Habían pasado, ya 2 años desde que lo habían extraído del cuerpo de su ex-contenedor, ya era libre!!!… si al fin era libre! después de tanto tiempo deseando que eso ocurriera, jeje, quien lo diría, ahora trataba de regresar al lado de su contenedor.
Si lo sabia, era estupido y tonto, pero por extraño que sonara, sin proponérselo se había enamorado de aquella persona, la cual estuvo a su lado 16 años de su vida, aquella que alejo la soledad, aunque sea de una manera indirecta… aquella que le enseño el valor de un lazo.
Si… para su desgracias se había enamorado del tonto de su contenedor, pero que podía hacer, y ahora, iba como tonto al lado de este, sin siquiera pensar en que es lo que haría si lo descubrieran.
Después de que lo habían extraído, y que los amigos del mocoso habían ido a rescatarlo, y Naruto había tomado la decisión de dejarlo en libertad. No lo iba a negar al principio fue divertido, pero pasando el tiempo, tuvo ese extraño sentimiento, el de la añoranza, y ahí estaba, regresando al lado de su querido cachorro, aunque con eso hubiera renunciado a algo valioso, sabia que había valido la pena.
En la aldea se podía observar a tres chicos los cuales esperaban tranquilamente a su sensei.
-ese kakashi, siempre se tarda-cubriéndola un aura obscura- jeje… pero cuando llegue ya nos la arreglaremos muajajajajaja!!!
Se podía ver a una chica pelirrosa, riendo como desquiciada.
-dios de verdad que cuando sakura chan se pone asi da mucho miedo… Por la nuca de los dos muchachos escurria una gota, al ver la expresión de desquiciada que en ese momento mostraba su compañera de equipo.
Los tres llevaban ya tiempo esperando a su sensei, desde que había acabado la guerra, todos ayudaron a la restauración de konoha, a Sasuke se le había otorgado el perdón ya que había rescatado el cuerpo de naruto, antes de que le extrajeran al kyubi, llevándose de esta manera también su vida; aunque al final Naruto había decidido dejar en libertad a Kurama en agradecimiento por todo lo que había hecho por el.
Después de la restauración, naruto comprendió sus sentimientos, y también el por que, el de tanta insistencia en que este regresara. Y a pesar de que sabia que por esto su amiga tal vez lo odiaría, había aceptado empezar un relación con Sasuke, pero esto a penas tenia un mes, por lo cual aun no mostraban tan abiertamente sus sentimientos… o eso era lo que el creía. Sai lo habían asignado a otro lugar, ya que necesitaban sus técnicas para otros asuntos, o eso era lo que le había dicho el pintor a naruto.
Estaban los tres tan metidos en sus pensamientos que a penas y sintieron las dos presencias que habían llegado, las cuales se situaron en frente suyo.
Uno era Kakashi, ese chakra era irreconocible para los tres, pero el segundo, extrañamente se le hizo conocido a naruto, pero en cuanto vio a la persona, vio que se había equivocado.
-Hola mis pequeños colibríes, como han estado en estos días de verano…- saludaba un sonriente kakashi.
Pero nadie le reclamo, todos o por lo menos dos de sus alumnos veían con curiosidad al individuo que se encontraba a su lado.
Era un chico sumamente atractivo, el cual tenia la piel morena clara, con un cabello rojizo, tal vez podía competir con el cabello de gaara y tenia uno ojos rojizos, pero claros, no tan fuertes como su cabello. Traía puesto un conjunto que consistía en un pantaloness color negro y una camisa negra de red y una sudadera color azul.
-Oh!... veo que ya vieron a Haruka.-decía esto mientras daba un palmadita en el hombro, dándole ánimos al muchacho a que avanzara un poco.
El muchacho avanzo un poco sin bajar su mirada, aunque para ser sinceros se sentía un tanto extraño estar el ahora en esa posición es decir antes el estaba dentro de Naruto, no pudo evitar mirar a este.
Naruto al ver como el nuevo chico lo veía, no pudo evitar sonrojarse, esa mirada, le causaba algo, no sabia que, pero se sentía…extraño?. Ese sonrojo no paso desapercibido por Sasuke, el cual sintió algo extraño dentro de el. No sabia por que pero esas miraditas no le gustaban nada. Es decir el sabia que Naruto solo era un juego, pero era SU juego, y mientras el se divirtiera con Naruto, el chico era intocable, incluso con la mirada. Pero en fin, ya luego se encargaría de ese tal “Haruka” y le enseñaría quien es el jefe.
El entrenamiento paso sin contratiempo, después de este, kakashi le había informado al kitsune, que Haruka viviría con el por ordenes de Tsunade.
Para Kurama eso había sido una gran noticia, no había sido difícil convencer a la vieja borracha, solo le había ofrecido 10 barriles con el mejor licor, y esta casi casi le daba hasta su alma. (no me pregunten donde saco los barriles) Por la cara que había puesto el Uchiha menor, la idea no le había parecido del todo buena.
Cuando al fin se iban hacia su casa, Naruto trataba conversar con Haruka, mientras trataba de lidiar, un poco con la cara de fastidio de su “novio” mientras iban tomados de la mano.
-en serio dattebayo, la villa te va a encantar, es grandiosa!!!- decía el pequeño rubio muy sonriente.
-mmm… eso espero Naruto-kun-dijo en un tono serio pero tranquilo
-Por favor… llámame Naruto… de acuerdo- decía mientras le mostraba una hermosa sonrisa.
Sin que los dos se lo esperaran, Sasuke soltó bruscamente la mano de naruto chasqueando la lengua.
-Yo me largo… - dijo mientras aceleraba su paso Naruto se quedo un momento sorprendido por la acción de su novio y cuando vio que este estaba a punto de dar la vuelta se dirigió rápidamente hacia el.
Desde lejos, el Kyubi veía como al parecer el Uchiha le reclamaba algo a Naruto y este le acariciaba el rostro y lo jalaba para que lo viera, después de un poco de jaloneos, por fin se dejo abrazar. Por encima del hombre de Naruto, Sasuke volteo en dirección en donde se encontraba este, y tomándolo de la nuca, le planto un profundo y apasionado beso, sin dejar de observar a Kurama, demostrando de esta manera quien era el que mandaba en el corazón de Naruto.
-Maldito… - pensó Kurama al ver la mirada que le lanzo Sasuke, pero poniendo un pose desinteresada, mientras esperaba a naruto.
Cuando regreso Naruto, este venia un poco acalorado, por el beso que acababa de recibir por parte de Sasuke.
-Gomene Haruka… es que Sasuke tiene un carácter, un tanto posesivo… jeje-decía mientras mostraba una sonrisa sincera y risueña.
-No te preocupes Naruto.
Una vez que por fin llegaron al hogar del rubio, Kurama vio como había cambiado de departamento, este era más grande, tenía 2 habitaciones, un baño, cocina y su sala. Si definitivamente parecía que le iba bien al pequeño.
Como Kurama, había estado tanto tiempo en el interior de Naruto conocía perfectamente la aldea, asi que cuando Naruto dijo que tenia que ir a comprar víveres, este inmediatamente se ofreció. Ya era un poco tarde, la oscuridad era profunda, y sabia que Naruto no era débil y mucho menos una damisela en peligro, pero había visto como varios depravados lo veían y no quería exponerlo a eso.
Una vez que salio de la tienda con los víveres, se dirigió hacia la casa que compartía con Naruto…
-como si fuéramos familia – no pudo evitarlo, pero el solo hecho de pensar en eso, provoco un ligero sonrojo en el, sabia que no era digno, de el, pero era lo que sentía.
Caminaba por la profunda noche, cuando de pronto escucho unos ruidos un tanto extraños, digno de un demonio como el se acerco cautelosamente y lo que vio lo desconcertó totalmente y por que no decirlo, también lo “calentó” un poco
Podía ver en aquel callejón a una persona parada, la cual tenia a un chico pelinegro contra la pared dándole placer, por los ruidos que daba, lo estaba penetrando profundamente.
-ahh… ahh… mas, mas… por lo que mas quieras
Por los ruidos que hacían, se veía que los dos disfrutaban mucho, el muchacho que estaba acorralando al otro, extrañamente se le hacia conocido, no sabia por que, al parecer los dos estaban escondiéndose, o tal vez solo eran civiles, y por eso no tenían chakra, eso explicaría, el por que no sentía nada, pero aun asi estaba raro que un civil se le hiciera conocido.
Es decir, al menos que lo hubiera matado, pero entonces estaría muerto, nada tenia sentido.
-mmmmm… ahhh.. ahh, que rico… dame ahí ahí…. Sa… mmm mas fuerte sasuke
¿Qué?!!!... había acaso escuchado bien… ese tipo había dicho Sasuke, el bastardo que el conocía. De un momento a otro, coloco al sujeto que estaba junto a el sobre un bote de basura, Kurama tuvo la tentacion de ir y golpear fuertemente a Sasuke, por lo que le hacia a su cachorro, pero si haci eso, el unico que estaria en dificultades seria el, haci que decidio que era mejor irse.
-ahhh ahhhh…. Me corro… me corro. Ahhhhhh -mmmmmmmmm
Sasuke, se subía con calma sus pantalones, mientras el chico que estaba sobre el bote de basura, trataba de recobrar la respiración.
-mmm… y cuanto mas piensas seguir jugando con el chico zorro?...
Sasuke ignoraba olímpicamente, dandole la espalda al muchacho, el cual lo veia con un poco de enojo.
-de verdad sasuke, ya dejalo yo te puedo dar todo lo que necesitas…- se había colgado por la espalda de Sasuke aun desnudo, mientras frotaba sus partes.
Sasuke un tanto enojado por el comportamiento de este, provoco que se safara de el, alejandolo finalmente
-ya no quiero que nos veamos-decia mirando friamente al muchacho que ahora se encontraba en el suelo, viendolo un poco asustado, ya que mostraba su sharingan.
- ya me hartaste, solo eres un acoston, nada mas, no te sientas tan especial
Mientras decia esto caminaba en direccion a la calle, con paso firme y decidido, antes de dar la vuelta, volteo hacia la direccion del muchacho aun con el sharingan activado
-ah… en cuanto a NARUTO, yo decido, cuando dejo de jugar con el… entendido.
Se dirigio con paso calmado a su casa, sabia que estaba mal ver a escondidas a otras personas, es decir, el era un Uchiha, no tendría por que andar escondiéndose, y menos del dobe… pero por extraño que pareciera, no quería que se enterara, desde que había regresado, y lo observo bien, se dio cuenta que jugar un poco con el dobe, no seria del todo aburrido, es decir, si estaba dentro de lo permitido de un Uchiha.
-je… definitivamente, Naruto es un juguete con el cual me pienso divertir a lo grande – seguía sonriendo mientras mostraba una gran sonrisa.
Kyubi habia regresado hace poco a casa de Naruto, y este ya estaba comiendo su adorado ramen, y le habia ofrecido a Haruka, este habia aceptado mas por compromiso que por otra cosa.
La verdad es que desde que habia visto al bastardo con aquel sujeto, se habia sentido mal, al ver como le veian la cara a su naruto.
-disculpa Naruto – decia dudando un poco
-si… que pasa Haruka?-decia sonriente aun comiendo su adorado ramen
-de verdad… es tan importante para ti, ese tal Sasuke, cierto?
-jeje… se me nota mucho- decia mostrando un hermoso sonrojo- la verdad al inicio creia que solo era un capricho, pero después, de todo, me di cuenta que de verdad, sentia un cariño especial, después de pensarlo mucho, me di cuenta que… jjeje… pues lo amo.
Kyubi al escuchar eso no pudo mas que apretar fuertemente sus puños, como era posible que el maldito Uchiha tratara de esa forma a Naruto que lo amaba con ese amor tan puro.
Ahora recordaba por que odiaba tanto a los Uchihas. Tan egoístas, que solo pensaban en ellos antes que en los demas, incluso antes que sus seres queridos.
Después de su pequeña platica, se habian retirado, cada quien a sus habitaciones, cuando Kyubi estaba en la suya, observaba en direccion hacia la casa de Sasuke.
-si… eh tomado una decisión, no se como, pero no te quedaras con el corazon de mi kitsune, no lo mereces – en su rostro se habia formado una sonrisa altanera – si definitivamente, naruto sera todo mio, o me dejo de llamar Kurama, el demonio de 9 colas.