Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Fuera de las líneas【HunHan】 por gummyguleum

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Esta idea comenzó desde el año pasado, pero yo por ser tan testaruda, me había lanzado(?) a comenzar a escribir fanfics que eran demasiado complicados. Por ende, este año, he decidido comenzar por esas escrituras que me encantan y que sé que podré acabar.

Espero les guste<3

Tenía un concepto sobre aquél chico y este mismo me causaba distintas emociones casi todos los días. A veces me fastidiaba, otra veces me entristecía y había momentos hasta en los que me alegraba. Sí, estas veces me parecían agradables, a pesar de lo incómodo que se me hacía pensar en algo de ese modo. Pero no dejaba de tener el concepto de que era simple y lindo; aunque fuera ese tipo de persona que no había conocido en mi vida y no deseaba conocer, la cual lograba controlar mis emociones con el solo verle.

Lo suponía un concepto interesante en un monótono día.

A veces fantaseaba mientras tomaba el tren, pensando en que él -quien tomaba el tren contrario- iría tal vez a llegar a su hogar, dejar sus cosas para luego concentrarse en hacer sus deberes o, otras veces lo imaginaba tomando un café y jugando con su posible gato, sí, un pequeñito gatito rubio, como él. Pues sí, si era así de lindo con ese color de cabello, tenía que tener un gato que quedara con el estilo de su amo. Ah, tonterías. También le imaginaba alegre y estas veces eran las que me terminaban por alegrar, porque verle sonreír mientras atendía a su teléfono me hacía imaginar que su familia, amigos o pareja le tenían una sorpresa, le habían hecho una propuesta o simplemente una visita. Como había veces que le veía cansado, angustiado o distante, que me hacían imaginar que le había tocado un mal día; de esos en los que su jefe conspiró contra su libertad, en los que olvidó las llaves en casa, en los que falló en su examen, en los que deseaba poder llegar a casa para olvidar que estaba mal. Quien sabe, habían muchas cosas de su vida que yo imaginaba con ver su expresión.

Quizás exageraba, pero no me quedaba otra cosa. Solo era un espectador de algo que realmente podía ser real, cómo no serlo. Aunque prefería no pensar en mi vida e imaginar la de él, porque la mía no era relevante o al menos a mi parecer. Estaba sumido en una monotonía que no dejaba de desagrarme y molestarme. Trabajo, soportar gente y dormir. Eso es lo de menos, lo importante era que él no sabía que yo existía o eso suponía, porque parecía no verme cuando nos topábamos en esa estación y solo le veía desde el otro lado de la línea. Pero me alegraba de que fuese así, prefería que ninguno de los dos se conociese, no quería decepcionarle ni decepcionarme, prefería fingir conocerlo todos los días.

Las calles eran bastante transitadas a esas horas del día, casi cuando la luz de este estaba por desaparecer y el frío de invierno no parecía ser impedimento para que la ciudad reviviera. Yo estaba apoyado en uno de los murales de la calle principal, cerca de ciertos restaurantes que emanaban un exquisito olor a comida -ya que en uno de ellos era en el que yo trabajaba-. Cosa que resultaba graciosa sabiendo que aquello me causaría más hambre y ansiedad al no poder comprarla. En mi cartera había dinero, pero no quería usar ese lujo que no me lo había ganado yo -para variar, aún no me pagaban-. Pero creía estar bien así.

«5 llamada(s) perdida(s) de Kai.
1 mensaje(s)»

Al ver mi celular, para asegurar qué hora era, este rezaba aquello en su pantalla. Había estado llamando varias veces, pero no deseaba responderle porque sabía qué clase de cosas diría "Hunnie, compra algo rico para comer, de preferencia pollo de la señora Hwang que está a unas cuatro cuadras de nuestro apartamento". No tenía ánimos de hacer algo al respecto, era predecible, por lo que solo me esforcé por leer el mensaje que decía algo muy parecido a lo que tenía pensado. Y la razón por la cual me encontraba sin ganas de nada era porque aquél chico del otro lado de la línea no había aparecido en días.

Me sentía un tanto estúpido de estar preocupado por alguien a quien no conocía, alguien con quien no había cruzado ni una mísera palabra, alguien que siquiera sabía de mi existencia. Tampoco era posible que estuviera tan preocupado que no sentía hagas de hacer nada que tuviese que ver con el día a día de mi vida, pensando en qué le podría haber pasado y me desesperaba, porque no tenía cómo encontrarlo de nuevo. Sin embargo ¿por qué le necesitaba tanto? ¿por qué tenía aquella sensación de que había perdido algo importante si ni siquiera podría realmente serlo?

Hasta el cigarro barato que estaba entre mis dedos y que intentaba acabar con tranquilidad en mis labios, al compararlo con la situación que llevaba dentro, parecía insignificante, siendo este una de mis aficiones.

"Soy un jodido estúpido"

Hace unos días atrás a ese, caminaba hacia la estación a mi hora de salida 19;45, como siempre. Con un gorro, mi cazadora colocada, mis audífonos y mi falta de expresión en el rostro. Todo era normal, pagaba, subía los escalones, me colocaba en un lugar variado de la estación y miraba con desinterés en dirección hacia la otra línea. Y ahí estaba aquél chico otra vez, pero esa vez no pude ver realmente su expresión, porque no había alguna.

Parecía decaído en su ropa coloquial, lo suficiente como para creer que le habían caído muchas cosas malas encima, pero al parecer no eran las comunes. Antes le habría notado triste o angustiado, sin embargo no tenía comparación con ese día. No brillaba como solía hacerlo, además estaba sentado y con su mirada distante en algún lugar del suelo que no existía. Y según lo que veía, él nunca tomaba asiento y se iba en el primer metro que pillara, pero lo dejó ir. Mi extrañeza me hizo fruncir con levedad el ceño, porque por segundos dejé de ver todo como algo imaginario sino que eso era la realidad y su realidad era que algo le había ocurrido.

¿Se supone que en el imaginar se debía sentir esa necesidad de cruzar como fuese aquella línea e ir a su lado? No podía estarme intrigando por un desconocido, no podía ser verdad y no podía estar pasando.

Por lo que riendo de mi repentina actitud y en lo extraño que me sentía al tener esa sensación suicida de ir a su lado sin razón, tomé el metro que había llegado y me fui convencido de que aquél chico estaría mejor para mañana.

Lo que no tenía en mente era que éste no fuese a volver al otro día, ni al otro, ni al siguiente, y así sucesivamente.

"¿Por qué me preocupo por esto?"

Y eso significó plantearse el «nunca volveré a verlo».

Yo tenía una mecánica al conocer a los demás. La primera era saber que no se puede confiar en ellas porque tarde o temprano te van a decepcionar. La segunda, no todo el tiempo están de humor para soportarte y, la tercera, sino logran comprenderte y respetarte, es imposible que exista el amor.

Pero en este caso, no sabía qué hacer, porque esta ansiedad estaba rompiendo cualquier parámetro que me pude haber regido antes de conocer a una persona. Porque aquél chico no lograba avanzar en aquella mecánica, era una pieza distinta que lograba dar error y, aunque no le conociera realmente y si mis intentos de imaginarle eran acertados, él no era como los demás.

-Mierda -Tomé con fuerza mi celular con una de mis manos, dejando caer lo último del cigarrillo después de aspirarlo-. Tengo que hacer algo.

«Para: Kai
De acuerdo idiota, voy en camino»

 

Notas finales:

Muchas gracias para los que lo hayan leído, de verdad lo agradezcob25;. Pronto continuaré con esta historia, espero les guste<3


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).