Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Promesa Cumplida por Angel electrico

[Reviews - 15]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Disclaimer: Free! Iwatobi Swim Club y Free! Eternal Summer pertenecen a Kyoto Animation, este trabajo está hecho sin ánimos de lucro, sólo con fines de entretenimiento.

N/A:Hola chicas! Una disculpa por el atraso con la actualizacion, pero tuve unos dias un tanto dificiles en cuanto a mi salud, tanto asi que estuve internada en el hospital un par de dias, pero afortunadamente ya estoy bien y lista para subir el nuevo capitulo, que espero sea de su agrado.

Recuerden que aunque ya no pueda actualizar seguido, este fic sera terminado en su totalidad.

Advertencias del Capítulo: Yaoi, OOC.

 

 *Reeditado el 31 de Enero de 2017*

CAPÍTULO III

Sousuke se encontraba en la habitación que compartía con el pelirrojo en la Academia Samezuka, estaba acomodándose la hombrera de neopreno cuando escuchó la voz de su mejor amigo acercándose, quien en ese momento abría la puerta mientras hacía malabares con su celular, su toalla y su mochila; el de ojos claros se acercó pronto a ayudarle y pudo notar como aquellos ojos rojos se enfocaban en su hombrera por unos segundos, para luego mirar de manera incómoda hacia cualquier otro lado del dormitorio.

Rin sabía que era casi imposible que Yamazaki volviera a la natación competitiva y esa situación lo llenaba de tristeza y de impotencia. Incluso se sentía algo culpable, ya que él fue el que persuadió al moreno de entrar al Club de Natación de la Primaria Sano en primer lugar y luego él mismo lo había instruido en el estilo mariposa, cuya brazada fue la responsable de la lesión -y del intenso dolor-que sabía que el más alto estaba padeciendo desde que volvieron de la Competencia Regional, apenas unos días atrás.

Matsuoka decidió dejar esos pensamientos para después, porque había dejado de prestar atención a la conversación que estaba sosteniendo con Nagisa, quien le estaba poniendo al tanto de la situación que estaba pasando con sus amigos de Iwatobi.

-Entiendo que estés preocupado Nagisa, pero tenemos que dejar que ellos solos resuelvan su problema-respondía Rin a un consternado rubio e hizo una pausa para escuchar lo que éste tenia que decir-Yo tampoco sé cual haya sido el motivo por el que no se hablen, pero es mejor que no intervengamos, cualquier cosa que suceda puedes llamarme, ¿entendido?, debo colgar porque voy a desayunar y tu también deberías hacerlo-Sousuke no quería ser entrometido, pero la voz de Hazuki era lo suficientemente fuerte y aguda como para alcanzar a escuchar un "está bien Rin-chan, te llamaré mas tarde".

-Nos vemos luego Nagisa, cuídate y salúdame a Rei-fue la despedida del pelirrojo hacia su amigo, colgó y volteó a mirar a Sousuke, quien ya estaba vestido y listo para acompañarlo a la cafetería de la escuela, entonces tomó aire y soltó la información de una sola vez- Haru y Makoto no se hablan aunque más bien es Makoto quien no le dirige la palabra a Haru, ni siquiera llegan juntos a la escuela, además de que está faltando a los entrenamientos del Club.

-Haruka no me ha dicho nada al respecto.

-Tal vez sea porque no se han visto desde que volvimos de la competencia-apuntó el pelirrojo resaltando lo obvio.

-El que no lo haya visto no significa que no hayamos hablado durante estos días, te recuerdo que existen los celulares.

-¿Haru y tu hablando por celular? ¿En serio?-el más alto solo asintió como respuesta-Sólo falta que me digas que se mandan mensajes de texto-a lo que su amigo volvió a asentir, viendo divertido la cara estupefacta del chico de ojos rojos-¿Sabías que Haru rara vez atiende mis mensajes a tiempo y aun menos mis llamadas? Y no solo a mi, cualquiera lo puede atestiguar.

-He escuchado algo sobre eso.

-Vaya, ustedes van muy en serio, ¿no es así?

-Tranquilízate Matsuoka, sólo son simples llamadas.

-Como sea, lo que me preocupa son esos dos, ellos nunca habían estado sin hablarse, digamos que no son como tu y yo que peleamos todo el tiempo; Nagisa está muy triste porque no entiende cuál fue el problema pero obviamente no se lo iba a decir-al decir esas palabras, el pelirrojo miró a su amigo mientras alzaba las cejas, haciendo evidente "cuál" o mejor dicho "quién" era el problema.

-¿Insinúas que yo soy el culpable de que tus amigos no se hablen?, no es asunto mio si Tachibana no puede aceptar que Haruka y yo tenemos una relación.

-Bueno tienes que tomar en cuenta que Makoto ama a Haru desde que eran niños y digamos que siempre guardó la esperanza de que le correspondiera. Además hasta a mi me sigue causando sorpresa que ustedes sean novios o como le digan a eso que tienen; no se si te diste cuenta de las caras que pusieron todos cuando llegaron tomados de la mano a la premiación, nadie lo podía creer.-Aseveró Matsuoka con un toque de humor, mientras recordaba el mencionado suceso, donde incluso hasta el hablador de Momotarou se quedo mudo de la impresión.

Sousuke sólo se echo a reír ante lo dicho por su amigo. Ciertamente no se había puesto a pensar en el estatus de su relación con Haru, obviamente eran más que amigos pero no sabía si era correcto denominarse como novios, se sentía extraño porque era la primera vez que pensaba en esas cuestiones. Apenas iba a responderle a Rin cuando escucharon que alguien tocaba la puerta, se trataba de Nitori, quien venia a preguntarles si ya habían ido a desayunar; al parecer Momotarou no lo había despertado a tiempo y temía que ya se hubiera pasado la hora reglamentada por la Academia, en efecto ya se les había hecho tarde y los tres se encaminaron con prisa hacia el comedor.


Mientras almorzaban, el chico de ojos claros se encontraba pensativo, si bien era verdad que hablaba con Haru más de una vez al día, se sentía algo incómodo con el hecho de que no le hubiera contado sobre sus problemas con Makoto. Sabía que apenas estaban comenzando su relación y que de hecho ninguno tenía experiencia previa en ese campo, aun así deseaba que el pelinegro tuviera más confianza en él. Entonces se le ocurrió una gran idea, y para llevarla a cabo necesitaría del apoyo de cierto muchacho de dientes filosos.

-Oye Rin, ¿no crees que deberías visitar a Gou-chan más a menudo?, tu sabes que ella se siente sola porque casi no ve a su egocéntrico hermano mayor, quien por cierto en unas semanas dejará a su linda hermana de nuevo a merced de adolescentes hormonales.

-¿Acaso insinúas que soy un mal hermano?-le cuestionó Matsuoka con mucha irritación.

-Yo no he dicho eso, sólo opino que deberías cuidar mejor de Gou-chan. ¿No te gustaría ir a recogerla a su escuela? Estoy seguro que se pondrá muy contenta y más aun si comes con ella y con tu mamá.

-Viéndolo así, es verdad que no he pasado mucho tiempo con ellas, debo aprovechar el tiempo que me queda aquí antes de regresar a Australia-le respondió Rin con sinceridad y cierta nostalgia al recordar que de nueva cuenta se iría del pueblo dejando atrás a su familia, con el fin de seguir esos sueños que cada vez eran más palpables.

-No tienes que agradecer mi consejo, es más, si quieres te puedo acompañar al Instituto Iwatobi.

-¿Porqué siento que todo esto es un plan tuyo para ir a visitar a cierta persona? No creí que fueras del tipo que necesita apoyo moral-le preguntó Rin con cierta suspicacia.

-De hecho no lo necesito, pero yo también quiero saludar a Gou-chan, estoy seguro de que tengo más contacto con ella que tu.

-Está bien, saliendo de clases iremos al Iwatobi.-finalizó el chico de ojos rojos mientras suspiraba resignado.

-Me parece una excelente idea-le confirmó su amigo, mientras tomaba un sorbo de café sin azúcar.


Rei, Nagisa y Gou esperaban impacientes por los integrantes restantes de su Club en la puerta de su Escuela, no sólo porque ellos terminaban sus clases antes que sus amigos de tercer año, sino porque estaban esperanzados a verlos llegar juntos. Había un gran ambiente de tensión desde que habían vuelto de las Competencias Regionales y ninguno de los tres chicos se explicaba el motivo por el que Makoto se había separado del grupo. El Equipo estaba enfrentando una gran crisis ya que faltaban sólo dos semanas para las Nacionales y no habían entrenado juntos ni una sola vez y al cuestionarle a Haru no habían recibido ninguna explicación convincente de su parte, el pelinegro sólo les decía que Makoto estaba ocupado porque ya estaban estudiando para los exámenes finales, además de que el entrenador Sasabe le había pedido trabajar más horas en el ISC Returns.

Mientras los tres amigos hablaban sobre la situación, Gou divisó a lo lejos las figuras de dos jóvenes que vestían el inconfundible uniforme de la Academia Samezuka, reconociendo al instante a su hermano y al mejor amigo de éste, a quienes llamó de inmediato.

-¡Onii-chan! ¡Sousuke-kun! ¡Aquí estamos!-gritó entusiasta la pelirroja a los dos muchachos mientras le hacía señas con las manos, éstos al verla se encaminaron directamente a saludar al pequeño grupo.

-Hola chicos, ¿cómo están? Oye Gou, vine por ti para comer juntos en casa con mamá, hace días que no las veo- le comentó Rin a su hermana mientras ésta se colgaba de su brazo sonriente.

-¡Hola Rin-chan! ¡Hola Sou-chan!-saludó el rubio con alegría a los recién llegados.

-Disculpa Hazuki, ¿cómo me llamaste?, es que creo que no escuché bien-le preguntó Yamazaki con el ceño algo fruncido.

-Tal vez te entró agua en los oídos durante el entrenamiento Sou-chan-contestó el rubio, totalmente ajeno al tono irritado del más alto.

-¡Por favor disculpe a Nagisa-kun Yamazaki-senpai, es que a veces es un poco impertinente!-se disculpaba de manera avergonzada y casi suplicante Rei, mientras le dedicaba una reverencia.

-Pero Rei-chan, no creo que a Sou-chan le moleste que le digamos así, ya que ahora forma parte del grupo. Al principio sólo era amigo de Rin-chan y no quería hablarnos, pero ahora es el "amigo especial" de Haru-chan-y al decir ésto les guiñó el ojo de manera cómica y continuó-y como cualquier amigo de Haru-chan es nuestro amigo, entonces Sou-chan ya es miembro oficial de nuestro grupo, lástima que no tenga nombre de chica, pero Gou tampoco lo tiene así que está bien.

Sousuke sintió un leve tic en el ojo, mientras observaba al mismo tiempo como Gou reñía por enésima ocasión con el rubio, el rostro lívido de Rei, y las sonoras carcajadas de Rin ante las descabelladas elucubraciones del chico de ojos rosas; Yamazaki miró al pelirrojo con los ojos entrecerrados, ya vería después la manera de vengarse de sus burlas.

En eso estaban cuando Nagisa alcanzó a divisar la figura solitaria de Haru, quien venía caminando a su acostumbrado paso tranquilo.

-¡Haru-chaaan! ¡Sou-chaaan vino a buscarte!-gritó a todo pulmón el rubio, llamando así la atención del pelinegro, quién no había reparado en que sus amigos lo esperaban en la entrada del Instituto.

-Perdón por hacerlos esperar, la última clase está tomando más tiempo de lo usual-se disculpó Nanase mientras los observaba, dándose cuenta de que faltaba un miembro de su Club.

-No hay problema Haruka-senpai, mientras te esperábamos llegaron mi hermano y Sousuke-kun, ¿no es genial?-le respondió la pelirroja con una sonrisa-¿Pero dónde está Makoto-senpai? ¿Otra vez se va a quedar hasta tarde?-cuestionó la chica, mientras la sonrisa se desvanecía de su rostro.

-No lo sé Gou, de hecho Makoto tomó sus cosas y salió del salón primero que yo, creí que estaría con ustedes, tal vez se haya ido a la biblioteca-respondió el de ojos azules, con el ánimo visiblemente apagado.

Matsuoka pudo ver la manera en que sus amigos se entristecían ante la ausencia del castaño y él se sintió igual, sólo esperaba que las cosas se solucionaran antes de las Nacionales, porque de no ser así el fracaso para los de Iwatobi sería inminente.

-Bueno Gou, creo que ya es hora de irnos a casa, me estoy muriendo de hambre, ¿tu no?-a lo que su hermana respondió afirmativamente y luego se dirigió a Nagisa y a Rei-¿Por qué no se adelantan con nosotros? hay que darle algo de privacidad a ese par, ¿no creen?-le sugirió a sus amigos con una sonrisa cómplice.

Entonces los amigos se despidieron de los dos chicos de cabello negro y se adelantaron a tomar el tren que los llevaría a sus respectivos hogares, fue entonces que Haru se dirigió al más alto.

-¿Que haces aquí Sousuke?-le cuestionó de manera parca.

-A mi también me da gusto verte Haruka-le contestó Yamazaki con una sonrisa y completó-Bueno, Rin quería venir a visitar a su hermana y me pidió acompañarlo,yo también tenía tiempo sin ver a Gou-chan y acepté su invitación y de paso tendría la oportunidad de verte.

El pelinegro sintió una punzada de enojo al escuchar la explicación del más alto, no sabía definirlo pero se sentía muy molesto al saber que Sousuke había ido a su escuela con la intención de ver a la pelirroja.

-Si querías ver a Gou, entonces debiste irte con ella y con Rin a su casa-espetó el pelinegro a la vez que miraba hacia el lado contrario de donde estaba su acompañante.

-Pues eso tenía pensado, pero cambié de opinión y quise acompañarte hasta tu casa; si te molesta mi presencia me iré con ellos, aun puedo alcanzarlos.

-No me molesta que vengas conmigo-fue la respuesta de Nanase, quien pensó mejor las cosas y prefirió que Sousuke se fuera con él antes que con los Matsuoka, ya que el mero pensamiento lo llenaba de irritación.

-Esta bien, entonces vámonos de aquí-puntualizó Yamazaki, sonriendo triunfante, aunque de manera disimulada ante las reacciones del chico de ojos azules.


Los dos chicos caminaban con cierta calma y en silencio la vereda que antecedía al hogar de Haru, aunque Sousuke ya estaba acostumbrado al mutismo del chico de ojos azules se sentía inquieto porque no encontraba la manera de abordar el tema de su distanciamiento con Makoto.

-Rin me contó que Tachibana y tu no se hablan, ¿Porqué no me habías contado?.

-No lo sé, creí que te molestarías si te hablaba sobre él.

-Aunque no me lleve bien con él sé que es tu mejor amigo y me doy cuenta de lo importante que es para ti. Sé que apenas nos estamos conociendo y que nunca podría ocupar el lugar de Tachibana, pero me gustaría que me tuvieras más confianza.

-Lo siento, es que no estoy acostumbrado a hablar sobre mis problemas, pero no volverá a suceder-le afirmó Haruka con sinceridad.

-Bueno, ya que aclaramos eso hablemos de otras cosas, ¿Qué ha pasado con los reclutadores?, ¿Has recibido nuevas ofertas?.

-Me temo que se han decepcionado de mi después de lo que pasó en la prueba individual, nadie ha vuelto a llamar-respondió Haru algo apesadumbrado.

-Pero ganaste el relevo combinado, es imposible que hayan pasado por alto eso-le dijo Sousuke a su compañero, claramente azorado ante la revelación.

-Quizá piensan que no tengo la fortaleza mental, pero tal vez las cosas cambien cuando vaya a las Nacionales.

-Yo también espero que eso suceda-aseveró Yamazaki mientras subían juntos las escaleras de piedra que antecedían al hogar del Haruka, éste se adelantó y abrió la puerta, pero su pareja se quedó en el umbral.

-Bueno, ya te acompañé a tu casa así que regreso a la Academia, tengo trabajos finales que entregar.

-Está bien-respondió Haru un tanto decepcionado mientras agachaba ligeramente la cabeza.

Pero Sousuke tomó con delicadeza su barbilla, instándolo a mirar hacia él y se acercó muy lentamente, mientras miraba complacido cómo las mejillas del pelinegro tomaban un color rojizo. Sus labios tocaron los ajenos apenas rozándolos, se separó de él unos milímetros e inclinando su rostro volvió a besarlo con la boca entreabierta sintiendo como el cuerpo de su pareja se tensaba, tal vez estaba incómodo porque estaban en la calle y le avergonzaba que lo vieran sus vecinos; a Yamazaki no le importaba en lo absoluto lo que a gente pensara de ellos por lo que sin cortar el beso soltó la barbilla de Haruka y tomó con ambos brazos la cintura de éste, atrayéndolo más a su cuerpo.

Luego sus labios succionaron el labio inferior del más bajo y éste jadeó sorprendido, situación que aprovechó el del ojos claros para introducir su lengua en la boca ajena. Haru gimió al sentir el contacto, sentía su respiración cada vez más agitada e incluso se sintió mareado; apretó con ambos puños la camiseta negra del uniforme de su acompañante en un gesto de ansiedad mientras intentaba seguir el ritmo del beso que Sousuke decidió romper momentos después al notar que en efecto el pelinegro se estaba quedando sin aire. Se separó lentamente mientras un hilillo de saliva seguía uniendo sus bocas, entonces se acercó de nueva cuenta a lamer la saliva que salía de una de las comisuras de los labios del más bajo, sintiendo la manera en que su menudo cuerpo se estremecía ante el roce.

-Creo que ahora si es momento de irme-aseveró Sousuke con la respiración entrecortada, mientras soltaba poco a poco al chico de ojos azules.

-¡Espera! ¿No te gustaría quedarte a comer?, tu escuela está lejos de aquí y tal vez ya tengas hambre- le interrumpió Haruka con decisión, aunque de inmediato lo invadió la timidez ya que se quedó mirando sus manos que aun apretaban la camiseta del más alto.

-Me encantaría quedarme a comer-le respondió Yamazaki con una gran sonrisa, supuso que ya había llegado el momento de probar la famosa caballa con arroz de Haruka Nanase.


Pasados un par de días Sousuke aguardaba en la entrada del ISC Returns ya que ese día le tocaba trabajar a Makoto, el castaño estaba teniendo gran éxito dando clases a los grupos de principiantes y ahora manejaba más grupos que al principio, todo ésto según la información que había recabado su pelirrojo amigo. Yamazaki no estaba solo, habían varias madres de familia que estaban esperando a que salieran sus hijos de la última clase del día, que terminaba a las 8 en punto y a dicha hora comenzaron a salir los niños, quienes se despedían entusiastas de su maestro y saludaban a sus padres, poco a poco se fueron disipando las personas, hasta que Makoto despidió a los últimos niños de su grupo, entonces reparó en el enorme muchacho que lo estaba esperando.

-¿Qué es lo que quieres Yamazaki? Haru no está aquí, debe estar en su casa-espetó el castaño con cierta amargura.

-No vengo a buscar a Haruka, vengo a verte a ti, necesito hablar contigo sobre un par de cosas- le respondió el de ojos claros con determinación.

-Yo no tengo nada que hablar contigo.

-Pues yo si y tendrás que escucharme Tachibana, lo quieras o no-le afirmó Sousuke al castaño, quien resopló inconforme.

-Está bien, habla entonces.

-Antes que nada quiero disculparme por las cosas que te dije el día de la competencia, sé que no es excusa pero ese día no me sentía muy bien, además tu tampoco dijiste cosas muy amables sobre mi.

-¿Eso es todo lo que tienes que decir Yamazaki?, porque mi familia me está esperando para cenar y no quiero tardar.

-No lo es, me he mantenido al margen estos días por que considero que es una situación en la que nadie debe intervenir, pero ya no puedo soportar ver a Haruka en el estado en el que está, tal vez no lo exprese con palabras, o su rostro parezca indiferente, pero...

-Pero aun así puedes saber que él no está bien, ¿no es así?-a lo que Sousuke afirmó con la cabeza-tal parece que ya estás aprendiendo a conocer a Haru.

-Haruka está sufriendo porque te alejaste, y no sólo él sino también el resto de tus amigos te extrañan. La competencia Nacional será en menos de dos semanas y no has entrenado con ellos. ¿Sabías que los reclutadores dejaron de llamarlo?, esa competencia será su última oportunidad y también la tuya.

-Yo no he dejado de entrenar, el entrenador Sasabe me deja usar las instalaciones, aunque no creo que haya alguna diferencia, no es como si algún reclutador fuera a fijarse en mi.

-En mi opinión eres un excelente nadador de dorso, incluso mejor que cualquiera de mi escuela, lástima que no creas en ti mismo. Pero crees en Haruka y en su potencial, y él cree en ti y te necesita más que nunca, no sólo como compañero de equipo sino como su mejor amigo.

-Haru ya no me necesita, ahora te tiene a ti.

-Tu ocupas un lugar en su vida que yo jamás podré tomar, pero eso no significa que vaya a alejarme de él por eso vengo a proponerte una tregua. Tal vez nunca lleguemos a ser amigos pero podríamos llevar una relación cordial, o al menos no irnos a los golpes cada vez que nos veamos.

-¿Puedo hacerte una pregunta?-le interrumpió Makoto de repente.

-Adelante.

-¿Amas a Haru?

-Eso es algo muy personal que no estoy dispuesto a hablar contigo-le respondió el moreno de manera defensiva.

-Vamos Yamazaki, no es algo tan difícil de responder.

-Aun es muy pronto para saberlo.-admitió por fin el más alto de los dos muchachos.

-Lo que yo puedo decirte es que he amado a Haru desde siempre, él es la persona más importante en mi vida y la que más admiro. Él no es como los demás, Haru hace las cosas a su propio ritmo y muchos no comprenden eso; se le dificulta relacionarse con la gente, por eso yo quise ser ese puente que lo comunicara con el mundo exterior. Haru a veces no entiende las bromas ni el sarcasmo, nunca ha tenido una relación sentimental y no va a distinguir si vas en serio o si sólo estás jugando con él.

-Entiendo tu preocupación y creéme cuando te digo que voy muy en serio, más de lo que he ido en toda mi vida y espero que eso sea suficiente para ti. No te ofendas pero creo que no le das el crédito que se merece a Haruka, él no está tan desvalido cómo tu lo ves-Sousuke suspiró, sintiendo por primera vez empatía con el de ojos verdes-Pero al mismo tiempo admiro tu lealtad y devoción hacia él, tanto así que me veo a mi mismo reflejado en ti, porque así he sido yo con Rin.

-Me conformaré con esa respuesta por el momento, pero quiero aclararte una cosa Yamazaki, si llegas a lastimar o a engañar a Haru te juro que no se de que sería capaz.

-Entonces asumo que aceptas mi tregua.

-Eso no significa que tu y yo nos hagamos amigos de la noche a la mañana.

-¿Acaso yo insinué algo parecido Tachibana?-le aclaró con algo de sorna el enorme chico al de ojos verdes mientras le extendía la mano a éste, quien estrechó su mano quedando así pactada la tregua entre ambos.


La casa de Haruka ya estaba en penumbras cuando Makoto tocó la puerta, sabía que ya era tarde pero no quería dejar pasar más tiempo. Ya se había dado por vencido cuando la puerta se abrió de imprevisto mostrando a un pelinegro en pijama, quién observó sorprendido al amigo que lo había estado evitando deliberadamente por días.

-¿Qué haces aquí Makoto?, ¿Pasó algo malo?-cuestionó el de ojos azules a su amigo castaño, quien como toda respuesta se abalanzó a abrazarlo.

-¡Lo siento tanto Haru, por favor perdóname! He sido un tonto y les he fallado a todos, no podía aceptar tu decisión de estar con Yamazaki y por eso me alejé, pero no puedo estar sin tí, mi vida no tiene sentido sin tí.-le dijo el castaño con vehemencia mientras lo abrazaba fuertemente e intentaba contener las lágrimas sin éxito.

-No te preocupes Makoto, en serio no estoy enojado, todo esta bien-le murmuró Nanase con suavidad mientras correspondía su abrazo y escuchaba el fuerte latido del corazón de su amigo, estaba seguro de que éste lloraba.

Esa noche Makoto se prometió a si mismo no volver a entrometerse en la relación entre Haruka y Sousuke y decidió guardar esos sentimientos tan profundos dentro de su corazón, tal vez algún día podría superarlo y seguir adelante.


Haru nunca se consideró a si mismo de baja estatura, pero de repente se sentía algo pequeño al caminar flanqueado por los dos enormes chicos que lo acompañaban todos los días cuando volvía de la escuela y de la práctica conjunta en la Academia Samezuka.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).