Uff… ¿Qué tal? Espero que os este gustando. Para ser mi primer fic de HP yo creo que me salió bastante bien. Lo tengo acabado, pero solo lo subiré si os gusta. Ya me diréis... espero reviews!!!
Cáp.2 Los Slytherins también lloran
- Harry... tu... estas enamorado ¿verdad?
Harry levantó la mirada de su cerveza de mantequilla y miró a Remus mientras se sonrojaba intensamente ¿Lupin se había dado cuenta? El profesor le sonrió al comprobar que había dado en el clavo.
- No te sorprendas... Tienes todos los síntomas. Estas en las nubes, suspiras... y no te comportas como de costumbre. – El chico bajó la cabeza avergonzado y fijó la mirada en su bebida. – Dime ¿quién es?
El chico no respondió. No podía confesárselo. Le había costado mucho aceptarlo, pero todavía no se atrevía a decírselo a nadie, ni siquiera a Lupin. “Estoy enamorado de Draco Malfoy, la persona a la que nunca he soportado, un Slytherin que me odia, y cuyo padre esta aliado con el hombre que intenta matarme.” Sonaba ridículo hasta en su mente.
- Nadie.
Remus suspiró.
- Bien, si no quieres decírmelo...
* * *
Aquella tarde, poco antes de la cena, Harry fue a dar una vuelta por las cercanías del bosque prohibido. Hermione estaba en la biblioteca, y Ron le había dicho que iba a asomarse a preguntarle algo. Aun faltaba más de media hora para la cena, no notarían su ausencia.
Pero cuando se encontraba en medio de su paseo vio una figura apoyada en un árbol. Estaba de espaldas a él, pero parecía que iba a caer en cualquier momento. Harry iba a acercarse a ver que sucedía, cuando reconoció al chico. Aquel cabello rubio platino era inconfundible... Malfoy. Pero ¿qué hacia Draco allí? En los lindes del bosque... parecía que temblaba... Harry estaba seguro de que si apartaba su mano del árbol caería al suelo. Harry no se atrevió a acercarse más. Estaba de espaldas a él, pero talvez lloraba... el chico deseó poder correr hasta él, estrecharle entre sus brazos y preguntarle que le pasaba. Lo deseó con todas sus fuerzas, pero sabía que no podía hacer eso... Harry se alejó lentamente, pero su mente no podía alejarse del rubio ¿qué le sucedía a Draco?
Continuó paseando hasta la hora de la cena y luego se dirigió al gran comedor. Al mirar la mesa de Slytherin vio allí a Malfoy. Estaba sentado entre Grabble y Goyle, y hablaba con el resto de muchachos de su alrededor, se comportaba como siempre, como hubiera dicho antes “Parecía tan estúpido y arrogante como de costumbre”. Por un momento dudo si de verdad era él a quien había visto, pero no, estaba seguro, era él. Fue entonces cuando se dio cuenta que en la sala la gente se giraba a mirar al rubio y murmuraba en voz baja.
- Si... ¿lo has visto?
Harry vio llegar a Ron y Hermione que parecían hablar sobre algo muy interesante.
- ¡Harry! – El pelirrojo corrió hacia él. - ¿Te has enterado?
- ¿Enterarme? ¿De que?
El chico dio un vistazo a su alrededor, la gente seguía observando a Draco, y fue entonces cuando Harry reparó en algo, Petter no estaba, el lugar que solía ocupar en la mesa de Ravenclaw se hallaba vació.
- De lo de Malfoy! Él y Petter han roto.
Mientras hablaba Ron se sentó a su lado y Hermione también ocupó su lugar en la mesa.
- ¿Roto?
- Si... y mírale, poco parece que le importa a esa cucaracha...
- ¡Ron! – Le reprendió Hermione.
- Pero si es la verdad... es una cucaracha. ¿Verdad Harry?
Harry miró a Malfoy, no había nada anormal en su actitud, nada que indicara la reciente ruptura... pero él le había visto en el bosque, le había visto temblar.
- ¡Ron! No puedes hablar tan ligeramente de los sentimientos de los demás... – Volvió a intervenir Hermione.
- ¿Sentimientos...?
- ¿Qué ha sucedido? – Intervino por fin Harry.
- No lo se. – Ron se encogió de hombros. – Solo se que han roto, y que el tal Petter no-se-que está muy afectado.
- Si... una amiga suya dice que esta destrozado, verdaderamente adoraba a Malfoy...
- No se como alguien podría enamorarse de esa víbora.
Harry se sonrojo. Él si entendía a Petter. Draco, tenia esa presencia imponente y elegante, esa apariencia tan autoritaria, esa arrogancia... y Harry se sentía morir, solo de pensar en lo mucho que desearía hacerle perder la compostura, aquella arrogancia... verlo estremecerse en sus brazos. Quería que le mirara como había mirado a Petter, que le sonriera como a él.
- Mírale. – Continuó Ron. – Parece de hielo. Tan tranquilo... Me gustaría saber porque han roto. No parece que al príncipe de Slytherin le haya afectado mucho.
- ¡Déjalo ya!- Explotó de repente Harry. Ron le miró confundido ¿Harry Potter defendiendo a Draco Malfoy? – No puedes saber sus sentimientos... no bromees sobre esas cosas.
- Vamos Harry, ¿de veras crees que...? ¡Es Malfoy!
- ¿Y que? ¡Hasta él puede tener sentimientos! – Harry miró a su amigo. – Seguro que incluso Snape los tiene...
Aquello era algo que hasta el propio Harry a veces dudaba, pero era el ejemplo mas exagerado que se le ocurrió. Ron le miró sorprendido, y tras intercambiar una mirada con Hermione decidió cambiar de tema.
Aquel fue el tema del día, todo el mundo tenía la mirada fija en Malfoy, que les ignoraba. Nadie parecía comparecerse de él, todos daban por sentado que él era el culpable. Pero Harry si notó algo distinto en Malfoy, su carácter que había mejorado junto a Petter, volvía a ser el de siempre. Aunque la gente creyera lo contrario, él estaba seguro de que Draco también lo estaba pasando mal. Aquel fue el tema estrella de la semana.
* * *
Harry se encontraba en el despacho de Lupin. El profesor se encontraba cansado, acababa de terminar su transformación y se encontraba débil.
- Perdona Harry, creo que bajaré a pedirle a Severus un poco de su poción reanimadora ¿Me acompañas?
- Claro. – Murmuró Harry.
Ambos se dirigieron al despacho de Snape, pero al entrar vieron que este no estaba solo. Snape se encontraba sentado en una silla, y recorriendo nervioso la habitación se encontraba Malfoy que se detuvo en seco al verles.
- Perdona Severus, siento interrumpir.
Snape se levantó y se dirigió a la estantería.
- Vengo por...
- Se porque vienes. – Murmuró el profesor de pociones tendiéndole un frasco a Remus que le sonrió amablemente.
- Gracias.
- ...
- Hasta luego Severus. – Lupin se giró y sonrió también a Draco que le miraba con antipatía. – Nos veremos en clase Draco.
Lupin se fue y Harry se giró dándole una última mirada a Draco que este no le devolvió.
- Pobre chico.
Harry se giró hacia Lupin no muy seguro de lo que había oído.
- He oído lo de Draco y Petter, supongo que el pobre estará destrozado.
- No es eso lo que opinan todos. – Murmuró Harry.
- Y tu ¿qué opinas Harry?
- ¿Yo...? – Harry tardó un instante en responder. – Creo que se equivocan.
Lupin sonrió complacido por la respuesta. No hablaron mas hasta llegar al despachó, entonces, Lupin habló mientras sacaba una barra de chocolate.
- Él te gusta.
- ¿Que? – Harry le miró entre sorprendido y azorado.
- Que él te gusta ¿verdad? – Murmuró Remus mientras le tendía el chocolate. – Me refiero a Draco, es el quien te gusta.
Harry no cogió el chocolate y se limitó a sonrojarse más.
- ¿No me lo quieres decir? ¿Y si yo te confieso que estoy enamorado de alguien?
Harry levantó la mirad sorprendido.
- ¿Tu?
- Si. – El licántropo sonrió ante el rostro sorprendido de Harry. – ¿Tan extraño parece?
- Es... es que... – Lupin entendió que de cierta forma, Harry lo consideraba una traición a Sirius.
- Ya hace un año de la muerte de Sirius, y la verdad es que... – Dudó un instante antes de intentar explicárselo al chico. - Mira Harry, no quiero que pienses que no amaba a Sirius. Paddy fue el amor de mi vida y siempre lo será, él siempre será importante para mí. Pero hace mas de quince años que lo perdí, cuando sucedió aquello fue muy duro para mi pero tuve que intentar olvidarle. Cuando volvió fue... no puedes imaginarte lo feliz que estaba... Pero nada era como antes, yo le amaba, pero también había empezado a sentir algo por otra persona, aunque eso fue algo que Sirius nunca llegó a saber. Sufrí mucho al perderle de nuevo.
Harry le miraba. Ya no parecía dolido porque Remus se hubiera enamorado de nuevo. Aunque el licántropo, veía en sus ojos, que al chico no le hacia gracia la idea, entendía que necesitara rehacer su vida.
- Pero ha pasado el tiempo y creo que puedo permitirme sentir algo por otra persona. Se que Paddy querría que fuera feliz.
Harry asintió.
- Bien, yo te he contado algo. Ahora te toca a ti. – Harry volvió a sonrojarse, se resistía a contarle a Remus sus sentimientos. Aquel amor que no podía ser correspondido. - ¿Te gusta ese chico?
- ...
- Tranquilo, no pienso decírselo a nadie.
- Soy un idiota, él me odia. – Remus sonrió al ver confirmadas sus sospechas. – Pero aun así...
- Si te consuela, no eres el único cuyo amor no es correspondido.
Lupin le sonrió y Harry le miró sorprendido.
- Pero...
- Te he dicho que estaba enamorado, pero no que fuese correspondido.
Lupin rió mientras tomaba otro trozo de chocolate, esta vez Harry no rechazó el que le ofreció. El joven confesó al lobo todos sus sentimientos, era tranquilizante poder confesarse con alguien.
* * *
Harry habló con Lupin toda la noche, ni siquiera bajaron a cenar. Cuando Harry se retiró era tarde, entro en la habitación silenciosamente, pero alguien le esperaba despierto.
- ¿Harry?
Ron se levantó de la cama.
- ¿Ron? ¿Sigues despierto?
- Si ¿Dónde has estado? No has ido a cenar.
- Estaba con Lupin.
- ¿Con Lupin? ¿Qué hacías con él a estas horas?
- Hablar.
Harry se puso el pijama.
- Harry, últimamente estas extraño ¿Hay algo que no me hayas contado?
- ¿Porque crees eso?
- Hermione y yo hemos hablado... Ella también te ha notado ausente. – Harry le miró resentido. – No te enfades. No debería decírtelo... pero Hermione opina que es que... bueno que...
- Venga, dilo ¿qué cree Hermione que me pasa además de tener unos amigos tan cotillas?
Ron se sonrojo.
- Ella cree que estas enamorado.
Ahora fue Harry quien se sonrojo, y su amigo lo notó, aunque el chico intentara ocultarlo.
- ¿A si? ¿Y de quien según la señorita?
Weasley se encogió de hombros mientras se dirigía a su cama.
- Harry, soy tu mejor amigo, sabes que puedes contar conmigo. Si fuera verdad ¿me lo dirías?
Harry se acababa de acostar y cerró los ojos ignorando la pregunta de su amigo. Si estuviera enamorado de cualquier otra persona talvez se lo contaría, pero ahora no podía. Ron odiaba a Draco, y Harry sabía que tenía razones de sobra para hacerlo. No podía confesarle a su mejor amigo que era gay y que además se había enamorado de la persona que mas odiaba, solo superada, tal vez, por su terrible profesor de pociones. Ah, y Voldemort, claro. Además, ahora ya no tenía que guardarse sus sentimientos, si hacia falta, había encontrado un hombro para llorar.
¡Remus se ha vuelto a enamorar! Felicidades Remus!!!!!! ¿Quién será el afortunado? (Si, afortunado, aquí no hay lugar para chicas, lo siento Tonks, ji, ji…) Parece que Draco ahora esta libre ¿Conseguirá Harry al Slytherin más sexy de todo Hogwarts?