4. Crush
Crush-Jennifer Paige
El lunes por la mañana Naruto llegó algo agobiado a la escuela, su papá le había sacado de un enorme embrollo. Llegó a su clase y se encontró con Shikamaru durmiendo en su sitio seguramente esperando a Neji.
-¿aún no se te pasa la resaca?
-hmmm…-se levantó- por lo menos si cogí esa noche, pero dime ¿Qué paso con las predicciones?
-mi papá se dio cuenta de la almohada bajo la sábana
-¿pusiste una almohada bajo las sábanas?
-¿si? ¿qué más podía hacer?
-dejar un clon en casa-dijo como si fuera lo más obvio del mundo
-ah…
Entonces en ese momento llegaron Neji y Hinata que enseguida fueron a saludar aunque obviamente los mellizos estaban interesados en saber lo que había pasado con las predicciones así que Shikamaru se hizo a un lado y Hinata se puso de un lado de Naruto y Neji se sentó en las piernas de su novio del otro lado.
-así que te atraparon porque no pudiste pensar en dejar un clon en casa- empezó Neji
-¿y tú y Sasuke se divirtieron en el baño?-preguntó Hinata con cierta malicia
Naruto se puso rojo hasta las orejas, los oráculos le miraban con sonrisas anchas y burlonas, Shikamaru también le miraba divertido.
-Hinata vio como saliste y dejaste ese ese pésimo engaño, tu papá entró después y se dio cuenta de que no estabas-comentó Neji
-y Neji vio como Sasuke te siguió al baño y…
-¡ya entendí!-gritó Naruto
-bueno-siguió Shikamaru-será mejor que regreses a tu asiento, mi compañero de laboratorio no tarda en llegar al igual que el profesor y además…
Sasuke estaba entrando al salón de clases en esos mismos instantes, no se fijó en nada más que su propio asiento que ocupó sin hacer mayor escándalo. Durante lo que restó del fin de semana, estuvo encerrado en su habitación haciendo sus tareas y saliendo solamente si era absolutamente necesario. No había podido dejar de pensar en lo que había pasado en el baño de la fiesta, los labios de Naruto y sus ojos cristalinos mirándole entreabiertos y con excitación.
El rubio se fue del asiento junto a Shikamaru para ir donde Sasuke. Aunque no lo quisiera decir, estaba realmente nervioso de ver nuevamente al azabache que ahora estaba a su lado en silencio, Naruto se sintió tremendamente incómodo sentado ahí pero no sabía qué hacer para aligerar el ambiente.
-Naruto-le llamó Sasuke muy bajo, solo para que Naruto escuchara
-¿qu…qué?
-lo que te dije en la fiesta era verdad
El color regresó a las ya de por si coloradas mejillas de Naruto que solo pudo abrir los ojos y mirar al frente.
-de verdad me gustas
La cabeza de Naruto estaba a punto de estallar, su cuerpo reaccionaba de una manera tan distinta e indeseada en ese momento, él quería creer que Sasuke no estaba diciendo eso. Entonces encontró una forma de lidiar con todo, que según él sería la mejor manera de hacerlo. Negación.
-¿de… de qué me estás… estás hablando Sasuke?
-la fiesta…-dijo con una ceja levantada- en el baño cuando nosotros…
-lo siento Sasuke pero no recuerdo haber estado contigo esa noche
El azabache le miro con el seño fruncido, Naruto ni siquiera le miraba a la cara y se veía nervioso pero cuando quiso decirle algo el profesor Kakashi llegó junto con el resto de la clase para tomar cada uno sus asientos.
El excéntrico profesor ocupó su lugar frente al escritorio mientras miraba con su único ojo visible a los alumnos que se acomodaban rápidamente.
-bien, nadie tiene resaca, eso quiere decir que el día de hoy no habrá que usar el medidor de alcohol
-¿Qué hay de usted?-le dijo Kiba desde atrás tratando de hacerse el gracioso
-la diferencia entre ustedes y yo es que aún puedo funcionar con cervezas encima pero bueno tengo noticias más interesantes que decirles además de cuanto alcohol necesito para mantenerme tranquilo con ustedes
Todos los alumnos se miraron entre ellos entre risas y bromas sobre el cinismo de su profesor, estaban bastante emocionados por escuchar lo que Kakashi tenía para decir.
- hemos sobrevivido a la primer semana de clases y la directora Tsunade cree que podemos hacer la primera excursión del año
Los estudiantes saltaron en alegría al saber que saldrían de la escuela. Las excursiones de Sky High siempre eran las mejores de todo el mundo (a los ojos de sus estudiantes) al visitar siempre lugares divertidos.
-como saben, la conferencia anual e héroes veteranos se llevará a cabo este fin de semana y la directora pensó que sería una gran idea llevarlos ahí
-pero eso es en la ciudad contigua-comentó Neji
-eso es a lo que voy-siguió Kakashi
El profesor buscó algo dentro de su maletín hasta encontrar unos papeles que empezó a repartir a los chicos en la clase. Todos se apresuraron a leerla cuando estuvo en sus manos. No era más que un permiso que se debía de firmar.
-Sus pares deberán firmar este papel para que puedan ir, pasaremos tres días y luego regresaremos. Tendrán que hacer un informe sobre lo que se verá ahí y como pueden leer en los permisos, la directora explica que es verdaderamente importante su asistencia así que no se preocupen
Parecía que todos habían estado esperando algo así, el descansar de la escuela siempre era bastante bienvenido en los chicos.
-¿Cómo nos dividiremos en las habitaciones?-se apresuró a preguntar Gaara
Los demás estudiantes le miraron algo extrañados, aquel comentario no venía muy al caso pero para Gaara era una pregunta de suma importancia, él estaba dispuesto a pedirle a Sasuke compartir habitación.
-compartirán con su compañero de laboratorio, justo así como están sentados
Cuando Kakashi dijo esto, Naruto sintió que todo el mundo se le venía a los pies. Había estado tan emocionado por la salida hacía un par de segundos que la noticia le había tomado bastante por sorpresa. Con el rabillo del ojo miró a su compañero que parecía levemente sorprendido a su par pero eso solo logró poner más nervioso a Naruto.
-bien, es hora de seguir la clase
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Después de la campana para el almuerzo, Sasuke intentó salir antes de que Gaara pudiera llamarlo para cualquier cosa, ese muchacho comenzaba a darle mala espina. El único que ocupaba los pensamientos de Sasuke no era otro más que Naruto.
El pasillo estaba abarrotado de gente y en su casillero en donde debía encontrar a su hermana esperándole pudo ver cómo era que ella no estaba del todo sola sino que Kiba, ese insistente muchacho estaba con ella. Por un momento Sasuke dudó en acercarse, por primera vez en bastante tiempo podía ver como Okami sonreía sinceramente, no fingía como siempre hacía en casa.
Decidió al final que sería mejor dejarla en paz entonces, sabía que incluso con él, Okami fingía estar bien. Sky high se estaba convirtiendo poco a poco en un sitio cada vez más agradable, pero por sobre todas las cosas, definitivamente era Naruto la que más le gustaba. Debía aprovechar ese tiempo y buscarle, quería hablar con él y aclarar las cosas pues no mentía, él de verdad se sentía atraído por esos enormes ojos zafiro.
Dio media vuelta esperando encontrar a Naruto, tenía hasta el final del almuerzo así que fue a la cafetería pero no lo vio ahí. Estaba a punto de regresar al salón pero entonces vio que Gaara venía desde el otro extremo del pasillo así que opto por un camino diferente doblando hacia el gimnasio que seguramente a esa hora debía estar vacío.
Entró rápidamente, no estaba dispuesto a soportar un segundo más con Gaara, ese chico le ponía los cabellos de punta y le daba muy mala espina además de que se sentía muy incómodo el hecho de que se le insinuara tan descaradamente.
El último par de años había sido realmente tenso para él y su hermana, las cosas no mejoraban y él estaba impacientándose. Itachi les había hecho una promesa que había roto al debutar como villano lo que solo hizo que todo fuese más difícil. Ahora estando en ese nuevo colegio por fin sentía que su vida podría cambiar para mejor, sin dudarlo eran aquellos ojos azules como el cielo lo que le daban el valor para seguir.
Al entrar en la estancia no pudo dejar de fijarse en que no estaba solo, pero lejos de incomodarse había encontrado a la persona con la que quería hablar.
Después de que el almuerzo empezara, Naruto vio a su amigo con la hermana de Sasuke y no tuvo el valor para interrumpirlo por segunda vez, no quería ir a la cafetería para seguir siendo interrogado por los oráculo, necesitaba un momento para pensar bien las cosas. El fin de semana había sido enteramente para regañarse a sí mismo por haber disfrutado tanto el haber estado con Sasuke aunque fuese un poco.
-que bueno que te encuentro, Naruto
La voz de Sasuke hizo que Naruto saltara por un instante, él era la última persona a quien quería encontrarse y ahora estaba justo ahí. El azabache caminó hasta la grada en donde se encontraba su compañero y se sentó a su lado en silencio, a decir verdad, él tampoco tenía idea de lo que debía decir.
El silencio entre los dos se hizo más denso, no sabían si mirarse a los ojos o simplemente permanecer esquivando sus miradas.
-Escucha…-empezó Sasuke- no importa que no quieras hablarme pero necesito aclarar algunas cosas contigo
-no me digas-dijo irónico sin mirarlo
-sé que recuerdas lo de la fiesta, no estabas tan ebrio
-yo no…
-pasaremos el próximo fin de semana durmiendo en la misma habitación, quiero que aclaremos las cosas antes de eso
-lo que pasó en el baño debe olvidarse-seguía sin mirarlo-no podemos hacer cosas como esas
-¿Por qué no? Creí haberte dicho que me gustas
-mi familia y la tuya son enemigas, tú serás un villano y yo un héroe
La campana sonó así que Naruto se levantó rápidamente para regresar al salón de clases, sabía que una vez que llegara tendría que pasar lo que restaba del día junto a Sasuke pero ese trayecto hasta el aula le serviría para pensar un poco. Ese momento que estuvo con el Uchiha en las gradas lo había descolocado, no podía pensar firmemente y los recuerdos de aquella noche no dejaban de llegar. ¿Cómo se suponía que mirara a la cara a Sasuke de esa forma? Simplemente era imposible.
Pero había algo definitivo, algo que no admitiría en voz alta y eso era el hecho de querer que se repitiera, jamás se había sentido igual y le gustaba.
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-no sé, no creo conveniente que aprendan sobre “héroes veteranos”, no es algo en lo que quisiera que pensaran mis hijos
Fugaku se rascaba la barbilla mientras leía los permisos para el viaje, la familia Uchiha estaba en el comedor, celebraban un trabajo bien hecho así que esa noche la cena era en honor a Itachi, un joven y prolífico aspirante para quedarse con el imperio de su padre.
-creo que Sasuke debe ir-intervino su mujer-tú por otra parte…-se dirigió a Okami
-deja que los chicos vallan-intervino Itachi
Las miradas de todos enseguida fueron a parar hacia Itachi, el muchacho sonrió de medio lado al ver que las cosas no cambiaban no importaba el tiempo que transcurriera. Aún así, desde su graduación podía decir que su opinión era tomada más en cuenta.
-piénsalo de esta manera papá-siguió Itachi- ¿cómo pueden ellos conocer las debilidades de los héroes? El conocer a esos vejestorios, pueden entender el razonamiento de un héroe
-si lo pones así suena bastante bien-volvió a hablar Fugaku
-insisto en que ella debe quedarse, estoy segura que ella tuvo la idea de que fueran a esa peligrosa fiesta a la mitad de la noche en la motocicleta de Itachi-insistió Mikoto
Okami se mantenía en silencio, ella prefería no meterse en esos asuntos y dejar que fuese su papá quien diera la última palabra.
-no Mikoto, si él va entonces ella también
La mujer de Fugaku solo apretó los labios hasta hacerlos una fina línea, no era la primera vez que su marido la hacía a un lado por poner a su hija. Siempre debía de reaccionar igual, solo mantenerse en silencio y hacer caso a su marido.
-firmare los dos permisos entonces
Sasuke miró de mala manera a su mamá y después a Itachi pero no dijo absolutamente nada, no quería arruinar el avance que ya había hecho. Quería ir a esa excursión, no se rendiría con Naruto y estaba dispuesto a todo con tal de poder lograr algo.
Después de la cena, Sasuke se encerró en su habitación solo que un rato más tarde fue interrumpido por su hermana que se había quedado bastante inquieta desde la conversación de los permisos, claro que su hermano mayor la dejo entrar.
-no hagas caso de lo que dice mamá
-no la culpo y lo sabes, no estoy enojada con ella
-Okami…
-además nos dejarán ir al viaje, eso es increíble
Los dos se acostaron en la cama del mayor, desde que habían comenzado a expulsarlos de las escuelas su relación se había fortalecido. No era raro encontrarlos a ambos dormidos en la misma cama por hacer los deberes juntos pero eran esas situaciones especiales eran las que les hacían pasar más tiempo juntos.
-¿de qué hablabas hoy con ese chico? No almorzaste conmigo por estar con él-recriminó el mayor
-solo hablamos-rio tímida
-¿durante todo el descanso?
-no quise dejarte solo Sasuke, lo lamento pero…
-es la primera vez en mucho tiempo que te sientes feliz ¿no?
La menor de los Uchiha sonrió con vergüenza mientras sus mejillas se teñían de rojo, Sasuke sintió algo de envidia al pensar nuevamente en Naruto. Sabía que debía aprovechar hasta el último momento del viaje, no sabía si era solo capricho pero simplemente no podía dejar de pensar en el rubio.
-serás compañero de habitación de Naruto
-así es
-por eso te traje esto
La muchacha sacó una pequeña caja de su pantalón y se la dio a su hermano que en primera instancia no supo que era pero al verla más de cerca sonrió divertido y negó con la cabeza.
-¿de verdad? ¿Condones?
-vas a estar un fin de semana compartiendo cuarto con él, quiero que me cuentes los detalles
-pero él es hijo de dos héroes, vive en un suburbio, probablemente sea virgen
-los condones no te los di para tu seguridad sino para la comodidad de él, no es divertido sentir como te escurres la primera vez
-no me digas eso, eres mi hermana menor, debo pensar que aún eres virgen
-si eso quieres-puso ojos de cachorrito- te lo juro por Diosito y Luis Miguel que soy virgen
Los dos lanzaron una terrible carcajada que se pudo escuchar hasta el piso de abajo en donde Itachi los escuchó claramente, él se había quedado en la cocina un poco más revisando los planos del nuevo robot que enviarían a la ciudad la semana siguiente. Las risas de sus hermanos menores le eran agridulces, sabía que los dos lo debían odiar en ese momento pero agradecía que estuvieran tan contentos.
Había tomado muchas decisiones los últimos meses que también habían afectado a sus hermanos menores pero el lidiar con ellos podía esperar hasta después de que cumpliera con su cometido, solo entonces podría intentar recuperarlos.
Miró el reloj en su muñeca, se hacía más noche y pronto debía ir a la cama así que se encaminó a su habitación. Desde que se había graduado, su vida había tomado un camino difícil y bastante tormentoso pero solo debía pensar en sus objetivos. Había renunciado a muchas cosas, personas importantes que ahora lo preferían lejos y no solo eran sus hermanos.
Su cuarto se había convertido para él en una especie de santuario en donde podía ser él mismo al menos en privado, nadie más debía verlo en esos momentos tan vulnerable por decirle de alguna forma.
-excursión ¿eh?-rio- me pregunto si tendrá que ver con algún muchacho
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La semana pasó rápidamente y el día de la excursión estaban todos fuera de la escuela abordando los camiones, el profesor Kakashi había recogido los permisos de los muchachos que estaban esperando abordar los autobuses.
El profesor Iruka se veía radiante, a diferencia del profesor Kakashi que simplemente no podía esconder su repugnancia hacia aquellas salidas que lo mantendrían lejos de casa por un fin de semana.
-anda, ya quita esa cara-exigió Iruka
-no sabes lo que dices, estas excursiones siempre son sinónimo de estar sorprendiendo a los estudiantes teniendo sexo
-eso es normal, ya no son niños
-es triste saber que estos mocosos cogen más que yo
-son jóvenes, tú por otra parte…
Kakashi no dejó que Iruka terminara la frase apretando sus mejillas, odiaba que su compañero de trabajo le recordara que ya no estaba en condiciones de salir de fiesta. Los años no pasaban en vano y eso Kakashi lo tenía bastante presente, sus sentimientos no habían cambiado para nada desde la escuela pero no podía darse el lujo de simplemente actuar imprudentemente.
-ya casi es hora-volvió a hablar Iruka mirando su reloj
Kakashi miró a su alrededor para asegurarse de que todos los estudiantes estuvieran ahí, no estaba seguro de haber tomado la decisión correcta al juntar a los chicos como parejas de laboratorio; se rascó la cabeza rezando porque no hubiera más inconvenientes pues ya no tendría fuerzas para lidiar con más cosas.
-¿estás listo?
El puño de Kiba chocó levemente contra el hombro de Naruto que despertó de su transe pensativo. Durante lo que restó de la semana, él estuvo muy distraído y procuraba no hablar con Sasuke, sentía que eso solo empeoraría las cosas aunque no podía decir que habían mejorado. El azabache ocupaba gran parte de sus pensamientos y no podía encontrar una forma de sacarlo de por vida.
-eso creo
-¿te sientes bien? Te ves cansado
-no estoy tan bien como tú
Las mejillas de Kiba se tornaron rojas al darse cuenta que Okami le miraba discretamente al lado de su hermano mayor. Claro que Naruto enseguida se dio cuenta que los candentes ojos de Sasuke no lo dejaban de mirar, eso le ponía muy nervioso pero a la vez le gustaba.
-es hora-anunció el profesor-todos suban a los autobuses
Les dividirían por clase, Naruto le había rogado a Kiba que ocupara el asiento a su lado durante el viaje, serían un par de horas en compañía de su amigo que le servirían para despejar un poco su mente.
Por su parte, Sasuke había hecho lo posible por evitar a Gaara pero al subirse al autobús comprobó que nadie más que el pelirrojo estaba dispuesto a darle un lugar a su lado. El azabache suspiró pesado y solo tomó las cosas con calma, podía esperar a llegar pues aún con Gaara interponiéndose no podía cambiar el hecho de que compartiría habitación con Naruto.
-me alegra que hayas venido a la excursión-se apresuró Gaara apenas Sasuke se sentó
-si, a mí también me alegra haber venido
-aunque los profesores nos fastidiaron con lo de las habitaciones
-no creo que dormir con Kiba sea tan malo
-¿bromeas?-alzó una ceja-ese tarado ronca
Una vez más, Sasuke sonrió distraído imaginándose si Naruto también roncaba. Era inevitable imaginar aquel cuerpo desnudo durmiendo a su lado, le encantaría acariciar su espalda mientras lo veía dormir, besarlo para escucharlo suspirar entre sueños.
-¿Qué piensas?
-¿ah? No lo sé
-oye, después de la conferencia nos darán el resto del fin de semana libre
-¿si?-contestó distraído
-quería saber si, ya sabes, tal vez podríamos salir y hablar tranquilamente
Una vez más, Sasuke se había metido en una situación comprometedora, no quería ser grosero pero Gaara realmente empezaba a fastidiarle. Gaara era sin duda alguna el tipo de chico con el que su padre le gustaría verlo, su forma de pensar y actuar encajaba perfectamente con los modos de su familia. No podía negar que su compañero de asiento era bastante atractivo y su juego de seducción era muy interesante, pero al mismo tiempo no podía dejar de lado a Naruto, su nuevo amor platónico.
Los labios de Gaara se seguían moviendo pero Sasuke había dejado de escuchar casi por completo, no le interesaba en lo absoluto el parloteo de un fanático con la entrepierna caliente. Estaba sentado hasta atrás así que alzó un poco el cuello para poder buscar al que le interesaba y pudo verlo sentado al lado de Kiba y sus demás amigos que iban jugado y riendo.
Las risas se escuchaban en todo el autobús, incluso podía escucharse como el conductor también se unía a algunas bromas tontas y reía. Todos parecían estar pasándolo bien, excepto claro esos últimos asientos en donde estaba él junto con los hermanos Sabaku. Por un momento Sasuke tuvo mucha envidia, quería ir con ellos y divertirse un rato pero sabía que si se atrevía a aparecer con ellos entonces los chistes se desvanecerían.
El concepto de amistad era algo que Sasuke aún no terminaba de entender, en todas las escuelas en las que había estado, siempre había sujetos como Gaara, acercándose solo por su apellido, morbo o buscando un buen acostón y en el caso del pelirrojo, probablemente serían todas las opciones juntas.
-¿me estás escuchando?
Una vez más, la voz de Gaara penetró en el subconsciente de Sasuke haciendo que volviera en si para darse cuenta que había dejado parlotear a su compañero sin haber escuchado ni una sola palabra.
-si…-se apresuró a decir
-¿de verdad? ¿De qué hablaba?-le recriminó algo fastidiado con una ceja levantada
-¿sobre Salir juntos en la excursión?
Para su buena suerte, Sasuke parecía haber acertado pues Gaara sonrió ampliamente y se inclinó hacia él. El azabache se hizo hacia atrás para evitar lo más que pudiera el contacto aunque en los asientos del autobús no había mucho lugar a donde ir y menos tomando en cuenta los cinturones. Como mecanismo de defensa, Sasuke volteó la cara a la ventanilla para evitar que el pelirrojo siguiera.
Los ojos del azabache fueron enseguida al autobús que volaba al lado de donde iba él, era el bus de la clase de su hermana menor. Desde donde estaba podía ver a Okami que mantenía las narices dentro de algún manga de su interminable colección de Shojo; ella estaba sola y no hablaba ni con el chico a su lado, Sasuke se sintió algo culpable de la situación.
-ella se integrará pronto-volvió a hablar Gaara dándose cuenta de lo que pensaba Sasuke
-es difícil, sé que es culpa de nuestro apellido
La mano de Gaara se coló hasta tomar la de Sasuke que solo volteó rápidamente para encontrarse con el rostro de su acompañante muy cerca del suyo. Las intenciones del pelirrojo eran obvias, intentaba besarlo pero definitivamente eso no estaba en los planes así que solo volvió a girar el rostro para evitar el contacto y afortunadamente Gaara entendió la indirecta.
Ahora solo restaban un par de horas para llegar, después de eso tendrían que escuchar la conferencia por la tarde y le restaban dos días para intentar algo con Naruto.