Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Las vueltas del amor por kaira chan

[Reviews - 37]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

We... vi que en algunos reviews pedían otro capi =P

Qdo medio inconcluso pero ahorita queda mas aclarado... Espero que les guste... y volveré con otro Fic... pero de Sev&Harry....

Besos!!! dejen reviwes!

Bye

o.O Epílogo O.o
 
A la mañana siguiente, se despertó temprano. Su alegría era exorbitante, jamás olvidaría su gran noche de amor con Draco.
Bajo a su sala común para poder disfrutar del dulce fin de semana, tal vez le haría una visita por la tarde.
Se acomodó en uno de los sillones y cerró los ojos. Sintió como una mano se apoyaba en su hombro y lo zarandeaba de tal modo que lo sacó de sus pensamientos.
 
-¡¡Her-Hermione!!... pero... ¿qué te a pasado?. –la muchacha vestía el uniforme, su cara era de extremo cansancio y su aura era de terror.-
 
-¡Mataré a Malfoy!, ¡juro que lo mataré!.
 
-¿De qué hablas?. –ya comenzaba a preocuparse por lo que la tomó del brazo y preguntó.- ¿Qué te sucedió?.
 
-Ese... –de otra forma no podía llamarlo.- me encerró en uno de los galpones que se encuentran cerca del bosque prohibido, mira si me encontraba con algo peligroso.
 
-Ya déjalo, hagas lo que hagas no hará ninguna diferencia, por que aunque odiemos admitirlo es un Malfoy– un tercero se añadió a la charla.-
 
-Ron.
 
-¿Vamos a desayunar?.
 
-De acuerdo, pero iré a cambiarme, con estas pintas no puedo caminar por ahí.
 
*-*-*-*-*-*-*-*-*
 
 
MUCHO TIEMPO DESPUÉS.....
 
-¡Wau!, ¿quién lo diría, no Harry?. Fin de año. ¡Por fin!, basta de exámenes, de adivinación, de retos. Ahora viene el descanso, y ambos, dignos de tal.
 
-Jaja, Ron, hablas como un Dios.
 
-Lo soy. Jaja.
Bien... tenemos que reunirnos en el comedor para el último encuentro con Dumbledor.
 
-Se nota las ganas que tienes de escucharlo.
 
-A mi solo me gusta su comida, jaja.
 
-Sos tremendo, Ron.
 
-Vamos Harry. Tenemos que llegar para comer...
 
Al llegar al comedor, se sentaron donde lo hacían habitualmente. Todo era “normal” a simple vista, pero Harry por dentro sabía que no era así.
 
Después de su primera noche de pasión con Draco, nada volvió a ser igual. Sus encuentros nocturnos eran mas seguidos, los trabajos los habían terminado juntos; y aun algo mas importante, tras luchar contra Voldemort, estuvo incapacitado durante 3 semanas, por lo tanto, sus tareas y trabajos eran en la enfermería. Pudo conocer la habitación del rubio, la cual se encontraba decorada por muebles de alta categoría que le daban un toque muy “Slytherin”. Lo había obligado a darle su contraseña, ya que él sabía la de su casa, y así casi todas las noches con su capa se infiltraba en territorio de serpientes para besarlo y compartir placenteros momentos de arrumacos que algunas veces terminaban en algo más.
 
Los problemas con Pansy se habían terminado, un gran peso que pudo desmontar de su espalda, ese tema lo tenía pasado de rosca; por suerte ahora andaba con otro.
Hermione y Ron, por fin habían declarado su amor, y estaban saliendo hacia ya 3 meses.
Y como llegaban las vacaciones, ¿con quién pasarlas?, obviamente que con la persona a la que amas. Draco, quien lo había invitado a pasar unas extensas vacaciones aislados del mundo, para poder disfrutar al cien por cien sus locuras; sin duda aceptó, era su sueño hecho realidad; tan solo pensar en pasar 3 meses con sus tíos lo disgustaba.
 
Mientras comían, dos miradas se cruzaban íntimamente. Ambos, desde lejos parecían entenderse.
 
-Harry, estas bastante ido. ¿Te sucede algo?.
 
-Nada Ron, simplemente pensaba en las vacaciones.
¿Tienen ya listas sus maletas?.
 
-Si, mañana a primera hora sale el tren. No veo la hora de ver a mis padres.
 
-¿Irás con tus tíos, Harry?. –dijo el pelirrojo mientras degustaba una rica pata de pavo.-
 
-No exactamente. Tengo otros planes. –dijo mientras observada nuevamente a su amante.-
 
-¿Qué es lo que miras?. –preguntó mientras se daba vuelta.-
 
-He, he... ¡Nada!.
 
-Vamos, Ron. Se ve que esta vez tendrá una aventura.
 
-¡Ho!, ¿enserio?. ¿Dónde irás?. –era bastante lento para entender algunas cosas.-
 
-Emmm... todavía no lo sé. –menos mal que estaba su amiga para salvarlo del abismo.-
 
*-*-*-*-*-*-*-*
 
Ya era de mañana, la noche anterior había sido fatal. Habrían tomado mucho, y su cabeza daba vueltas.
Tomó su equipaje y bajó a la sala común para juntarse con sus amigos.
 
-Hora de irnos.
 
-Yo me voy ahora. Iré a ver a Dumbledor y después tomaré el tren.
 
-Ok, Adiós.
 
Mientras caminaba por los pasillos arrastrando su enorme maleta, notaba que su corazón latía a mil por hora.
Salió entonces por una de las ventanas mas bajas del castillo, no podía ser visto, sino lo descubrirían.
Por fin llegó, pero se dio cuenta de que no había llegado.
Soltó ese pesado bulto y comenzó a contemplar el dulce paisaje.
De pronto, todo oscureció. Dos manos habían tapado sus ojos.
 
-Jaja, no juegues. Vamos suéltame.
 
De pronto, notó que las manos se movieron de lugar pero sin abandonar su antigua acción. Sentía su respiración, sabía que estaba lo suficientemente cerca como para poder saltarle y apretujarlo todo, pero dejó que continuara con su jueguito.
Sintió el rozamiento de sus labios sobre los suyos, a veces podía llegar a hacer cosas bastante excitantes.
No aguantó mas, y convirtió ese rozamiento en un profundo beso, el cual duró añares para él. Cada vez que recibía uno, sentía escalofríos. 
Luego sacó sus manos dejándolo apto para ver y lo tomó por la cintura acercándolo mas a el.
Al rato se separaron para poder iniciar su nueva aventura.
 
-Esto no lo olvidarás jamás.
 
-Dalo por hecho.
 
 
Caminaron unos metros hasta por fin encontrarse con un lujoso auto. Allí estaba, parado frente a este observando cada detalle.
Bajó entonces un hombre bastante delgado vestido de etiqueta y se acercó a ambos para tomar su equipaje y así emprender el viaje.
 
-Señor Malfoy, avíseme cuando podamos partir. –dijo antes de volver a su antiguo puesto.-
 
-Unos minutos.
¿Vamos?. –dijo mirando esos hermosos ojos esmeralda.-
 
-Sí.
 
Ambos subieron. Era bastante amplio, entrarían mas de 7 personas, pero allí solo estaban ellos dos.
 
-Tardaremos un poco en llegar.
 
-¿Dónde iremos?.
 
-Una casa lejos de todo. Tendremos comida para todos los meses, alguien se encargará de eso como también de cocinar, de limpiar, etc.
 
-Dijiste que íbamos a estar solos.
 
-El personal de mantenimiento y el chef están, a ellos no se los cuenta como “alguien”. –notó la cara de enojo del moreno, por lo que agregó.-. Estaremos solos si se los ordeno, no te preocupes.
 
Allí se calmó un poco. ¿Cómo podían ser vacaciones si no podías tener intimidad con tu pareja?, pero cuando escuchó la otra parte, quedó conforme. El simple hecho de estar junto a él tanto tiempo le encantaba, era tan gratificante tenerlo para el solo.
Echó un vistazo por la ventanilla, el auto volaba bastante alto por encima del mundo muggle. Al volver su mirada, descubrió que ya no se encontraba frente a el, sino a su lado.
El rubio lo miraba fijamente, aquellos ojos grises demostraban a simple vista el amplio deseo de poseerlo, pero no era ni el lugar ni el momento.
Se acercó y lo besó. Sus manos lo sujetaron por la cintura y de a poco fueron recostándose sobre el amplio asiento.
De pronto, el contacto se cortó.
 
-Espera Draco, aquí con... ya sabes, no.
 
-El no molestara. Pero por las dudas. –se levantó y presionó uno de los botones que se encontraban junto a la división del auto. Una ventanilla se bajó dando acceso al gabinete donde estaba el conductor.-. Buffiel, no quiero interrupciones.
 
-Entendido mi señor. –subió entonces la ventanilla.-
 
Volvió entonces la mirada a Harry, el cual se encontraba sonrosado.
Se acercó nuevamente a él, y lo besó.
 
-Espera Draco, no, aquí no, no me siento cómodo. –no sabía dónde mirar, odiaba rechazarlo.-
 
-De acuerdo. –se había dado cuenta de que le incomodaba la situación, por lo que decidió esperar. No se expondría a perderlo.-
 
El viaje continuo sin mas preocupaciones. Ambos charlaban, entre tanto se besaban o jugueteaban con sus cabellos, se podía llegar a decir que parecían una pareja de recién casados.
 
Pasada ya la hora, el auto descendió.
Al bajar divisó un enorme jardín rodeado por extensos parques, una enorme pileta, y otros artefactos muggles.
 
-Bienvenido a tus vacaciones.
 

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).