida le había parecido bastante curioso.- ¡Croco-chan! ¿A qué hora llegaste? - había preguntado amistoso al ver al mayor sentado a la mesa del desayunador con una taza de café y un plato de comida vacio al lado, casi nunca encontraba a el mayor en casa y realmente no sabía a qué hora llegaba normalmente.
- A la hora que ya dormías.- murmuro el aludido sacándose el puro de la boca y tirando la ceniza de este en cenicero de cristal que se hallaba justo frente a él, el olor de aquel tabaco al principio no le había agradado mucho a Luffy pero poco a poco se había ido acostumbrando a el al punto que ya no arrugaba la nariz al estar cerca de su tío, era parte de su olor personal al igual que la colonia un poco fuerte y almizclada que usaba en el cabello.- ¿Y el resto de tu ropa mocoso?- Habiéndose servido su vaso de agua el menor había volteado a ver sus piernas desnudas, no recordaba bien lo que había pasado después de que se metiera a la cama de Ace en busca del calor de su hermano así que simplemente se había encogido de hombros para darle a entender al mayor que no tenía idea donde había quedado.
Ignorando la mirada levemente reprobatoria que el más alto le daba Luffy había bebido su agua terminando aquella por completo antes de hacer una exagerada expresión de saciedad al acabarse el contenido del vaso.- Bueno, buenas noches tío Croco.- había dicho tras dejar el vaso en el fregadero antes de sentir el gancho de la mano ajena en el cuello de su pijama hacerle detenerse. Que el mayor usara un garfio en lugar de una mano falsa o aluna otra cosa en aquella extremidad que le faltaba a el menor siempre le había parecido bastante genial, le hacía parecer una especie de pirata de los que salen en las películas- ¿sucede algo?- pregunto echando la cabeza para atrás para ver al más alto que se había puesto tras del, el gesto de duda del mayor solo le había hecho ladear un poco el rostro en esa misma curiosa posición donde por la pijama abierta daba un agradable espectáculo de su pecho desnudo hasta la ropa interior.
-No, nada, regresa a la cama mocoso, después hablaremos.- volviendo a sentarse tomo el puro que había dejado en el cenicero de nuevo para darle una calada a aquel, mirando como el chiquillo lo veía con los ojos llenos de curiosidad por un instante antes de regresar por donde había venido, exhalando el humo del cigarro Crocodile había estado pensando en preguntarle al menor si sabía lo que era la provocación, probablemente no, había decidido arbitrariamente y le había observado subir hasta la segunda planta mientras descartaba la idea, no pasaba suficiente tiempo con sus sobrinos como para darse cuenta de muchas cosas pero el mocoso de las pecas nunca se había comportado de la manera como lo había visto aquel día y dudaba que mucho tuviera que ver con que quisiera ser un hermano ejemplar, pero aquel probablemente no era el momento adecuado para hablar con el más joven de los D, la 1:30am en un día de escuela no era precisamente el mejor momento, quizá otro día.
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Cuando regreso a la habitación de su hermano aquel aun dormía, acostado boca arriba y solo con la mitad de una pierna bajo las cobijas lucia realmente gracioso, Luffy había pensado ir a por la cámara que le habían obsequiado hacia unos meses en su cumpleaños para sacarle una foto y molestarlo después pero otra cosa había llamado su atención, en aquella posición y con únicamente los pantalones de pijama puestos su hermano lucia.... bueno... no sabía exactamente como describirlo pero acercándose lentamente y sin hacer ruido hasta el lado del pecoso se había deleitado por unos instantes en contemplar a Ace de aquella forma tan relajada y apacible, incluso el leve ronquido que emitía le parecía bastante agradable, con una de sus manos el pequeño se había atrevido a pasar la llena de sus dedos por el hombro hasta uno de los brazos ajenos, lanzando una furtiva mirada nerviosa al pecoso y después a la puerta antes de continuar, por algún motivo sentía que estaba haciendo algo que no debía, quizá el hecho de que lo que más le llamaba la atención de aquel cuerpo al que a veces espiaba mientras Ace no le veía era justo aquello que el pecoso le había prohibido tocar el otro día.
Mordiendo su labio inferior el más joven había deslizado su mano por la curva del pecho ajeno que comenzaba a notarse más ancho y marcado y el vientre ya plano, sin ningún vestigio de la redondez infantil que compartiera con Luffy apenas unos años antes, el cuerpo de su hermano era tan diferente al propio que no podía evitar sentir aquella curiosidad incluso por otras cosas, el suave montículo un poco despierto entre las prendas inferiores del pecoso por ejemplo...- Ace... yo...- su joven manita se había detenido al borde de los pantalones ajenos, quería adentrar esta mas allá de esa zona pero no quería desobedecer lo que su hermano le había dicho apenas unas noches antes, el suave suspiro que abandonara los labios del pecoso mientras le acariciaba de aquella forma sin embargo había sido demasiado, un feliz calor que le recordaba al generado por los besos de su hermano le había surgido ante aquella deliciosa reacción de su hermano y como la primera vez con los besos quería mas de aquello.
Sus deditos acariciaron suavemente por encima de la tela, probando, preguntándose lo que le gustaría al más alto, lo que le haría sentir bien, sintiendo más que viendo como aquella hombría bajo la tela iba tomando forma y tamaño muy diferentes a los que normalmente veía cuando se bañaban, desde que el otro le impidiera tocarlo la primera ocasión había estado muriéndose de la curiosidad por ver aquello pues nunca le había sido posible descubrir a su hermano tocándose a sí mismo, y ver que había tratado varias veces, pero Ace decía que tocase su puerta antes de entrar y Luffy no solía desobedecer a su hermano, no por lo regular…
Quería verlo, quería ver y conocer todo de Ace.
Los suspiros y gemidillos que en alguna ocasión anterior había confundido con dolores ahora le habían hecho sonreír.- Luffy...- el aludido se detuvo un poco asustado al escuchar su nombre en esa ronca voz, creyendo que el mayor había despertado retiro su mano al instante, viendo como el más alto se removía y quejaba antes de volver a quedar quieto en la cama.
El corazón le latía en los oídos al menor, la manera como su hermano había llamado su nombre en sueños mientras le tocaba había hecho que todo el calor de su cuerpo se concentrase en sus mejillas y después más abajo, cerca de la boca del estomago, subiéndose de nuevo a la cama había comenzado a llenar el rostro del pecoso con breves besos, haciendo que aquel se removiera un poco mas.- Ace... - con su rodilla apoyada entre las piernas de su hermano podía sentir perfectamente como el miembro de aquel iba tomando mas rigidez conforme le frotaba en contra de su muslo, escuchando el leve quejido de la boca ajena había detenido sus movimientos de nuevo, sabía lo que estaba haciendo y no veía nada malo en ello, no entendía realmente por que su hermano insistía en que estaba mal algo que se sentía bien.- Ace lo siento... ¿Duele?- pregunto a el que aun dormía, bajándose de su cuerpo un poco confundido al no estar muy seguro de estar haciendo aquello bien, después de preguntar a su hermano había decidido investigar un poco por su cuenta esas cosas, quería tocar a su hermano de aquella manera pero el mayor le había dicho que no podía hacerlo... también le había dicho que no lo hiciera con nadie mas así que quizá pudiera... o debiera... no sabía ni que pensar...
Volteando su mirada hacia abajo de nuevo había sido presa de la curiosidad, el bulto entre los pantalones del mayor ahora era tan notorio que si pasaba su manita por aquel podía sentir solamente la gruesa e hinchada punta del fallo ajeno y los suaves quejidos de su hermano continuaban ahora aunque no le tocase...
-Ace...- intentando despertar al mayor había comenzado a colar su manita debajo de la ropa del otro moreno, sintiendo a aquel removerse cuando su tímida mano acariciara bajo la tela de los bóxers la hombría de su hermano con la puntita de los dedos.- Ace despiertas... ¿Pu... puedo?- el mayor había abierto los ojos un poco, cristalizados aun por el sueño y esas sensaciones que el pequeño le había estado provocando mientras dormía.
-Luffy...- entre suspiros y jadeos había ido recuperando poco a poco la conciencia solo para caer en cuenta de que no estaba imaginando las torpes y suaves caricias del más pequeño.- Lu... ¿Que... que haces?-
-Ace... déjame ayudarte ¿Si?- el apenado y suplicante tono en el que el menor había pedido aquello lo había vuelto loco, si en sus cinco sentidos ya era presa fácil a cualquier cosa que dictara el menor ahí en ese instante solo había asentido como estúpido sin darse cuenta realmente de lo que había aceptado hasta que sintiera aquella infantil manita tratando de abarcar el ancho de su miembro y apretándole ligeramente, haciendo que experimentara tal oleada de placer que había acabado arqueándose involuntariamente.
-nhhh... Lu...- la forma lenta y delicada como el menor subía y bajaba por toda su extensión en un cadencioso ritmo tenia al más alto al borde de la suplica, la amplia sonrisa que pudiera ver en el joven rostro no sabía si era angelical o demoniaca, el menor parecía verdaderamente complacido por las reacciones que le estaba provocando y en verdad era así.
Para Luffy no había nada mejor que hacer sentir bien a su querido hermano y ver como aquel disfrutaba con las caricias que le brindaba le hacía sentir feliz a el también, de a poco comenzó a acercar el rostro de nuevo al de su hermano para comenzar a besarle suavemente, el sabor de la boca del chico de las pecas era tan delicioso que a Luffy siempre le parecía estar disfrutando de un delicioso postre y como tal intentaba hacer que durara lo más posible a pesar de su instinto de querer devorarle de una sola mordida, en esta ocasión sin embargo apenas sellar los labios del mayor se había arrepentido ligeramente pues de aquella forma no podía escuchar los agradables sonidos que Ace soltaba mientras le atendía, la forma como llamaba su nombre una y otra vez entre suaves suspiros también le gustaba demasiado.
-Luffy.... nhh... por favor...- creyendo que el mayor le pedía por mas caricias el monito había aumentado el ritmo de aquellas, masturbando a su hermano con algo más de fuerza y causando que a aquel le fuera aun mas difícil articular y mantener su voz baja al mismo tiempo, no quería ser escuchado después de todo pero en aquel momento en poco podía pensar que no fueran más de esas atenciones.- Tu... tu boca Lu... por favor... -
El desconcierto se apodero del monito por un instante ¿Su boca? Aquella idea jamás se le habría ocurrido por sí sola, probablemente porque era físicamente imposible realizar aquello (que el supiera) y como tal lo había descartado.- mhh... por favor Lu... hazlo con tu boca...- el suplicante susurro de su hermano le había sacado de sus cavilaciones de inmediato, aceptando aquella idea sin dudarlo más.
-Yosh... ya voy Ace...- murmuro bajando a la altura del miembro del mayor, sacando aquel de entre la pijama y la ropa interior para contemplarle embelesado por un momento antes de comenzar a llenarlo de suaves besos y lamiditas, chupando un poco la punta mientras seguía recorriéndole con las manos, la petición que al principio le había parecido un poco extraña ahora se le asemejaba la mejor idea del mundo, el sabor de su hermano era mucho más penetrante en aquella zona y aquel liquido que emanaba en pequeñas gotitas de la puntita del miembro del mayor aunque extraño en sabor no le desagradaba del todo, además de que podía oír libremente los gemiditos de aquel otro muchacho que llamaba por su hermano de manera tan amorosa y necesitada, Luffy no sabía muy bien porque pero parecía que aquel calor que antes solo estuviera en sus mejillas y su estomago comenzaba a bajar también a su vientre, haciendo a su cuerpo ponerse "feliz" con las reacciones de su hermano.
Aquello había sido una clara emboscada, los jugueteos que su pequeño hermanito tenia con el ya le volvían loco y ahora que le había sorprendido medio dormido y demasiado necesitado su mente le había gritado una alerta que su cuerpo no había alcanzado a comprender, antes de saberlo ya se hallaba pidiendo por aquello tan sucio y horrible que el menor parecía más que encantado de hacer, su mismo corazón latía tan fuerte que Ace temía fuera a salirse de su pecho y además de los incontrolables gemidos que más o menos ahogaba mordiendo sus labios y el nombre de su hermano su cerebro parecía haber perdido la batalla ante el libido y casi daba gracias que aquello no le permitiera pronunciar la sarta de sandeces que quería soltar en ese momento, cada rose del menor con su lengua y sus manos quemaba y mandaba una oleada de placer por su cuerpo, cuando había sentido aquellos besos en la endurecida y torturada erección que el más joven le había causado casi había temido que aquello nunca fuera a terminar, el pequeño era tan inocente que no había forma de que supiera el dolor que le estaba causando aguantar esa placentera agonía.
Las suaves caricias y besos lejos estaban de calmar la excitación que sentía y mas que remediar el calor de su cuerpo solo parecían avivarlo, al momento de sentir la boca ajena engullir por fin la punta de su miembro instintivamente había llevado una de sus manos a la cabeza del menor, tomando sus cabellos y haciéndole tragar su falo casi por completo, el chiquillo apenas y se había quejado, Ace le había visto meter en su boca pedazos de carne más grandes que su propia hombría así que poco le sorprendía que fuera capaz de acomodarle casi sin esfuerzo, estaba seguro que había sido mas la sorpresa ante los bruscos movimientos la causa de esos quejidos que escuchase del menor que cualquier otra cosa, o al menos eso trataba de pensar para poder entregarse por completo a la placentera sensación que esa húmeda cavidad envolviéndole por completo le causaba, marcándole un ritmo un poco más acelerado al tiempo que le envestía ligeramente la boca con el movimientos de sus propias caderas.- Lu... joder...- susurro fuera de sí, soltando el cabello del menor para poder incorporarse un poco, quería, necesitaba observar aquella deliciosa forma como el otro le estaba atendiendo, dejando que el menor tomase su propio ritmo.
-No aguantare mucho...- susurro el más alto mientras su hermanito continuaba atendiéndole con un ritmo más o menos similar al que le había marcado, usando su lengua para saborearle por completo y haciendo que el mayor gimiera un poco más alto.- Lu... basta...- susurro halando de nuevo el cabello del más joven para intentar separarlo, sentía que estaba a punto de estallar.
De mala gana el pequeño se había sacado de la boca el miembro de su hermano solo para sentirle correrse en su cara con un sonoro gruñido, aferrando sus manos a su cabello de manera levemente dolorosa, la escena había sido tan terriblemente erótica que Ace había temido volver a empalmarse, el rostro de su hermanito manchado con su propio semen lucia tan delicioso que había tenido que inclinarse a lamer su semilla de las mejillas del menor, encontrándose con una mirada de reproche por parte del pequeño cuando se separase de su rostro.-¡Ace! ¡No es justo!.- le escucho decir antes de sentirle enzima suyo, besándole de manera efusiva eh intrúyente, lamiéndole los labios con hambruna y dándole suaves mordiditas en la lengua y el resto de la boca.- Era mío Ace... no lo comas...- el tono de berrinche de aquellas palabras a pesar de sus acciones había sido tan terriblemente adorable que el mayor no había podido evitar reírse.
-¡No te rías!- Se había quejado el mas joven jalando levemente del cabello del otro para que dejase de hacer aquello que le estaba haciendo enrojecer más que todo lo que habían hecho anteriormente, no le gustaba sentir que su hermano se burlase de él.
-¡Hey! ¡Hey! ¡Ya! ¡Está bien!- exclamo el pecoso al tiempo que se afianzaba a las manos del otro para que dejase de jalarle el cabello.- está bien, ya no me reiré.- la sonrisa en su rostro sin embargo no le había abandonado aun, a pesar de que algo dentro de él le estaba carcomiendo poco a poco y de que lo que acababan de hacer estaba sumamente mal la mirada de desconfianza del pequeño no dejaba de parecerle graciosa.
Luffy no había tardado mucho en soltarle, abrazándose a su cuello en lugar de eso.- Realmente te amo Ace.- articulo el más joven seguido de una enorme sonrisa que mostraba todos sus dientes, aquel gesto había hecho al mayor acelerar el pulso en demasía, la manera tan sincera como el chiquillo siempre le decía aquello era casi demasiado para él pero le gustaba, le gustaba en verdad y quizá aquello no fuera tan malo, quizá y solo quizá, en una pequeña y recóndita parte del planeta donde no habitaban personas cerradas de mente aquello no estaba mal... era casi una lástima que ellos no habitasen uno de esos lugares.
-Y yo a ti Luffy...- se atrevió a susurrar con la pesadez de saber que aun si sus sentimientos eran correspondidos estos no podían ser descubiertos, todo el nerviosismo de lo que acababa de acontecer con su hermano le había ido llegando de a poco hasta hacerle hormiguear las manos ¿Que era lo que acababa de hacer? volteando a ver la alarma junto a su cama los números que brillaban en rojo marcaban las 2:00am, Joder, esperaba que Crocodile no estuviera en casa aun o, que al menos, no les hubiera escuchado.
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Continuara